☆ ━━━━━━ ¿𝐀𝐑𝐄 𝐘𝐎𝐔 𝐒𝐀𝐓𝐈𝐒𝐅𝐈𝐄𝐃?  ━━━━━━★

"𝐓𝐈𝐑𝐀𝐁𝐀 𝐃𝐄 𝐌𝐈 𝐂𝐀𝐁𝐄𝐋𝐋𝐎, 𝐄𝐋 𝐃𝐈𝐀 𝐐𝐔𝐄 𝐎𝐁𝐓𝐔𝐕𝐄 𝐄𝐋 𝐓𝐑𝐀𝐓𝐎 𝐐𝐔𝐄 𝐂𝐀𝐌𝐁𝐈𝐀𝐑𝐈́𝐀 𝐌𝐈 𝐕𝐈𝐃𝐀"

Cuándo sabes una historia, pregúntate tres cosas:

¿Que es cierto? Y ¿La victima es realmente sólo una persona? o ¿Depende de la persona que la cuenta?

Cuándo era sólo un niño tuve que aprender, que en éste mundo solo existen personas buenas o malas, ambiciosas o conformistas, inteligentes o Imbéciles.

La diferencia de estar satisfecho no se diferencia mucho a ser un mediocre.

Eso era lo que el "Viejo" solia decir de una manera incesante todo el tiempo, pero ¿Qué podia saber yo? Que el hecho de ser el "mejor."

Termianaria por condenarme toda una vida la cuál si le veo desde otro punto ya estaba jodida.

Puedo ser el Heroe o el Villano de ésta historia, pero antes de tomar mi papel, quiero que sepas mi versión.

Donde todo comenzó, y finalmente termino mi vida.

Hubiera dado todo por vivir la verdad, no por conformarme si no, por tener una venda que solo me impedía ver más allá de los aires de egocentrismo... y soledad.

𝗣𝗢𝗩 𝗖𝗜𝗡𝗖𝗢 𝗛𝗔𝗥𝗚𝗥𝗘𝗘𝗩𝗘𝗦

La primera vez que me sentí satisfecho, cuando Papá levantó su mirada de sus papeles para decir:

──Fuiste el mejor de la Academia.

Algo dentro de mi vivió en ese momento, como si mi alma fuese una delicada llama de fuego que dependía de una vela pero en ese momento todo se esfumó.

───Pero eso era antes.

¿De que estába hablando? Si el mismo dijo que fui el mejor, el examen de Griego había sido está mañana, no podía ser posible.

──Pero... El examen fue está mañana... ─── Recorde ───Tuve la mejor puntuación.

Mire mi gran X (En griego eso simboliza un 10) en papel mientras me sentia algo confundido... creí que está sería la ocasión perfecta para qué papá dijese aquéllas palabras...

──Tu lo dijiste, eso fue en la mañana en este momento eres el mejor.

──Soy el mejor.... ── murmuré en una especie de trance.

──La grandeza está contigo numero Cinco, pero depende de ti si deseas conservarla ── Me quitó aquella hoja para mostrarme otra ──No hay mucha diferencia entré el ser un conformista y el ser un Mediocre.

𝙐𝙣 𝙢𝙚𝙙𝙞𝙤𝙘𝙧𝙚.

─¿Seras un Mediocre? O ¿Un Ganador? ── Me tendió otro exámen el nombre qué estaba escrito en el costado me hizo centrar mi atención.

──Ocho igual obtuvo un 10... ── Solté un tanto desconcertado

──Ambos dieron más de lo que podía hacer el resto.

Eso era cierto, no era un secreto que entré mis hermanos no existía una gran comunicación pero, si te detenias a observar podías notar con facilidad cuál era el roll de cada Uno.

Ocho solía estar en su cuarto leyendo y escuchando música en su walkman la mayor parte del tiempo, dejándo de lado sus actividades extracurriculares que compartiamos.

──Ambos somos ganadores... ── Una parte de mi se tranquilizó, pero la cabeza de papá negando me hizo dudar.

──Tu eres el Ganador... Porqué fuiste el primero en entregarlo.

"𝐔𝐍𝐀 𝐕𝐈𝐃𝐀 𝐏𝐑𝐄𝐓𝐄𝐍𝐃𝐈𝐄𝐍𝐃𝐎 𝐒𝐄𝐑 𝐄𝐋 𝐆𝐀𝐓𝐎 𝐐𝐔𝐄 𝐂𝐎𝐍𝐒𝐈𝐆𝐔𝐈𝐎́ 𝐋𝐀 𝐂𝐑𝐄𝐌𝐀"

──Nadie quiere el segundo lugar numero cinco ── tomó Ambas pruebas para botar la de Ocho al cesto de basura.───¿Crees que alguno de tus hermanos se interesa por ti?

