𝑯𝒐𝒚 𝒑𝒓𝒆𝒔𝒆𝒏𝒕𝒂𝒎𝒐𝒔
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Delegado
╰───⌲Cap. 𝐎𝟑. ༣. . ·

Era el tercer día de clases y todos se encontraban en el aula esperando la llegada del profesor Aizawa. Cada uno se encontraba platicando con sus amigos, a excepción de Todoroki, por lo que te acercaste a él.

—¿Por qué tan solo amigo? -preguntas.

—No es de tu incumbencia -serio.

—Si no fuera de mi incumbencia no te estaría preguntando -sonríes.

Este se quedó callado.

—Tienes bonitos ojos -sonríes- Me recuerdan a alguien... -pensativa.

Él volteó a verte con algo de enojo.

—Me recuerdan a All Might -sonríes- Me gustan -te alejas de él.

—¡___-chan! -Izuku exclamó, y te entregó un pequeño bento- Dijo mi oka-san que te diera un poco de katsudon que hizo ayer ella -sonríe.

—Muchas gracias Izuku -sonríes- Dile a Inko-san que se lo agradezco

—No te preocupes, yo se lo diré

De repente, Aizawa entró al aula, y todos salieron corriendo hacia sus respectivos asientos.

—Buen trabajo en el combate de entrenamiento de ayer. Vi el vídeo y los resultados -comienza a hablar el tutor- Bakugo, eres talentoso, así que no actúes como un niño -le recomienda.

—... -desvía la mirada sin poder ver atrás- Lo sé

Sonríe ante ello la joven, sin saber que aquel gesto, no pasa desapercibido para algunos.

—Y Midoriya, te rompiste el brazo de nuevo, ¿eh? -ve los papeles- No puedes seguir  diciendo que no puedes hacer nada porque no puedes controlar tu quirk -le recuerda- No me gusta decir lo mismo una y otra vez. Mientras no puedas controlar el asunto, hay mucho que debes hacer. Siente el sentido de urgencia, Midoriya

—¡Hai, sensei! -levanta la cabeza decidido.

—Ahora, empecemos esto -se dirige a todos- Lamento decirlo tarde, pero hoy, ustedes...

Todos se tensaron ante lo dicho por el héroe profesional

—Decidirán el presidente de la clase -anuncia.

—¡Es una actividad normal de escuela! -pensaron todos aliviados.

—¡Yo quiero ser el presidente de la clase! ¡Elíjanme! -exclama Kirishima.

—¡Yo también! -levanta la mano Kaminari.

—Es un trabajo hecho para mí... -y es opacado por Ashido-chan.

—Yo seré la líder -exclama animada.

—¡Mi campaña es para que todas las faldas de las chicas sean treinta centímetros arriba de la rodilla! -exclaman por detrás.

—Si eso sucede, uso el uniforme de hombre, sin discusiones -Izuku ríe levemente ante tu comentario, supones que era para olvidar el comentario anterior.

—¡Yo lo haré! ¡Yo!

—¡Silencio, por favor! -alza la voz Iida- Es un trabajo con la seria responsabilidad de liderar a otros. No es un trabajo que todos quieran hacer -mantiene el brazo elevado- Es un llamado que requiere la confianza de todos a su alrededor. Si queremos utilizar la democracia para elegir un verdadero líder, entonces debemos tener una elección para elegirlo

—¡Tu mano está en lo más alto! -le recalcan.

—¿Por qué sugieres eso?

—No nos conocemos tanto todavía, ¿como podemos confiar o algo así? -cuestiona Tsu.

—Si ese es el caso, y todos votan por sí mismos... -empieza Kirishima.

—¿No crees que por eso precisamente quien reciba múltiples votos puede ser considerada la persona adecuada? ¿Qué piensa, sensei?

—No me importa, mientras decidan antes de que la clase termine -aprueba acostándose con su bolsa de dormir.

—¡Muchas gracias! -agradece.

• • •

—¡¿Tuve tres votos?! -exclama Izuku.

Tapaste tu boca ante su reacción, es mucho mejor su expresión de lo que te imaginaste.

—¡¿Por qué deku?! ¡¿Quién votó por él?! -exclama enfadado Bakugo.

—Bueno, es mejor que votar por ti -comenta Sero.

—¡¿Qué dijiste?!

—Un voto... -murmuran del otro lado- Sabía que esto pasaría... Es lo que esperaba del llamado de una persona...

—¿Votaste a alguien más, eh? - preguntan a lo cual asintió.

