Chapter 42:-

Días más tarde ...

Era un miércoles por la mañana, apenas mitad de semana y Jimin despertaba con una maldita resaca que lo traía muerto. Pero eso no le importo mucho, ya que tenia que asistir a una cita importante con Rosé, después de que ella misma durante la noche anterior le envira un mensaje pidiéndole juntarse.

Con una sonrisa brillante releyó lo escrito, y no supo el porque, pero se sentía ansioso de volver a verla.

Rosie

Tenemos que hablar. Nos vemos mañana a las 10:30, en la cafeteria Greem Café.

-Solo quiero llegar y escaparme contigo, bonita.

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Mientras tanto en casa de Rosé y Bangchan ...

Ambos desayunaban tranquilamente y en silencio, puesto que Felix ya se había ido al jardín y los adultos tenían reuniones programadas para el mediodía.

La fémina dejo de comer mirando al cabecilla tras tragar su ultimo bocado.

-Yo, quería decirte que me voy a juntar con Jimin, en el Greem Café.-dijo sorprendiéndolo, aunque no lo hizo notar.-creo que hay que terminar esto como corresponde.

-Muy bien, lo entiendo, pero no necesito saberlo.-dejo caer neutral.

-Pero yo necesito decirlo, porque quiero que vuelvas a confiar en mí. Porque no te quiero perderte.

-¿Eso es lo que realmente quieres? .-cuestiono sin perder su tono apagado.

-Sí, estoy dispuesta a hacerlo. No quiero que por una estupidez que cometí, nos distanciemos.-pronuncio con suavidad al mismo tiempo en que apoyaba su zurda contra la mano masculina.-también, lo estuve pensando y, ... creo que regresar aquí fue un terrible error.

-¿Qué quieres decir con eso? .-comento frunciendo el ceño al no comprender.

-Quiero regresar a Australia, los tres juntos, y que formemos una familia lejos de los problemas y desvíos de mi parte.

-Rosé, piénsalo bien, tu hermano y amigas están aquí.-decía tratando de que no hiciera una locura.-no te equivoques, después no habrá vuelta atrás.

-Lo sé, y estoy segura de mi decisión.-termino de decir con firmeza.

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Rosé ya había llegado a aquella cafetería y el reloj marcaba cerca de las once de la mañana, colocándola nerviosa y ansiosa a la vez.

Por un segundo desvío la mirada a la avenida, intentando encontrar al abogado, pero este simplemente no aparecía. Se quiso distraer con el menú del local pidiendo por él, pero el sonido de la campanilla la coloco atenta, encontrándose con el castaño conectando sus ojos.

El mayor se acerco a ella besándole la mejilla sutilmente en forma de saludo, pero frunció el ceño levemente, al notar que la rubia se había quitado rápidamente del contacto extrañándolo.

-Perdón por la tardanza. Salió una reunión de ultimo minuto y no pude negarme, ¿cómo estás? .-pregunto él primero al ver que no decía nada.

-Más o menos.-declaro manteniendo la mirada sobre la mesa evitándolo por completo.-esto no ha sido fácil.

-Esto, ¿qué? .-se atrevió a decir sin entender.

-A ver.-comenzó a decir dándole una mirada rápida.-te pedí que vinieras, porque he tomado una decisión. Y, lo que hemos vivido estos últimos días, la verdad es que ha sido hermoso, muy lindo, ha sido ... .-se quedo en silencio tras no saber que más decir.-ni siquiera encuentro las palabras correctas para describirlo, pero también he tenido que elegir, y ... voy a elegir a mi familia. Así que te voy a pedir que, no nos veamos más.

-... Ro, yo sé que esta situación es muy complicada para ti pero, ¿estás segura de qué esto es lo que quieres?, no vernos más.

-Sí, es lo que quiero.

-Nunca te he pedido nada.-formulo con gracia menor.-mírame.-ella no lo hizo.-Chaeng, por favor, mírame.

