Steve permanecía en silencio mientras cruzaba sus brazos y oía las discusiones de Tony, Natasha solo sonría un poco.

— Creo que es suficiente, Tony — Dijo Nat dejando un leve golpecito en el hombro de Stark.

— Iré con los demás, debo entrenarlos — Dijo Steve ya harto de las palabrerías que salían de la boca de Tony.

— Lo que faltaba! El gran Capitán América huyendo de la realidad y siendo un completo gallina — Dijo Tony al ver que Steve se alejaba de la conversación —. Ya veo por qué Lucy no ha regresado.

Eso molesto demasiado a Steve, simplemente se giró a ver a sus dos compañeros y posó sus ojos en la pelirroja quien miraba con un poco de sorpresa al multimillonario.

— Deberás entrenarlos sola. Me iré a casa — Dijo Steve dejando más sorprendida a la mujer.

No espero respuesta de nadie, solo dejó las instalaciones subiéndose a su motocicleta y dirigiéndose a su departamento.

La cama permanecía ordenada sin huellas de algunas pisadas que a veces dejaba Raksha cuando descansaba allí, la cocina permanecía limpia sin muestra de algún pastel o alguna preparación dulce que Lucy solía hacer para la hora del té. Miró hacia el sofá y ella no estaba allí leyendo uno de esos tantos libros que Bruce o Tony le obsequian.

Steve con tristeza se sentó en su lugar tomando un cojín que ella solía utilizar para apoyar su cabeza en él, lo aferró a su pecho y cerró sus ojos mientras olía el perfume que había quedado allí.

— Ella volverá, Steve — El hombre se sobresalto al oír la voz de su mejor amigo, Bucky.

Dejó el cojín a un lado y camino hacia Bucky, lo abrazo mientras soltaba un suspiro tembloroso.

— No sabes cuánto la necesito en mi vida — Confesó Steve.

Su corazón estaba completamente roto y pedía a gritos que la presencia de Lucy lo curará por que era lo único que él quería para seguir viviendo, sin ella él no era nada.

— Lo sé amigo, pero debes resistir y ser fuerte para ella. Estoy seguro que Lucy debe estar igual que tu anhelando el día de su reencuentro — Dijo Bucky —. Y también estoy seguro que ambos volverán a estar juntos, como debe ser.

Steve solo asintió y miró su anillo de compromiso, al verlo se dió cuenta que debía ser positivo ante esta situación a pesar que fuese demasiado duro.

[...]

Lucy intentaba darse ánimo ella misma ante todos los papeleos que debía solucionar, Katherine había ocultado muchas cosas a la comunidad y Lucy debía hacerse responsable de ello buscando una solución.

— Lucy — Spencer tocó el hombro de la chica para llamar su atención —. Con Alicia estuvimos debatiendo un poco en qué deberías hacerte una prueba de ADN para corroborar que realmente seas hija de Katherine.

— Está bien, pero que sea rápido — Dijo Lucy a lo que la mujer asintió.

***

— Y cómo te sientes? — Pregunto Alicia mientras ingresaba la sangre a unos pequeños frascos para luego ser analizados.

— Bien algo...— Lucy fue interrumpida por Alicia.

— No digo por esto, lo digo por tu nuevo trabajo y tus nuevas responsabilidades.

— Extraño demasiado mi otra vida, a Steve a los chicos. Quisiera volver — Confesó Lucy.

— Ya basta Lucy! — Dijo Spencer —. No podrás volver aún que más quieras, tienes que cumplir con tu castigo por haber asesinado a Katherine.

— Tu también lo ibas hacer — Respondió Lucy con mucha molestia —. A tí también deberían juzgarte, quisiste hacerlo.

— Lucy! — Dijo Alicia sorprendida.

— No! No me hagan solo la culpable a mí, ustedes también querían acabar con ella pero Raksha fue quien tomó valor para hacerlo y así liberarnos de aquella maldad que nos rodeaba por culpa de Katherine — Dijo Lucy saliendo del laboratorio muy molesta.

Raksha solo dijo que lo siguiera y comenzó a correr dejando a su humana muy confusa. Ella lo siguió llegando a su habitación, el tigre busco entre la ropa de Lucy y logro encontrar el teléfono que Tony le había entregado antes de irse.

— Que sucede? — Pregunto Lucy.

— Esto — Dijo Raksha enseñando el teléfono —. Llama a Steve.

Lucy miró con una sonrisa a su tigre y lo abrazo mientras tomaba el teléfono que lo había olvidado por completo.

— Eres el mejor Raksha — El tigre solo lamió la mejilla de su humana y espero impaciente a que Lucy llamara a su amado.