Bueno pinches warras (con cariño xd) aquí esta vuestra segunda parte :v ya aviso que es un poco wtf y que si has visto el hentai Shoujo Ramune te va a sonar un poquito una parte xd.

Warline10 anyo0278

Advertencias:

+18 o +21 no sé
Sploshing
Daddy/Bonita/Pequeña
Uso de Vibrador
Foto un poco indebida (?)

Narra T/N

Mis padres ya conocían al albino que tenía como novio. Gracias al que está en el cielo, todo salió bien y mis padres lo aceptaron. También hay que decir que se arregló bastante para esa cena que tuvimos. Una de las pocas veces que lo he visto en traje.

De eso ya había pasado un tiempo y el verano se hacia cada vez más presente en nuestra ciudad. Las vacaciones nos pasaron factura debido a que él tenía que estar más pendiente en su pandilla y yo tenía trabajo con el objetivo de ganar dinero para luego gastarlo en compras ropa o comida. Ya casi no hablábamos, a mi en cierto modo me enfadaba debido a que el que menos tiempo tenía era él, de hecho ni siquiera me había preguntado de qué trabajaba.

- Ey, T/N, ¿estás bien? Te noto alejada de aquí. - Me habló Shinichiro quien estaba en su cama tumbado sin alguna prenda de ropa que le tapara el torso levemente marcado y flaco que tenía.

- No, es que el verano es muy malo para mi. - Reí levemente.

- Déjame adivinar... ¿Wakasa? - Preguntó mirándome incorporándose apoyándose en la cama con su codos y antebrazos.

- Sí. - Suspiré. - Es que ya casi ni hablamos, se dedica a estar en el gimnasio y a estar peleando con otras pandillas. Si le llamo me dice "No puedo ahora cariño, estoy en una pelea" la mitad de las veces. - Le miré seriamente a los ojos. - Y mi trabajo tampoco ayuda pero lo suyo es el principal problema. - Él soltó una risita para despeinarse.

- En eso tienes razón, apenas trabajas 5 horas al día. Esta claro que a ti no te falta tiempo. - Me comentó observando como me levantaba de la cama.

- Sí, por cierto, ¿no estoy aquí porque trabajas? Vas a llegar tarde tonto.

Él se levantó rápidamente para tomar sus llaves, su gorra marrón y su paquete de cigarros junto a el mechero. Luego tomó su camiseta y se la puso mientras yo reía.

- ¡Tienes todo lo que tienes que hacer en la libreta de la cocina! - Gritó mientras salía de la casa corriendo.

- ¡Buena jornada de trabajo Shin! - Le respondí mientras bajaba las escaleras con tranquilidad para ir a la cocina.

Trabajaba de niñera de los 3 sano cuando no se podían quedar ni con el abuelo ni con Shinichiro. Esos niños si que eran energéticos, por eso mismo no encontraban una cuidadora estable. Hasta que llegaron a ti que por ciertas razones equivocadas se comportaban contigo.

- ¡Ey, cuñada!, ¿Cuándo volverá tu novio? Tengo que enseñarle como se hacer ya esa postura tan complicada que dijo el abuelo. - Preguntó Manjiro desde el sillón donde jugaba a la consola.

- Manjiro, te he dicho varias veces que no es mi novio, es un amigo. - Le repliqué mientras leía la libreta en el marco de la puerta del salón, la cual conectaba con la cocina.

- Y yo te he dicho que me digas Mikey en vez de Manjiro. - Se quejó sacando su dulce de la boca.

- Ya Mikey, déjala. - Entró en la habitación la hermana menor.

- No, además, ¿Cuándo le dirás a Kenchin que te gusta? - Mencionó el de la consola provocando que el rostro de Ema se pusiera rojo.

Me acerqué a Mikey y le di una colleja provocando que se quejara y se sobe la zona golpeada.

- Guarda más respeto a tus mayores y a tu hermanita. Lo que le has preguntado no es de tu incumbencia. - Le reñí para ver al Kurokawa salir de un sofá riendo sin parar cual psicópata.

- ¿Has visto? ¡Soy mejor que Mikey! ¿Después le dirás eso a Shinichiro?, ¿verdad? - Preguntó emocionado a lo que también me acerqué y le di otra colleja.

- Es de mala educación espiar conversaciones ajenas Izana. - Le reñí escuchando la risa de fondo de Mikey. - Hoy, según Shinichiro habrá de comer ramen. Así que quiero que no haya peleas, ¿si? - Los tres asintieron pero Manjiro levantó la mano. - Di.