-¿Qué? .-musito costándole hacer aquel movimiento.

-Rosie, te conozco, no quieres terminar con esto.-decía entre risas nerviosas.

-Te equivocas, sí quiero.

-No te creo.-negó aun mirándola con la esperanza de que cambiara su lejana actitud.-Ro, todas estas veces que hemos estado juntos, he visto lo feliz que eres conmigo y yo contigo.

-Sí, claro, ha sido muy lindo.-le dio la palabra.-pero, una cosa es pasar un buen rato, y otra muy distinta, es compartir una vida juntos.

-Pasar un buen rato.-repitió haciendo una mueca.-¿eso ha sido para ti todo esto? .-la rubia solo se mantuvo en silencio.-Ro, sé que toda esta situación te conflictúa y no quieres hacerle daño a nadie, cosa que me parece bien, pero no sé si te quieres tomar un tiempo para pensarlo ...

-No quiero pensarlo ni tomarme un tiempo.-dijo rápido.-ha sido muy lindo revivir este amor clandestino y pasional que tuvimos en el pasado, pero soy inteligente y me doy cuenta que esto es un recuerdo, que es un juego, una fantasía y ... no soy una quinceañera, soy una mujer adulta que toma decisiones, y decido recuperar a mi familia. Así que te voy a pedir de verdad, que no nos sigamos viendo más.

Jimin río socaron, provocando en ella una molestia notoria.

-Lo siento, pero, simplemente no puedo creerte. Eres pésima mintiendo.-negó conservando aquella sonrisa.

La rubia no dijo más, simplemente le dio una ultima mirada y tomó su bolso retirándose del lugar dejándolo ahí con dudas presentes, queriendo seguirla, pero sabia que debía darle su tiempo y espacio para pensar.

Pesé a que la vio y tenia oportunidad de tornarla del brazo y escaparse con ella, Rosé se le perdió de vista en cuanto salió del local corriendo, sin pensar que a unas dos cuadras de la cafetería, Bangchan se encontraba estacionado monitoreando cada movimiento que hacían y ella daba, creyendo que podría regresar con el castaño.

-Bien hecho, Roseanne.

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Lisa solo miraba en silencio a la chica, quien mantenía la cabeza gacha sin decir más después de contarle lo sucedido con Jimin durante la mañana.

-Ros, ¿estás segura que esto es lo que quieres? ¿dejar de ver a Jimin? .-interrogo con suavidad.

-Creo que es lo mejor para todos.

-Ay Ro.-suspiro rodando los ojos.-no te estoy preguntando si es lo mejor para todos. Te estoy preguntando sí es lo que realmente quieres.

-Mira, yo ya tomé una decisión. Y, no lo quiero pensar mucho más porque me voy a volver loca.

-A ver, tanto tú y yo sabemos que Jimin no fue una simple calentura, ¿me equivoco? .-volvió a decir alzando una ceja cuestionable.-y también sabemos, que eras inmensamente feliz cuando estabas con él, ¿no? .-Park solo se encogió de hombros sin responder.-Ro, yo sé que adoras a Chris, pero una cosa es admirarlo, respetarlo, quererlo, y otra cosa muy distinta; es estar enamorada. Dime, ¿estás enamorada de Bangchan? .-pregunto, solo recibiendo un suspiro como respuesta.

- ... ¿Sí?, no sé, no sé.-dudo.-pero lo que sí sé, es que llevo tres hermosos años con él. No puedo llegar y tirarlos a la basura por una aventura.-Lisa jadeo queriendo entender su punto, pero aun así no lo logro.-supongamos que dejo a Chris y me voy con Jimin, ¿y si después me arrepiento?

-Es que de eso se trata la vida.

-No Lisa, no.-negaba ante sus ideas.

