09
CAPÍTULO NUEVE
• FIESTA •
═══════════════
La cita de Marlene y Némesis había sido genial, se llevaron de maravilla al tener personalidades similares, aunque la rubia es más tranquila y buena a comparación de la pelinegra. Hablaron sobre varias cosas, bromearon, coquetearon a más no poder en forma de juego y se besaron, pero nada más porque al final de la cita se dieron cuenta que no sienten atracción sexual por la otra, así que no pasó a más como normalmente lo haría Némesis, aún así las dos quedaron como conocidas que se agradan y hoy en la fiesta de Gryffindor planearon compartir unas bebidas en donde Marlene le presentará a sus otras amigas para divertirse todas juntas.
Justamente ahora Némesis se encuentra dando los últimos retoques de su maquillaje mientras que Regulus está acostado en su cama viendo entretenido un cómic que encontró en la habitación de ella.
Costó bastante convencerlo de acompañarla pero al final lo logró tras fastidiarlo mucho al punto de aceptar solo para callarla.
— Ah, cierto, me olvidé de decirte que también le invité a la adorable Hufflepuff Ava Wilson.
— ¿Por qué hiciste eso? — preguntó un poco molesto dejando de lado el cómic.
— Porque en un futuro los dos van a tener una linda relación y me darán bonitos sobrinos ya que los dos son atractivos, así que por ende los mocosos tendrán buenos genes.
— ¿Estás drogada? Porque no encontraría otra razón para la estupidez que acabas de decir.
— Ya verás que tendré la razón y cuando vengas todo avergonzado a pedirme consejos para conquistarla te diré "te lo dije".
— Si ese fuera el caso a quien menos pediría consejos es a ti, y por si no recuerdas ya estoy comprometido con una sangre pura.
— Primero que nada, auch, yo soy buena dando consejos de amor a pesar de nunca haber tenido pareja, además el entrenador no juega. Y en segundo, no voy a permitir que te cases con esa, vamos a huir antes de eso.
— ¿Huir? — preguntó más interesado.
Némesis terminó de maquillarse y se miró encantada en el espejo haciendo distintas poses y mirando especialmente su trasero que se ve más grande con esa ropa, de hecho todo en ella se ve sexy y lo sabe.
— Sí, tengo una casa y mucho dinero que me heredó mi abuela por ser su nieta favorita, con eso ya sería suficiente para que vivamos los dos.
— Suena bien, pero no sé...
— Solo piénsalo, mientras tanto dime que me veo bien.
Hizo un corto desfile dando una vuelta par luego tirarle un beso, Regulus rio negando y le dio una repasada de pies a cabeza.
Lleva un crop top ajustado con un gran escote y espalda abierta con la tela negro semi transparente y brilloso con un pantalón de la misma tela que es ajustado pero por debajo de la rodilla es acampanado. Su cabello lleva recogido pero varios mechones están sueltos, su maquillaje es entre negro y plateado acompañado de un labial marrón claro y para rematar lleva unos tacones negros de seis centímetros.
— Te ves hermosa como siempre pero no me gusta que la tela sea transparente, hasta acá puedo ver tu ropa interior — dijo celoso cruzándose de brazos — Y no te digo que te cambies ya que eres libre de llevar lo que quieras, lo que me preocupa son los imbéciles que parecen animales en celo y no le respetan a las mujeres.
— Aww, te preocupas por mí— dijo con una fingida voz aguda — No lo hagas, soy capaz de defenderme muy bien de ese tipo de hombres.
Puso una sonrisa malvada y Regulus no quiso saber cómo es su forma de defenderse, aún así aceptó entre preocupado y celoso por lo que pueda pasar, solo espera que al final de la noche no se tenga que agarrar a golpes con unos chicos para defenderla porque para él ella ya es como su hermana y no le gustaría que le hagan nada depravado sin su consentimiento.
— Mejor vámonos que ya es tarde.
— ¿Cómo entraremos?
— Concordamos con James una hora y él saldrá afuera para dejarnos entrar.
— Ok, vamos antes de que me arrepienta más de lo que ya estoy.
Se levantó acomodando la camisa negro que lleva tratando de alisar las arrugas mientras que Némesis se colocó perfume para luego abrir un cajón y sacar una pequeña bolsita metiendo en su escote bajo uno de sus senos llamando la atención de Regulus.
— ¿Qué es eso?
— Pastillitas de la felicidad.
