Estar en cuarentena era la peor y lo mejor del mundo para Frank. Lo mejor porque tenía a su familia solo para él pero lo peor porque ya estaba aburrido de estar en casa.

Eran prácticamente 5 meses de estar en ese encierro y la rutina ya lo tenía hastiado. Aparte de eso hacía tres semanas que Gerard no le prestaba la atención debida porque estaba trabajando en el nuevo comic de Umbrella Academy que saldría en septiembre.

Para darle su espacio y evitar caer en la tentación de molestarlo había decidido instalarse la app esa, TikTok. Al principio solo había sido para ver los videos y distraerse, pero con el paso de los días comenzó a grabar videitos pequeños. Le gustaban esos de recrear escenas con la canción de I'm Just a Kid. Las gemelas eran sus cómplices, ellas amaban buscar en los álbumes familiares fotos que fuesen fáciles de replicar, como era de esperarse Gerard no había participado en ninguno de esos videos.

Frank consideró que ya era suficiente de trabajo, su esposo merecía un tiempo para relajarse y al menos disfrutar un día sin pensar en nada pasando tiempo divertido con su familia y reponer energías; así que ese sábado por la mañana había decidido sacar si o si a Gerard de su estudio.

Fabricó en su mente un plan estratégico que no fallaría.

La primer parte del plan era que mientras él cocinaba, las gemelas invitarían a papi Gee a ir a la piscina. Él nunca les decía que no a los niñas, así que esta vez no sería la excepción. Luego Lily diría que iría a buscar a Lois y a Bucket pero en realidad cerraría el estudio con llave, la cual había sido previamente escondida.

Frank sonrió triunfal cuando vio a su esposo aparecer de la mano de Cherry en el umbral de la puerta de la cocina.

—Hasta que al fin sales de ahí —le dijo acercándose a darle un beso.

—No podía despreciar una invitación de estas princesas.

Lily ya había regresado y estaba de pie junto a su hermana, ambas con la misma sonrisa inocente que tenía Frank. Ahora si, tendrían a Gee solo para ellos.

*

El día había transcurrido tal como Frank imaginó. Para cuando la noche cayó pidieron pizza a domicilio y los cuatro juntos vieron The Nun aunque la mente de Frank estaba en otro lado, esperaba con ansías el momento de tener a Gerard junto a él en su habitación, estaba seguro que le encantaría lo que le tenía preparado.

Al finalizar la película entre los dos llevaron a las niñas a su habitación, les ayudaron a cambiarse y las dejaron durmiendo. Teas cerrar la puerta Gerard le dio un beso a Frank, suave, tan solo un roce y sin más se alejó caminando en dirección a las escaleras.

—Gee —susurró Frank tomándole de la mano—. Quédate ésta noche conmigo.

Gerard se acostaba muy tarde cada noche, quitándoles la posibilidad de intimar.

—Tengo trabajo que hacer amor.

—Prometo que te vas a divertir. —Con sigilo se colocó detrás de él, con sus manos comenzó a masajear los hombros de su pareja—. Además estás estresado, necesitas un descanso.

Gerard se giró bruscamente y lo tomó de las caderas, yendo directamente a atacarle la boca, devorando sus labios. Frank jadeó en el beso por lo imprevisto que había sido el movimiento.

—Vamos a la habitación nene —le susurró en el oído a Gerard cuando éste comenzó a deslizar sus manos debajo de su camisa.

Entre besos y tropezones llegaron a su cuarto, repartiéndose caricias y roces, pero cuando Gerard quiso quitarle la camisa, Frank lo volvió a interrumpir.

—¿Qué pasa?

—Necesito darme una ducha antes.

—Frankie no importa, yo te necesito ya.

Sonrió ante la necesidad de Gerard sin embargo hizo caso omiso y corrió hacia el baño. No iba a tomarse una ducha, solo necesitaba quitarse la ropa y mojarse el cuerpo. Quería probar un challenge que había visto en TikTok hacía unos días atrás, donde las chicas se quitaban la toalla frente a su pareja y grababan su reacción, él obviamente no grabaría así a Gerard pero si moría por ver su rostro cuando estuviese totalmente desnudo frente a él.

Salió rápido de la regadera y se colocó la toalla alrededor del cuerpo y con pasos gatunos fue a la habitación.

Encontró a Gerard sentado en el suelo con una mesita pequeña entre las piernas y el computador en ella. Sabía perfectamente que se estaba vengando de él.

Gerard estaba usando sus lentes para leer y eso lo hacia lucir más guapo y sexy, Frank sentía como se estaba calentando con sólo verlo trabajar con esa expresión en el rostro, tan serio. Caminó un poco más y se colocó frente a él.

—Volví.

—Mjmm —le respondió sin voltear a verlo.

Frank resopló y se quitó la toalla que cubría su cuerpo lanzándola a un lado de Gerard, llamando así su atención. Gerard levantó la vista del computador y no pudo evitar relamer sus labios al ver a Frank. Sus ojos lo recorrieron de pies a cabeza, deteniéndose un par de segundos en su pene semi erecto, el castaño aprovechó para pasar sus manos sobre su cabello y mover sus caderas despacio.

