𝐅𝐎𝐑𝐓𝐘
"LA REDADA PT. 2"
LO PRIMERO QUE HIZO AL LLEGAR FUE BUSCAR A KEIGO, a quien por suerte logró encontrar gracias a su vista mejorada, lo malo fue que había llegado un poco tarde pues su hermano se encontraba bastante herido.
Natsuki lanzó un pico de hielo hacia el villano que se hacía llamar Dabi, este no se esperaba tal ataque por lo que fue lastimado en el hombro y con rapidez se alejó del héroe número dos.
—¿Te encuentras bien? —murmuró la de cabellos azules mientras observaba a su hermano con preocupación.
—No deberías estar aquí —respondió el rubio mientras observaba a su hermana menor.
—Eres de la U.A —espetó Dabi mientras observaba a la de cabellos azules—. Patético ¿También trajeron estudiantes? Fíjate, mocosa —señaló a Twice, otro de los villanos—, él lo mató, lo apuñaló por la espalda mientras iba a ayudar a los suyos ¿Y? ¿A qué viniste? ¿A salvar a alguien? ¿A salvar qué? Los héroes profesionales a los que admiras son mucho más sucios que nosotros.
—¿Por qué crees que debería sentir pena? Ustedes han matado a muchos por mero placer, los héroes lo hacen para salvar a los indefensos—respondió la peliazul con el ceño fruncido.
Que te hayan pasado cosas malas no quiere decir que tengas el derecho a hacerle cosas malas a otros. Y muchos villanos probablemente eran víctimas de lo cruel que la sociedad o la vida podía ser.
Pero eso no les daba derecho a intentar arruinar o quitarle la vida a otros.
Natsuki entonces no lo pensó dos veces y extendió sus alas. Tomó a Keigo en brazos y se fue volando.
Dabi ni siquiera pudo seguir a la chica gracias a la velocidad de esta.
—Se qué lo hiciste por el bien común, hermano —murmuró ella—. Los villanos pueden asesinar a los héroes pero estos no pueden asesinar a los villanos ¿No crees que es algo injusto?
Keigo sonrió ante eso, él le había hecho esa misma pregunta a Kira hace muchos años.
—Hermano, podría ver el mundo arder y lo único que me importaría es que tú y la tía Kira estén bien —continuó ella con lágrimas en sus ojos—. Así que no debes morir ¿Entendido?
Mientras volaba hacia el lugar donde tratarían a su hermano Natsuki escuchó lo que Endeavor comunicó a través de los comunicadores compartidos que todos tenían.
—¡Mensaje para todos! ¡Aquí Endeavor! Estoy con Shigaraki en el hospital, quien pueda venir sin rozar el suelo que venga.
La de cabellos azules deseó volar con más rapidez, pero si lo hacía se corría el riesgo de que algún sucio entrara en la herida de su hermano y así terminaría infectada.
Pero entonces escuchó algo más que Endeavor dijo.
—One for All...
Natsuki se detuvo abruptamente ante eso.
Midoriya.
Shigaraki va tras Midoriya.
La de cabellos azules entonces se apresuró mucho más, salvaría a su hermano primero y luego ayudaría a sus amigos. Debía brindar toda la ayuda posible.
En otro lado de la ciudad, Kira estaba con Aizawa, la primera cargando al otro.
—No dejaré que nada te ocurra, Eraser —murmuró la de cabellos azules notando como un Nomu se acercaba a ellos.
La de cabellos azules extendió sus alas y sin pensarlo voló hacia el monstruo, le asestó tres golpes y entonces con unos rayos de millones de voltios les electrocutó el cerebro, provocando así que el Nomu fuera inservible.
Pero entonces otro Nomu llegó, y luego. Kira terminó un poco alejada de Eraser al final.
Eso no podía permitirse, ella debía estar cerca de Aizawa, él era esencial para la derrota de Shigaraki Tomura.
Kira debía cuidarlo, no podía permitir que Shigaraki o algún otro se acercara al azabache.
Pero, gracias a todos los Nomus que se acercaron a ella, perdió el tiempo y se alejó más del azabache, y entonces vió todo en cámara lenta.
Vió a Shigaraki Tomura apuntar hacia Aizawa, y después vió como el villano le lástimo los ojos.
Pero Kira no consiguió hacer nada pues un Nomu le mordió el brazo derecho.
La de cabellos azules oscuros enfurecida soltó un grito y sin pensarlo dejó salir una gran descarga de electricidad.
Los tres Nomu's que la atacaban terminaron con el cerbero freído.
Voló con rapidez hacia el azabache quien en esos momentos estaba siendo tratado por Shōto Todoroki, el chico que reconoció con facilidad gracias a las miles de veces que Natsuki habló sobre él.
—¿Cómo se encuentra? —cuestionó la de cabellos azules mientras acariciaba el cabello de Aizawa.
—Sus heridas han dejado de sangrar —mencionó él mientras observaba con una mueca a su sensei.
—Dios, primero Hawks, ahora Aizawa ¿quién sigue, Natsuki? —murmuró la de cabellos azules.