— ¿Qué?
— Nada, estás chiquito para esto.
— Soy un año menor que tú.
— Chiquito dije.
Regulus rodó los ojos y abrió la puerta haciéndole una seña para que pase primero y así lo hizo pero no sin antes regalarle una sonrisa de inocencia con el fin de que no esté molesto con ella pero siendo sinceros él no puede molestarse con ella por mucho tiempo, siempre se le pasa rápido.
.
Minutos después subieron la última escalera que lleva a la sala común de Gryffindor y esperaron a que salga James quien parecía estar pendiente ya que inmediatamente salió dándole una repasada general a ambos.
— Wow Némesis, te ves maravillosa.
— Ya lo sé, pero gracias, tú te ves bien. ¿Nos dejas pasar?
— Sí, claro. Adelante.
Regulus otra vez le dio el paso primero pero en este caso para taparla de los ojos de Potter ya que se tendrá que agachar para entrar y por ende se notará más su ropa interior, al menos adentro con la oscuridad no se notará tanto y no tendrá que cuidarla todo el tiempo.
Apenas la chica entró las luces de colores la golpearon, al igual que la fuerte música y olores mezclados.
Sonrió encantada al ver a mucha gente bailando, tomando, jugando y las típicas parejitas besándose con toqueteos de por medio como si no hubiera mañana. Definitivamente ya extrañaba el ambiente de las fiestas porque la última vez que fue a uno fue hace un mes en una discoteca muggle y ella se considera un alma libre y fiestera.
— ¡Las bebidas están por allá! — señaló James una esquina — ¡Que disfruten la fiesta!
Con eso se perdió entre la gente y la pelinegra le agarró de la mano a su amigo para que no se pierda apenas llegan y juntos emprendieron hacia las bebidas mientras la chica ya mueve los hombros contagiándose de la fuerte música movida.
De camino recibió varias miradas como era de esperarse lo que hizo que su ego se eleve por las nubes. Ama la atención.
Al llegar en la mesa de bebidas se topó con Marlene quien inmediatamente la reconoció soltando un leve gritito para luego acercarse a ella y darle un corto abrazo acompañado de un beso en la mejilla.
— ¡Te ves jodidamente ardiente! — halagó semi gritando por culpa de la música.
Le agarró de la mano y le dio una vuelta haciendo que la pelinegra sonría encantada.
La susodicha le dio una repasada de pies a cabeza a Marlene quien lleva un vestido rojo ajustado con un labial del mismo color haciendo resaltar su blanca piel y su cabello dorado.
— ¡Tú no te quedas atrás! — dijo guiñándole el ojo causando una risita avergonzada — Oh, cierto, él es Regulus Black.
Este bastante incómodo le dio un asentimiento mientras se vuelve a colocar al lado de su amiga ya que la otra la alejó por un momento.
— ¡Lo conozco! ¡Un gusto Black, espero te diviertas!
— Ajá.
— ¡¿Quieren tomar algo?!
Los dos observaron la mesa topándose con la clásica cerveza de mantequilla en botellas, también tequila, vino, vodka, whisky de fuego y agua.
Regulus sin contestar fue hasta la mesa y agarró un vaso para servirse un poco de vino.
— ¡Hoy no tomaré tanto! ¡Tengo otros planes! — le informó Némesis haciendo un gesto que al instante la rubia captó acercándose a su oreja para hablarle mejor.
— ¿Me podrías vender uno?
— Por supuesto, por ser mi nueva amiga te vendo solo por dos galeones. ¿Quieres ahora o después?
— Ahora.
Némesis le dio la espalda a la gente y quitó la bolsita de su escote para luego abrir y quitar una pastilla pasándole a Marlene quien le extendió el dinero para luego meterlo en su boca y hacerlo pasar con la cerveza, por su parte la pelinegra volvió a guardar en su lugar y le hizo una seña a Regulus quien vio todo lo que pasaba pillando por fin lo que son las pastillas.
— Guárdame el dinero que yo no tengo bolsillo — le pidió pasándole las monedas.
— ¿Qué mierda haces vendiendo drogas? — le reclamó agarrando las monedas y metiendo en el bolsillo de su pantalón.
— Mientras no termine Hogwarts no podré acceder a mi herencia así que debo vivir de algo.
— Pero ya eres millonaria, tienes como vivir.
— Yo no, mi padre lo es y no pienso volver a pedirle dinero. Solo son negocios Reggie, relájate, ahora bebamos algo.