Mire cómo los exámenes de mis hermanos estaban en el mismo cesto, para qué la ceniza de la pipa de Papá termianara por ensuciarlos.

──Mantente así, o terminaras en la basura cómo los demás.

Trague profundo alarmado, mientras observaba aquella hoja en mis manos mi esfuerzo no había servido de nada fácilmente creí que estaba bien pero sólo había fallado.

──Felicidades ahora retírate. ── Ladeó la puerta.

En silencio salí de la habitación, un nudo en mi garganta apareció para que mirará mi habítacion donde había algunos comic's así cómo mis libretas ordenadas en una repisa.

Cerré la puerta para, sentarme en el piso descansado mi espalda en la madera para respirar profundamente escuchando las risas de mis hermanos en el jardín que jugaban en el gran patio de la Academia Umbrella.

──¿Porqué ellos pueden ser felices sin importar nada?── Susurre acurrucandome en el piso.

¿Porqué ellos pueden vivir tranquilos? Mientras yo me preocupó por absolutamente todo a mi alrededor, cada trazo, cada palabra, cada nota que obtenía en un Examen.

Ellos eran felices con lo que tienen, yo... solo quiero tener más.

──Y yo no puedo alegrarme por un jodido 10.

Senti cómo mis ojos ardian para que mi corazón latiera mas rapido, sentí mi cuerpo arder lentamente mientras mis manos temblaban.

No Podía hacerlo, no entendía cómo... pero al cabo de unos minutos algo más apareció no era tristeza si no todo lo contrario era irá.

Yo me había equivocado, no era suficiente lo que había echó sólo era un maldito Mediocre al igual que mis hermanos.

──No soy un Mediocre.

Me repeti para caminar hacia la mesa y comenzar a botar aquellos posters de películas, así cómo la mayoría de mis juguetes por la habitación.

El viejo había apagado aquella llama, para qué se consumiera lentamente pero a su vez ya no era el mismo sentimiento había algo más.

𝐄𝐋 𝐃𝐄𝐒𝐄𝐎 𝐏𝐎𝐑 𝐒𝐄𝐑 𝐔𝐍 𝐏𝐔𝐓𝐎 𝐓𝐑𝐈𝐔𝐍𝐅𝐀𝐃𝐎𝐑.

𝐘 𝐄𝐒𝐓𝐀𝐁𝐀 𝐂𝐎𝐌𝐄𝐍𝐙𝐀𝐍𝐃𝐎 𝐀 𝐂𝐎𝐍𝐒𝐔𝐌𝐈𝐑𝐌𝐄... 𝐋𝐄𝐍𝐓𝐀𝐌𝐄𝐍𝐓𝐄.

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───Entonces, ¿El mundo termina en 8 dias?

Me mantuve con la mirada fija sobre la pared, tratando de procesar toda la información  ───¿Cómo fue?

───Horrible ─── Respondío Klaus ───¿No has visto la cara de idiota que tiene?

Diego río ───¿Realmente el fin del mundo?

Cinco les dió una mala mirada, conteniendo su respiración contando hasta 10 mentalmente.

───Que parte del fin del mundo ¿No comprenden?

A la mierda, la tranquilidad los zoquetes de mis hermanos no eran más que un grupo de payasos.

Allison hablo ───No lo se, tal vez es porque no es lógico ─── se cruzo de brazos, llevándose la atención de todos ───¿El futuro?

───Creo, que somos los menos indicados para juzgar qje es lógico ─── Respondí ───Es decir, somos ocho bebés no deseados

Luther intervino ───No confundas las cosas.

───¿Y que somos? ─── Le dedique una expresión sarcástica ───¿El espíritu santo?

Una nueva pelea estaba por iniciar, las voces se alzaron como algunos empujones por parte de Diego y Luther sin razón aparente.

Cinco se levantó de golpe ───Al carajo, ¿Están conmigo?

Todos guardaron silencio.

───Si, no lo creo.

───¿Te estás escuchando?

───¿El fin del mundo?

───Espera, ¿Te cogiste al maniquí?

La mirada de Cinco aún era indiferente, desde aquella noche en la biblioteca había evitado hablar conmigo, me había desilusionado nuevamente.

