Chapter 31:-

Me acosté con Seulgi

con Seulgi

Seulgi

Tuvo que estacionarse de emergencia, ya que sus lágrimas no la dejaban ver con claridad y más aun, recordar las palabras de Jimin.

Cuando quiso tomar su celular y llamar a Lisa para que la escuchara. En su bandeja de notificaciones apareció un mensaje de un número desconocido, obligándola a verlo.

Tan solo apretarlo, su corazón se hizo pedazos, al ver aquellas imágenes entre Seulgi y Jimin besándose completamente desnudos sobre la cama.

-C-cómo fuiste capaz Jimin, cómo pudiste haberme hecho esto.-musitó con la voz quebradiza.

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A la mañana siguiente ...

-Ya tienes que estar contenta, ¿no? .-atacó Taehyung al verla en la cocina preparando el desayuno.

-¿Qué? .-cuestiono dándole la cara.-¿perdón?, pero, ¿te levantaste con el pies izquierdo?

-Jimin y Rosé terminaron su relación.-dijo sorprendiéndola.-él le confesó todo anoche. Ahora, mi amigo está destrozado, y no creo que Rosé lo esté pasando mejor.

-Tae, lo siento, yo... yo no tenia esa intensión. Lo único que quería era que fuese sincero, hablaran y solucionaran sus problemas.-le decía con franqueza.

-Claro.-soltó con sumo sarcasmo.-colocándole la soga al cuello para que le dijese que durmió con Seulgi, por culpa de una borrachera. Esa no era la manera, noona.

-... Me extraña, porque Rosé no ha hablado conmigo, ni mucho menos con las chicas.

-Y cómo lo haría, sí debe estar pésimo con todo lo ocurrido.-la regañaba como si de una niña chiquita se tratara.-Jisoo, eres mi hermana y te quiero, pero lo que hiciste, no estuvo bien. No es bueno involucrase en temas de pareja, Chaeyoung será muy amiga tuya, pero ese no es motivo para obligar a una persona a confesar sus pecados.

-Tengo que ir y hablar con ella ahora.-declaro quitándose el mandil y yendo al recibidor.

-Noona, ¿qué esperas hacer?. Es un hecho, ellos no van a regresar.-dijo tratando de hacerla reaccionar.

-No. Talvez, todavía estamos a tiempo para que ambos vuelvan a estar juntos.

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Para cuando Jisoo llegó al piso de la rubia, chocó de frente con ella al encontrársela saliendo del departamento con ojeras y los ojos rojos.

-Rosie ... .-musito haciéndose notar.

-¿Eh? .-pronuncio confundida al verla tan temprano en el lugar.-unnie, ¿qué haces aquí? .-cuestiono sin entender.

-Es bueno haberte encontrado. Creí que ya estarías en la cafetería.-la menor negó en silencio.

-No, tranquila. Hoy abrimos más tarde.-declaro sonriente.

-Bueno, yo vine porque, necesito hablar contigo.

-Dime, ¿qué pasó? .-pregunto frunciendo levemente el ceño.

-Yo, ... me siento tan culpable. Me enteré que rompiste con Jimin.

-Entremos, no creo que sea un tema que todos deban enterarse.-la invito a entrar en cuanto vio como algunas de sus vecinas se asomaban para escuchar su conversación.

Una vez dentro del apartamento, Rosé le hizo entrega de una taza de té y ambas se sentaron cómodamente en el sofá.

-Unnie, hiciste lo correcto.-la pelinegra negaba sutilmente con la mirada baja.-si a ti, un novio te engañara, yo haría lo mismo. Y no solo yo, Jennie y Lisa también, hasta llegarían a molerlo a golpes sin pensarlo dos veces.-dijo en cuanto la mayor le confesó el trato de ella y Jimin.

-Sí, lo entiendo, pero yo no quería que esto sucediera.-le decía lastimada.

-Unnie, tú me conoces. Qué otra opción había, dime.