— ¿Que hay de tu amiga? — le señaló a la chica quien está hablando con la pelirroja que al parecer le está regañando por algo.
— Ignórala, total en unos minutos se olvidará de mí — dijo agarrando el tequila sirviéndose un shot y tomando todo de un solo trago para luego repetir una vez más — ¡Ahora vamos a bailar!
— No, Némesis por favor no. No me hagas esto maldita.
Ignoró las súplicas de su amigo y le agarró de la mano arrastrándole consigo a la pista en donde está sonando una canción entre movida y sensual, justo lo que le gusta a ella quien ya empezó a moverse sintiendo la música adentrarse a todos sus sentidos haciendo que se deje llevar al son de la pista ignorando la letra. Todo lo contrario a su acompañante que se encuentra más tieso que un muerto.
— ¡Vamos Reggie! ¡Muévete!
— ¡Ni siquiera sé bailar este tipo de música!
— ¡Solo déjate llevar y baila como se te antoje! ¡No existe ninguna regla!
Le agarró de la mano que está libre del vaso y le hizo mover lentamente y tras ver que se soltó más bailando por si solo deshizo el agarre y minutos después ya estaba bailando con todo como ella.
Y sin que se den cuenta hay cuatro chicos observándolos fijamente mientras están sentados en uno de los sofás, estos son los merodeadores quienes extrañamente no se están divirtiendo, los cuatro por diferentes razones, dos de ellos por sentirse rechazados por alguien, uno por haber sido rechazado y no solo sentirse y el otro simplemente porque las fiestas no son lo suyo.
— ¿Ellos son novios? — preguntó Remus a la nada.
— Que yo sepa son mejores amigos — respondió James esta vez buscándole a la chica que le rompió el corazón una vez más hace unos minutos atrás.
— Ella no podría tener solo amigos — dijo Sirius dando un trago de su whisky mientras le observa a su hermano y a la chica con odio.
— ¿Qué mierda hacemos de amargados aquí? — preguntó Peter dándose cuenta de la situación — Yo me iré a emborracharme.
— Te acompaño.
Y así quedaron solo James y Remus quienes están muy aburridos viendo a todos divertirse menos ellos.
— Creo que yo también lo haré para pasar las penas — dijo levantándose — ¿Vienes Remus?
El chico dudó mucho pero al final tras verle muy cerca a Némesis y Regulus terminó por aceptar con el fin de ahogar esa pequeña molestia en él y que no debe estar ahí si no quiere que pase a mayores.
═══════════════
Una hora después y todo ya cambió, Marlene está bailando eufóricamente a causa de la droga, Regulus está un poco ebrio bailando con la chica que tanto negó juntarse, Némesis se encuentra bailando bastante pegada con un chico, Sirius está haciendo beso de tres con dos chicas mientras se toquetean entre ellos, Peter desapareció con una chica, James está en la mesa de bebidas en compañía de un chico cantando a todo pulmón una canción de desamor mientras toman como si no hubiera mañana, los dos bastantes despechados, y finalmente Remus quien están un poco tomado pero no ebrio, él se encuentra otra vez sentado con un vaso en mano mientras acepta que realmente siente atracción hacia Némesis y que no solo se dio ahora que interactúan, sino que ya siente atracción desde antes, por lo que ahora no está reprimiendo los celos y a la vez tristeza mientras le observa fijamente a la chica con ganas de ser el chico con el que baila, pero no es lo suficientemente valiente para acercarse e invitarla a bailar por miedo a que lo rechace.
Némesis por su parte ya se había dado cuenta hace minutos atrás que el chico la observa y ha estado esperando que se acerque a invitarla de una vez por todas en lugar de solo verla porque la verdad que ya le empieza a poner caliente esa mirada intimidante, pero al parecer no se acercará nunca así que volteó directamente y empezó a bailar para su suerte con una canción bastante sensual de fondo.
Remus sintió sus mejillas encenderse cuando fue pillado pero aún así no pudo apartar la mirada ya que se quedó embelesado viendo sus movimientos lentos pero sensuales mientras lo mira fijamente como si lo estuviera bailando a él y no al chico detrás suyo. Sintió su corazón latir con ferocidad y fue peor cuando sus manos se deslizaron por sus pechos bajando lentamente por su abdomen dejando más a la vista su escote notando claramente que no lleva sostén, algo que lo llevó directamente a la imaginación de cómo sería verla bailando solamente con la única ropa interior que lleva puesto ahora y que es bastante notorio.
