XXXIV
Chapter 34:-
Ya eran pasadas las once de la noche y ellos seguían compartiendo entre risas o acusaciones infantiles señalándose de par en par. Para ese entonces, Bangchan le susurro a la rubia que iría a ver al niño, ya que era hora de marcharse, a lo que ella asintió dándole la razón.
A lo que el peliazul se distancio, no pasó más de un minuto cuando su móvil celular comenzó a vibrar, anunciando a los demás que la disculparan contestando la llamada en el balcón.
Mientras hacia aquellos movimientos, Jimin la siguió con la mirada, para imitarla y seguir los mismos pasos encontrándose a solas en el pequeño mirador del hogar. Rosé al verlo a su lado frunció el ceño confusa, y al terminar al conversación, se dispuso a entrar, pero él no la dejo, provocando quejas en la fémina.
-Podrías soltarme, por favor.-mascullo entre dientes.
-Tenemos que hablar.-soltó sorprendiéndola. Rosé rio por lo bajo mientras negaba apoyándose sobre el barandal y colocaba su mirar sobre el mayor.-¿qué es lo tan gracioso?
-Que tú y yo, no tenemos nada de que hablar Jimin.-declaro, dejándolo mudo.-construiste un hogar, tienes una familia y trabajo estable, y por lo que vi, eres muy feliz con tu hijo. No entiendo, ¿qué es lo que hace falta en tu mundo perfecto?
-Tú Roseanne.-confeso asombrándola.-, te he añorado y esperado todos estos años, Rosie.-le decía a medida que avanzaba hacia ella y la chica retrocedía encontrándole con la pared, quedando torpemente acorralada.-no he dejado de pensar en ti, bonita.-murmuro haciéndola tragar con dificultad.
-... Hay algo que debes saber Park Jimin.-pronuncio cambiando completamente su semblante.-, ya no soy la chica de hace tres años atrás.-negó mirándolo a los ojos.-y aunque sea difícil para ti, no pienso repetir el mismo error del pasado. Permiso.
Trato de salir de la situación, pero el hombre no la dejo ir tan fácil sosteniéndola del antebrazo prohibiéndole marcharse.
-Aun no he terminado de hablar, Chaeyoung.-se dispuso a decir haciendo presión en el agarre.
-Jimin, me estas lastimando.-se quejo dándole la cara débilmente.-déjame ir.-sostuvo temerosa.-¡Jimin!
-Qué está pasando aquí.-quiso saber el tercero al deslizar la puerta de cristal.
-Chris.-musito con miedo.
-Oye, Rosé dijo que la soltaras, ¿acaso estás sordo? .-dijo con deje molesto. La chica se coloco entre ambos, ya que no quería que ninguno saliera lastimado ni mucho menor hacer algo que después se arrepentirían el resto de sus vidas.
-Cariño, tenemos que irnos.-le decía mirándole suplicante.-Chris, por favor.-volvió a decir, viendo que los hombres prácticamente se estaban moliendo a golpes con la mirada.-Christopher, vámonos.-dictamino tomándolo del brazo adentrándolo al apartamento.
-Bien.-acepto a regañadientes sin quitarle la mirada de encima al contrario.
-Ella no se puede ir, no sin antes responderme algo importante.-demando empujándolo del hombro bruscamente.-Rosé, dímelo.-suplico acercándola a su rostro asustándola.-ese niño ..., ¿podría ser mío? .-la chica se quedo sin habla, por lo que solo podía mirarlo temerosa y negar en silencio.
-No es tuyo, si es lo que desesperadamente querías escuchar. Felix lleva nuestra sangre.-declaro Bang conteniendo sus impulsos de golpearlo.-ahora, suéltala.
-Necesito escucharlo de tus labios, ¡dímelo! .-insistió haciendo presión en el agarre dañándola.
-¡Déjame en paz! .-chillo al soltarse y abofetearlo duramente dejándole la mejilla marcada.
Ante el escandalo y gritos de la chica, tanto como los dueños de casa como sus invitados fueron a aquella dirección sorprendiéndose por tal discusión entre ambos hombres.