-No, ninguna.-señalo.-pero Jimin estaba hablando con Seulgi, y él le decía que había colocado algo en su bebida. Podría ser verdad, Rosie.

-Puede ser, pero aun así, eso no justificaría nada. Jimin fue a hablar con ella sobre una estafa, él no debió de haberse quedado ni mucho menos haberle aceptado beber.

-Sí, tienes razón.-le dio la palabra.-pero, me da pena verlos así, porque ustedes se aman y son una hermosa pareja. Y con lo bruja y resentida que es Seulgi, estoy segura que sí le coloco algo en el trago, ¿o me equivoco?

-Concuerdo contigo, y es lo más probable. Pero Jimin, no es ningún adolescente que va por primera vez a una discoteca y se embriaga.-decía con tono agrio.-desde el primer momento en que él acepto beber con Seulgi, es responsable de terminar encamado con ella.-soltó haciéndola comprender.-unnie, tú sabes que estoy perdidamente enamorada de él, pero ... no puedo perdonarlo tan rápido.

-A ver, ¿por qué lo dices tan certeramente, que no lo vas a perdonar?, si no lo has intentado aun. Si tú dices estar enamorada y lo amas, entonces debes de pelear por lo que quieres. Al final de todo, debes darte la oportunidad de escuchar bien su versión.

La rubia solo suspiro y desvío la mirada, sin saber que más decir.

-Entonces qué sucederá con Jimin, ¿terminaras la relación sin arreglar las cosas? .-volvió a decir trayéndola a la realidad.

-¿Qué otra opción tengo, unnie? .-musito desganada.

-Rosie, él fue un tonto, se equivocó. Pero tuvo coraje y te dijo la verdad.-declaro intentando que abriera los ojos.-cualquier otro hombre, se lo hubiera llevado a la tumba.

-Sí, lo sé. Pero, no puedo perdonar algo como eso.-negaba afligida.-no puedo. No está en mí esa capacidad.

-No puedes, o no crees poder. Decídete, yo creo que deberías intentarlo. Date una oportunidad de ser feliz, y no lo hagas por Jimin, si no, por ti.-suspiro tomándole las pequeñas manos con delicadeza.-Rosie, la pregunta es bien sencilla, ¿tú sigues enamorada de Jimin? sí o no.

-Ay unnie, más que nunca.

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Esa misma noche ...

Jimin se encontraba a solas en su departamento, ya que Jihyun había salido con sus compañeros de trabajo y llegaría tarde.

Para el castaño no era nada fácil estar en esa situación. Recordar a Rosé y todos sus momentos juntos eran cruciales para él, sobre todo, cuando ella no quería ni escucharlo.

Dejo una botella de cerveza sobre la mesa de centro, y en cuanto se iba a dejar caer en el sofá, el timbre del hogar sonó obligándolo a ir al recibidor.

Al abrir la puerta, se sorprendió al ver a Rosé frente a frente, la cual lo miraba neutral y con ganas de hablar.

-Roseanne.-pronuncio anonadado.-hola.

-Buenas noches.-saludo ella inquieta.

-Pasa por favor, adelante.-la invito a pasar completamente nervioso.

La rubia se adentro al departamento siendo seguida por el mayor, quien se detuvo en cuanto la fémina también lo hizo, para enfrentarlo.

-Jimin, yo lo estuve pensando demasiado, y ... tienes razón. Yo no puedo dar por terminada nuestra relación, no sin antes escucharte.-declaro dándole pie a que comenzara a dar su versión de los hechos.

-Rosie, yo te suplico que me des una oportunidad.-dijo acercándose lentamente a ella.-yo te amo.

-... Cuando estoy distanciada de ti, yo siento q-que puedo perdonarte, que es fácil y me dan unas inmensas ganas de correr a tus brazos. Pero ahora que estoy frente a ti, no puedo, no puedo, hay algo que me lo impide. No puedo hacerlo, Jimin.-negaba con dolor.

