Chapter 18:-

Algunos días después ...

Rosé dejo el papeleo a un lado en cuanto una de sus empleadas toco a la puerta e ingreso a la oficina.

-Jefa, Park Jimin está aquí y quiere verla, ¿lo hago pasar? .-pregunto la chica esperando una respuesta, y tras suspirar pesadamente, afirmo moviendo su cabeza.

Cuando Jimin entro, esperaron a que les trajeran café y algunos bocadillos para comenzar a hablar. Tenían mucho de que discutir, sobre todo, de un tema en común entre ellos, Kim Taehyung.

-Es un lindo lugar, veo que tienen mucha clientela.-comenzó a decir el hombre rompiendo el silencio muerto.

-No hay necesidad de alagar, sé ha que viniste.-el castaño asintió desviando la mirada.-ahora entiendes que lo que paso entre nosotros, no tiene ni pies ni cabeza. Me sentí tan avergonzada y estúpida al querer negarlo, pero, simplemente él tenia muchas cosas para atacarme.

-Lo siento, debí de habértelo contado antes, pero, temía que si te veía una vez más ...

-Por favor, no sigas.-dijo incorporándose del sofá individual dándole la espalda.-no quiero escucharte. Jimin, tenemos que alejarnos, tú y yo no podemos seguir así.

-¿Así, cómo? .-cuestiono colocándose a su espalda. Rosé se giro quedando de frente y lo miro fijamente, en sus ojos se podía notar a simple vista que le afectaba.

-Jungkook es mi prometido, pronto me casaré con él y no puedo seguir haciéndole esto. Mucho menos contigo, para él tu eres su hermano ...

-Y, ¿qué soy yo para ti? .-pregunto esperando a que fuese sincera consigo misma.-Rosé ... .-pidió acariciándole la mejilla con dulzura.

Ella se dejo llevar, y como respuesta, se lanzo a los brazos del mayor y en un movimiento rápido se apropio de la boca masculina besándolo con vehemencia.

Jimin rodeo la menuda cintura entre sus fuertes brazos y sin dejar de besarse, la guio hasta el sofá recostándola con él encima sin aplastarla. Se separaron escasamente para recuperar el aliento, mirándose con profundo amor.

Rosé acaricio el pectoral sobre las ropas y comenzó a desabotonar la camisa dejando ver la piel bajo la tela negra. Jimin le robo un largo beso, dejando en claro que iba por más, y ella, no se le negó ante lo que pronto sucedería.

Al cabo de unos minutos después, ambos se entregaban sin pudor alguno escondiendo sus gemidos entre besos hambrientos, caricias y gruñidos los cuales quedaban olvidados en las paredes color blancas de aquella oficina.

-¿Qué piensas? .-pregunto mientras acariciaba los dorados cabellos de la fémina sobre él.

-Que fue una locura.-sonrío apoyando su frente en el hombro del Park.-Jimin, deberías irte, ya es tarde y pueden sospechar.-le dio un casto beso y se bajo del regazo comenzando a vestirse ante la penetrante mirada masculina.

-¿Volveremos ha estar juntos? .-pregunto esperanzado.

-Solo fue un desliz, no quiero correr el riesgo otra vez.-termino de decir, dejando un silencio entre ellos.

Cuando lo iba a encarar, Jimin la besó con pasión tomándola con firmeza de la nuca.

Rosé se alejo en cuanto le propino una sonora bofetada molesta y con la respiración agitada.

-Te dije que no, ¿acaso no entiendes mi punto?

-Si no sintieras nada por mi, no corresponderías a mis besos, ni mucho accederías a hacer el amor conmigo.-le decía mirándola con acusaciones.-deja de esconderte bajo un antifaz, porque aunque no quieras reconocerlo, tu boca puede decir muchas cosas, pero tu cuerpo, dice lo contrario en cuanto estamos juntos y te acaricio.

-No es verdad.-se negó a creerle.-solo vete y olvídate de mi, y de lo que sucedió aquí.

-Y, ¿tú crees que lo olvidare, solo porque tu lo dices? .-cuestiono neutral.-algunas veces creo que eres una persona sin sentimiento y que solo piensa en su bienestar, y no los demás, y ahora que lo veo, puedo decir que es verdad.-pronuncio lastimándola.-bien, hare lo que me pides. Tú y yo nunca estuvimos juntos, y ni siquiera cruzamos palabra.-dictamino yendo en dirección a la puerta.-espero que puedas al fin cumplir tu sueño de casarte con Jungkook, y seas feliz como siempre quisiste. Adiós, Park.-finalizo dándole un fuerte portazo a la puerta haciendo que Rosé diera un salto ante la acción.

Chaeyoung se dejo caer en su silla de escritorio cubriendo su rostro entre sus manos y ahogo un sonoro sollozo, mientras lagrimas se deslizaban por sus abultadas mejillas.

Lo siento

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Una semana más tarde ...