- ¿No podríamos comer Taiyakis?

- ¡Ya estoy en casa! - Gritó el de pelo azabache al pasar por la puerta con el reloj marcando las diez de la noche.

- ¡Hermano! - Los 3 hermanos fueron corriendo a donde su hermano estaba.

- Bienvenido Shin. - Dije asomándome por la puerta con su plato de comida en la mesa. - La cena ya esta lista. - Le sonreí amablemente.

- T/N no tenias porqué, además ya terminaste de trabajar hace rato. ¿Por qué no estás en casa? - Preguntó mientras los hermanos le dejaban pasar a donde yo estaba.

- No podía dejarles solos, además es tu culpa por volver tarde. - Le reproché provocando que él se riera.

- ¡Ya, bésense! - Gritó Mikey provocando que ambos nos sonrojáramos.

- Me doy una ducha y te dejo en casa, ¿si? - Habló el que acababa de llegar a lo que asentí para volver a lo que hacía antes.

- Nenes, debéis de entender que no somos pareja. - Les expliqué al escuchar la ducha funcionar. - Yo estoy con otro chico y lo que decís puede causar malentendidos. A mi no me molesta porque sé que es de broma pero no se si a la pareja de vuestro hermano o a la mía le puede mostrar. - Comenté. - ¿Qué digo? , a la mía seguro le molesta. - Pensé mientras comíamos en silencio después de eso.

Cuando Shinichiro salió de la ducha y cenó me tomó de la mano para ir a su garaje donde tenía los cascos y la motocicleta. Me tendió uno de ellos mientras que el otro lo dejaba para encender el motor del vehículo mientras me miraba.

- Sabes subirte a una, ¿verdad? - Asentí provocando que él se colocaba como debía para yo montarme.

Una vez lo hice nos dirigimos a mi casa. Cuando llegamos prácticamente eran las doce de la noche, él paró el motor, aparcando para acompañarme a la puerta de mi casa.

- Gracias por quedarte hasta tarde, te lo pagaré. - Soltó rascándose la nuca.

- No, no hace falta que lo pagues, considéralo pagado con traerme a casa. - Le regalé una sonrisa.

- Y por lo de los chicos también perdón. - No sabía a que se refería hasta que le vi el leve sonrojo que llevaba en las mejillas.

- Tranquilo, tu lo has dicho, son niños. - Le revolví el cabello poniéndome de puntillas debido a la diferencia de altura. - Y como son niños, deberías de irte ya antes para acostarlos si no se han dormido ya. Mikey siempre se guarda la consola para jugar en la noche así que quítasela. - Le dejé un beso en su mejilla provocando que se sonrojase más. - Nos vemos mañana Shin. - Me despedí entrando a la casa la cual estaba en total oscuridad.

- ¿Hola?

Me quité los zapatos para encender las luces y dirigirme a la cocina con el objetivo de recordar que día era hoy y por qué no estaban mis padres. Nada más llegué al calendario vi un papelito pegado que ponía "Estamos en el concierto de Enhypen, no te preocupes, llegaremos en la mañana".

- A veces agradezco tener padres Kpopers. - Reí para mi misma para apagar la luz de la cocina dirigiéndome a mi habitación la cual estaba extrañamente encendida.

Nada más entré, lo vi. Palidecí cuando le escuche hablar con esa ronca voz tumbado en mi cama la cual tenia puesto ese juego de sábanas rojas tan llamativo para el que yacía encima de estas.

- ¿Qué haces con Shinichiro todos estos días cariño? - Me preguntó el albino seriamente mientras dirigía su mirada a una bolsa de color negro que estaba a su lado. - Además, alguien me ha dicho que sales con ese pelinegro... ¿Eso es verdad?

Me quedé paralizada, la marca que tenia la bolsa la conocía muy bien, sin contar con que la otra bolsa de color rosa ubicada al lado de su torso desnudo me hacia imaginar lo que pasaba. Iba enserio cuando me dijo que si le ponía celoso usaría piruletas.

- Coge la bolsa negra y ves al aseo ya. Vamos a tener que hablar largo y tendido. - Nada más lo escuché trague en seco para intentar explicarle.

- Wakasa esto no es lo que parece, simplemente Shin ne- no me dejó hablar.