-Rosé, por favor, yo te amo. Estoy enamorado de ti.-le aseguro tomándole el rostro delicadamente.

-Yo también te amo Jimin, pero no puedo. No puedo con esto que siento.-le decía con los ojos cristalinos.

-Mi amor.-musito invitándola a tomar asiento junto a él.-sí yo pudiera retroceder el tiempo, y-yo lo haría. Lo haría, créeme. Yo nunca había conocido ni voy a conocer a una mujer como tú, eres lo mejor que me ha sucedido en la vida.-la rubia jadeo sin saber que responder y cubrió su rostro sintiéndose derrotada. Jimin intento abrazarla y consolarla, pero ella se hizo a un lado evitando su tacto.

-No Jimin.-murmuro negando.

-Perdóname, por favor Rosie, perdóname.-pidió juntando sus manos.

-Mi corazón quiere perdonarte, pero mi cabeza no me deja. No puedo, no puedo.

-Yo soy capaz de hacer cualquier cosa. Cualquier cosa, con tal de arreglar esto. No sé, si quieres que me aleje de ella, que no siga con su caso, lo hago.-dijo desesperado.-vámonos lejos, empecemos una vida lejos de todo el mal.-decía intentando mantener sus sentimientos controlados.

-Es que, no se trata de escapar Jimin. Yo nunca me voy a poder olvidar de lo que pasó entre tú y ella.-señalo cruzada de brazos.-yo me conozco, y sé que nunca me podre sacar eso de la cabeza.

-Pero, ... nosotros podemos salir adelante.-jadeo dando pasos hacia ella.-basta con que no nos propongamos. Nosotros nos amamos, Roseanne.-dejo caer al mismo tiempo en que acariciaba el delicado rostro femenino.-en los peores de los casos, nadie va ha poder decir que no lo intentamos.

Dicho lo ultimo, acerco su propio rostro al contrario y la besó dulcemente. Rosé tardó en corresponder, pero lentamente subió sus manos al cuello masculino y lo acercó más a ella transformando el beso a uno más romántico y pasional.

Cuando Jimin la abrazó y tomó de la nuca profundizándolo aun más, Rosé entreabrió sus ojos, rememorando todas las fotografías del castaño junto a Kang, obligándola a separarse lentamente, dejando un silencio entre ambos, a lo que el mayor la miro sin entender y ella le dio la espalda al mismo tiempo en que se limpiaba los labios.

-Chae, hagamos lo que te estoy proponiendo.-dijo junto a una sonrisa brillante.-vayámonos lejos, lejos de todo.

-Es que, por muy lejos que nos vayamos Jimin, esto no va a cambiar.-declaro dándole la cara.-eso que pasó, nos va a seguir a todas partes. Nosotros nunca más vamos a volver a tener lo que teníamos. Yo no me voy a poder olvidar de esto, y tú tampoco.

-Pero sí yo ni siquiera me acuerdo. Rosé, te estoy diciendo la verdad, no recuerdo cómo sucedió eso. No lo sé.

-Pero pasó.-soltó dejándolo sin habla.-no entiendo Jimin, yo ... yo te miro y siento que ya te perdone. Yo sé que tú me amas a mí como yo te amo a ti, pero esas fotografías ... tuyas con Seulgi en la cama.-negaba con los ojos acumulados de lagrimas.-no puedo. No me las puedo sacar de la cabeza.-volvió a decir con la voz quebradiza.-te juro que más que trato, no puedo liberarme de esas imágenes.

-Pero, ¿cómo tú sabes de esas fotos? .-inquirió sorprendido.

-Porque Seulgi se encargo de enviármelas a mi teléfono.-confeso mirándolo a los ojos.-yo estoy segura que ella hizo todo esto apropósito para separaros, ... y lo logro.