Ese día era especial para los dos, ya que estaban tomando algunos detalles de su boda junto a la planificadora. Ella le indicaba los arreglos que se iban haciendo día a día, lo que faltaba o preguntaba a los novios si querían hacer un cambio en alguno punto de la lista.

-Rosé-ssi, entonces me confirma que la decoración serán tulipanes rojos y blancos.-menciono la mujer con agenda en mano.

-Jungkook, ¿querías tulipanes? .-se dirigió a Jeon confundida, ya que ella había dicho en diversas ocasiones que la decoración serian rosas de jardín y enredaderas.

-Lo siento, debí de haber escuchado mal.-dijo culpable.-pero, aun así, el rojo y blanco predominara en el salón, ¿no es así? .-pregunto, colocando su mirar en la planificadora.

-Sí señor, también, debo decirles que cuando ustedes entren, se encontraran con un camino de velas y pétalos marcado, para que lleguen al palco y puedan compartir con los invitados.

La pareja asintió ante las palabras de la mujer, y cuando ella iba a seguir con los últimos puntos de la planificación, la melodía del celular de Jungkook sonó en el salón interrumpiendo el momento.

-Lo siento, debo atender esta llamada.-pronuncio al leer el remitente.-es de la oficina. Volveré pronto, tú sigue hablando con la señora y después lo discutimos.-termino de decir saliendo del cuarto.

Rosé parpadeo confundida y luego tomo asiento frente a la adulta, quien le señalaba los diversos colgadores florales que podrían adornar con las luces elegidas anteriormente. Pesé a que ella estaba mirando las imágenes, su subconsciente viajaba a lo sucedido con Jimin en la oficina, de como sus besos y cuerpos se acoplaban al otro, entregándose sin miedo a ser descubiertos.

Inconscientemente llevo las yemas de sus dedos hasta sus labios, rememorando los dulces y pasionales besos que el castaño le regalaba entre cada movimiento.

-Rosé-ssi, ¿me está escuchando? ¿se siente bien?, está un poco ... sonrosada.-señalo sus mejillas color Ruby.

-N-no, perdóneme, pero, tendré que venir otro día.-se despidió, dejando perpleja a la mujer e imito a Jungkook retirándose del gran salón.

Mientras corría hacia la salida, solo una cosa invadía su cabeza, y tenia nombre y apellido.

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Llego al edificio con la respiración agitada, y sin pensarlo ingreso al lugar pidiendo el piso en donde se encontraba él. Una vez paso por los cubículos y oficinas de diferentes departamentos, finalmente encontró el de Park Jimin, abogado civil.

Golpeo la puerta de cristal templado, y espero a que esta fuera abierta. Cuando ambos estuvieron frente a frente, no lo pensó y se lanzo a sus brazos besándolo en el acto, Jimin la recibió confundido, pero aun así, lo siguió invitándola a su oficina y cerro la puerta con seguro.

Lo que sucedió entre ellos, quedo en aquellas paredes y en sus memorias.

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Con Jungkook ...

-Lisa... .-dijo sonriente.

-Lo siento, no quería interrumpir.-pronuncio dulcemente.-te llamaba para saber si, no sé, ¿te gustaría salir a tomar un poco de aire y hablar?

-Lis, me encantaría, pero ... .-musito a través de la linea.-en estos momentos no puedo, estoy con Rosé y la planificadora, y ... lo siento.-murmuro dejando un silencio entre ellos.

-Oh, y-yo entiendo.-asintió después del incomodo momento.-bueno, será en otra ocasión. Nos vemos, adiós Kookie.-corto la llamada antes de que la escuchara llorar.

-Lisa, espera yo ... .-trato de detenerla, pero ella ya había cortado la comunicación.-¡demonios! .-maldijo entre dientes golpeando la pared contigua. Para su sorpresa, al volverse, se encontró con la planificadora de bodas en el corredor, pero ella estaba sola.

-Perdón, pero, y, ¿Rosé, donde está? ¿acaso fue a los servicios? .-pregunto, a lo que la mujer negó.

-Señor Jeon, su prometida acaba de irse dejándome con la palabra en la boca.-decía indignada.-debo decirle que en mis diez años de experiencia, nunca me habían hecho esto, y ella como una mujer que pronto dirá el sí, acepto; se escabullo en la primera oportunidad que tuvo.

-Me disculpo por ella, quizás debieron ser los nervios o ...

-No, no fue eso, y si yo fuera usted, la vigilaría mejor.

-¿A qué se refiere? .-quiso saber colocándose a la defensiva.

-Ella estaba pensando en un hombre, y por su actitud, claramente, no se trataba de usted.

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Jimin inhalo profundamente mientras tenia rodeada la cintura de la rubia entre sus brazos, en cuanto soltó el aire de sus pulmones, una sonrisa boba se adueño de su cara llamando la atención de la fémina a su lado.

-¿Qué sucede? .-pronuncio mirándolo con interés.

-Es que, me cuesta creer que hallas corrido tantas cuadras para llegar aquí.-dijo conservando aquella sonrisa, contagiándola.