Su indiferencia aun me molestaba, pero su presencia me reconfortaba de alguna manera.

Me levante de la mesa, saliendo por unos instantes del comedor, regrese al cabo de unos segunfos con una tarta de moras.

Klaus se acercó ───¡Genial! ─── Miro la tarta de moras ───Hace tiempo que no como nada dulce.

Ante una nueva crisis, me desahogue cocinando la noche anterior, ignorando un posible trauma.

───La ultima vez que comi algo asi, me depile con una rosquilla.

Me alejé asqueada ───Bien, ninguno de nosotros puede simplemente, lavarse las manos ─── Saque unos platós de un gabinete ───TODOS ─── Recalque ───Estamos atados, nos guste o no.

───¿Disculpa?

Allison salto a la defensiva ───¿Que quieres decir con todos?

Conte mentalmente hasta 10, ya habia tenido una confrontación con Luther esta mañana, ¿Que sigue? ¿Que el maniquí también hable?

Cinco se acerco de golpe, hacia la mesa haciéndonos callar, tomo un tenedor aproximándose hacia Diego.

───¿Cinco?─── Pregunte ───¿Estás....?

───¿Demandante? ─── Dio una mirada a Luther ───¿Recalcitrante?, ¿Truculento?

Aumento el tono de su voz con cada palabra, así como su cara se hacia mas rojiza con cada segundo.

Hablo Diego. ───Yo...─── Busco las palabras ───iba a decir loco

━━━Por si no lo han notado─── Se acercó al trozo de patel ───Está por terminar la vida en la tierra.

───¿Y qué hago?

───Cinco, si no quieres hablar en este momento─── Aleje la tarta ───Podemos tratarlo más tarde.

───No, no ─── negó ───¿Sabes qué hago?

tomo el tenedor para clavarlo en el centro del glaseado

Grito ───¡Como pastel!

Apuñalo literalmente... aquel postre.

Sin decir más tomo una porción, llevando un bocado de pastel a su boca, no espero mucho para probar nuevamente otro trozo

───Come despacio, hermano...

Miro Luther las acciones de cinco.

Este lo ignoró miro sus manos por unos segundos, para llevarlos al betún, hasta sentir el esponjoso pan como glaseado en su boca.

Uso sus manos para llevar trozos increíblemente grandes a su boca, aún si no terminaba de masticar los primeros bocados dejándolos a medias.

───¡Pastel! ─── grito con la boca llena ───El mundo se acaba y como pastel!

Incluso hasta yo me quedé quieta desde mi silla veía como el traje de cinco se llenaba de betún, así como sus mejillas y su rostro a la vez que sus ojos se enrojecían.

───Suficiente pastel…─── tome la tarta ───¿Porqué no tomamos un poco de aire?

Tome sus brazos con delicadeza, intentando no agobiarlo ante su ataque, mientras miraba de manera suplicante a los demás porque se fueran de la cocina.

Susurró ───¿Que tiene el raro de cinco?

Parece ser que esto si lo escuchó, para dejar de comer aun con los puños llenos de pastel caminó hasta Klaus.

───Sabemos por qué están aquí ───miro a Luther quien ocultaba su rostro en sus manos ───Les doy vergüenza.

───Porque todos me ven como un fenómeno,─── Se señaló ───Pero si algo, se jode es porque el idiota de cinco Hargreeves es responsable.

───Nadie cree que eres un fenómeno Cin... ─── intervine ───Tampoco eres un idiota. 

───¿Como vamos a confiar en ti?  en primer lugar.

Opino Allison masajeando sus cienes aun con los ojos cerrados

Esto era un completo desastre... esperaba que todo mejorara después de todo, finalmente éramos adultos ¿Donde estábamos ahora?

Respectivamente en nada.

El comentario de Allison incluso hasta a mí me dejo helada.

───¿Saben que?─── se giró sobre sus pies para caminar hacia la salida del comedor ───  váyanse al Diablo

Allison murmuró ───Que estupidez..

Pero después se regresó para mirar sus manos llenas de pastel, se acercó hacia Allison tomando un trozo de pastel  para dejarlo en la mano derecha.

───Una rebanada igual de grande... ───miro finamente sus ojos ───Así como tu boca.

Alzo las cejas para salir finamente de la habitación.

───No digas nada ───me apresuré a hablar antes de que Diego se riera de Allison. ───Tú misma, te lo has buscado.

