┆O. 44
━SECRETO━
• • •
──Entonces, ¿todavía no puedes consumir alimentos sólidos? ─pregunté sentada en la ventana de la habitación mirando al platinado leyendo su libro.
──Para mi desgracia, no. ─suspiró mirando la intravenosa. ──. Todavía me queda otra semana así.
──Supongo que ese Sharingan es una espada de doble filo. ─dije refiriéndome al verlo en cama después de usarlo en otra misión. ──. Pero, hablando en serio, Hatake. No lo uses muy seguido, puedes causarte mucho daño.
Él dejó de leer prestando su total atención en mí al escuchar mi preocupación, aunque no lo aparenta, lo considero como un hermano por todas las veces que cuidaba de mí. Yo solo me limitaba a observar la aldea desde la ventana sintiendo la brisa del viento rozar con suavidad mi cabello.
──No te preocupes, pequeña. ─habló sin dejar de verme. ──. Estaré bien. No pienso usarlo si terminaré en cama tres semanas.
Lo miré.
──Me alegra escuchar eso. ─me crucé de piernas.
──¿Y qué hay de ti? ─preguntó regresando a su libro. ──. ¿Todo bien con tu Byakugan?
──Eso parece. Lady Tsunade me dijo que mejoró en este mes. ─lo escuche suspirar de alivio. ──. Pero, no debía de usarlo seguido. Es mejor ir lento para no empeorar la situación.
──Sí, creo que es lo mejor. ─en eso se escuchó la puerta ser abierta. ──. Adelante.
──Buenos días, Kakashi-sensei. ─En la puerta apareció Sakura junto con Naruto y un chico pálido que no conozco.
──Oh, son ustedes chicos. ─su mirada cayó en el azabache. ──. Así que tu eres el nuevo miembro del equipo.
Miré al Hatake al escucharlo, para después mirar al chico pálido. Había escuchado un rumor de que el equipo 7 encontró un "sustituto", por así decirlo, para las misiones.
──Sai, ¿cierto? ─preguntó lo que parece ser su nombre. ──. Mucho gusto.
Ambos chicos sóbaban sus mejillas las cuales estaban rojas en señal de haber recibido un golpe.
──Gracias. ─dijo el azabache.
──Oye, Sakura, acércate, por favor. ─pidió el mayor a su pupilo, ella se acercó a él. ──. Esos dos se ven mal heridos. ¿Pelearon o algo así? ─preguntó en susurro, pero al estar en la ventana, me encontraba menos de dos metros de distancia. ──. Conociendo el temperamento de Naruto, no me extrañaría que así hubiera sido.
Sakura se enderezó en su lugar.
──No, no, nada parecido a eso. ─negó con una risita. ──. Todos nos llevamos muy bien.
Alcé una ceja ante eso.
──Bueno, si tu lo dices. ─soltó el Hatake sin creerle.
Ella soltó una risita nerviosa. Miré de reojo al chico al sentir su pesada mirada y más al ver mi tatuaje de ANBU.
──Oh, cierto. ─habló Sakura. ──. Yumei, él es Sai, el nuevo integrante del equipo. ─me lo presentó. ──. Sai, ella es...
──Sarutobi Yumei. ─interrumpió a su compañera sin dejar de verme. ──. La princesa del viento. ─no dije nada, se supone que solo, los consejeros y ANBU'S me llaman de ese modo. ──. Es un placer conocerla, Yumei-sama. ─hizo una pequeña reverencia.
A pesar de negar ese nombre, él único que me sigue llamando de esa forma era Danzō; quien nunca me dio buena espina.
──Ya, ¿y? ─lo miré sin expresión en mi rostro.
──No lo tomes personal, ella siempre es así, "ttebayo. ─le susurró el rubio. ──. Por cierto, Kakashi-sensei. ─su mirada seria se posó en la de su sensei. ──. En nuestra última misión, nosotros...
──Lo sé todo. ─lo cortó antes de tiempo. ──. Yamato me dio los detalles. También sobre Sasuke.
Mi mirada regresó a la aldea, este era un tema que no me interesaba. Solo me dediqué a ignorar su conversación.
──De hecho si el entrenamiento funciona, Naruto. ─no pude evitar escuchar aquello proveniente del Hatake. ──. Tu poder puede incluso superar al mío.
──¿Yo puedo superarlo, Kakashi-sensei?
──Así es.
Me sorprendió haber escuchado decir que trabajaran juntos para crear un jutsu definitivo para el rubio, completamente nuevo. Obviamente iba hacer un gran desafió, tendrían que entrenar mucho y no tendrá mucho tiempo.
Solté un suspiro cuando la puerta se abrió de pronto, sin pedir permiso.
──¿Cómo te sientes hoy, Kakashi? ─era mi hermano junto a su equipo.