Todo esto era un juego de seducción y la presa efectivamente estaba cayendo sintiéndose más atraído que nunca por su cazadora, o más bien sería completamente perdido en sus movimientos, sintiéndose como nunca antes había pasado.
La tensión sexual entre ambos era bastante notorio para los dos y para cualquiera que estuviera viendo el espectáculo mientras esperan ver que el hombre ceda, pero en esta historia la mujer tiene más poder y valentía.
Némesis cansada de esperar fue directo a él mientras siguen observándose fijamente sin perder contacto en ningún momento, sintiendo como si solo ellos estuvieran en el lugar y no rodeado de personas.
Remus tenía ganas de huir por los nervios al verla acercarse pero una parte suya es como si lo evitara, quizás el alcohol en su sistema que le está pidiendo algo de diversión y distorsionando un poco su realidad, por esa razón se quedó de piedra cuando ella se sentó encima de sus piernas percibiendo al instante el maravilloso olor de su perfume y no pudo evitar inhalar profundo sintiéndose atraído hasta por el olor de ella, con ganas de hundir su nariz en su cuello.
— Hola lobito — murmuró en su oído colocando una mano en su pecho.
Remus sintió escalofríos por todo su cuerpo al sentir su aliento soplar contra su sensible cuello y sus latidos empeoraron cuando su mano empezó a moverse con lentitud proporcionando calor en esa zona. A este punto ya había caído por completo y era un manojo de nervios, emoción y calentura porque al final del día sigue siendo un adolescente con las hormonas alborotadas y del cual no recibe ese tipo de atención hace mucho tiempo.
— Ho-Hola — tartamudeó.
Se quiso golpear al instante por comportarse tan patéticamente pero fuera de espantarle a Némesis le atrajo aún más ya que le gusta mucho ponerle nervioso a los chicos y saber que ella tiene el mando entre los dos.
— Hoy te ves bastante bien lobito — murmuró con una sonrisa de lado y sin dejar de mover su mano.
La inseguridad le pegó fuerte a Remus pensando que solo lo dice por compromiso ya que cualquier chico en la fiesta se podría ver mejor que él quien no puso ningún esmero en su vestuario pensando que sería otra fiesta aburrida, por lo que ahora solo lleva una simple remera blanco, jeans negro y su converse todo desgastado, ni siquiera se arregló el cabello. Y desea poder volver el tiempo atrás y vestirse mejor sabiendo que la chica que le atrae y es deseada por muchos estaría sentada sobre su regazo.
— Cualquiera se ve mejor que yo.
— En este momento el único que tiene mi atención eres tú y créeme que no necesito mirar a otros para saber que tú eres más atractivo que cualquier otro que se haya esmerado en su vestimenta, además al final del día solo tú me parecerás interesante.
Un poco de su autoestima se elevó pero como siempre su mente le juega una mala pasada haciéndole ver todo lo peor.
— Es porque ahora mismo estás encaprichada conmigo y planeas que yo sea el que te divierta esta noche — dijo tomando el valor y mirándola directo a los ojos.
— ¿Y eso es malo? ¿Acaso no te gusta la atención que recibes de mí? ¿No te gusta que esté sentada encima tuyo mientras le ignoro a todos y me centro solo en ti? ¿No te gusta que haga esto? — deslizó su mano más abajo hasta detenerse en el inicio de su jeans — Dime que no te gusta y me alejo de ti.
El castaño se lo planteó seriamente si dejarse llevar o detener todo a tiempo antes de caer redondito volviéndose uno más del montón cuando para él no se sentiría así, pero dio una rápida repasada al lugar dándose cuenta que debería dejar de reprimirse por culpa de su licantropía y disfrutar de su adolescencia como cualquier otro y eso incluye estar con una hermosa chica.
— No quiero que te alejes.
— Eso pensé.
Conectaron sus ojos por largos segundos, una lucha entre marrón contra marrón, sintiendo la tensión sexual acumularse a su alrededor e inevitablemente sus miradas se desviaron a los labios del otro y como magnetismo se acercaron lentamente pero como a Némesis le encanta fastidiar y jugar en todo momento se detuvo a centímetros de sus labios.
— Quiero escucharte pedir que te bese.
— Bésame, Némesis — cedió ante su petición.