-Sí, sí lo es. De apostar y equivocarse, jugársela por lo que uno quiere, Rosie.-decía tomándole ambas manos dándole apoyo.-a ver, yo sé que tú eres más buena que la mismísima santa virgen de Calcuta, y que lo único que no harías en tu vida es hacerle daño a Bangchan y al pequeño Felix, pero quiero que por una vez en tu vida pienses en ti, qué es lo que tú quieres de verdad. Amiga, Jimin puede ser el amor de tu vida y lo estás dejando partir.

Los ojos de la fémina se volvieron cristalinos y sin darse cuenta, una vaga lagrima se deslizo por su mejilla siendo seguida de otras más preocupando a la de cabellos cortos.

-Lisa, ya lo decidí, ¿sí? .-pronunció junto a una sonrisa temblorosa.-ya lo olvide una vez, y lo puedo olvidar de nuevo.-aseguro deshaciéndose de las marcas aguadas que tenia en su rostro.-cambiemos de tema, por favor.-suplico apenas por su tristeza presente.

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En la consulta de Chris ...

El australiano se despidió de su ultima paciente de esa tarde, encontrándose con Rosé en la sala de esperas.

-Hola.-saludo tímida ante su penetrante y confusa mirada.

-¿Qué haces aquí? .-pregunto manteniendo su postura rígida y demandante.

-Fui y hablé con Jimin.-dijo acercándose poco a poco hasta mantener cierta distancia del contrario.

-¿Y eso? ¿me vas a contar lo qué pasó entre ustedes ahora?

-Sí.-afirmo sincera.-, porque esto es importante para mí y no quería esperar a llegar a casa. Se acabo.-soltó junto a un suspiro.-no volveré a juntarme con él nunca más.

El chico estiro su mano y la tiro contra su pecho abrazándola cálidamente, siendo correspondió de la misma manera por la rubia.

-Gracias, me reconforta demasiado escucharte decir eso.-musito besándole los dorados cabellos castamente.

Ella asintió sin mirarlo tragándose las ganas de llorar frente al psicólogo. Luego de eso, ambos entraron a la oficina del chico sentándose uno al lado del otro todavía manteniendo su cercanía.

-Ro.-la llamo obligándola a levantar la mirada conectándola con él.-tú me habías dicho que estabas dispuesta a todo, para mantener lo nuestro, ¿verdad? .-ella afirmo en silencio.-pero el otro día, estaba buscando unos archivos y encontré una libreta, donde se cayeron algunas fotografías tuyas y de Jimin juntos.

-¿Por qué no me lo dijiste? .-pregunto en un murmuro.

-Me dio vergüenza que tú pensaras que estaba rebuscando entre tus cosas. Son tus pertenencias, tus recuerdos.-le decía, a lo que Rosé solo sonrío culpable.-en cuanto lleguemos a casa, ¿podrías deshacerte de ellas?

-Sí, claro, ¿algo más? .-acepto con dolor retenido.

-No sé, dime tú.-exigió mirándola con acusaciones.

-No, nada más.-negó rápido.

-Ro, gracias.

Todo estará bien

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Dos semanas después ...

Bar 81, 22:15 pm.

-No amigo.-negó el abogado bajo los niveles de alcohol.-no seas tan exagerado, tampoco estoy tan mal.-reprochaba molestando a los demás que también bebían a su alrededor.

-Oye Jimin, cuando tú vienes es porque estás pésimo. Y eso que no venías hace tiempo.-afirmo el barman limpiando uno que otro vaso detrás del mesón.

-¿Si, verdad? .-río haciendo un mueca graciosa.-yo te voy a mostrar como estoy en estos momentos.

Seguido, sacó su celular del vaquero y marcó un contacto en especial.

El número que usted llama no existe

-Así me tienen amigo. Hasta el teléfono me cambiaron.-declaro dejándose caer sobre la mesada.

-Bueno, entonces compadre, este corre por cuenta de la casa.-dijo el hombre sirviéndole otra ronda.

-Salud.-pronuncio antes de alzar el vaso y tragarse todo el licor amargo.