───No sé, qué está sucediendo en tu vida en este momento.

Dije a un lado de Allison. ───Pero, no intentes desquitar tu ira con Vanya o cinco, no porque tu vida es una basura vas a tratar a los demás como una.

Vanya había mencionado algo al respecto, como era de esperarse habló con una mirada baja hacia sus zapatos:

 ───"No era nada, yo lo provoque.”

───Así que Allison solo por tener un mal día ¿puede culparte?─── cuestioné ───No tienes ni la mínima responsabilidad de la felicidad de los demás Vannie.

Allison solo se quitó asqueada el trozo de pastel, mientras tomaba un par de servilletas con ayuda de Luther

───¿A dónde vas?─── preguntó Klaus mientras comía un poco de pastel.

───A salvar el mundo.

Me acerqué por una taza, así como un poco de azúcar en los pequeños cajones de la cocina.

Se burlo Diego, mirando la taza de agua caliente ─── ¿Y vas a preparar Te.

───Intento que regresé la única persona con un poco de sentido común.

Se burló Klaus a mis espaldas. ───Se lo diré a cinco.

───Dile lo que quieras, solo negare que por primera vez lo alague.

Tome la taza para salir de la cocina, lista para una posible negociación o una posible pelea

No sabía si era un buen momento, ¿Se encontraba un poco más calmado? o ¿inclusive estable para tener una conversación?

¿Qué podría hacer? Absolutamente nada.

Cuando estamos molestos o en un momento tan vulnerable como lo era este, habia aprendido que, a veces las palabras eran tanto como de ayuda, así como una perdición hacia otra crisis.

Duele escuchar las opiniones de los demás, aún cuando ellos nunca experimentaran, con la misma intensidad las emociones que sentimos.

───¿Cinco puedo pasar?

Llamé a la puerta ───.....

───Sólo vete, no me siento dispuesto ahora.

Escuché desde el otro lado de la puerta

───Está bien, si no estas abierto a hablar ───suspiré Solo traje una taza de té de manzanilla.

La deje frente a la puerta para caminar hacía mi habitación

Escuché ───¿Tiene azúcar? 
    
Sonreí regresando frente a la puerta  ───Se que no te gusta lo dulce en tu té.

En unos segundos la perilla se giró abriendo la puerta, mostrando sus ojos rojos, así como sus mejillas manchadas por el colorante azul del glaseado.

───Gracias....

Miro hacia abajo la taza. ───....

Estaba por inclinarse por ella, me adelanté tomándola entre mis dedos, inconscientemente miré sus zapatos llenos de trozos de pastel y manchas del mismo.

───Toma ─── me apresuré a decir entregándosela.

No dijo nada, sólo miro el contenido de la taza ───....

Nuevamente entro a la habitación.

───Te dejo descansar, ───Dije desde el marco de la puerta ───Descuida tengo algunas cosas en mente.

───¿Quieres pasar? ───se hizo a un lado ───Tengo galletas.

¿Cinco Hargreeves estaba siendo amable conmigo?

Lo observé con atención, la primera vez que dijo algo similar terminamos empapados en un circuito de obstáculos.

Comenté no del todo segura ───¿No te molestaría?

Solo negó ───Necesito a alguien lo suficientemente lista para trabajar.

Bueno su orgullo seguía ahí, no estábamos perdidos después de todo.

Alcé las cejas para entrar a la habitación. ───Lo tomaré cómo un alago de tu parte.

Todo estaba en silencio.

Hace unos 10 minutos que miraba mi cuaderno, esperaba que sucediera algo, pero Cinco solo miraba el techo o se perdía en la nada.

───Te mentí no tengo galletas.

Hablo rápido dejando la taza de té en la mesa de noche frente a su cama.

Respondí dejando de escribir. ───Si, lo sabía.

───Ah...─── jugo con su pie moviéndolo de un lado a otro ───¿entonces no estabas aquí por las galletas?

Negué

───¿Entonces que estás haciendo aquí conmigo?

No sabía que era, pero no podía bromear o evitar aquel comentario,  era una de las pocas veces que Cinco era serio en una situación así.

───Porque…-

Pensé un momento las palabras adecuadas ───....

Este podría ser un momento para solo irme tal como él lo había hecho,  incluso podría molestarme como todos en este lugar, pero si tenía algo claro:

Cinco no lograría salvar al mundo...
o al menos por sí solo.