Kira solo deseaba que donde quiera que su sobrina estuviera se encontrara bien.
[...]
La de cabellos azules observó con el ceño fruncido a los villanos en el suelo, todos fueron noqueados por la misma Natsuki.
Puede que algunos tuvieran huesos rotos, pero a la peliazul no le importaba.
No, ya no le interesaba lo que le ocurriera a los villanos.
—Midnight sensei ¿Se encuentra bien? —cuestionó ella mientras cargaba a la mujer, quien asintió débilmente—. No se preocupe, la llevaré a un lugar donde pueda descansar mejor.
Natsuki estaba furiosa, pero intentaba contenerse.
Voló hacía la zona donde estaban muchos heridos, entre ellos su hermano, a quien no había abandonado hasta que trataron sus heridas y vendaron.
Al llegar ella misma se dispuso a ayudar a los médicos, su hielo servía para detener el sangrado que Midnight estaba teníendo.
Natsuki llevaba así un buen rato, salvó a un buen par de doctores y los colocó en una zona segura, y poco a poco había estado trayendo a héroes que se encontraba en el camino.
Había estado haciendo lo que le dijeron, rescatar y evacuar.
—Voy a seguir trayendo a todos los que pueda —les dijo ella—. ¿Todo seguro aquí cierto?
—Así es Falcon—dijo uno de los médicos.
Eran siete médicos los que habían, todos habían estado como locos tratando a los heridos que la peliazul traía, y sin duda alguna también se sintieron inspirados por la determinación de la adolescente.
Natsuki entonces continuó con su misión, no podía detenerse a pesar del cansancio que la embriagaba pues a pesar de rescatar a muchos heridos también se enfrentaba a villanos.
Algunos consiguieron dejar pequeñas heridas pero ninguna muy profunda, sin embargo estás ardían.
Y entonces, mientras buscaba a más heridos, se encontró con una mujer.
La mujer de sus pesadillas.
El cabello lo tenía más largo que la última vez, pero sus ojos, contrario a las últimas dos veces ya no demostraban frialdad, está vez tenían algo diferente.
—¡Espera! —dijo la villana al notar como Natsuki estaba lista para atacarle—. ¡No busco pelea, necesito tu ayuda!
Natsuki le observó con cierta confusión más nunca apartó sus ojos azules de los orbes verdes de la mujer frente a ella.
—¿Qué es lo que quieres, villana?
—Puedo ayudar —espetó la mujer con rapidez—. Todo este tiempo he estado cegada por la ira, el resentimiento. Y-yo.... solo quería venganza.
—¿Venganza?
—Hace un tiempo una heroína no logró salvar a mi padre por culpa de All For One y Garaki —empezó a decir la mujer—. Siempre culpé a los héroes hasta hace unas semanas, yo descubrí la verdad.
Eso provocó que Natsuki no le interrumpiera, pero aún así se mantuvo alejada de la mujer.
—Mi kosei, mi verdadero kosei es.... manipulación—continuó la mujer—. Puedo manipular a la persona que yo deseé, puedo cambiar sus recuerdos e incluso controlarlo, no hay fecha de caducidad. Pero debo tocar a la persona para poder cambiar sus recuerdos.
—Tú eres la clave para poder ganar —le interrumpió Natsuki—. ¿Pero, por qué reaccionaste hasta ahora?
—La última vez que nos vimos, Eagle estaba contigo —respondió la mujer—. Primero quise asesinarla, pero luego decidí investigar sobre qué fue de ella luego del accidente, descubrí que se la pasó bastantes años en el hospital luego del accidente ese día, ella también sufrió mucho.
Eso dejó descolocada a Natsuki, la mujer frente a ella era la hija del hombre que su tía no logró salvar.
—Todo es culpa de All for One, yo misma haré que ese hombre pague, pero voy a necesitar tu ayuda y refugio, Natsuki, en cuanto noten que sobreviví vendrán por mi e intentarán matarme.
—Voy a ayudarte —declaró la peliazul mientras se acercaba a la mujer y la cargaba en brazos—. Pero debo ir a pelear contra Shigaraki y necesito un favor.
—¿Qué cosa?
—Voy a dejarte con unas personas, pero volveré por ti —aclaró—. Cuida de ellos, si algo ocurre por favor protege a Hawks.
—¿A Keigo? —cuestionó ella dejando a la peliazul sorprendida.
—¿Le conoces?
—Es el sobrino de Kira, claro que le conozco —respondió la azabache obvia—. Y tu debes ser Natsuki, la hermana de Keigo.
—¿Lo protegerás cierto?
—Con mi vida —aseguró.
—Bien, entonces agárrate fuerte....
—Hanna, soy Hanna Shin.
Y entonces voló bastante rápido hacia la zona con los doctores.
—Aquí está otra mujer, tiene heridas superficiales a exepción de la herida en su pierna, ella es la última que traeré, debo ir a ayudar a los demás.
Y con eso salió volando.
Era momento de la batalla.
Una que no tenía intención de perder sin luchar hasta la muerte.
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