- Dime Waka, ¿qué no recuerdas que somos pareja? A claro, es verdad, "Shin". - Hizo comillas con sus dedos para luego levantarse. - Que no entiendes de "Coge la bolsa negra y ves al aseo." - Me tomó del mentón con fuerza para que le mirase a los ojos. - Si no lo haces tú, te cambiaré yo mismo.

Luego de eso me soltó por lo que hice lo que me pidió. Como me esperaba, el contenido de la bolsa era una lencería del color de su cabello con toques del de sus ojos. No dejaba nada a la imaginación pero que podía hacer. Salí observándolo, estaba tomando las dulces piruletas que había comprado para la ocasión. Nada más entré al dormitorio su afilada vista se clavó en mi.

- Insisto, Waka, te estás confundiendo. He estado con Shinichiro éstos días porque -

- ¿Por qué te gusta? Yo te demostraré que soy mejor que ese palurdo. - Nada más dijo eso se levantó y se dirigió a dónde yo estaba por lo que iba retrocediendo conforme podía. - Jugaremos al gato y al ratón, pero de una forma distinta. - Me alcanzó y me tiró a la cama. - Pero hay una cosa que nunca cambia, y es que... El ratón nunca caza al gato~ - Me susurró para salir de mi habitación escuchando la cerradura de fuera cerrarse.

Me levanté y fui a donde estaba la puerta intentando abrirla pero como había escuchado, él había cerrado. En ese momento me arrepentí de darle una copia de la llave a él por si ocurría alguna emergencia.

- Mierda. - Murmuré tumbándome en la cama de nuevo.

Se había puesto celoso y lo peor es que no sabia que había encargado a alguien que me vigilará. Esta situación se me hacía extraña. Me dedique a ver que había en la bolsa rosa mientras lo esperaba. Gominolas, piruletas, lacasitos, nata montada... ¿Se había comprado el kiosco de chuches o qué?

- ¿Ahora que hago yo? Me va a dejar en silla de ruedas y soy muy joven aun para eso, aprecio mis caderas. - Pensé tomando su camiseta negra que estaba en el suelo para olerla. - Aunque la idea de que este celoso y no pueda controlarse me prende a decir verdad. Además luego puedo hablar con él y aclararle de que solo estoy allí por trabajo.

Estaba tan concentrada en oler la camiseta y disfrutar del perfume de mi novio que no me di cuenta de que el volvía a estar conmigo hasta que sentí una nalgada que me hizo dar un grito y mirarle.

- Ya estoy aquí bonita, veo que te diviertes con mi camiseta. - Tragué en seco viendo lo que traía. - ¿Ya lo viste? Seguro lo disfrutas~ ahora abre las piernas para Daddy~

Y como si tuviera ese sensor de las puertas del supermercado y estas fueran mis piernas las abrí para él. Luego se colocó encima de mí.

- Muy bien bonita~ pero seguro le haces lo mismo a ese idiota ¿verdad?~ - Negué con la cabeza para sentir como empezaba a acariciar mi intimidad sobre la fina tela de la lencería. - ¿No?~ Entonces ¿qué haces con él en su casa la mayoría de días?~ - Bajo su mirada a donde estaba su mano para morderse el labio inferior. - Esa lencería te queda tan bien~ Seguro si la usas con él se da cuenta que eres mía... - Se acercó a mi oído para lamer el lóbulo de mi oreja para susurrarme. - Por qué eres solo mía, mis colores están en ti~

Me mordí el labio excitada por su actitud dominante y celosa, más aún cuando sentí que empezaba a hacer marcas en mi cuello bastante notorias. Mientras tanto me apartó a un lado la lencería para dejar mi entrada ya mojada al aire.

- Estas mojada~ - Me susurró de la misma manera que antes. - ¿Acaso te gusta esto?~ - Entonces comenzó a introducir ese vibrador lila con forma de huevo lentamente pero apenas iba a la mitad y lo metí yo sola al contraerme. - Pero mira~ tus paredes se lo ha tragado~ eres una pervertida~

Sacó el mando de su bolsillo y lo dejó a un lado para luego volver a poner la lencería en su sitio.

- En los sueños donde eres protagonista me han dado una idea sobre qué hacer para castigarte aparte de lo que te dije en el gimnasio.~ - Comentó levantándose para coger la bolsa llena de dulces y llevar la al lado del control de velocidad que marcaba el 0 por poco tiempo. - Hubo un sueño en concreto que me gustó mucho y quería hacerlo realidad.~ - Tomo el control. - Y que mejor día que hoy.~

De repente sonó un pitido y sentí como empezó a hacer su trabajo el juguete provocando que cerrará las piernas por la sensación.