Desde su regreso habíamos hablado relativamente nada o al menos de una manera "profunda"

───Me agradas─── respondí ───Mas que cualquier otra persona en esta casa.

Ahora el guardo silencio ───¿Enserio te agrado?

───Mas qué eso, disfruto de tu compañía ───Admití ───En pocas palabras me importas.

Si, incluso aun cuando tu orgullo te impide pedir ayuda, pero, espere tanto tiempo que regresaras solo para poder darte un abrazo.

¿Alguien había abrazado a cinco cuando regreso?

Exacto nadie.

Podría ser una de las personas más inteligentes que conocía, pero, aun así, necesitaba algo que cualquier ser humano,  requiere tener en su vida.

Un poco de amor y comunicación con las personas más cercanas que conocía .

───Se que pueden llegar a ser unos completos tontos a veces ───me refería a mis hermanos ───Incluso tú, cuando usas tu humor negro e incluso algo retorcido.

───No soy un tonto.

Se defendió mientras tomaba un poco de Te

───No tienes porque estar...

No dije nada más, solo bote el cuaderno para finalmente hacer lo que había deseado hacer por mucho tiempo.

Lo interrumpi ───Solo, cállate.

Me acerqué hacia el para abrazarlo.

No me importo si había un caos debajo de nuestros pies o el mismo cielo caía sobre nosotros en este momento, había pasado tanto tiempo molesta conmigo misma que había olvidado mi orgullo con cinco.

Susurré ───Me alegra verte de nuevo.

Ya no me importaba lo que había sucedido hace tiempo, espere tanto por tenerlo frente a mi y decirle que era tan importante, sus palabras me habían dañado tanto porque era la primera persona quien me importaba realmente.

No estaba molesta del todo con él, la culpa de la muerte de Ben me carcomía viva,  incluso cuando cinco salto en el tiempo me había culpado por ambos.

Hundí mi nariz sobre su hombro ─── Te extrañé..

𝗣𝗢𝗩 𝗖𝗜𝗡𝗖𝗢 𝗛𝗔𝗥𝗚𝗥𝗘𝗘𝗩𝗘𝗦

Espere un nuevo reclamo, pero jamás un abrazo, sin saber que decir mis dedos temblaron sin saber como sobrellevar este momento, no recordaba la última vez que había recibido un abrazo.

Lentamente mis brazos rodearon su cintura,mientras mis dedos se cerraban así como mis ojos cansados.

───Bienvenido a casa ─── Susurró ───Encerio te extrañe.

Y ahí estaba, simplemente me deje llevar escondiendo mi rostro en su cabello dejándome llevar por su olor a vainilla y nuez.

Sus dedos acariciaban mi cabello, mientras sus manos daban un pequeño masaje por mi espalda sin romper el abrazo entre nosotros.

Me Rompi ───Gracias...

Se separó mirándome atónita ───Tambien te he extrañado...

Tiré nuevamente de su brazo, aferrandome intentando poder recuperar la compostura, mi corazon latía con fuerza Podía escucharlo en mi oido papiltar con gran fuerza.

Mis pulmones se cerraron, intenté recuperar el control de mi cuerpo, sentía cómo me ahogaba nuevamente en el agua incapaz de gritar.

Quería vomitar, escupir las palabras que no eran capaces de salir de mi boca.

───Ey....─── Susurró ───No me iré a ningún lado.

Correspondió tomando lentamente mi mano ───Está por pasar.

Negué  con la cabeza, intentando quitarme mi corbata con desesperación ───No....─── murmuré con dificultad ───.....

Lleve mis manos hasta mi pecho, siento la rapidez de mi corazón.

Mi habitación daba vueltas, ¿Realmente estaba aquí? O ¿Seguia atrapado en jodido apocalipsis? Cerré mis ojos con fuerza con miedo de abrirlos.

───Esto no es real ─── Negué ───No es verdad.

Me deje caer sobre el piso, llevando mis manos Hacía mi cabello con frustración con miedo de abrir los ojos.

───Por favor abre tus ojos.

Negué con terror, podía recordar estar en el maldito y jodido lugar donde desperté cada mañana, ese jodido lugar donde nl existía nada más que soledad.

Cada vez que cerraba mis ojos esperaba, despertar en mi Cama viendo mi techo con calculos, mi estantería poder despertar con el sonido de la horrible alarma.

Y bajar a desayunar un horrible licuado, frente a mi plato mientras todos comiamos en silencio acompañados, de una expresión de terror y diversión ante cada misión corriendo por la academia.