-¡Basta Jimin, qué demonios te sucede! .-gruñó Namjoon alejándolo de la escena.
Jisoo se acercó a la rubia y trató de tranquilizarla, pero ella simplemente negó conteniendo sus lágrimas y se marchó en total silencio junto a sus seres queridos.
Una vez Rosé salió del apartamento sin decir palabra alguna o siquiera despedirse, todos miraron al castaño reprochándole por lo que había sucedido.
-Qué, ¿acaso hice algo tan malo para que me lleven a la horca? .-soltó frunciendo el entrecejo.
-Jimin, pudiste haber causado un accidente sin darte cuenta. Estaban discutiendo en un balcón del décimo piso, ¿crees que si alguno hubiera caído a esa altura, podría hacer sobrevivido? .-cuestionó Yoongi neutral.-no era ni él momento, ni siquiera el lugar para mantener una "conversación" .-hizo comillas ante la situación.
-Tenía que salir de dudas.-quiso justificar su temperamento, pero sabía que su furia contenida y poco autocontrol qie tenía no ayudaría en nada.-quería saber si ese niño era, ... Ya no importa.-suspiro haciéndose camino entre los invitados.-yo también me iré. Lamento mucho lo sucedido, perdón.-dijo antes de meterse en la habitación donde los infantes dormían y sin despertar a su hijo, imito a la rubia marchándose sin dar la cara.
-¿Crees que halla sido buena idea que se fuera así? .-cuestionó Taehyung hacia su hermana mayor.
-Era lo mejor, créeme.-aceptó relajando su rostro.-hay que respetar la vida de nuestra amiga, no podemos hacer nada sin que ella dé el primer paso.
-O quizás nunca lo dé.-terminó de decir Jungkook cruzado de brazos.
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Mientras iban de camino a casa, el ambiente no era favorable para ninguno de los dos. Tanto ella como Bangchan pensaban y rememoraban a cada segundo lo sucedido hace menos de media hora.
-¿Podrías estacionarte un segundo? .-pronunció sin mirarlo.
El hombre lo hizo sin decir palabra y ella de bajo del auto apoyándose en el barandal del puente mirando a la nada.
Luego sintió un peso en su hombro izquierdo, girándose en ese mismo instante, pues, necesitaba con urgencia un abrazo y consuelo.
-Lo siento, no debí involucrarme en ... Perdóname.-dijo cabizbajo.-Ro, yo no quería que las cosas se salieran de control pero tu ex novio, es un grandísimo idiota.
-Eso no es lo que me afecta. Yo sabía que en cualquier momento tendría que enfrentarme a él pero, no creí que fuese tan pronto, mucho menos con Felix ahí.-suspiro y cerro sus ojos con fuerza ante los recuerdos frescos que tenia tras la anterior discusión.-nunca debí de haber regresado, fue el peor error que he echo.
-Ros, no te eches la culpa encima, yo también tuve que ver. Quería que viajaras y pudieras estar con tus amistades.-declaro colocándose a su lado.-¿crees que intente acercarte a ti nuevamente? .-pregunto después de un largo silencio.-digo, quizás tú todavía sientas cosas por él y ...
-Estoy contigo, eso es lo que cuenta.-lo interrumpió mirándole con una dulce sonrisa.-estamos juntos por algo, o mejor dicho, por una linda personita.-termino de decir guiando su mirada al auto estacionado a unos cuantos pasos de distancia.
Bangchan la imito junto a una sonrisa y la abrazo rodeándole la cintura, acercándola a él.
-Te amo.-musito sobre los rosados labios de la fémina.
Ella le acaricio la mejilla y colocándose de puntillas, le robo un casto beso, el cual se incremento en cuanto la tomo del cuello y le permitió profundizarlo.
Rosé se alejo avergonzada golpeándole el pecho levemente. El hombre río ante su infantil comportamiento, por lo que la rubia le reclamaba entre pucheros y él seguía carcajeando sin percatarse que desde la otra acera, Jimin los veía seriamente y con la mandíbula comprimida de los celos presentes.
Molesto, se retiro regresando desde donde venia anteriormente, solo para atravesar la avenida y cometerse a un bar, bebiendo todo lo que pedía hasta perder la conciencia.