Luego, sacó su móvil celular del vaquero ya que este vibraba constantemente, viéndose reflejado en único familiar de su perdición.

-Channie, mi amigo.-saludo entre dientes con burla.

-¿Jimin, eres tú?, te escuchas un poco raro, ¿estás bebiendo? .-cuestiono mientras conducía por la avenida principal.

-Solo un poco.-soltó junto a una sonrisa grande.

-Mejor dame la dirección de donde estas. Realmente no te escuchas para nada bien.-decía negando.

-¿Que? ¿p-para qué?, s-si estoy ... bien.

-Por qué sí estás en este estado, es porque necesitas a alguien acompañándole, y que mejor que yo lo haga.-comento exhalando fuertemente.-después de todo, tengo de devolver el favor de alguna manera. El otro día me salvaste en el tribunal y de preocupar de más a Rosé, gracias.

-Seria mejor que me lo dijeras en la cara hyung.

Por un momento hubo silencio, en el cual el mayor de ambos creyó que se le había ido la señal frunciendo el ceño confundido.

-¿Jimin, sigues ahi?

-... Te acabo de enviar la dirección, nos vemos acá.

Dicho lo ultimo corto la llamada y espero el tiempo necesario a su amigo, quien se tardó más de media hora en llegar y él ya había pedido tragos para ambos, los cuales se terminó de beber por aburrición.

-¡Hey, ChimChim! .-exclamaron tras su espalda golpeando fuertemente esta misma, ocasionando que soltara una palabrota ante el dolor.-yah, ni que te hubiera roto una escápula.-carcajeo sentándose a su lado notando como lo miraba mal. -sabes.-siguió ante el silencio entre los dos.-me gustaría lanzarme en parapente.

-¿De verdad?

-Sí, ¿tú no te atreverías? .-soltó tras darle un corto trago a la cerveza.-¿y sí lo hacemos juntos? .-ideo sonriente.

-Yo voy a todas.-respondió imitándolo.-salud por eso.

-Oye, no es tiempo de hablar de temas intransigentes. Es momento de colocarle el cascabel al gato.

-¿Qué gato? ¿ahora soy un gato?, nah, ese papel le queda de maravilla a Yoongi.-dijo haciendo un ademan pobre junto a una alta carcajada.

-No te hagas el idiota.-negó rodando los ojos.-quiero saber el por qué estás aquí, porque dudo que sea para saber de cómo estoy, ¿no?

-¿Y por que otra razón seria, hyung? .-murmuro llevándose el vaso a los labios perdiéndose en aquel dorado liquido.

-Por mi hermana, es obvio.

-¿C-cómo ... ? .-balbuceo al verse acorralado.

-Somos amigos.-dejo caer dándole en el clavo.-estamos bebiendo un trago en un bar, ¿de qué otra cosa hablaríamos sino?, ¿del idiota del juez que se deja comprar, eso? .-soltó irónicamente.

-¿Por que no, un tema más interesante? .-quiso iniciar, pero solo recibió como respuesta una negativa.

-A mí no me interesa en lo más mínimo, hablar de mi querida carrera por ahora.-bramo pidiendo otra ronda.-bien dime, ¿qué sucede con Rosé? .-cuestiono mirándolo desde arriba.

-No pasa nada con ella, y no pasara nada con Rosé, ¿sabes por qué?

-No lo sé, ¿por qué?

-Porque Rosé, está enamorada de Bangchan y tienen una familia juntos.

-No, pero eso es falso.-negó una vez más haciendo una mueca.-solo se tienen cariño y ya, eso no dura para siempre. Amigo, la vida no se acaba porque uno esté casado, la vida se acaba cuando las personas se mueren o enferman como yo.-soltó, provocando que el castaño frunciera levemente el ceño ante sus palabras.-sabes Jimin, debes de aprovechar al máximo. Yo también estoy intentando de hacer, pero no sé si alcance; porque me queda poco tiempo.-termino de decir, preocupándolo aun más.