Mirarla pintar, mientras contenia su respiración esperando no arruinar la pintura frente a ella.

Ver el cómo, leía con atención las páginas de sus libros con detalle ignorando el caos en la academia, soltando un suspiro perdido que las palabras del señor Darcy.

Su ilusión al hablar sobre las constelaciónes y sus trazaran figuras en el cielo.

Su risa ante los comentarios que desagradablemente eran provocados por Diego, mientras la hacía reír en la clase de baile en solo una canción.

Aunque después, intentará seguir el ritmo ante nuestras conversaciones mientras bailábamos ante una, mala polca entre saltos y unos cansados tacones.

Y al caer la noche, estar en mi habitación mientras hablábamos sobre nuestros libros favoritos y algún comentario cruel hacia nuestros hermanos.

Despidiéndose al cerrar la puerta, aunque no era un adios ya que de alguna manera llegaba a aparecer en mis sueños haciendome reir, haciéndome tartamudear...

───¿Puedes abrirlos ahora?

Mis ojos buscaron acostumbrarse a la poca luz del lugar, encontrándome con sus ojos azules, mirandome con atención, sostuvo mis manos por unos segundos

Y ahí estaba ella.

───¿Te sientes mejor?─── Preguntó ───Cin, ¿Puedes respirar?

Me hizo sentir vivo, no quería decirlo pero su simple existencia me dejaba fascinado.

Dijo con aires de preocupación ───¿Cómo estás?

La temperatura subió a mis mejillas ───Creo que Podría caerme.. ─── Balbuce ───¿Podrías esperar solo un segundo?

No dijo nada, asintió aún tomando mis manos.

Me encontraba mejor, pero solo quería permanecer unos segunfos más asi, ¿Me estaba aprovechando? Posiblemente si, pero solo deseaba tomar su mano y ignorar todas nuestras obligaciones por un momento.

Tal ves no sería fácil, pero no me encontraba solo en esto.

𝐏𝐎𝐕 𝐍𝐀𝐑𝐑𝐀𝐃𝐎𝐑

─

──Vamos, quiero mostrarte algo ─── ánimo la castaña levantandose ───Se como ayudarte.

Cinco le miro sin comprender.

Saco de su mochila sus auriculares ───¿Qué?

───El mundo se acaba ─── Respondió ───¿Y quieres escuchar música?

No dijo nada y se los colocó, antes de tomar su teléfono tomo las manos del azabache, asegurándose de no gritar ni llamar la atención de sus hermanos.

───¿Puedes teletransportarnos a la azotea?

Asintió ───Creí que odiabas que lo hiciera ─── se burló ───¿Para qué?

───Voy a tirarte del techo.

───......

Le dio una mala mirada ───Al parecer el sentido del humor aún no lo encuentras ──── Alzo sus cejas ───Es un chiste.

Avergonzado tomó sus manos, llevándolos hasta la parte mas alta y desolada de la Academia Umbrella.

El viento golpeaba su cuerpo, moviendo su cabello de vez en cuando el sol rozaba sus piernas antes de ocultarse.

Miro con interés y cierta perplejidad el lugar, el frío aire fue un invitado a participar en el atardecer y los colores pasteles que lentamente se degradan con las estrellas

Daba un aire de los 80's los faros de luz revelaban cómo el césped necesitaba ser podado illy en sus ratos libres solía arreglarlo con Ben.

La castaña solía plantar Rosas y lindas margaritas, el jardín era precioso en verano para hacer una parillada con el grupo de amigos mientras encendían unas bonitas serie de luces en el patio.

───Ahora...─── Illy camino hasta una pequeña palapa ───Solo dilo.

Se colocó los auriculares, mirando al chico de ojos verdes ───No te preocupes, no es necesario que escuché.

Se mantuvo en silencio, mirando sus pies.

───Sólo ¿Podría pedirte algo?─── Dijo mirando a la ciudad.

───¿si?─── lo miro con duda ───Si me insultas...

Dijo rápido ───Date la vuelta.

Sin decir mucho, se sento en la pequeña banca con vista a la cuidad, dándole la espalda al chico impidiéndo ver sus movimientos.

Busco en su telefono una canción, dejándose llevar por el ritmo de la guitarra subiendo el volumen, acaparando la voz del contrario.

───Listo ─── Murmuró en voz baja  ───Adelante.

𝗣𝗢𝗩 𝗖𝗜𝗡𝗖𝗢 𝗛𝗔𝗥𝗚𝗥𝗘𝗘𝗩𝗘𝗦

───Esto es estúpido.

