"SENTIMIENTOS EXTRAÑOS"

Capítulo 14 y 15 basados en la película MHA; Two Heroes

NATSUKI MIRABA MARAVILLADA LA ISLA, su hermano había sido invitado y junto a esa invitación le dijeron que podía llevar un acompañante, la pequeña Takami era la obvia dueña de la otra invitación.

Para lastima de ambos hermanos, Kira no iba a poder asistir con ellos debido a que era demasiado pronto, el psiquiatra se encontraba haciendo los exámenes finales para indicar si ella podría finalmente ser dada de alta o no.

—Espero no se te haya olvidado nada, Takami Keigo —espetó la de cabellos azules mirando al mencionado severamente, su hermano podía ser el ser humano más despistado en ocasiones.

—Ni Kira se comportó así —murmuró él mirando a su hermana menor, quien le escuchó y ante eso le frunció el ceño—. Hermanita, tranquila, llevo todo.

—Más te vale —murmuró mirando a su hermano.

Fueron al hotel donde se instalaron, el rubio estaba bien disfrazado, después de todo no quería ser descubierto por los fans, no iba a poder disfrutar con su hermana las vacaciones si se enteraban que él se encontraba ahí.

Y aunque le encantaba la atención, está vez solo deseaba descansar de su trabajo como héroe y disfrutar con su hermana todo lo que la isla podía ofrecer.

—Muy bien, es hora de explorar —declaró Kiego mientras dejaba su maleta en la sala de estar de la habitación de hotel que les dieron—. ¿Vamos?

—Ya voy —espetó la peliazul mientras buscaba algo con que agarrarse el cabello, cuando encontró el objeto salió con Keigo dirigiendo el recorrido.

—¿Has estado aquí antes? Supongo que los de Seguridad Pública debieron inspeccionar si el lugar era seguro para los turistas —espetó la peliazul.

—No, no he venido antes —declaró el rubio—, ahora ¡A explorar!

Ella negó varias veces con la cabeza al notar el comportamiento infantil de su hermano. Recorrieron el lugar por un rato, Keigo parloteaba sin parar, pero se detuvo cuando notó como su hermana se quedó mirando con cierto brillo en los ojos a un evento en específico.

Miró el centro del lugar, ahí estaba un chico de cabello bicolor que recordaba muy bien, era el hijo de Endeavor.

Shōto Todoroki.

Sonrió divertido, su hermana no era buena disimulando, y menos con él. Y esa sonrisa divertida se convirtió en una maliciosa.

—¿Quieres ir a saludar a tu amado? —cuestionó provocando que su hermana pegara un pequeño brinco.

—¿Q-que? No... —respondió ella con duda en su voz, pero era demasiado tarde porque su hermano le estaba arrastrando más cerca del lugar—. Y él no es mi amado.

Entonces, los ojos azules de la chica chocaron con los heterocromáticos del bicolor quien al mirar a la chica su semblante se volvió un poco más tranquilo, por su parte la peliazul le dio una leve sonrisa junto a un saludo con la mano, el bicolor hizo un asentimiento en su dirección.

—¿No quieres hablar con él? —continuó molestando Keigo.

—No —negó ella sonrojándose un poco, su hermano no iba a parar de molestarla.

—Pero yo quiero conocer a mi cuñado, parece agra-

—No, onii-chan, no se te ocurra —espetó ella mientras tomaba el brazo del mayor—. Continuemos viendo el lugar.

—Está bien, está bien —iba a dejar de molestarla, por ahora.

Ambos hermanos se fueron del lugar bajo la atenta mirada del bicolor, quien se interesó en saber porque el hermano mayor de Natsuki iba cubierto de los pies a la cabeza.

Keigo iba vestido completamente de negro, e incluso portaba unas gafas y un sombrero, ciertamente se miraba sospechoso, pero la gente no había empezado a sospechar de su identidad.

[...]

El vestido que traía era de color negro y sin mangas, estaba pegado al cuerpo y tenía una abertura en su pierna derecha. Le gustaba como le quedaba, cosa extraña en ella pues rara vez le gustaba como le quedaba un vestido.

Estaba molesta con su hermano mayor, quien había decidió entrar a la fiesta antes que ella, pues la menor no había terminado de peinarse y colocarse un poco de brillo labial.

Cuando entró al lobby, se sorprendió de ver a algunos de sus compañeros de clase ahí.

—Hola —espetó ella con una pequeña sonrisa, los demás le correspondieron el saludo.

Ella iba a entrar a la fiesta, pero entonces fue detenida porque las puertas se cerraron de inmediato, sintió como una mano la tomó del brazo y la jaló hacia su cuerpo, se sonrojó levemente al notar que el responsable de tal acción fue el bicolor.

Todos se juntaron e intentaron salir de ahí, siendo esto imposible, pues las puertas no se abrían.