-Espera, ¿cómo es eso? .-dijo casi atragantándose con su propia saliva.-¿cómo que no te queda mucho tiempo de vida?, ¿estás enfermo?

-¿Eso dije? .-Jimin asintió frenéticamente.-no mocoso, debiste de haberme escuchado mal.-le resto importancia junto a una sonrisa burlona.

-No, no te hagas el imbécil conmigo Park Chanyeol. Dime ahora mismo, qué mierda es lo que tienes.-hablo demandante, provocando risas en el mayor.-¿qué es tan gracioso?

-Que intentas hacerte el rudo, pero no te sale.

-Hyung ...

-No, no, no.-negaba queriendo escapar.

-No, qué.

-Que no pienso decirte nada más.-reitero sacando su cartera para pagar los tragos.

-Pero, por qué hyung.-insistió recostándose sobre el mesan casi quedándose dormido.

-Porque es un secreto, que no puedo contarle a nadie. Mejor dime, qué está pasando entre tú y mi queridísima hermanita.

-Que no pasa nada, hyung, No insistas.

-Jimin, no seas tonto. Acércate a Rosé, yo sé que tú puedes contra todos y podrás volver a ganarte su corazón.

-Estás loco.-termino de decir, cerrando sus ojitos

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En casa de Rosé y Bangchan ...

-¿Y esto? .-pregunto pasando a la sala principal, encontrándose con aperitivos deliciosos en la mesa de centro y velas.

-Es una sorpresa.-dijo ella dándole un dulce beso en los labios.-Felix se quedara con Sana esta noche, así que tenemos la casa para nosotros dos solitos.

Chris la volvió a besar, esta vez rodeándole la cintura apegándola a su propio cuerpo sintiéndola por completo.

-Que delicioso.-babeo al ver la cantidad de comida para aquella noche.

-Y una champaña bien helada.-pronuncio mostrándola orgullosa.-¿podrías abrirla, por favor?

-Sí, ... espera un segundo.-le dijo sacando su celular del saco.

-¿Qué sucede? .-cuestiono al ver una expresión dura en su rostro.

-Es Jimin.-soltó junto a un bufido.

-No le respondas.

-No tengo nada que ocultar.-señalo con rudeza.-qué mierda quieres.-hablo tajante al aceptar la dichosa llamada.

-Necesito hablar con los dos. Esto afuera de tu casa.-dijo sin más.

-¿Me estás jodiendo?

-No, no te estoy jodiendo.

-Chis, espera, adonde vas.-siguió ella al verlo ir en dirección al recibidor y tomar un par de zapatos de la entrada.

-Este imbécil está abajo.

-P-pero espera un poco ...

-No, tú quédate aquí. No te pienso exponer, mucho menos con él rondando por acá.

-Chris ...

-¡Quédate aquí, demonios! .-le gritoneó fuertemente.

Intento detenerlo, pero el chico ya había salido dando un fuerte portazo haciendo que casi brincara del susto.

-Qué haces aquí.-demando fríamente ya estando frente al abogado.-qué pretendes viniendo a mí casa.

-Quiero hablar con ustedes.

-¿Estás borracho? .-pregunto mirándole mal.

-No.-negó rápidamente.-no, no estoy borracho. Solo un poquito alzado, pero no borracho.

-Qué es lo que quieres, ¿armar un escandalo? .-dijo con tono agrio.

-No, quiero hablar con ustedes dos.

-Rosé, no quiere hablar contigo. Te quedo claro.

-Sí, bien claro. Pero no me voy a mover de aquí, sin hablar con ustedes.

Bangchan solo suspiro cansado y lo guio hasta su apartamento. Rosé por su cuenta, corrió hasta el interior del hogar antes de que notaran que ella los estaba observando desde el tercer piso.

Una vez los tres reunidos, él peliazulado dio como inicio la conversación, ya que ambos Park solo se mantenían mirando con desganes.