Note como, no hubo respuesta escuché el como el sonido de las cuerdas de una guitarra permanecían en los auriculares, mientras movía su cabeza levemente.

───No me gusta pasar tiempo conmigo mismo ─── Solté ───Añoro tanto el silencio, pero cuando finalmente lo tengo me asusto.

───Se qué, soy un hijo de puta ─── Admití ───Todo el mundo lo sabe.

───Papá, Mamá ─── murmuré ───Diego lo sabe.

───Maldita sea ─── Rei ───Todos lo saben.

Las palabras hicieron un torbellino que solo crecía en su cabeza, recordando las palabras hirientes de cada uno de ellos...

───¿Encerio? ¡Solo mírate!

───¿Crees que mereces un aplauso?

───Eres adicto a una droga, llamada soledad y estas tan jodido.

Escucho las voces de Allison, Diego y Luther en su cabeza aumentando su intensidad, comenzando a abrumarlo.

Repitiéndose sin fin. ───¿Encerio? ¡Solo mírate!

───¿Crees que mereces un aplauso?

───Eres adicto a una droga, llamada soledad y estas tan jodido.

Las voces cesaron, dueron gracias al duro golpe que el chico se dió en el pavimento

Jadeo un poco, miró sus muñecas estaban raspadas como sus rodillas,  respiró con dificultad intentando recuperarse, apoyando su fuerza en sus brazos

Estoy cansada, Dime ¿El ser parte de esta "Familia" siempre implicara perderlo todo?

La voz de la chica apareció entre aquel torbellino, como si fuera un Susurro lo suficiente para no dejar que se levantara, quedando en silencio perdiendo su mirar en la nada

───No illy tu no....───susurro sin notar como el cielo de la noche dejaba caer pequeñas gotas

Siendo testigo de la desgracias del Azabache ayudando a perder lágrimas de sus ojos con las gotas que caían del cielo

───Lo siento

Es lo que salió de sus labios entre cortados sin esperar una respuesta.

Sus hermanos habían dicho la verdad por más triste que fuese, cada palabra d fue gracias a sus acciones esperando tener la solución a todo,

Tal cual como cuando eran niños, Siempre teniendo la razón y la respuesta encontrando ¿El porqué? De las cosas

Pero ya no era un niño

Había intentado regresar sin éxito, pasando años en soledad con la esperanza de regresar a su hogar.

El cruzar esa puerta esperando ver a su inestable familia disfuncional, correr por la sala haciendo escándalo gracias a los gritos que salían de sus bocas con diversión

El golpeteo de sus pies contra el piso subiendo las escaleras

Era un fenómeno... Sin pertenecer a ningún lado gracias a aquella mujer no tenía un lugar donde ir.

Deseaba con todas sus fuerzas que todo, lo que pasará fuera un mal sueño, despertar y que todo fuera norma.

Esperaba levantarse de la cama y encontrarse con Luther y Diego, peleando como de costumbre en cualquier tipo de competencia, por más ridícula e insignificante que fuera para demostrar quién era el Número 1

Salir de su cuarto viendo abuna Allison, en su tocador cepillandose el cabello, viendo aquel relicario que adornaba su cuello con un una A y una L grabadas en el corazón de oro.

Caminar por los pasillos escuchando la dulce melodía del violín de Vanya, inundando el lugar con una sonrisa orgullosa por las notas que salían de su violín sientiendose especial.

Pasar el gran pasillo, encontrando a Ben y Klaus hablar sobre su cama riendo.

Pero no era un sueño, era la realidad por más horrible y dura que fuese, estaba ahí sumido en la desesperación.

───Vamos cin...

Hablo una chica detrás suyo.

Reonocía su voz se dió la vuelta. ───....

Encontrándose a una castaña, con una sonrisa en su rostro tomando su mano para bajar por las escaleras corriendo

Para pasar un rato en el jardín juntos, mientras la castaña leía "Orgullo y prejuicio.

Bajo la sombra de un gran árbol, con sus ojos cerrados escuchando con atención,  a la linda chica que pasaba sus dedos por su cabello mientras el dormía en su hombro.

Lo que comenzó como un "Accidente" termino por ser una de sus cosas favoritas

Para después de un rato terminar dormido en las piernas de la chica, abriendo sus ojos con algo de pesar,  viendo su cabello danzar con la suave pero refrescante brisa del día.