—Pero, tú también querías hacerlo... -le recuerda Sato- ¿Qué intentaste hacer, Iida?

Narra ___:

—___-chan -volteo a ver a Izuku- Tú serás la delegada

—¿Qué? -veo confundidamente la pizarra más determinadamente.

Martínez ___: 4 votos
Midoriya Izuku: 3 votos
Yaoyorozu Momo: 2 votos
Iida Tenya: 1 votos

Y más nombres con un voto o ninguno.

—¿Y p-por qué tú no? -le cuestiono.

—S-Sabes que tú eres buena con el liderazgo y la autoridad -nervioso.

—Está bien -accedí- Seré la delegada y tu el fiable subdelegado -sonreí de lado.

Me levanté de mi asiento al igual que Izuku, poniéndonos al frente de la clase mientras papá se levanta de su siesta cuando estaba a punto de convertirse en mariposa.

—Entonces... La presidenta es Martínez y el vicepresidente es Midoriya

—A mí no me parece mal... -Tsuyu comenta.

—Midoriya es entusiasta y ___ demostró dominio en el entrenamiento -apunta ese detalle Kirishima.

• • •

—¡Hay mucha gente hoy también!

—Es porque todos en el curso de héroes, curso de apoyo y curso de administración comen en el mismo lugar -explica Iida.

—¡El arroz es delicioso! -alagó al probar un poco del arroz.

—Aunque fui elegido como subdelegado de la clase, no sé si estoy calificado para ello -comentó pesimista luego de suspirar.

—Entonces te dejaré a cargo para que veas que si lo vales -sonreí dándole un poco del katsudon a Izuku.

—Tampoco le asustes así, Martínez-san -comentó Uraraka.

—Pero es para que se dé cuenta que él puede -corrijo luego de comer otra pequeña porción y darle otro poco a Izuku.

—No pasa nada que también estés nerviosa del cargo, ___-chan -Izuku habló.

—... No lo estoy -desvié mi mirada y mordí el interior de mi mejilla.

—Claro que lo estás, te conozco -burlón.

Bufé, porque sabía que él tenía razón.

—Martínez, tu firmeza y flexibilidad te demostraron como una líder liberal -le veo asombrada- Midoriya-kun, tu coraje y juicio en los momentos críticos te hacen digno por igual, por eso voté por ti

—¿Fuiste tú? -le ve asombrado.

—Pero, ¿no querías ser presidente de la clase también, Iida-kun? Quiero decir, usas lentes y todo -comenta Uraraka.

—Querer serlo y ser adecuado para ello es diferente -nos comenta- Meramente hice lo que juzgué era correcto

—¿Meramente? -repiten confundidos.

—Usualmente, no usas esa palabra... -comenta el peli-verde.

—Oh, eso es... -intenta excusarse.

—Lo he estado pensado... -le ve sonriente- ¿Eres un niño rico, Iida-kun?

—Rico... -repite como asqueado- He intentado cambiar mi forma de hablar porque no quiero ser llamado así. Sí, mi familia ha sido de héroes por generaciones. ¿No conocen al héroe Turbo, Ingenium? -explica.

—¡Por supuesto! -sonríe- ¡Él es un héroe popular que tiene sesenta y cinco socios trabajando en su agencia de Tokio? -informa- ¡Acaso...!

—Es mi/su hermano mayor -exclama él orgulloso mientras que yo lo murmuro y ellos se asombran ante su revelación.

—Es un héroe que honra las reglas y lidera a la gente -sonrío al oírlo- Me puse el objetivo de ser un héroe porque quiero ser como mi hermano -baja la mirada- Sin embargo, creo que es muy pronto para que mi liderar a otros

Juego con un mechón viéndolo atenta, creo saber qué haré al volver a clases.

Narrador omnisciente:

Sin embargo, la calma de la joven se detuvo al oír la alarma de la academia.

• Violación de Seguridad nivel 3. Todos los
estudiantes evacuen inmediatamente •

—... A-alguien a entrado a la escuela... - murmuraste- Mierda, debí de haberme acordado de esto

—¿___-chan? -el oji-verde la ve con preocupación al notar que no se mueve de su sitio.

Mientras tanto, los demás alumnos no pierden el tiempo en intentar salir del lugar, provocando así, un amontonamiento aun sonando la alarma.

—Vamos, hay que irnos -te toma del brazo.

Pero al intentar caminar, caíste de rodillas. El joven se percata que tu respiración se entrecorta.

