Recomendación: Escuchen la canción mientras leen

Una mirada molesta y con rabia miraba la escena donde veía a su amada besándose con otra persona que no era el. Su aura era camuflada para que la de pelo carmesí no lo notara, pero se le esteba haciendo difícil al presenciar eso.

Lo único que pasaba por su mente era matar a esa chica, que se atrevía a probar esos labios que solo le pertenecían a el, debía acabar con su vida pronto.

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Unos meses pasaron, decidiste dejar a los cazadores de demonios para poder vivir al lado de Koinatsu y cumplir lo que en la otra vida dejaste inconcluso. Tanjiro decidió seguir en esa organización y seguir tu legado, además sabia utilizar mejor la respiración solar gracias a ti.

En ese transcurso de tiempo, las dos mujeres que se convirtieron en enamoradas, vivían juntas en una casa un tanto grande, la mayoría de veces tus hermanos veían a visitarlas,  amabas esos momentos.

Ahora Koinatsu y tu estaban en un restaurante en EE.UU, tu enamorada quería ir a conocer ese lugar, así que le cumpliste el sueño. Solo estaban tu y ella, ya que habías reservado ese lugar para esa noche.

—¡La comida de este lugar es muy deliciosa!—hablo sonriendo feliz, siempre quiso probar ese tipo de comidas

Tu solo estabas callada observando como ella hablaba hasta por los codos de lo que visitaron y vieron ese día, adorabas escuchar su voz emocionada y tranquila a la ves. La luna esa noche estaba en su máximo esplendor, desde la gran ventana que estaba adelante de ustedes se podía apreciar perfectamente.

La mesera que estaba atrás de Koinatsu un poco alejada pero que tu podías ver, te hizo una seña advirtiéndote que ya estaba listo, sonreíste dándole entender que era la hora.

Un violín se empezó a oír desconcertando a la de pelo marrón, te miro y luego las luces se apagaron y una luces led se prendieron en su lugar de color rojo suave. La contraria estaba en shock al ver como unas personas aparecieron con unas rosas rojas y blancas, junto con un peluche de osito y unos chocolates. Mas conmocionada no podía estar.

Y peor, cuando noto que la canción que estaba tocando el violinista era su canción preferida.

Pov. Koinatsu

Mi pulso se acelero cuando ___ se paro de su asiento y se arrodillo frente a mi con una sonrisa que seria capaz de alumbrarme en las noches más oscuras. Sentí que me iba a desmayar cuando note que saco una pequeña caja de color marrón claro.

—Koinatsu...no, Mi amada, mi dulce y bella dama, eres la única que a sabido sacar este lado cursi dentro de mi, la única que fue capaz de hacerme perder en tu inigualable belleza y en tus ojos que resplandecen más que mil estrellas, se que las pablaras que estoy diciendo son cortas si se trata de demostrar el amor que me haces sentir hacia ti, por favor, acepta mi mano y déjame estar a tu lado siempre—su mano abrió la cajita dejando ver un anillo que tenia una piedra del color de mis ojos que brillaba ciegamente— prometo que nunca te faltara nada, de eso me encargare yo con mis propias manos, seré la mejor esposa o marido que una mujer como tu necesita en su vida, siempre podrás encontrar una compañera y amante conmigo, por qué....te amo

Las lagrimas que amenazaban con salir se dejaron ver cuando termino de decir la ultima frase, pero no eran de tristeza si no de alegría, sin contenerme más, salte encima de ella mientras repetía la frase "si quiero".

Con delicadeza tomo mi mano, y puso el anillo, una sonrisa de felicidad adorno su hermoso rostro, no podía ser más feliz, tenia al amor de mi vida a mi lado, y pronto nos íbamos a casar, me pregunto, ¿Qué más podría pedir?