¿Realmente me has olvidado tan fácil?
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Días después ...
Rosé atravesó la entrada de aquel restaurante, el cual no visitaba desde que se había distanciado de sus amistades. Al visualizar el local pudo notar como Jisoo alzaba su mano dejándose notar sonriente, rápidamente fue hacia aquella dirección encontrándose con las dos restantes y la silla libre a un lado de Lisa.
Ambas cruzaron miradas sintiéndose un poco incomodas, pero eso fue reemplazado en cuanto la misma Jennie la obligo a sentarse haciendo que desviara la mirada molesta.
-Bien, ¿qué es lo tan importante que tenias que decirme? .-pregunto mirando a la anterior expectante.-tuve que cerrar la cafetería antes por ti.
-Vamos Ro, no seas tan infantil.-reprocho Lisa tratando de aligerar el ambiente.-son buenas noticias.-la rubia pestañeo esperando, por lo que la segunda Kim deslizo una cajita de compromiso.
-E-eso, eso es lo que creo.-pregunto mirando a la susodicha.
Ella asintió conteniendo las lagrimas de felicidad, y como si de un coro se trataran el grupo completo chillo de alegría ente la pronta boda.
-Yoongi me lo propuso anoche mientras veíamos un partido de baloncesto.-contaba con una gran sonrisa.-no fue demasiado romántico, ustedes lo conocen, no es de su agrado demostrar sus emociones, pero para mi fue perfecto.
-Por favor, no me digas que lo lanzo como si de una pelota se tratara.-ironizo Jisoo sin esperar que la menor afirmara, dejándola con la boca abierta.-realmente me sorprende que estés con él. Pero se nota que te quiere, eso es lo que cuenta.
-Y, ¿para cuando seria el gran día? .-se atrevió a preguntar Lisa dándole la palabra a la futura novia.
-Pues, aun no lo hemos pensado, pero quizás en unos tres o cuatro meses.-asintió dejando caer la mirada en Park.-Ro, ¿crees que aun sigas en Seul para ese entonces?
-Unnie, no te quiero dar falsas esperezas ni mucho menos una promesa, pero trataré de estar contigo ese día, ¿si? .-termino de decir bajando la mirada en el acto, pues no sabia como afrontarla.
Después de compartir el almuerzo, el grupo se disperso, pero antes de marcharse por caminos diferentes, Lisa le pidió a la rubia si podían hablar. Esta al sentirse presionada no supo como negarse, por lo que opto por escucharla sin restricciones.
Llegando a un parque reconocido por ambas, tomaron asiento una al lado de la otra tornándose un silencio entre ellas, pues no sabían como comenzar un dialogo el cual podría terminar en una gran discusión o pela con insultos entremedio.
-La verdad es que, debí de haberte dicho esto mucho antes de todo lo sucedido hace tres años.-comenzó a decir jugando nerviosamente con sus manos.-talvez fue egoísta de mi parte o quizás muy estúpida al no decirte la verdad de frente, pero sinceramente, no quería que nuestra amistad finalizara por la culpa de un hombre, por eso decidí callar.
-Tomaste valor para decírmelo aquel día, así que, no eres una estúpida para mi.-soltó junto a una leve sonrisa.
-Perdóname Rosie, yo lo menos que quería en la vida era lastimarte con eso. N-no sabes las veces que traté de olvidarlo, pero no podía sacármelo de la cabeza.-apenas pronuncio gracias al nudo formado en su garganta.-me enamore del menos indicado.
-Yo también me enamore de quien no debía.-sonrío sin ánimos.-creo que ambas cometimos el mismo error, pero sabes, antes de que yo pueda perdonarte, quiero que me abraces como antes.-dijo con los marrones cristalinos.
Manoban la miro reteniendo sus lagrimas pero una vez al sentir la calidez de quien una vez fue su mejor amiga, estas mismas se deslizaron por sus mejillas sorprendiéndose que Rosé también lloraba junto a ella.
-L-lo siento, lo siento.-repetía angustiada entre sollozos.-te quiero.
-Y yo a ti, Lili.