—¡___-chan! -se agacha frente de ti- ¡Re-reacciona! -implora.

—¡Todos váyanse, ahora no nos sirve! -escucha la joven.

—N-no me de-dejen aquí... - logra decir entre lágrimas.

—¿Eh? -la observa con confusión-

—P-por favor... -suplica entre cortados sollozos.

—___-chan... -murmura el muchacho con preocupación.

Sin saber que más hacer, la envuelve entre sus brazos con los nervios a flor de piel por la cercanía que estaban teniendo. Esperando que aquel acto hiciera un efecto.

—I-izuku... -logra pronunciar en su oído- T-tengo miedo... -admite aferrándose al joven.

Aquella misma frase reitera la pequeña abrazada al niño que la consuela con notable nervios y preocupación de que se altere su querida enamorada.

—... - como acto de reflejo, acaricia su cabello con cuidado, como si temiera hacerle algún daño- E-está bien... ____, e-estoy aquí... contigo...

Entonces, un grito del pasillo les llama la atención.

—¡Chicos, todo está bien! -resuena la voz- ¡Son solo los medios! No hay razón para entrar en pánico, ¡No pasa nada! -recalca firme- Estamos en la U.A. hay que actuar de forma apropiada a la élite

Todos los presentes se le quedan observando, asombrados, luego, más calmados al probar que el joven tenía razón, solo era los periodistas.

—Nee... -ve nuevamente a su acompañante, mientras limpia rápidamente sus lágrimas- ¿Piensas lo mismo que yo, Izuku? -sonríe más relajada-

—¿Uh? -voltea a verla- Hai, ____... -devuelve el gesto con timidez.

• • •

—Antes de decidir sobre los encargados de las tareas, queremos decir algo -anuncia la joven sosteniendo a escondidas la mano del peli-verde- Midoriya-Kun, ¿quieres hacer los honores? -guiña divertida.

—¿Y-yo? -voltea a verla nervioso y asiente tras mirarse por unos segundos– Cre-creemos que Tenya Iida debería ser el delegado –comienza algo nervioso– logró captar la atención de manera genial, tenemos fe que Iida será el mejor en esto –sonríe más confiado– y e-ehm...

—Yo también estoy de acuerdo –comenta un pelirrojo– Lo ha dicho Midoriya –sonríe– ¿Aunque eso no debería decirlo...?

— Ejem –ella capta sus miradas– Y Momo Yaoyorozu será la subdelegada, nos demostró ser analítica a los detalles durante el entrenamiento –cruza los brazos, sonriente– Ambos estamos de acuerdo que serán un buen equipo –completa la oración.

—Pierden el tiempo –interrumpe el azabache tras unos comentarios de sus alumnos– No me importa lo qué hagan, pero apresúrense

—Siempre tan amable –ríes a lo bajo mientras su compañero asiente asustado.

—Si la delegada me nomina, no tengo opción –se levanta el joven.

—Estoy de acuerdo, si el subdelegado me ha elegido –imita su acción la azabache– Seré ahora la subdelegada de la clase 1-A

—Y desde hoy, Tenya Iida, prometo dar lo mejor de mí para ser el delegado– promete alzando el brazo

—¡Ánimo, salida de emergencias! –exclama el pelirrojo.

—¡Salida de emergencias Iida!

—¡Esfúerzate!

—¿Y yo qué...? –murmura la azabache.

Ante ello, alza el pulgar arriba la antigua delegada, provocando que sonría la reciente subdelegada.

Ahora, sin nada más que anunciar, ambos jóvenes vuelven a sus asientos, intercambiando por un segundo una mirada al otro mientras el reciente dúo comienza con su labor.

—Izuku, sabes que puedes seguir siendo el subdelegado –le recuerda susurrando.

—Me-mejor que sea otra persona, co-como Yaoyorozu, ella tuvo dos votos –desvía la mirada.

—Hmm~, hagamos que acepto tu propuesta... –sonríe– porque creo que te gustaba tener una excusa para estar más tiempo conmigo –bromea.

—¿Co-como l-lo...?! –se percata de que está más adelante.

—¡Vamos, que si no seremos los últimos en llegar! –exclama.

—¿N-no lo decía en serio..? –avanza hasta llegar a su lado– Parece que no... –la observa de reojo.

• • •

—Hoy, para el entrenamiento básico de héroes, será una clase con tres instructores. All Might, yo y una persona más –anuncia el tutor.

—Mierda, se me olvidó advertirles a mis padres de esto -piensas, asustada.

