Lo que pasó aquella noche

No insistí más en el tema de irme con Özil ya que sabía que Harriet daría lo que fuera por ir con Reus, todo por una amiga, si eso significa ir con el chico que odias.

Ibamos en el carro, un silencio incómodo invadía el carro, hasta que Özil habló.

-Oye, siento lo del otro día...- dijo pero lo corté.

-No hay nada que decir, asumo que tenías un mal día- digo.

-Si, la verdad el día anterior perdí un partido de fútbol y me sentía fatal- cofesó.

-Siento oír eso-.

-¿Podemos iniciar de cero?- preguntó Özil.

Al principio iba a contestarle que si, pero me mantuve firme y contesté, -no va a hacer fácil tener mi amistad-.

-Valdrá la pena el intento- dijo mirándome.

-¿Dónde está mi cuaderno?- pregunté.

-Descuida, está en mi mochila, no le hice nada- dijo y busqué su mochila.

La ví en la parte de atrás del carro, era de Nike, azul oscuro con cierre amarillo fosforecente, abrí su mochila sin permiso y busqué mi cuaderno. Lo encontré hasta al final, revisé que no le hubiera hecho nada y mi cuaderno se encontraba en buenas condiciones.

-¿No confías en mi cierto?- preguntó.

-No confió en chicos populares, y sé que eres como ellos- dije.

-Mira, yo no soy como los populares. De hecho, nunca he tenido novia- confesó.

-Emm, no esperaba eso de tí- me sorprendí.

-Bueno, es verdad- dijo con una sonrisa a lo que yo fruncí el ceño. -Tienes bonita letra por cierto-.

Y volteo la vista a la carretera, ya nadie dijo ninguna cosa durante el trayecto.

Llegamos y ví que Özil envió un mensaje y luego me miró -debemos de ir a la plaza de comidas, ahí nos veremos con los demás y con tu amiga- dijo.

Entramos al centro comercial y caminamos hasta llegar a la plaza de comidas, durante el trayecto pude ver una tienda de cómics, luego iré cuando Özil no me vea.

Pedimos comida y nos las entregaron rápidamente, comí rápido y Özil quedó impresionado.

-Veo que comes mucho- comentó.

-Aja- dije con la boca llena y dos chicas empezaron a acercarse hacia él.

-¿Cómo te llamas tú?- preguntó una de ellas.

-Mesut- contestó este.

-Mesut, me encanta- dijo la otra.

Coqueteaban con él, pero veía que a Özil le valía, asi que aproveché que no me veía y me fuí de ahí. Decidí ir a la tienda de cómics y buscar uno de The Flash.

Admiraba todos los cómics, algunos ya los tenía, pero me faltaban para completar la historia completa, uno de ellos era de The Flash, así que seguí buscando y al fin lo encontré.

Ví la portada, era este mismo el que me faltaba, miré la parte detrás del cómic y veía cuanto costaba. El precio era razonable.

-Nunca pensé que una chica como tú, leyera esas cosas- dijo Özil a mi oído.

Dí un pequeño brinco ¿pero cómo me encontró?

-¿Qué haces aquí?- cuestioné.

-Bueno: digamos que mi amiga se escapó de mí y tuve que ir a buscarla- dijo y me guiñó el ojo.

-Uhg, no vuelvas a hacer eso- regañé.

-No te vuelvas a escapar- contradijo.

-Como sea, vamos a la plaza de comidas- dije y dejé el cómic.

-Luego te alcanzo- dijo Özil y fui a la plaza de comidas.

*Narra Mesut*
Mandé a Kara con Thomas y Toni, ya que sabía que ellos habían llegado. Solo faltan Marco y Harriet.

No puedo dejar de mirar el cómic que Kara leía, era de Flash, nunca imaginé que mi chica le gustaba leer este tipo de cosas, cada vez aprendo más de ella.

Un chico se acera a mí y pregunta que si voy a comprar el cómic. Por un momento me quedó pensando, esto puede ayudar en mi relación con Kara, a lo que le digo al empleado que sí y lo compro.

Salgo de la tienda y veo que Marco y Harriet se aproximan a mí.

-¿Tu comprando cómics?- pregunta Marco sorprendido.

-¿Me harías un gran favor?- le pido.

-¡Kars!- grita Harriet y va con Kara, que bueno, así no le dice a ella.

-Depende- contesta Marco.

-Solo finge que compraste esto- estaba nervioso.

-¿Por qué compraría eso?- me cuestiona.

-Escucha: no pude evitar comprarle esto a Kara, será una sorpresa, así que ayúdame por favor- rogué.

-Ok, ok- aceptó y me quitó la bolsa en la que se encontraba el cómic.

Ambos nos dirijimos hacia los chicos y chicas. Toni dijo que nos fueramos a sentar para hablar de todo.

-Escuchen ustedes dos: de ahora en adelante se juntarán con nosotros, lo que digamos se queda entre nosotros. No pueden decirlo a nadie, ni a sus papás. Esto es...serio- explicó Toni.

-No diremos nada- respondió Harriet por las dos.

-¿Jones?- pregunta Toni.

-No diré nada. Pero ¿por qué a fuerzas tenemos que juntarnos con ustedes?- cuestionó Kara.

-Personas ya las vieron con nosotros, ya no es seguro que las dos vayan caminando por ahí- explicó Thomas

-Merecemos saber ¿qué problema traen para llegar a estos métodos?- deseó saber Kara.

-Llegó la hora Toni- argumenté.

Ví que tragó saliva y habló -de acuerdo, no se vayan a espantar. Hace un año, mi hermano fue asesinado por Jeremiah Pyro, el día que nosotros ganamos el torneo de fútbol. Jeremiah odía perder; yo metí el gol ganador, asi que Jeremiah tomó venganza y mató a mi hermano. Planee vengar a mi hermano y hace un mes terminé con la vida de su hermano mayor- dijo Toni y agachó la cabeza.

Kara y Harriet se quedaron en shock, Marco abrazó a Harriet y soltó una lágrima. Kara era más fuerte y rompió el silencio.

-¿Y luego qué pasó?- pregunta.

-Escondimos el cuerpo, y aún no lo han encontrado- expliqué.

-¿Podemos confíar en que no dirán nada?- pregunta Thomas.

-Tienen mi palabra- dijo Kara.

-También la mía- dijo Harriet.

-De acuerdo. Mañana nos vemos en la escuela. Nada de decirle a sus padres- advirtió Toni.

*Narra Kara*
Özil se ofreció a llevarme a casa y se aseguró de que mi padre estuviera ahí.

Bajé de su carro y me preguntó -¿te encuentras bien?-

-Descuida. Es solo que, no esperaba ese tipo de situación- expliqué.

-¿Tu padre está en casa?- pregunta.

Miro a la ventana y ví a mi padre sentado en la mesa, trabajando en unos papeles -si está- afirmo.

-Ok, ya estás a salvo. Te veo mañana Kara- dijo con una sonrisa.

-Ok- dije y me alejé de su carro para caminar a la entrada de mi casa.

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