Sus preciosos ojos color miel, cerrados dejando admirar sus largas pestañas haciéndola ver mucho más bonita.

Solo para mirarla por un rato, con una sonrisa sin que nadie lo notará .

Solo el lo sabía... y eso le bastaba, con la calidez en su pecho sin entender ¿Porque?

O tal vez , si lo sabía ¿Realmente  se sentía así?

Sea lo que fuese no le importaba, pero disfrutaba de esa sensación tan misteriosas que lo consumía

Viendo sus carnosos labios entre abiertos,  con la necesidad de tocarlos, sentirlos la curiosidad mi consumía como la duda...

¿Que pasaría?

¿Lo harían el hombre más feliz?

Probablemente

¿Ella le correspondería? Aún beso inexperto pero completamente honesto y cálido

No lo sabía

No tenía una manera de saberlo... Solo debía arriesgarse pero había un problema.

La cobardía.

El tiempo no espera a nadie

Dichosos los enamorados... Dicen que son bendecidos por los ojos de cupido, siendo testigos de la magia más fuerte y grande que existe el amor.

Pero también condenados, a las desgracias y corazónes rotos que terminan con aquella magia.

Para convertirlo en el peor veneno que existe .

Esperaba tener el valor suficiente para levantarse y darle un beso...

Solo uno bastaría con uno sería más que suficiente.

Un beso puede significar lo todo. O puede no significar nada.

Tal vez, el no lo sabía pero, para ambos eso valía absolutamente todo.

Pero nunca llegó ese beso, esperaba que su castaña, recostara su cabeza en su hombro y así ambos dormir una pequeña siesta con sus manos entrelazadas bajo el árbol que los cubría de toda pena y sufrimiento.

Estaba derrotado listo para tirar la toalla, solo quería liberarse de aquellas cadenas que lo sometian a lastimarse sin darse cuenta

La lluvia dejo de tocar su cuerpo confundido levantó su mirar viendo unos coquetos y pequeños zapatos frente el, subió su mirar encontrando el final de unos shorts de mezclilla, una blusa a tirantes con rayas con una chaqueta de mezclilla

Su cabello levemente despeinado a los costados de sus hombros, color castaño,  con cuidado haciendo de lado unos mechones rebeldes a un lado

Bajando hasta su alturaz entre sus manos había el mango
de un paraguas.

Cbriéndolo de la lluvia y la tormenta que existía dentro de su cabeza.

Y un su corazón que había sido lastimado

───¿Necesitas un paraguas?-

Levantó su cabeza con lentitud y vergüenza.

Valla sorpresa la que se llevaría, para encontrarse aquellos ojos miel

No respondió nada

Encontrándose con Su castaña,  sosteniendo un paraguas lo suficientemente grande para cubrirlos de la lluvia

───Ven cin...

hablo encorbandose un poco quedando a la par

Su corazón latió rápido,  un suspiro salió de los labios del chico

───Es hora de ir a casa.

Finamente había despertado, se sentía como en casa.

𝐍𝐎𝐓𝐀 𝐃𝐄 𝐋𝐀 𝐀𝐔𝐓𝐎𝐑𝐀:

1.- 𝐄𝐒𝐓𝐄 𝐁𝐎𝐑𝐑𝐀𝐃𝐎𝐑 𝐅𝐔𝐄 𝐄𝐒𝐂𝐑𝐈𝐓𝐎 𝐇𝐀𝐂𝐄 𝐃𝐎𝐒 𝐀𝐍̃𝐎𝐒.

2.- 𝐍𝐎 𝐁𝐔𝐒𝐂𝐎 𝐌𝐈𝐍𝐈𝐌𝐈𝐙𝐀𝐑 𝐄𝐒𝐓𝐀𝐒 𝐒𝐈𝐓𝐔𝐀𝐂𝐈𝐎𝐍𝐄𝐒.

3.- 𝐌𝐄 𝐃𝐈𝐒𝐂𝐔𝐋𝐏𝐎 𝐒𝐈 𝐄𝐒 𝐄𝐌𝐏𝐀𝐋𝐀𝐆𝐎𝐒𝐎 (𝐍𝐎 𝐐𝐔𝐄𝐑𝐈́𝐀 𝐁𝐎𝐑𝐑𝐀𝐑𝐋𝐎 𝐀𝐒𝐈 𝐐𝐔𝐄... 𝐀𝐐𝐔𝐈́ 𝐄𝐒𝐓𝐀𝐌𝐎𝐒)