—¡Perdoné! ¿Qué vamos a hacer? –pregunta uno de sus alumnos.

—Desastres, catástrofes y todo eso –contesta mostrando una tarjeta que tiene escrito Rescue– Es entrenamiento de rescate

—Rescate... Parece que habrá mucho trabajo... –susurra el rubio de mechón oscuro.

—¿Verdad? –sonríe la peli-rosa.

—¡Idiota, ese es el deber de un héroe! –recalca el pelirrojo– ¡Mis brazos ya están listos!

—Nadie puede vencerme en el agua, ribbit –asegura la peli-verde.

—Qué agridulce es esa palabra... –murmura para si misma.

—Oigan, aún no termino –recalca el azabache– Pueden decidir si quieren usar su traje o no, esta vez –aprieta un botón– Porque probablemente sus trajes limiten sus habilidades –aconseja.

—Qué buena indirecta, se sorprenderá al ver que puede hacer mi traje –le ve atenta.

—El entrenamiento será fuera del campus, tomaremos el autobús –explica– Eso es todo, prepárense –se marcha.

En respuesta, los estudiantes se levantan por sus trajes.

• • •

Los alumnos se encuentran afuera mientras una castaña avanza con su amiga. El traje de la joven tenía un notorio cambio, llevando la parte inferior del traje algo descubierto, mostrando un poco más sus piernas.

—Oh, estás utilizando el traje de educación física –comenta la castaña– ¿Y tu traje?

—S-se destruyó durante el entrenamiento de combate, así que espero que la compañía de apoyo lo arregle –explica.

Les atrae su atención el sonido de un silbato.

—¡Clase 1-A, reúnanse! –demanda– ¡Formen dos filas con base a su número y entren al bus de forma ordenada! –vuelve a utilizar el silbato.

—Iida-kun está muy acelerado... –comenta el peli-verde.

—La idea del silbato es buena... –halaga.

Todos los alumnos se subieron al bus y se acomodaron como quisieron.

—Diablos, no pensé que sería este tipo de bus –se lamenta.

—No había necesidad, ¿no? –comenta sonriente la peli-rosa.

—Digo lo que se me viene a la mente –comenta– Midoriya... –voltea a verle.

—¿Si, Asui? –imita su acción, nervioso.

—Llámame Tsuyu –le sugiere.

—B-bien... –acepta.

—Tu quirk se parece al de All Might –suelta aumentando los nervios del muchacho- Al igual que el de Maruchinesu-san

Al decir eso, tu cuerpo comenzó a temblar ligeramente por los nervios.

—¿E-eso crees...? –voltea a ver otro lado– Pe-pero yo...

—Espera Tsuyu, All Might no se lastima cuando lo usa –le recuerda a su compañera– Es solo que se parecen –comenta el pelirrojo aliviando a los jóvenes– Pero está bien tener un quirk de potenciación simple, ¡puedes hacer cosas geniales! –adula alzando el brazo– Mi endurecimiento es muy útil –activa su quirk– Pero, por desgracia, es muy vistoso

—¡Creo que es genial! –lo halaga el oji-verde– ¡Es un quirk digno de un profesional!

—¿Profesional? –sonríe– Pero tienes que pensar también en la popularidad

—Mi láser ombligo es profesional, llamativo y poderoso –se alimenta el ego.

—Pero luego siempre te duele el estómago –le recuerda haciéndole caer de ese pedestal.

—Bueno, en fuerza y vistosidad, ganan Todoroki, Maruchinesu y Bakugo ¿no? –comenta el pelirrojo y en reacción, el rubio desvía la mirada.

—Pero Bakugo siempre está enojado, no creo que sea popular –recalca ese detalle la peli-verde.

—¡¿Qué demonios?! ¡Enfréntame! –la demanda, molesto.

—¿Ven? –señala la joven.

—No nos conocemos de hace tanto, es increíble que todo el mundo sepa que tu personalidad es basura –explica el rubio.

—¿Y ese vocabulario, cretino? ¡Te... –es interrumpido por un bostezo detrás del muchacho.

— Oigan... ¿Pueden bajar la voz, por favor? –pide la mexicana.

Bakugo sin decir nada se sienta y se calla.

—Al parecer ella es la única que hace que guardes silencio -volvió a comentar la chica rana.

— Ya llegamos. Dejen de jugar –habla el maestro antes de que le responda.

—¡Sí, sensei! –responden al unísono.

—Parece que mi siesta tendrá que esperar –suspira resignada.