- Ah~ Wa-Waka~ - Gemí por la sorpresa.

- No~ - Sacó la nata montada y la agitó. - Ahora soy Daddy para ti Bonita~ - Quitó la palabra y empezó a colocarla por mi vientre haciendo que sintiera el contraste de la temperatura. - Aguanta Pequeña~

Una vez terminó con la nata en esa parte, con lo poco que quedaba me hizo como una especie de collar alrededor de mi cuello provocándome mas espasmos de los que provocaba el vibrador. Al terminar volvió a darle a ese botón con sonido que intensificó las vibraciones provocándome un sobresalto.

- Tranquila~ Ya queda poco~ - Explicó mientras abría un paquete de golosinas para empezar a colocarlas en donde había nata escribiendo "Wakasa" y luego coloco una en esa especie de collar que tenía. - Así~ qué linda te ves~ - Miró hacia mi intimidad dándose cuenta de que mis fluidos ya empezaron a mojar la cama provocando que se mordiera el labio con una sonrisa coqueta. - Mierda~ - Observé como bajó la mano a su bulto acariciándolo levemente. - Tengo que inmortalizar esto~

Fue a por su móvil a la mesita de noche para sacar una foto en dónde se podía ver hasta que la nata empezaba a ser líquida por mi temperatura corporal.

- Será mejor que comience ya~

Dejó el teléfono y se agachó a lamer y comer de los dulces que había en tu cuerpo. Habían veces en las que me ofrecía dulces con nata por lo que tenía que abrir la boca provocando que algunos gemidos salieran sin mi permiso.

- A-ah~ Daddy~ se menos rudo~ - Pedí conforme podría entre jadeos intentando salvar mis caderas.

Había pasado apenas unos minutos desde que me sacó ese juguete junto a la lencería y me tenía a cuatro patas en la cama mientras él se dedicaba a embestirme con todo lo que tenía. ¿Lo bueno? Lo bueno es que se había olvidado de lo de las piruletas y los lacasitos. Lo malo es que iba a terminar si caderas si seguía así. Ya había llegado a mi orgasmo debido al juguete pero él seguía a lo suyo.

- N-No~ - Le escuché reírse entrecortadamente por su respiración agitada - ¿Qué Shin no te hace sentirte así?~ agh~ - Nada más lo escuché me contraje, ¿aun seguía celoso? - Mierda~ aprietas muy bien~ - Pegó su pecho a mi espalda para agarrarme del pelo formando una coleta malhecha de la que tiró haciéndome mirar al frente. - Lástima que haya sido por la jodida mención del sano mayor~ - Entonces sentí que sus estocadas iban duras y bruscas haciendo que aumenten de todo mis gemidos.

- N-No~ ah~ - Dije como pude sintiendo como dentro de poco me volvería a correr.

- ¿No?~ ah~ Entonces gime mi nombre hasta que los vecinos se aprendan mi nombre de memoria~ - Susurró para soltar un fuerte gruñido seguido de un "Mierda~" para sentir como llenaba mi interior de su semilla causando que yo también me corra haciendo lo que me pidió, cayendo a las sábanas manchadas.

Luego de eso, salió de mi para tumbarse al otro costado intentando recuperar la respiración.

- Waka, estaba en casa de Shinichiro porque trabajo allí. - Expliqué una vez recuperé la respiración para reír levemente al ver un sonrojo en su cara.

- Perdón, me pasé. - Habló casi muerto de vergüenza por como de idiota se había comportado.

- No pasa nada. - Suspiré para ponerme sobre su pecho escuchando sus latidos aun acelerados. - Solo tendrás que ir a comprar pastillas, cambiar las sábanas para dormir y ayudarme a darme una ducha por no creo poder dar un paso. - Reí con un sonrojo en mis mejillas para verle a los ojos.

- Esta bien.

- Por cierto, ¿qué harás con esa foto que tomaste?

Perdón me dio pereza Jsjddjdjdjdj no se espero les haya gustado. Estoy preparando unos oneshot de Jujutsu Kaisen por si interesan

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Próximos:
-Draken
-Hanma 🔥
-Shinichiro
- Sanzu Pt2
- Ran 🔥 (Esp 10k en el fanfic)

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