-Mi amor, ... pequeña, lo que tú necesitas es tiempo, y yo te lo puedo dar.-decía esperanzado.-yo te puedo esperar todo el tiempo que tú necesites, toda la vida de ser así. Tienes que entender y creer, que en mi corazón ni en mi cabeza, no hay un espacio para otra mujer que no seas tú.

-Yo no quiero condicionar tu vida, Jimin.

-Pero déjame decidir esto a mí. Mira, hace mucho tiempo yo decidí, que eras tú la mujer con la cual quiero pasar el resto de mi vida, y eso, no lo va a cambiar nada ni nadie.

-Yo tampoco me veo con otro hombre que no seas tú.-dijo sonriente. Jimin tomó sus pequeñas manos y beso estas mismas castamente.

-Dame una oportunidad. Por favor mi amor, por favor, solo una.-suplico totalmente arrepentido.

-Antes de eso, yo necesito sanarme primero. Si no, te voy a sacar en cara tu infidelidad, todo el tiempo. En la primera discusión que tengamos, ... no se puede vivir así.-le decía, a lo que Jimin solo la escucha atento y con amor genuino.-yo necesito averiguar si, alguna vez, voy a poder sentirme segura a tu lado.

-Yo te voy a demostrar que sí. Te lo juro, yo te lo voy a demostrar. Chae, yo te amo más que a nada en el mundo, no te olvides de eso. Nunca, ¿bien? .-ella asintió sonriente antes de marcharse y dejar un silencio en el hogar.

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Para cuando Rosé regreso al departamento, paso directo a su cuarto y se recostó en la cama rememorando lo sucedido con Jimin una hora atrás.

Tras suspirar, sacó su celular del bolsillo de su abrigo y comenzó a visualizar las fotos, en las cuales salían ambos sonrientes. Se detuvo en una especialmente, la cual la hizo sonreír aunque era más una mueca. Se trataba de aquellos días en donde habían ido a las cabañas y pese a que ella había decidido terminar con su relación, pero Rosé, ya estaba enamorada de él.

Por el lado de Jimin, se encontraba en las mismas circunstancias. Al pensarlo un poco, quiso llamarla, pero su móvil comenzó a vibrar avisándole que tenia una llamada entrante por parte de Taehyung.

Sin dudarlo, respondió la llamada y espero a que el contrario hablara primero.

-Hey Jimin-ah, ¿qué cuentas? .-cuestiono mientras se arreglaba el cabello.

-Nada, estoy en mi departamento.

-Entonces, ¿te parece si bebemos algo?, ¿Jimin? .-lo nombro al solo escuchar silencio.

-Bien, acepto.-asintió sin que el menor notara su bajones.-seria bueno hablar con un amigo.

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Así pasaron los días y hasta semanas, en donde el día menos pensado, Lisa entró en labor de parto en medio de un evento de marketing, donde ella era la presentadora.

Había sido una sorpresa para todos, sobre todo, para quienes estaban en horario de trabajo y Jungkook se encontraba en el extranjero cerrando un contrato con otra agencia. Él cual al enterarse de tal noticia, tomó el primer vuelo de regreso a Seúl y estar con la pelinegra.

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Hospital central de Seúl

Jungkook había atravesado la compuerta de cristal casi con el corazón en la mano y agitado. Cuando se acerco a la recepcionista para preguntar por la Tailandesa, pudo darse cuenta que sus amigos y Rosé se encontraban en la sala de espera, por lo que no dudó en acercarse a ellos y preguntar si sabían de su estado.

-Por ahora no nos han dicho nada.-comento Taehyung apoyado en la pared contigua.

-¡Demonios! ¡¿cómo no nos dicen nada?! .-gruño alterado.

-Hey, Jungkook, cálmate.-dijo Namjoon colocándole una de sus manos sobre el hombro del menor.-ella estará bien. Solo hay que esperar, ¿bien?

Taehyung frunció levemente el ceño al notar la extraña actitud de su amigo, el cual respiraba intranquilo y golpeaba continuamente su pie contra las baldosas del edificio completamente nervioso.