—Mi teléfono no tiene señal —espetó Todoroki—. Parece que todas las entradas han sido bloqueadas.

—El ascensor tampoco funciona —espetó Jirō mientras intentaba hacer que este funcionara.

—¡No quiero morir!

—No creo que el sistema de seguridad haya cambiado a modo alerta solo por haber detectado un explosivo.

—Puede ser una trampa —le susurró la peliazul al bicolor, quien asintió de acuerdo con ella.

No era normal, después de todo ese sistema de seguridad había sido hecho por los mejores de los mejores.

—Melissa-san ¿Hay alguna manera de poder entrar a la fiesta? —espetó Midoriya, quien quería ir para poder buscar a All Might.

—Si utilizamos las escaleras de emergencia, creo que podemos llegar a la fiesta —respondió ella.

—¡Por favor, abre el camino!

Entonces siguieron a la rubia mayor, quien consiguió llevarlos a la fiesta, o bueno, el piso de arriba donde estaba la celebración.

Gracias al kosei de Jirō, pudieron saber por All Might que los villanos habían sido los encargados de la activación del sistema de seguridad.

Natsuki buscó a su hermano con preocupación, esté se encontraba amordazado igual que los demás héroes.

—Onii-chan —susurró ella preocupada, su hermano la miró de inmediato, había escuchado la voz de su hermana desde que entró al edificio—. T-tengo miedo —murmuró—. No quiero que te hagan algo.

—Hermanita —espetó el rubio intentando tranquilizarla, comprendía que su hermana aún no tenía tanta experiencia como él y era normal que tuviera miedo—. Cuídate por favor, eres fuerte y puedes con todo, no te preocupes por mí, solo intenta escapar.

La Takami asintió con lágrimas en sus ojos, era bastante sensible y el hecho de mirar a su hermano en ese estado provocó que quisiera llorar o ir a desatarlo de inmediato.

El bicolor observó a la peliazul con cierta sorpresa, había notado como ella hablaba con una de las personas que estaban en la fiesta, y esa persona le respondía, él supuso que Natsuki hablaba con su hermano mayor, estando en lo correcto.

Eso sí, no había notado quien era el hermano mayor de la chica. Todos fueron a un lugar donde nadie les vería, y ahí empezaron a discutir qué es lo que harían a continuación.

—Hemos recibido el mensaje de All Might —habló Iida—. Sugiero que sigamos las instrucciones del Maestro de la U.A, All Might y escapemos de este lugar.

—Estoy de acuerdo con la opinión de Iida-san —espetó Yaoyorozu Momo—. Seguimos siendo simples estudiantes. No podemos luchar contra villanos sin nuestras licencias de héroe.

—¿Qué pasa si escapamos y buscamos ayuda con los héroes de fuera? —sugirió Kaminari.

—Creo que será difícil poder escapar —mencionó Melissa llamando la atención de todos—. Este lugar se construyó con el mismo nivel de seguridad que el Tartarus, donde están los villanos más buscados.

—Entonces, todo lo que podemos hacer es esperar por ayuda...

—Kaminari, ¿estás satisfecho con eso? —cuestionó Jirō.

—¿Qué quieres decir?

—¿No sientes que deberías ir a ayudar?

Entonces empezaron a discutir entre ellos hasta que Natsuki habló.

—Podemos ayudar sin luchar —declaró ella—. Un héroe no solo lucha contra los villanos directamente, también lo hace en las sombras. Como una misión de espionaje.

Esas palabras se las había dicho Keigo, quien demasiadas veces había tenido que hacer misiones de ese tipo. Vencer a los villanos sin luchar.

Todo se trataba de estrategia e inteligencia.

—Takami-san tiene razón —habló Midoriya—. Necesitamos un plan para salvar a All Might y a los demás sin luchar contra los villanos.

—Entiendo como te sientes, pero ¿hay algo tan conveniente-

—Incluso si es difícil, aún quiero intentarlo. Quiero buscar la mejor manera posible y luego poder ir a salvar a todos.

—El sistema de seguridad de la isla está en el último piso de esta torre —espetó Melissa—. Si los villanos han tomado el control del sistema, entonces los bloqueos de autenticación y las contraseñas deberían estar desactivados. Deberíamos poder reiniciar el sistema. Solo tenemos que alejarnos de los ojos de los villanos y llegar al último piso y así quizá podamos salvar a todos.

—Estoy adentro —murmuró Natsuki con una sonrisa tímida, Midoriya le observó con una sonrisa agradecida, entendía mejor que nadie lo difícil que era hablar frente a personas que no conoces muy bien.

Los demás fueron apuntándose, todos de acuerdo con el plan, o al menos no tan en desacuerdo.

Ya tenían un plan, solo había que esperar y rogar en que saldría bien.

Por qué así sería ¿No?