Evan

Amar a Leah mientras enfrentaba la realidad de mi compromiso con Emma fue un torbellino de emociones y dilemas. Durante el trayecto hacia su casa, reflexioné sobre los últimos diez años de mi vida y me vi atrapado en la perspectiva de un matrimonio sin amor pero con la responsabilidad de criar a un hijo que amaría con locura, al mismo tiempo que recordaría a Eleanor como alguien que marcó mi vida de manera profunda.

Pensar en Leah me llenaba de alegría y añoranza, recordando los días llenos de complicidad y risas, su personalidad cálida y creativa que iluminaba cada momento juntos. Me di cuenta de que aún la amaba y que ella era el "algo" que añadía color a mi vida.

Sin embargo, enfrentaba la difícil decisión de cómo manejar mis sentimientos por Leah mientras esperaba un hijo con Emma y me preparaba para casarme con ella. Sabía que era injusto para ambas mujeres y que debía tomar una decisión que definiría mi vida para siempre.

¿Era correcto arriesgarme por Leah? A pesar del miedo y la incertidumbre, sabía que ella lo valía. Pero también entendía las consecuencias y el impacto que tendría en todas las partes involucradas.

Además, había otras preocupaciones en mi mente, como mi salud mental afectada por las tensiones de mi trabajo en la serie. Quería mejorar y reorganizar mi vida para ser la mejor versión de mí mismo, tanto para Leah como para mí mismo.

Decidí que debía encontrar la manera de hablar con Emma sobre la verdad, sin alterarla ni afectarla durante su embarazo. Quería llegar a un acuerdo con ella sobre nuestro futuro y el de nuestro hijo.

Esperaba que Leah estuviera dispuesta a esperarme mientras yo encontraba el camino hacia ella. ¿Estaría ella dispuesta a esperar, o se cansaría? Solo el tiempo lo diría, pero esperaba que cuando estuviera listo para regresar a ella, encontrara un lugar en su corazón para mí.