──Ay, Asuma-sensei, ¿no sabe que debe tocar antes de entrar? ─le riño la rubia.
──¿Qué cuentan amigos? ─preguntó Chouji.
Mi mirada chocó con la del Nara.
──Mire que sorpresa, pero si es la problemática. ─sonrió, pero la borró cuando miró a Sai. ──. Te conozco. Eres el pálido. ─gruñó con molestia.
Fruncí mi ceño mirando asesinamente a Sai. No sé qué pasó entre ellos, pero ya me molesta.
──Em, ¿qué pálido? ─por lo que veía Ino no sabía quién era, pero Chouji si.
──Buenas tardes. ─sonrió Sai, pero no parecía muy sincera.
Al final, explicó la razón por la cual él atacó al Nara junto a Naruto y Chouji. Según él, era para medir la fuerza de su compañero de equipo.
──Ya veo, así que era eso. ─susurró el Akaimichi comiendo de sus papás. ──. Ahora lo entiendo.
──Mi nombre es Sai. ─se presentó sin dejar esa sonrisa. ──. Siéntanse con la confianza de ser casuales.
Suspiré ignorando a las chicas susurrar sobre él y al Nara hablar con Naruto sobre no haber presentado el examen chunin, pero también sobre la misión con Sasuke.
──¿Por qué vinieron todos a visitarme? ─preguntó el Hatake de pronto. ──. Se supone que Yumei era la única que me iba a hacer compañía.
──No tengo nada que ver con esto. ─lo miré de reojo. ──. Además, esto no es un área de descanso. ─miré a los demás. ──. Kakashi necesita descansar.
Sabía que Asuma no estaba aquí por venir a ver lo lindo que es el Hatake. Era por algo más.
──Tienes razón. ─susurró mi hermano. ──. Por qué no van al BBQ, muchachos. ─miró a sus pupilos. ──. El equipo Kakashi puede ir con ellos si lo prefieren. ─a sus dos pupilos les pareció bien la idea. ──. ¿Vas tú también, Yumei?
──Ya comí, gracias. ─negué.
──Bien, tengo que hablar con Kakashi de algo importante. ─aclaró. ──. Pero, coman tranquilos, yo pagaré la cuenta.
El Nara gruñó un poco molesto al saber un poco sobre que hablará.
──Pero, y luego... ─habló Naruto. ──. ¿Qué hay de toda la conversación que acabamos de tener de nuestro entrenamiento? No puede dejar la plática a la mitad.
──Ah, cierto. ─suspiró al acordarse. ──. Tomaremos el tema después.
──¡¿Qué?! Pero, se estaba poniendo bueno.
──Naruto, mientras que el Hatake siga internado, no van a poder hacer nada. ─lo llamé para que se fuera. ──. Mejor disfruta tu tiempo ahora que lo tienes.
──Yumei tiene razón, no seas impaciente Naruto. ─dijo el platinado.
Suspiré al verlo ser arrastrado por Sakura yendo al BBQ. Me crucé de brazos mirando las nubes, mi hermano se posó a un lado mío sintiendo el viento golpear suavemente nuestro rostro.
──La cosa es, que las otras aldeas están muy alborotadas. ─habló Asuma después del silencio.
──Lo sospechaba. ─susurró el Hatake.
Entrecerré mis ojos al saber la razón de aquello; Akatsuki.
──Mientras su objetivo sigan siendo los Bijuu, podemos tener la certeza de que vendrán tarde o temprano a buscar a Naruto. ─comentó Asuma e inmediatamente una ira creció dentro de mi pecho.
Si eso llega a pasar, no me quedaré de brazos cruzados.
Salí de mis pensamientos al escuchar la puerta ser abierta dejando ver al Nara.
──No tienen porque dejarme fuera de esto, yo estoy tan preocupado por los Akatsuki tanto como ustedes. ─dicho esto entro a la habitación. ──. Y Naruto, ¿estará bien? ¿Qué tal si esos Akatsuki nos atacan?
Eso era lo que más me preocupaba aunque no lo expresara.
──Ni él podría... ─murmuré por lo bajo sabiendo que no es tan fuerte para enfrentarlos.
Si Gaara no pudo.
──Tienes razón. ─dijo Kakashi. ──. Ni él podría hacerlo. ─la sorpresa se dejó ver en nosotros. ──. Bueno, aún no. ─aclaró.
Estaba tan concentrada en él, que no sentí la presencia de alguien a mi espalda.
──¡Te encontré, Yumei! ─escuche un grito.
Me sobresalte cayendo al suelo de trasero.
──¿Pero qué mierda te sucede, Banri? ─miré al pelirrojo con su uniforme de ANBU.
Él dejó de sonreír al escucharme.
──Esa boca, jovencita. ─me miró con advertencia.
──A la mierda. ─dije enojada por haberme asustado siendo víctima de risas de los presentes.