Por el lado de las chicas, Rosé llevaba ya hace un tiempo al teléfono siendo omisa a la mirada de Park, quien a toda costa intentaba acercársele, pero ella lo evadía con agilidad, ignorándolo por completo.

-¿A quién llamas tanto Rosie? .-pregunto Jennie curiosa.

-Pues a quien más, al padre del niño.-soltó con molestia, ocasionando que ambas Kim se miraran la una a la otra con miedo intenso.

-Espera. Siquiera sabes, ¿quién es el padre? .-dijo Jisoo esta vez saliendo del trance.-digo, Lisa nunca no nos dijo, por eso ...

-Unnie, eso es más que obvio, es Ten.-señalo sin mas.-Lili me dijo que durante el viaje a Tailandia había pasado algo entre ellos. Está más que claro, ¿no?

-Bueno, Rosie, no sé.-decía afligida.-y si, ¿lo hablamos con Lisa después? .-ideo con los nervios a flor de piel.-digo, quizás ella se sienta atropellada si hacemos esto a sus espaldas, ¿no te parece?

-No, no me parece.-negó de brazos cruzados.-yo creo que ella haría lo mismo por nosotras si estuviera en nuestro lugar. Jisoo unnie, ¿hay algo de qué yo no esté enterada?

La chica dio una mirada cómplice a Jennie, quien se mordió el labio sin saber que hacer o decir. Para ese entonces, cuando iba a decirle de sus sospechas, el móvil celular de la rubia sonó, obligándola a atender la llamada y alejarse lo suficiente de ambas Kim, quienes se miraron la una a la otra angustiantes.

-Dios, tengo miedo de su reacción.-musito Jennie casi devorándose las uñas de los nervios que tenia.-unnie, debemos decírselo. Rosé no se merecer una cosa así, ya ha sufrido demasiado con tantas mentiras.

-Lo sé, lo sé Jennie.-acepto culpable.-me siento responsable de todo esto porque, yo presentía que algo sucedía entre ellos dos, pero nunca llegué a pensar que seria hasta el día de hoy.

-Unnie, no te coloques la soga al cuello. No es tu culpa que Jungkook jugara con Rosé de ese modo, hasta a mí me cuesta creer que se burlara en su cara por tantos años.

-Sí sé, pero ... .-decidió callar la ver como la menor de ambas se acercaba a ellas al finalizar la llamada anterior.

-Bien, ya hablé con él. Dijo que nos reuniéramos en el café de la esquina, también me dijo algo que no logre entender, pero que me lo diría en cuanto estemos ahí.-termino de decir tomando su bolso junto a sus acompañantes.

Mientras ellas iban de camino al elevador, el grupo masculino no le quitaron la mirada de encima totalmente confundidos por su salida tan abrupta.

-Hyung, ¿tú sabes algo del por qué las chicas actúan tan sospechosamente? .-cuestiono Jungkook dirigiéndose a Jin, quien solo se encogió de hombros y bostezó por falta de sueño.

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Al llegar a la cafetería, Rosé fue la primera en abrir la puerta, haciendo que la campanilla de esta sonara y los clientes colocaran la mirada en las recién llegadas. Mas, ellas solo entraron para encontrarse con el susodicho de la llamada y hablar del bebé de Lisa.

-Bien, ya estamos aquí todos reunidos.-comenzó a decir él hombre tras darle un corto sorbo a la taza de té.-¿de qué querías hablar conmigo? .-cuestiono dirigiéndose a la rubia frente a él.

-Es sobre Lisa. Supongo que estás enterado que ella está embarazada y en estos momentos se encuentra dando a luz.-decía demandante.

-¿Y?, ¿qué tengo que ver yo con todo eso? .-soltó confundido.

-A ver, Ten, no te hagas él desentendido. No conmigo, sabes muy bien que ese bebé es tuyo.-dijo altanera, provocando que el chico se atragantara con la infusión y tosiera por falta de aire.