-Te puedo contar un secreto.-musito abrazándole el estomago.-estuve pensando todo el día en ti. Desde que desperté por la mañana, hasta ahora, y aunque me duela reconocerlo, mientras planificaba la boda, tú también invadías mi cabeza.

-Hey, no llores.-le dijo al sentir humedad en su piel.-sé que esto no debería suceder, y es algo que no podemos controlar, sabiendo que ...

-Te quiero.-confeso, dejándolo sin palabras.-te quiero Jimin-ah, sinceramente.

-Pero ... -soltó, aun conociendo la respuesta.

-Me tengo que casar con Jungkook.-dijo incorporándose y cubriendo su desnudes con la manta del sofá.-debo olvidarte Jimin, ya no nos volveremos a ver, prométemelo.

-No me pidas eso, sabes que no podre hacerlo.-se negó imitándola.-Rosé, te amo.-le dijo tomándole ambas manos para besarlas.-eres la única para mí.

-No Jimin, no digas más.-pidió dándole la espalda.-no lo hagas más difícil.

-Entonces que, ¿esta será la ultima vez que pueda hacerte mía? .-cuestiono al verla colocarse la ropa femenina.-Ro, ¿acaso, fue nuestra despedida? .-dijo una vez más, esperando una respuesta, la cual nunca llego.

Cuando ella trato de irse, la tomo del antebrazo volviéndola obligándola a mirarlo, encontrándose con que sus mejillas estaban bañadas de lagrimas.

-S-sí Jimin,... .-asintió deshaciéndose del agarre.-es nuestro adiós.

El silencio los envolvió, y ante ello, la rubia tomo la decisión de marcharse, pero, al dar escasos cinco pasos, Jimin nuevamente la posesiono frente a él y se adueño de sus labios, besándola de una manera tan cálida, dulce y romántica, que la joven de dorados cabellos le correspondió colocando ambas manos en el torso fornido del mayor.

Ella fue la primera en separarse cubriendo su rostro mientras daba pasos atrás. Jimin quiso abrazarla, estrechándola entre sus brazos y fundirse con ella, pero no era el momento, mucho menos cuando otra persona ingreso a la oficina abruptamente.

El mayor del trio inspeccionó detalladamente la habitación, y en segundos coloco la mirada en ambos Park, notando a simple vista lo que sucedía.

-Rosé, ¿qué haces aquí? .-pregunto Jin, fingiendo que nada pasaba.

-N-nada.-negó, dándole una mirada rápida al abogado.-y-yo, yo ya me iba, permiso.-se despidió de los hombres y se perdió entre los cubículos de los trabajadores del bufete.

En cuanto se quedaron solos, Jimin fingió que tenia una reunión urgente, pero al sentir la mano del mayor sobre su hombro obligándolo a detener el paso, supo que su vida corría peligro.

-¿Que hacia Rosé aquí? .-cuestiono mirándolo fijamente.

-Vino a hablar conmigo, nada más.-respondió, intentando escabullirse del interrogatorio.

-Jimin.-suspiro guiándolo al sofá individual de la oficina.-vamos a hablar seriamente, de hombre a hombre, y quiero la verdad.

-¿De qué verdad me estás hablando? .-sonrío con nerviosismo.

-Ambos sabemos perfectamente lo que sucedió aquí hace un rato, porque tienes marcas recientes en tu cuello y labial en la comisura de tu boca.-el castaño bajo la mirada siéndose lo más asqueroso del planeta.-no fue difícil darme cuenta de su romance, las miradas que se daban y como actuaban cuando se encontraban juntos daba mucho que pensar.

-Debes estar odiándome en estos momentos, ¿no es así? .-mascullo haciendo puños sus manos.

-Eres hombre, tu noviazgo con Seulgi iba mal y es claro que te fijarías en otra mujer, pero nunca creí que fuera la prometida de tu mejor amigo. ¿Sabes lo que Jungkook te hará en cuanto se entere de vuestra traición? .-el Park asintió ante su pregunta.

-¿Desde cuándo lo sospechabas? .-quiso saber.

-Desde la propuesta de matrimonio.-reconoció sorprendiéndolo.-Yoongi dijo que tenías una amante, vi como se miraron en la terraza y como me pedias a gritos que me fuera para irte a estar con Roseanne, ya que ella se había ido tiempo antes.

-Bueno, debes estar tranquilo.-suspiro cabizbajo.-ya que, esta fue la ultima vez que estoy con ella. Rosé eligió a Jungkook, y yo no puedo hacer nada contra ello.

-¿Estás enamorado de ella? .-pregunto al verlo con los ojos cristalinos.-se sincero conmigo, no me ocultes nada.

-La amo como un loco, y la quiero tanto, que daría mi vida por ella.

-¿Qué harás entonces? dudo que puedas verla en brazos de otro, ¿no es así?

-Volveré a Busan, volveré de donde nunca debí de haber salido.-soltó, sintiéndose débil.-si ella es feliz, yo también lo seré.

Porque la amo

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Momo 🍑💕