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Solo había pasado una semana en la cual su mundo se coloco patas arriba en cuanto fue a la guardería y sorpresa, tanto Jimin como su hijo estaban en compañía de Felix conversando amenamente mientras compartían a gusto un delicioso helado.
-¡Mami! .-exclamo el niño corriendo hacia ella con una inmensa sonrisa.-mira, mira, ese hyung me regalo un helado.-le enseño la golosina al mismo tiempo que saltaba frente a ella eufórico.
-Cariño, no me gusta que recibas cosas de extraños.-señalo haciendo que el pequeño borrara aquella sonrisa y dejara caer el cono de helado al suelo molesto, para luego marcharse al auto estacionado sin decirle palabra alguna.-Felix, te estoy hablando.-indico frustrada.
Tras suspirar se encontró con la mirada burlesca del castaño, quien se disponía a marchase de la escena, pero ella fue más rápida y se acerco solo para dejarle bien claras las cosas.
-No es necesario que hagas una escena en este momento Roseanne, estoy con mi hijo, ¿no te das cuenta? .-elevo al pequeño quien la saludo alegre sin percatarse de su rabieta.
-No quiero que te acerques nunca más a Felix, te lo prohíbo. Si te vuelvo a ver cerca de él, no respondo Park Jimin.-ataco a la defensiva.
-¿A qué le tienes miedo? ¿crees que lastimaría a un niño?, mucho menos si es alguien tan importante para ti .-cuestiono frunciendo el ceño.-dios Rosé, no soy ningún criminal ni nada por el estilo.
-Solo mantiene la distancia.-dijo bajando la voz.-por favor, no insistas en acercarte a nosotros. Esto no nos hace bien, tú sabes perfectamente el porque.-termino de decir encarándolo.-bien, espero que mis palabras se hallan quedado en tu cabeza, adiós.
Rosé se alejo a paso lento y en cuanto llego al automóvil se giro, dándose cuenta que Jimin la miraba como hace mucho tiempo atrás, con amor.
Perdóname
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Esa misma noche ...
-¿Cómo estuvo tu día bonita? .-pregunto Chris al llegar con ella en la cocina y abrazarla por la espalda.-¿mucho trabajo?
-Un poco, tú sabes, papeleo y más papeleo. También hubieron algunos pedidos y contrate a tres chicos más, bueno dos niños y una chica.-recordó a los estudiantes urgidos y nerviosos ante la entrevista realizada.-más que eso, no nada, todo tranquilo.-afirmó escondiendo información crucial.
-Bueno, entonces ahora que te encuentro de buen animo me gustaría decirte algo.-dijo apoyándose en la mesa isla del lugar.
Rosé se giro dándole la cara y espero sus palabras.
-Voy a cambiar al niño de guardería, no quiero que vuelva ahí.-dejo caer sorprendiéndola.
-P-pero qué dices, ¿por qué lo quieres sacar? .-cuestionó sin entender.
-Te voy a responder con otra pregunta, ¿qué hacia hoy Park Jimin con nuestro hijo afuera de su escuela? .-dijo, a lo que Rosé se mordió él labio nerviosa y desvío la mirada intranquila.-dime la verdad, ¿te encontraste con él hoy? .-ante el silencio de la rubia dejo en claro que era verdad.
-No pasó nada. Regañe a Felix por eso, no fue mi intención llegar tarde por él, no calculé bien los tiempos por eso... .-suspiro levantando la cabeza sintiéndose de lo peor.-lo siento, no quería mentirte.
-Pero sí lo hiciste.-acepto de mala manera.-¿se propasó contigo? .-dijo desconfiado.
-No Chris, no sucedió nada. Yo le dejé bien claro que no se volviera a acercar al niño, o terminaría muy mal.-sonrió leve y a paso lento se acercó al peliazulado acariciándole la mejilla dulcemente.-cariño, Felix ya hizo amiguitos en clase. Lleva un mes en la guardería, no sería justo si lo cambiamos así tan bruscamente, además, si lo hacemos, le costará demasiado adaptarse nuevamente.-le decía tratando de que cambiara de opinión.