—Oh Frankie, espérame un segundo debo terminar esto —dijo volviendo su vista a la pantalla y tragando fuerte.

—¿Es en serio?

—Si.

—Supongo que no te molestaría que me siente a tu lado mientras te espero entonces.

—Para nada.

Frank se sentó junto a él en el suelo, pegando su pecho desnudo al hombro de Gerard y acomodando su pierna izquierda sobre la derecha de Gee. Comenzó a acariciarle el abdomen bajando peligrosamente hasta el inicio de sus pantalones, viendo como Gerard trataba de concentrarse en el teclado pero ni siquiera podía escribir una palabra.

—Deberías relajarte cariño —le susurró muy cerca de la oreja, haciendo que los vellos de Gerard se erizaran.

Descaradamente apretó la erección de Gerard sobre la tela para luego deslizar la palma de su mano sobre ella una y otra vez. Gee por inercia levantó la pelvis para buscar un contacto más profundo, recostó su cabeza en el borde de la cama y cerró sus ojos.

—Te miras tan sexy de lentes Gee —gimió Frank. Gerard abrió sus ojos verdes y lo volteó a ver—. Pareces un profesor —dijo antes de recibir los labios de Gerard sobre los suyos, enredando sus lenguas y compartiendo sus salivas.

Frank no pudo evitar el gran gemido que salió de sus labios cuando sintió como Gerard tomó su polla entre sus manos para masturbarlo también, con mucha dificultad y sin romper el beso metió su mano dentro del pantalón de Gerard para acariciarlo sin la tela de por medio.

—Mmmm Frankie... lo haces tan bien... —gimió Gerard cuando las caricias de Frank se trasladaron hacia sus bolas, apretándolas un poco y luego volviendo a subir hacia el falo de su polla arrastrando despacio su mano mientras él le acariciaba con el pulgar la hendidura de su pene, sabía que a Frank le enloquecía que hiciera eso, que deslizara un par de veces su mano rápidamente por todo el largo y que después presionara la punta.

—Ohh tú lo haces mucho mejor ahhh...

Ambos parecían un par de adolescentes cachondos haciéndose una paja y gimiendo como desesperados.

—¿Sabes? —dijo Frank, con la respiración entre cortada.

—¿Mmm?

—Pareces un profesor.

—Ya lo habías dicho Frankie ahhh.

—Y yo siempre he querido que me folle un profesor.

—Mmmm —Gerard sonrió y lo besó, lamiendo sus labios en el proceso—. Qué travieso Frankie, pero ahhh... a mi me gustaría que un alumno tan precioso como tú me montara —le respondió siguiéndole el juego.

Se sonrieron cómplices, soltaron sus erecciones y Frank tomó la mesa con la laptop para empujarla a algún lado mientras Gerard se deshacía de sus pantalones. Sin perder tiempo Frank se acomodó sobre él con cada pierna a ambos lados de las de Gerard, sus penes se rozaron haciéndolos gemir.

—Vamos Frankie, móntame rico —gimió Gerard mientras tomaba los glúteos de Frank y pasaba su pene entre ellos varias veces.

Frank tomó la polla dura de Gerard con una mano y la dirigió a su entrada, autopenetrandose lentamente. Ambos jadeando y soltando altos gemidos, Frank comenzó a saltar rápido pero sin subir mucho sobre Gerard quien hundía sus dedos en sus caderas dejándolas marcadas.

—¿Le gusta así señor?

—Me encanta Frankie, estás tan apretado, no pares.

Gerard pasó su lengua por todo el largo de la garganta de Frank succionando sobre el tatuaje de Let Love In que tenía ahí, luego siguió bajando con sus besos hasta adueñarse de sus pezones donde los lamió y mordió uno por uno. Frank sin detenerse lo agarró del cabello gimiendo más alto.

Minutos después Gerard lo tomó de las caderas y lo suspendió un poco para tomar el control, penetrando con fuerza golpeando en su próstata directamente.

—Oh por Dios, más duro ahhh.

Gerard sintió como Frank empezó a hacerse más estrecho alrededor de su hombría, sabía que dentro de poco acabaría así que aumentó el ritmo de sus embestidas. Con un par más Frank se corrió entre sus pechos, él lo abrazó fuerte de la cintura y sus últimos movimientos los hizo circulares haciendo que su orgasmo fuese más placentero.

—¿Te gustó Gee?

—Me encantó, amé que te hayas desnudado así frente a mi, tan dispuesto amor.

—Te extrañaba cielo.

—Perdón amor, te prometo que no volveré a enfrascarme en trabajo —dijo antes de besar sus labios  Frank seguía sobre de él con su pene adentro—. Frankie ¿De dónde sacaste la idea de desnudarte así?

—Tiktok —le respondió simple. Hizo el ademán de levantarse de Gerard pero este lo volvió a abrazar contra él, penetrandolo suave, sintiendo como su semen se resbalaba del interior de Frank y le servía como lubricante para moverse con más facilidad—. ¿Quiere más profesor Way?

Gerard besó sus labios como respuesta mientras seguía moviéndose dentro de él haciéndolo sentir como se iba poniendo duro nuevamente.

Quizás estar en cuarentena no era tan malo después de todo.