──Veo que no me dejas otra opción. ─susurró. ──. Darás 100 vueltas a la aldea.
──No lo haré. ─me negué. ──. Soy un Jounin, ya no me puedes obligar a ello.
──Tienes razón, no serán 100, ahora son 200.
──Púdrete, Banri. ─solté ante ese número.
──300 y contando, Yumei. ─su mirada era severa y sabia que no estaba jugando.
Qué estupidez. ─pensé sin decir nada para no aumentar el número.
──Acabas de pensar: "qué estupidez", ¿no es cierto? ─me quedé en blanco al escucharlo. ──. Darás 400 vueltas sin rechistar.
Una gota de sudor bajó por mi cien. Mejor ni para que me quejaba, él siempre se salía con la suya.
──Pero, las tendrás que dar otro día. ─lo miré con una ceja en alto. ──. La Hokage solicitó nuestra presencia.
──¿Nuestras? ¿Nos llamó a los dos? ─pregunté seriamente. ──. ¿Sabes algo?
──Creo que tiene el paradero de... Suki.
Los presentes se sorprendieron, en cambio yo, sentía mi oscura mirada ser ocultada por mi cabello. El viento se movió más fuerte por unos segundos.
En un parpadeo ya me encontraba de pie frente a la ventana.
──Ya era hora. ─murmuré saliendo por la ventana sin pensarlo.
──Banri. ─escuche la voz de mi hermano. ──. Cuídala.
──Siempre, Asuma. ─sonrió. ──. Regresará en una pieza.
Los miré antes de desaparecer.
──Suerte, problemática. ─sonrió, miré a otro lado.
Es momento de vernos.
Estábamos frente a la Hokage esperando a que nos hablara un poco sobre el paradero de Suki.
──Bien, iré al grano. ─nos miró seriamente. ──. Hace unos minutos un ANBU reportó haber visto a dos personas, llevaban capas negras con nubes rojas, estaban caminando por los alrededores de la aldea Motoyoshi. ─cerró sus ojos por unos segundos. ──. La descripción de uno de ellos concuerda con la de Suki, muy similar considerando que han pasado tres años.
Nunca me pregunté cuánto había cambiado, nunca me interesó, pero me imagino que su cicatriz se mantiene sin poder ocultarla.
──Su compañero lleva una máscara naranja. ─la miré regresando nuevamente a sus palabras. ──. Lo que sabemos hasta ahora es que los Akatsuki operan en parejas, pero aún así, puede haber un tercero. ──. Banri, te voy a asignar a dos chunin y junto a Yumei van a dirigirse a la aldea Motoyoshi a confirmar si es Hyuga Suki.
──Sí resulta ser ella, ¿qué haremos? ─pregunté apretando mis puños impacientemente.
Ella entrelazo sus manos apoyando sus codos en su escritorio.
──Su misión es eliminar a un Akatsuki y traer a su compañero para interrogarlo, si no es posible... ─nos miró seriamente. ──. Eliminen a ambos.
──Entendido, Hokage.
Mis ojos tomaron un brillo que jamás había visto en mi vida.
Hyuga Suki, pronto nos vemos.
──¿Cree que fue buena idea dejar ir a Yumei? ─preguntó aquella mujer azabache observando a su maestra de pie frente a la ventana.
──¿Por qué lo preguntas, Shizune? ─respondió su pregunta con otra sin mirarla.
──Es solo que... ¿qué sucede si el Akatsuki llega hacer Hyuga Suki? ─preguntó mirando a otro punto. ──. No cree que la princesa...
──Shizune. ─la calló sin mirarle. ──. Esto es un asunto más personal antes que nada. Yumei tiene razones para decidir si dejarla con vida o no. ─giró su cabeza mirando a la joven. ──. Perdió a su compañero y su ojo por culpa de ella. ─cerró sus ojos recordando aquel día hace tres años. ──. Además, hay muchas cosas que no cuadran.
──¿Cómo cuáles? ─preguntó al observar la inquietante mirada de la rubia.
──El Byakugan. ─posó su mirada en las nubes. ──. Si Suki era de la rama secundaria, como se decía, el Byakugan de Yumei no tendría la capacidad de usarse.
La azabache se sorprendió de haber escuchado aquello recordando las.veces que la ha visto activando aquel Dojutsu sin problema alguno.
──Entonces, ¿quiere decir que...?
──El clan Hyuga y el Sandaime Hokage guardarón un secreto que ni los consejeros me quieren decir por lo delicado que fue. ─apretó su puño con molestia. ──. Y me temo que Hyuga Suki lo descubrió de alguna manera.
El viento entró por la ventana golpeando con suavidad el rostro de ambas mujeres mientras en su cabeza se preguntaban qué tan guardado iba a estar aquel secreto.
Y por qué no contarlo a nadie.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top