— Así me gusta.
Y en el preciso instante en que sus labios se rozaron alguien la empujó y casi cayó si no fuera porque Remus la sostuvo rápidamente de la cintura. Los dos bastante molestos miraron por todos lados buscando quién fue el culpable de interrumpir pero no le vieron a nadie sospechoso.
— Bueno, supongo que el destino no quiere que nos besemos — bromeó Némesis — De todas formas se te ve un poco borracho y quiero que recuerdes cada detalle del momento en que te bese.
— No estoy borracho — dijo rápidamente el chico aún con las ganas de besarla.
— Como sea, es hora de divertirnos.
Con descaro metió la mano en su escote haciendo que la tira de su blusa casi caiga desvelando su seno pero Remus rápidamente lo sujetó sin querer que nadie la vea. A Némesis ni le importó ya que es solo una teta como todos lo tienen y siguió hurgando hasta lograr quitar la bolsita y sacar una pastilla, antes de tomarlo Remus la detuvo curioso.
— ¿Qué es eso?
— Éxtasis.
Tras responder tragó la pastilla en seco sin necesidad de tomar un líquido.
— ¿Me das uno?
— ¡¿Qué?! — exclamó bastante sorprendida — Tú, el perfecto Remus Lupin quiere probar una droga, no te puedo creer.
En otra ocasión hasta él se sorprendería de sí mismo e incluso negaría cualquier tipo de droga pero por hoy decidió mandar todo a la mierda y dejarse mal influenciar por Némesis porque algo de ella le hace sentir relajado ante todo, quizás es su personalidad o su facilidad para manipular, aunque en este caso no lo está manipulando así que directamente va a lo primero. En fin, solo tiene ganas de sentirse como cualquier adolescente e incluso sentir lo que ella siente al consumir eso y poder entenderla mejor.
— Te daré la mitad de uno porque es tu primera vez pero antes necesito tu completo consentimiento porque más adelante no quiero lidiar con dramas de que yo te obligue y blah blah.
— Te doy mi completo consentimiento y prometo hacerme cargo de toda consecuencia.
— Bien — quitó el último que le quedaba tras vender el resto y partió por la mitad con su uña — Abre la boca.
Siguió su orden una vez más y ella colocó la pastilla en su lengua y luego le hizo una seña para que tome con ayuda del vaso de cerveza que hace minutos atrás colocó en el sofá.
Una vez listo ella se levantó de su regazo con una enorme sonrisa y le extendió su mano, Remus se levantó marcando la gran diferencia de altura y sujetó su mano siendo recibido por la frialdad de su palma y dedos, todo lo contrario a él.
Los dos se dirigieron al centro bailando al son del rock and roll, por un momento Remus se movía tímido pero poco a poco se dejó ir mucho más.
Y minutos después los dos ya estaban bailando eufóricamente dejándose llevar por el techno y las luces de colores parpadeantes, ambos agarrados de la mano y marcando su propio ritmo de baile mientras se observan fijamente en todo momento con las pupilas dilatadas.
Remus nunca antes se había sentido de esa forma y ahora entiende perfectamente la razón por la cual consume, se la está pasando mejor que nunca con su compañía, así que en un arranque de felicidad la pegó a su cuerpo colocando su mano en su mejilla con la intención clara pero Némesis dándose cuenta negó.
— ¡Ya te dije que lo haré estando en todos nuestros sentidos! ¡Solo espera!
El castaño asintió un poco desilusionado pero en segundos todo quedó en el olvido y continuaron divirtiéndose juntos por lo que resta de la noche hasta ser los últimos en quedar de pies bailando.
═══════════════
Al día siguiente Némesis despertó gruñendo al oír voces y se removió en su cama pero se detuvo al sentir un cuerpo pegado atrás suyo y un brazo cubriendo su abdomen. Todos los recuerdos le vinieron al instante y supo la razón de cómo terminó en esta situación, Remus y ella fueron los últimos en quedar bailando hasta que la música se apagó y a ella le dio pereza ir hasta su habitación así que se tomó el atrevimiento de pedirle al chico dormir en su habitación y por eso ahora están en esa situación.
— Al menos uno de nosotros se divirtió anoche.
— Ya cierra la boca y deja de lloriquear James — le retó Némesis abriendo los ojos con dificultad por la luz solar.
— Es que me ha rechazado de vuelta — chilló.
