Créditos a su autora bonniebird en Tumblr.

Título: Pequeña diversión.
Advertencias: Lenguaje explícito, obscenidad, trío, smut, échense agua bendita antes o después de leerlo, grax.

━ ★ ━

Nunca se sabrá cómo quedaron atrapados en eso, pero allí estabas, sentada entre Tommy y John, que se miraban por encima de la mesa.

Nunca se sabrá cómo te convertiste en su único foco de atención, pero eso no cambió el hecho de que estabas atrapada entre dos hombres bastante peligrosos que estaban irritados el uno con el otro hasta el punto de que probablemente comenzarían una pelea si el otro comenzaba a respirar mal.

Te fuiste y ambos hermanos saltaron para mover tu silla, dándote tiempo suficiente para salir de la Guarnición mientras discutían. Una serie de golpes en la puerta principal de apuestas te hicieron rodar los ojos, abriste la puerta y John entró tropezando.

—Hey, simplemente comprobando... que llegaste bien—dijo John rápidamente.

—Tommy no está aquí—suspiraste, mientras él se quitaba el sombrero y se acomodaba en una silla.

—Sí, sé que no, solo estaba...—John sonrió tímidamente cuando lo interrumpiste.

—Comprobando que él no está aquí.

Te sentaste a su lado y los dos comenzaron a conversar, sin darse cuenta de que Tommy se había apresurado a entrar al lugar para disculparse por ignorarte antes, pero su disculpa quedó atrás cuando te encontró riendo de algo tonto que John había dicho.

—¿En serio?—Tommy espetó, cuando John se movió para besarte, haciéndote girar hacia él en el último segundo.

—Tommy, ¿qué haces aquí?—preguntaste, levantándote de la silla.

—Interrumpiendo aparentemente.

Él espetó con una mirada fulminante a su hermano que había agarrado su sombrero y comenzaba a retarlo con la mirada.

—¿Por qué no te acuestas con los dos?—cuestionó Ada, a la par de ustedes. Para luego golpear la colilla de su cigarrillo en un cenicero que había en un escritorio.

—¡Joder, Ada!—gritaste, haciéndola reír.

—Todo lo que digo es que eso los callaría por un tiempo y sé que te gustaría.

Y aquello fue el final de la discusión.

Pero idea de Ada aun flotaba alrededor de tu cabeza mientras se suponía que estabas trabajando, tu mirada se centró en Tommy y John, mientras masticabas el extremo de tu lápiz.

John chasqueó los dedos frente a tu cara cuando se volvió para preguntarte si habías escrito lo que Tommy había dicho.

—¿Hmm?—preguntaste tontamente, haciendo reír a los chicos Shelby.

—¿Tienes algo en la mente?—preguntó John.

—Um...—susurraste, intentando pensar en una excusa

Ambos Shelby te miraron con diversión, mientras te sonrojabas intensamente y comenzabas a inquietarte, con la esperanza de moverte fuera de sus ojos.

Emanaron un comportamiento extraño y continuaron hasta que Tommy te llamó la atención, debido a la mirada aturdida con la que los veías.

—¿Amor?—Tommy te preguntó, el sonido de aquella palabra te hizo morder el labio inferior.

Saltaste cuando John lanzó un brazo alrededor de tu hombro, queriendo tener la misma cantidad de atención que su hermano. Girando para mirarlo, tu aliento se enganchó cuando te acercaste tanto a John que bien podrías haber frotado su nariz con la tuya.

Sin pensar, besaste a John, el Blinder te agarró por la nuca cuando le permitiste profundizar el beso, tragando un suave gemido que fue forzado a salir cuando Tommy te lamió posesivamente el cuello.

Lo único en lo que los chicos parecían estar de acuerdo, era en que tenías demasiadas prendas puestas, mientras John cerraba la puerta de la oficina de Tommy, Tommy fue quitando una por una.

No pasó mucho tiempo hasta que las manos de John se unieron a las de Tommy para seguir tu cuerpo expuesto.

—Creo que John debería irse al carajo—Tommy te murmuró.

—Al diablo con Tommy—John espetó fuertemente, a pesar de tener su rostro enterrado en tu cuello.

—¿No pueden quedarse los dos?—preguntaste en voz baja.

Ambos te miraron por un momento, asintiendo a regañadientes mientras aceptaban tu propuesta. Al principio dudaban, los toques de Tommy eran suaves y sensuales, mientras que John estaba desesperado y necesitado.

Tommy se desabrochó los pantalones y te levantó lo suficiente como para hundirse dentro de ti, empujándote hacia atrás, hacia John, que estaba demasiado ocupado mirándote boquiabierto por la forma en que te retorcías bajo el toque de Tommy.

—Cuanto más rápido termines, más rápido podremos intercambiar roles, solo piensa cómo se sentirían las manos de Tommy al hacer esto—John susurró en tu oído, una de sus manos se deslizó para acariciar desde tu pecho hasta llegar entre tus piernas y permanecer ahí.

—¡John!—jadeaste, tus caderas se sacudieron, haciendo que tú y Tommy gruñieran.

No les llevó mucho tiempo terminar, pero ustedes tres no estaban planeando hacer aquella una noche fácil, Tommy quedó fuera y te encamino hacia donde John se había sentado a admirarte.

—Haz algo mal con ella y será lo último que hagas, Johny Boy—Tommy advirtió, pero su voz se quebró ronca de lujuria.

A diferencia de los empujes calmados pero firmes de Tommy, los de John fueron rápidos y posesivos, tus ojos se pusieron en blanco y tu cuerpo se arqueó contra el fornido cuerpo de Tommy.

Sus grandes manos acariciaban suavemente tu anatomía, mientras sus besos eran dejados sobre tu piel.

Las manos de John agarraron tus caderas, para finalizar lo que había iniciado, tu cabeza cayó sobre el hombro de Tommy, que te sonrió cuando tus ojos se abrieron.

—No cedas tan pronto—te susurro, admirándote—. Nos hemos divertido mucho para no repetir esto.