-Si hubiera sabido que el hijo de Park estaba en la misma guardería, ni loco lo hubiese inscrito ahí.-bufo molesto, mas, Rosé le hizo entender que aunque ellos intentaran alejarse del hombre siempre iban a frecuentarlo, ya que tanto ella como Jimin tenían el mismo grupo de amistad.
-Me quieres, ¿verdad? .-pregunto tomándola desprevenida.-digo, algún día hubiera una discusión entre nosotros y terminara nuestra relación, ¿tú volverías con él? .-cuestiono afligido.
Rosé desvío la mirada sintiéndose mal por sus palabras, y para sorpresa de ella misma, negó con pesar.
-Jimin es un hombre casado, tiene un hijo y una familia la cual cuidar. Yo no puedo llegar y romper ese circulo así tan fácil, además, yo también tengo mi familia, ¿por qué querría otra? .-soltó junto a una leve risa.
-Porque te conozco Ro, y sé que muy en el fondo de tu corazón él sigue latiendo cada vez que están juntos.-confeso alarmándola.-sigues enamorada de Jimin, ¿no es así?
La rubia trato de decirle que se equivocaba, pero el chico no se lo permitió dejando en claro que él sabia que nunca podría amarlo como alguna vez amo a Park Jimin.
-Vamos a llegar a un acuerdo.-comenzó a decir la fémina cerrando sus marrones ojos temblorosa.-después de que Jennie se case, nosotros volveremos a Australia y nos olvidaremos por completo de todo lo sucedido aquí.
-¿Y tu hermano, qué piensa de eso?
-Una vez ya me fui, dos veces no será nada del otro mundo. Estuvimos distanciados por mucho tiempo y aun así nos comunicábamos todos los días. Estaremos bien, lo sé.-aclaro acunando el rostro masculino entre sus manos.-por favor, no volvamos a hablar sobre este tema que a ninguno nos hace bien, ¿si? .-dijo, a lo que el chico asintió en silencio y le robo un beso haciéndola reír.
Bangchan la abrazo y ella se apoyo en el hombro del hombre pensativa ante la reciente y extraña actitud del chico.
Dejándose llevar por sus pensamientos, recuerdos junto a Jimin tanto los antiguos como los de las situaciones frescas del ultimo tiempo abordaron su cabeza, obligándola a retirarlos rápidamente con un movimiento de cabeza alejándose de Bang también.
-Voy a terminar la cena.-añadió acercándose a la estufa y darle la espalda incomoda.
¿Por qué es tan difícil olvidarme de ti?
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A la mañana siguiente ...
El ambiente de la cafetería extrañamente se sentía bien. El publico estaba cómodo y convivía amenamente con la clientela, como también los repartidores de pedidos.
Para ese entonces apenas eran las diez con quince y Rosé estaba taladrándose la cabeza con las prontas reuniones y más aun, siendo parte de la organización de la boda del señor y señora Min.
-Dios, no quiero más.-apoyo su frente contra el mesón descansándola por unos instantes, los cuales fueron interrumpidos cuando Hyeri atravesó la puerta junto a un gran ramo de rosas.-¿y eso? .-pregunto asombrada.
-Son para ti.-chillo entregándosela con una gran sonrisa.
-¿Para mi? .-pestañeo confusa olfateándolas, sintiendo mariposas en su estomago las cuales le hicieron sonreír maravillada.-hace mucho tiempo que no recibía flores.-decía al mismo tiempo en que tomaba la tarjetilla y leía lo escrito en ella.
-Ay, Chris es tan lindo, él realmente te ama Rosie.-dijo esperando una respuesta, la cual nunca llego, pues la sonrisa que anteriormente se asomaba en el bello rostro de la rubia se esfumo de un momento a otro.-Ro, ¿sucede algo malo?
-... no son de Chris, las envío Jimin.-declaro dejando la tarjeta a un lado y dejándose caer en la silla de escritorio.
-¿Qué?, no, esto debe ser una broma.-tomo el pedazo de papel y leyó en voz alta la escritura.-“Nuestra llama jamás se apagará, porque nuestro destino es ser uno. Eres y siempre serás la dueña de mi corazón, firma, J.M.”