— Ya cállate que me duele la cabeza — se quejó Remus apretando más la cintura de la chica, pero luego se dio cuenta de la situación y la soltó rápidamente abriendo los ojos — Lo siento.
— Anoche no parecía importarte estar cerca mío — bromeó haciendo que sus mejillas se sonrojen inmediatamente.
— Que asco, no hablen de su noche de sexo frente a los desdichados como yo que no consiguieron nada.
— No tuviste diversión porque te emperraste en Evans y su rechazo en lugar de irte con cualquier otra persona dispuesta a darte aunque sea una mamada.
— Ella tiene razón — apoyó Peter quien salía del baño.
— Némesis, tú eres una chica.
— No me digas, y yo que creí que era hombre — ironizó rodando los ojos.
— No me refiero a eso, lo que quiero decir es que sería genial que te acerques a ella para quitarle información sobre si le gusto o no.
— ¿Y yo qué gano a cambio? — preguntó sentándose en la cama dándose cuenta que lleva solo su ropa interior con la remera de Remus y el susodicho está sin el — Linda vista.
Le guiñó el ojo y el chico bastante avergonzado se tapó la cara con la almohada.
James se aguantó sus ganas de momento shipper y se centró en el objetivo principal.
— Te daré 10 galeones.
— 30 y la capa de invisibilidad por una semana más de lo acordado anteriormente.
— 25 y la capa.
— 28 y la capa. Lo tomas o lo dejas.
— Hecho.
Ambos estrecharon su mano cerrando el trato ante las miradas de diversión de los dos merodeadores, pero toda felicidad se vino abajo cuando un desaliñado Sirius entró a la habitación y se quedó de piedra en la entrada viendo el panorama. Peter solo con una toalla cubriendo su cintura para abajo, James sujetando la mano de Némesis quien está sentada en la cama de Remus solo con una remera suya y el susodicho acostado sin remera y tapado de la cintura para abajo pareciendo desnudo.
— ¿Qué carajos pasó aquí? ¿Ustedes cuatro....
— No, solo Remus y Némesis — contestó James de lo más relajado.
— ¡¿Qué?! Con mi amigo ¿en serio Lestrange?
— ¿Algún problema?
— ¿No te fue suficiente con drogarlo anoche?
— ¿Te drogaste? — le preguntó sorprendido el azabache — Mierda, me hubiera gustado ver eso.
— Ya deja el drama Black que aburres siempre queriendo pelear conmigo, ya hasta pienso que solo es para llamar mi atención.
— No digas estupideces.
— ¡Ya basta! — exclamó Remus sintiendo su cabeza palpitar del dolor y peor con la discusión — Cálmate Sirius, no hicimos nada más que dormir, y sobre lo otro, no le eches la culpa a ella, yo fui el que la pidió.
— Por qué me emborraché — se lamentó James ya que se perdió de todo.
— Algo tuvo que hacer para que accedas a drogarte. Tú no eres así.
— No hizo nada, y si te sirve de consuelo no volveré a consumir, solo...solo quería sentirme un adolescente normal...
Mientras tanto Peter compartió gomitas con Némesis y ambos empezaron a comer viendo el espectáculo bastante entretenidos como si fuera una telenovela.
— Toda mi vida he estado viendo como ustedes se divierten y disfrutan de su juventud mientras que yo debo quedarme sentado reprimiéndome por miedo a que la bestia se descontrole y le haga daño a alguien.
— Ya te dijimos que no tienes porque reprimirte Remus, solo sucede una vez al mes, mientras tanto no le dañarás a nadie.
— Tú no entiendes lo que es vivir con esto día a día, piensan que me afecta solo una vez pero no es así, él sigue ahí dentro, esperando tomar poder.
Némesis colocó su mano encima de la suya en forma de apoyo al ver sus ojos aguarse y se sintió culpable de haberlo amenazado viendo ahora lo mucho que sufre y teme a su licantropía.
Remus dio la vuelta su mano entrelazando con el suyo y Sirius para su pesar vio esto dando un suspiro rendido.
— Está bien, haz lo que quieras, ya no me meto en tu vida.