-¿P-perdón? .-respondió tratando de estabilizarse.-Rosé, es imposible que yo sea el padre de ese niño.

-Ah, ahora no te harás responsable. No lo puedo creer, realmente eres un patán de primera que solo se aprovechó de mi amiga.-decía decepcionada.

-No soy lo que tú dices y piensas.-se defendió frunciendo el ceño.-entre Lisa y yo hace mucho tiempo que no sucede nada. Desde que nosotros terminamos nuestra relación en la universidad, nunca más crucé palabras con ella.

-¿Q-qué? Pero, Lili dijo que entre ustedes había sucedido algo en Tailandia, y ...

-No es verdad.-negó casi perdiendo la cordura.-sí, nos encontramos en él bar del hotel cuando viaje a mi país. Pero ella no estaba sola, si no, con Jeon.

-¿Jeon? .-él asintió sintiendo las liradas de las restantes sobre si.-perdón, pero, ¿estás hablando ese Jeon Jungkook?

-Sí, es el único Jeon que conozco.-declaro sintiéndose de lo peor.-lo siento, pero esa noche ambos se veían muy acaramelados, hasta llegue a pensar que estaban en una relación.-la rubia negó aturdida junto a una sonrisa, la cual era en realidad una mueca lastimosa.

-No, no puede ser.-murmuro sin creérselo.

-Los vi entrar a la misma habitación, Chaeyoung. Supongo que con eso entiendes lo que sucedió después.-termino de decir completamente afectado por verla de esa manera.

-Roseanne ... .-susurró Jisoo al verla así.

Quiso darle apoyo tomándole la mano, pero Park se retiró del lugar corriendo siendo seguida por la mayor y escasos momentos después por Jennie, quien agradeció por el tiempo requerido y siguió los mismos pasos que las féminas anteriores.

Para cuando pudo divisar a Jisoo, esta estaba a una distancia necesaria de la menor, quien a simple vista se veía afectada y con los ojos llenos de lágrimas.

Poco a poco fueron acercándose a ella, pero tan solo nombrarla, la chica se quebró ahí mismo, mientras intentaba ocultar sus quejidos pero le era imposible. Su llanto era lo único que se escuchaba a la redonda.

-Llora Rosie, sólo llora. Te hará bien.-dijo Jennie consolándola.

Al pasar casi media hora y estando más calmada, miró a cada una siendo recibida por una mirada culpable y cristalina.

-Ro-...

-No, no tienes que decirme nada.-se negó al escucharla.-veo que era la única que no lo creía.-soltó con voz apagada.-c-cómo, ¿c-cómo pudieron hacerme esto?

-Lisa siempre estuvo enamorada de Jungkook, fue por esa razón que ella terminó su relación con Ten. No fue porque él le fue infiel o por otro motivo, si no, porque en su corazón ya había otro hombre.-declaro Jisoo con voz suave.

-Y-yo lo siento Chae, debimos habértelo dicho antes, pero creímos que no nos creías si te lo decíamos tan fríamente.-se justificó.-tampoco sabíamos que ellos seguirían siendo tan descarados y no afrontarlo, pero... Siempre se estuvieron escondiendo y, no era la primera vez que lo hacen.

-¿Qué quieres decir con eso? .-cuestiono dirigiéndose a la anterior.

-Ay Ro, esto va a ser difícil digerir.-inhaló con fuerza y la miró directamente a los achocolatados cristalinos de su menor.-ellos están juntos desde él baile de primavera. Los vi besándose esa boche en la biblioteca, estaban escondidos en los últimos estantes a oscuras y tardaron más del tiempo suficiente para salir de ahí.

-Dios mío.-chillo cubriendo su boca para reprimir un fuerte sollozo.

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Unas horas después, el trio volvió al hospital solo para enterarse que durante su tiempo afuera, el bebé ya llegado al mundo y estaba en la habitación de recién nacidos junto a otros niños.