La rubia oculto su rostro entre sus manos frustrada. Hyeri al verla en esa situación le propuso deshacerse del ramo, pero Rosé se negó diciendo que ella misma arreglaría este mal entendido.
Después de quedarse a solas marco aquel numero de contacto el cual dudó por casi dos minutos presionar.
Al otro lado de la línea una voz masculina respondió serenamente, el cual intercambio una que otra palabra con la emisora y corto rápidamente.
Al cabo de una hora más tarde, el mismo Park Jimin entraba a su oficina como en los viejos tiempos.
-¿Para qué me pediste que viniera? .-pregunto dudoso, aunque sabia a la perfección el motivo de su llamada.
Rosé se giro un segundo tomando las flores y sin decirle nada, hizo entrega de ellas firmemente.
-No quiero que esto se vuelva a repetir.-formulo fríamente.-dime, ¿qué tratabas de hacer enviándome rosas? Jimin te lo dije hace unos días, no quiero tener problemas con Bangchan, mucho menos que tengan que ver contigo.
-¿Por qué intentas excusarte y protegerte con él? confiesa de una vez, dile que aunque estés a su lado, jamás podrás sacarme de tu cabeza.
-Estás diciendo disparates.-bufo haciendo una mueca.-toma tus flores y vete, tú y yo no tenemos nada de que más hablar. Por favor sal, tengo que seguir trabajando.-señalo la puerta y al hombre no le quedo de otra que acatar ordenes.
Ni siquiera pasó medio segundo cuando Jimin regreso, lanzo el ramo al sofá cercano y le robo un apasionado beso sorprendiéndola.
La joven rubia lo alejo abofeteándolo en el momento, pero aun así el mayor volvió a devorarle la boca sin importarle que ella lo golpeaba intentando alejarlo.
Al cabo de un minuto, él mismo fue quien se distancio al quedarse sin aliento juntando sus frentes, sintiendo aquel sentimiento de profundo y sincero amor entre ellos.
-Jimin, tienes que irte, e-esto no es correcto.-negó agitada y con el corazón latiéndole a mil.-por favor, vete.-musito sintiendo sus ojos arder.-vete.-volvió a decir entre sollozos.
El castaño la abrazo fuertemente dejándola que llorara en su pecho el tiempo que quisiera.
Cuando estuvo más tranquila le acaricio el rostro dulcemente provocando que se dejara llevar por sus caricias, las cuales subieron de tono en el instante en que la recostó sobre el escritorio y prácticamente profano la boca femenina con sus candentes besos y lengua, no sin antes quitarse el anillo de matrimonio y guardarlo en el bolsillo del pantalón.
-Eres mía, mía Rosie.-dijo en cuanto besaba y mordisqueaba el fino cuello de la menor mientras se hacia camino entre la blusa y el escote de ella, queriendo aprovechar cada segundo a su lado.
Lamentablemente, cuando se dispuso a retirarle por completo la parte superior de la ropa, Hyeri volvió a entrar al cuarto ahogando un grito del pánico y más al ver semejante escena de ambos.
-Unnie ... .-musito Rosé con los cabellos levemente alborotados y solo en brasier a medio abrochar.-t-te lo puedo explicar.
-No necesito una explicación Roseanne, ya vi lo suficiente para saber que iba a suceder. Permiso.-dicho lo ultimo cerro la puerta con tanta fuerza que esta retumbo dejando un sonido horrible en el corredor.
-¿Tendrás muchos problemas después de esto? .-se atrevió a preguntar mientras abotonaba su camisa mirándola preocupado.
-... Jimin, tienes que alejarte de mi.-declaro haciendo puños sus manos.-esto no se puede volver a repetir, no quiero lastimar a nadie, mucho menos destruir una familia.
-¿Crees que pueda olvidar lo que acaba de suceder entre nosotros?
-No pasó nada, queda claro.-termino de decir, a lo que el mayor solo se digno a asentir y siguió los mismos pasos que la chica anterior sin despedirse de la rubia.
-Qué es lo que acabo de hacer dios mío.-mascullo afligida.
Me voy a volver loca
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Momo
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