Con eso volvió a salir dando un portazo dejando el lugar en silencio y la chica se sintió incómoda e intrusa preguntándose en qué momento pasó a una situación envuelta con los merodeadores, ni nunca hubiera imaginado que ahora mismo estaría en su habitación presenciando todo un drama mientras le da apoyo al chico que amenazó con el otro chico enfrente quien también amenazó, él único impune de su veneno en ese lugar es Peter. Y se dio cuenta que por su culpa la perfecta amistad está teniendo problemas, por lo que lo mejor sería alejarse ya que no quiere romper algo tan bonito como lo que tienen esos cuatro chicos, además no quiere verse envuelta en un drama cuando ya tiene suficiente en su vida.
— Bueeeno, yo ya me largo.
Se soltó del agarre de Remus y se levantó de la cama agarrando su ropa de anoche con la intención cambiarse.
— Espera, quizás te quede grande pero te puedo prestar un pantalón para que no vayas así.
— No será necesario Lupin, pero si te robaré tu remera.
Los tres chicos voltearon cuando ella se iba a poner el pantalón para darle privacidad.
— Tan educados los niños — se burló riendo.
Se colocó su pantalón y la remera le queda tan grande que tapa su trasero así que nadie verá su ropa interior en pleno día ya que deben ser como las doce porque el sol ya está en lo alto.
Y como si fuera su propia habitación fue al baño viendo el desastre de su cabello, al menos el maquillaje aún se conserva un poco, aún así procedió a quitarse con ayuda del agua y papel higiénico ya que no tiene algo mejor a su alcance.
Minutos después ya salió casi como nueva viendo que los otros también ya están vestidos y hablaban de algo pero al verla se detuvieron, por ende estaban hablando de ella o algo privado, aún así no le tomó importancia y fue hacia sus tacones agarrando para luego ponérselos.
— ¿Cómo es posible que hayas estado toda la noche con esos y otra vez camines ahora con eso? — preguntó James anonadado.
— Costumbre — se levantó y los miró a cada uno por unos segundos — Ya me voy, chau.
— ¿Eso es todo? ¿No te vas a despedir de Remus?
— No seas pesado James — le retó el castaño.
Némesis soltó un resoplido y avanzó hasta Remus dejando un casto beso en la comisura de sus labios como despedida oficial ya que no volverá a pedirle su compañía por un largo tiempo.
— Hasta nunca perdedores.
Con eso salió escuchando un grito de Potter diciendo "No somos perdedores" lo que le causó gracia.
Al bajar a la sala común recibió la atención de todos los alumnos que están ahí pero no le tomó importancia y caminó con la cabeza en alto todo el tiempo como lo habían enseñado hasta salir finalmente para su gran alivio porque ya le estaba hartando tanto rojo y calidez, prefiere mucho más su casa.
═══════════════
Horas después ambos amigos se estaban contado todo lo sucedido en la fiesta y ahora era el turno de Regulus.
— Tenías razón, es bastante agradable.
— ¿Cómo podría ser Regulus + Ava? No lo sé, ya lo pensaré pero te lo dije, mi sexto sentido ya me decía que estarían juntos.
— Cálmate fiera que solo bailamos y hablamos unas horas hasta que ella se cansó y la tuve que acompañar a su sala.
— Así se empieza amigo.
— Ajá.
— ¿Cómo te sentiste con ella?
— Bien.
— ¡Sé más explícito idiota!
— ¡Hey! Sin insultos — la miró mal pero la otra ni se inmutó — Está bien, me sentí escuchado y entendido porque tenemos muchas cosas en común, también me sentí relajado, como si pudiera ser yo mismo, y...y..no sé, no soy bueno expresando.
— De todas formas ya entendí que dentro de poco ambos van a estar dándose besitos, andando agarrados de las manos y diciéndose asquerosas cursilerías.
— No seas exagerada, además ya te dije que no puedo.
— ¡Al carajo con la supremacía de la sangre! Mereces toda la felicidad Reggie y que tu familia de mierda no te lo arrebate.
— Supongo que sí.
Esa noche al menos uno de los dos obtuvo algo bueno en su vida, o eso parece, porque quizás también fue el inicio de algo que más adelante sería especial. Pero....¿Qué pasa cuando dos personas tienen rechazo al amor? ¿Terminarán dejando de lado su rechazo para amarse con locura o se destruirán más de lo que ya están?
═══════════════
Holaa! ¿Cómo están?
Solo vengo a decirles que a partir de ahora la situación entre Remus y Némesis se volverá interesante 🔥
¿Les gusta leer escenas explícitas o les causa incomodidad?
Estaré leyendo sus opiniones al respecto.
Hasta la próxima <3
Ingrid.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top