Aunque Rosé se negaba a ir, fue empujada por sus amistades para conocer al fin a aquella criaturita, que había luchado por salir y casi romper los tímpanos de los médicos ante sus fuertes gritos.

Una vez llegaron al corredor, todo el grupo se asombró al verlo, pues era la viva imagen de Jungkook.

Por el lado de Rosé, solo pudo desviar la mirada y morderse el labio para evitar colocarse a llorar ahí mismo. Eso no pasó por percibido para Jimin, quien la tomó de la mano y se la llevó a rastras hasta llegar a las escaleras de emergencia y dejarla que soltara todo lo que sentía.

Estando en ese lugar, la rubia lloró en su pecho mientras este la tenía entre sus brazos y la consolaba acariciándole los largos y dorados cabellos con sutileza, y le decía que todo iba a estar bien.

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Días después ...

Era sábado por la tarde, y Rosé había decidido no ir a trabajar, por lo que estaba en casa intentando distraerse, después de haber discutido con Jungkook esa misma noche, nada más este mismo le confesó de su amorío por años con Lisa y que ese niño era su hijo.

No habían pasado más de quince minutos, cuando el timbre retumbó en la sala, obligándola a salir de la cocina e ir a abrir.

Al hacerlo, le cerró rápidamente la puerta en la cara, provocando que la chica de afuera comenzara a ser insistente llamándola por su nombre y tocar constantemente el molesto timbre.

-Roseanne, por favor, hablemos.-pedía golpeando la puerta en señal de suplicio.-necesito que me escuches. Por favor, Rosie, sé que cometí un error, pero... Hablemos.-decía desde el corredor.

-Vete, regresa por donde has venido.-dijo agriamente.-¡vete Lisa! .-gruñó dolida.

-¡Rosé, por favor! .-pronuncio apoyada sobre la madera.-por nuestros años de amistad.

-¿Años de amistad? .-soltó con gracia al encararla.-¿me estás hablando de amistad, Lalisa Manoban? .-carcajeó siendo seguida de la menor quien se mantuvo en total silencio en cuanto pasaron a la sala.-cuándo ha habido una amistad entre nosotras, si yo nunca he sido tu amiga.

-Ro-...

-Lisa, se burlaron en mi cara.-declaro resentida.-me señalaron de la peor manera solo por enamorarme de otro hombre y ser sincera con mis sentimientos. Y ustedes,... todo lo que me decían eran mentiras. Eres de lo peor.-bufo negando.

-No, no, no. Las cosas no fueron así,... Mira, déjame explicarte, ¿sí? .-tomó asiento frente a ella e inhaló tratando de no llorar.-sí, te he ocultado cosas, pero, eso no me hace mala persona. Yo también tengo mi corazón y sentimientos, y duele.-Rosé movió su cabeza asintiendo, pese a que sus palabras eran vagas para ella.-yo me quiero disculpar sinceramente contigo, pedirte perdón.

-¿Perdón? .-se río sin gracia.

-Te quiero pedir perdón por todo lo que te he hecho sufrir. Realmente lo siento, pero nunca llegue a pensar que algo así pasaría.

-¿No?, entonces qué. ¿Jungkook te amenazó con un arma para que fueras corriendo a sus brazos? .-cuestiono duramente.-dime, ¿fue así?. Ah, y la cereza del pastel, vuestro hijo.-hablo severamente.-mentirme en la cara, Lisa. ¿Fue necesario todo esto?

-N-no sabía ... .-musito con un nudo en la garganta.-nunca planeamos esto, Roseanne. De hecho, al principio no nos lo queríamos quedar, para no hacerte sufrir pero, con el tiempo ...

-No, no lo hiciste por mí.-negó rápidamente.-si no, por ti misma. ¿Y sabes por qué?

-¿P-por qué? .-susurro con los ojos cristalinos.

-Porque si Jungkook y yo nos hubiéramos casado y tenido hijos, tú ya no estarías en la fotografía.-afirmo cruzada de brazos.-eres una traidora Lisa.

-No, no lo soy.-negaba totalmente afectada.

-Ah, entonces no es traición. Pues dime, ¿me podrías explicar qué mierda es?

-... es una mujer, que se enamora del novio de su mejor amiga. ¿Eso es tan difícil de entender? .-señalo sin mirarla.

-Oh, te tengo que entender.-dijo con sumo sarcasmo.-tengo que entender, que mi novio y mi mejor amiga mantuvieron una relación amorosa a lo largo de años y durante ese tiempo, tuvieron un hijo juntos. ¿Eso debo comprender?

-Es que, no fue así.-soltó afligida.-Ro, durante todo este tiempo tuve que guardar todos mis sentimientos en una caja, porque, desde el momento en que conocimos a Jungkook, yo me enamore de él.-confeso sorprendiéndola.-sé que sonara absurdo pero, fue amor a primera vista. Pero, tuve que guardar silencio todos estos años y mirar como estúpida, como el hombre de mis sueños salía con mi mejor amiga, le pedía noviazgo a mi mejor amiga, cuando se fueron a vivir juntos y peor aun, cuando Jungkook te pidió matrimonio.-le decía con lagrimas en su rostro.-y de repente, un día se fijo en mí y me miró con amor verdadero. Al principio quisimos detener esto, pero ya era demasiado tarde, ambos nos queríamos y eso quedo más que claro cuando viajamos juntos a Tailandia y quedé embarazada. Pero tuve que mentir, no le pude decir a nadie de mi embarazo, tuve que asistir a los controles sola, ¿por qué?, porque el padre de mi hijo se iba a casar con mi mejor amiga y no quise joderle la vida. Eso, es sacrificio.

-Pobre. Pobre de ti, ahora resulta que eres una mártir.-rezongo irónica.

-No.

-¿Qué debo hacer entonces? ¿tengo que agradecerte por ese sacrificio?

-No, quiero tu comprensión.-dijo con la voz quebradiza.-que me entiendas, porque, al final de cuentas, nos enamoramos del mismo hombre, y cómo no, si es un hombre maravilloso.

-Eso no me interesa. Tampoco quiero comprenderte, y si para ti Jungkook es tan importante, ¿por qué no lo guardas en una cajita y te lo llevas muy lejos de mí?, porque yo no lo quiero volver a ver ni saber de él, nunca más.

-Porque, él todavía tiene sentimientos por ti Rosie.-declaro mirándola a los ojos.-quizás no sea sincero conmigo, pero se le nota cuando te nombra. Dice tu nombre con tanto cariño y dulzura, que algunas veces me hace dudar de todas las promesas que me hizo.

-... Eso no es verdad.-negó sensatamente.-porque si fuera así, como tú dices, no se hubiera ido a encamar contigo la misma noche en que estuvo conmigo por primera vez.-la pelinegra se mordió el labio al saber lo sucedido durante la fiesta del baile de primavera.-Lisa, yo confiaba en ti, ¿cómo pudiste traicionarme de esa manera?

-Yo nunca quise hacerlo Ro, te lo prometo. Pero, lo que pasó, pasó.-dijo sin mas.

-Cinco años Lalisa, cinco años y no te tomaste un segundo en decírmelo.-dijo con furor.

-Perdóname. Perdóname Rosie.-lloriqueo casi sin aliento.-l-lo siento, de verdad.

-Sabes una cosa, yo te consideraba una hermana, pero ahora, ya no quiero ni verte la cara.-pronuncio agriamente.-vete, y no regreses. Si aun te queda un poquito de dignidad, desaparece de mi vida, para mí ya no existes.

La chica asintió reteniendo las lagrimas, y sin mas, salió en completo silencio del apartamento sintiendo el portazo dado por Rosé a su espalada.

-Lo siento, Rosie.-declaro mirando con tristeza y lástima la vivienda de Park.

Perdón

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Momo 🍑💕