-Ya habla, qué mierda quieres decirnos.

-Jimin, nosotros ya hablamos.-pronunció la fémina sintiéndose con falta de aire.

-No, no quiero hablar de eso.-

-¿Estás borracho? .-cuestiono ella esta vez levemente preocupada.

-Un poquitito.

-Ya basta de parloteo barato y habla de una maldita vez.

-Quiero decirles algo de Chanyeol.

-¿Qué? ¿qué tiene mi hermano? .-exigió saber dando zancadas largas y firmes hasta el mayor del trio.

-Resulta que estábamos bebiéndonos unos tragos y, ... .-trataba de contar.

-¿Te emborrachaste con mi hermano?

-No estoy borracho, Roseanne.-dijo con seguridad aunque intentaba mantenerse erguido.-sí estuviera borracho, no estaría aquí con este problemón metido en la cabeza.

-De qué cosa estás hablando, imbécil.-jadeo el peliazul cansado de la situación.

-Chanyeol está enfermo, me lo acaba de decir. Y al parecer, es grave.

-C-cómo que mi hermano está enfermo, de qué.

-No me quiso hablar del tema.

-Entonces, por qué dices que el grave.

-Me dijo que quería aprovechar el tiempo, el poco tiempo que le quedaba. Recuperarlo, porque la vida se termina cuando uno se enferma, como le había sucedido a él.

-Lo sabia.

-No, espera Rosé.

-Lo sabia.-repitió la rubia angustiada.

-Rosé, este imbécil está completamente borracho. Está diciendo disparates.

-Cuando nosotros nos fuimos a Jeju, él me dijo que se iba a morir.

-Pero también dijo que todos nos íbamos a morir algún día. Este es un recurso patético Park, qué mierda haces en mí casa preocupando a mí chica.

-Ro ...

-¡Qué pretendes idiota!

-Chaeng, recuerdas la vez que fuiste a mi oficina y me preguntaste si tu hermano estaba enfermo?, y yo te dije que no lo sabia .-ella asintió desviando la mirada.-bueno, ahora lo sé. Está enfermo.-aseguro con los parpados a medio cerrar.

-Bien, ¿ya terminaste?, ahora te puedes ir. Vete, vete de aquí y no regreses nunca más.

-No debí haber venido, pero no tenia como llamarte.-pronuncio, dirigiéndose a la menor de ambos hombres.

-¡Ya lárgate de una vez! .-gruño empujándolo fuertemente haciendo que casi perdiera el poco equilibrio que tenia hasta ese momento.

-Basta, basta. Detente, se podría golpear la cabeza, déjalo irse tranquilo, por favor.

Jimin se marcho luego de intercambiar miradas con la rubia, y esta solo pudo sentarse en el sofá agobiada por lo anterior. Por el lado de Bangchan aun le costaba asimilar lo ocurrido, y sobre todo que Rosé lo haya querido defender tanto.

-Es un maldito idiota.-mascullo fríamente.-cómo pudo aparecerse por aquí con semejante estupidez, por dios.

-Channie no me contesta.-dijo ella al escuchar los tonos de la llamada sin ser respondida.

-Pero, cómo lo llamas por esta estupidez, Rosé.-bramo alterado.

-¿Y si fuese verdad? .-inquirió mirándole con acusaciones.-, yo te conté que ha estado mal de salud. Tose, ha tenido temperatura, y la ultima vez vomito y se desmayo en pleno juicio, ¿te acuerdas?

-Sí, pero piensa un segundo. Si tu hermano estuviera realmente enfermo, ¿le contaría a este bastardo o a ti primero?

-Son amigos.-dio como respuesta.-se hicieron muy cercanos durante el tiempo que yo no estuve con él. Se tienen confianza, quizás, no lo sé.

-¡Te está mintiendo! .-exclamo a la defensiva.-¿te imaginas a Chanyeol emborrachándose con él?, no le creo. Y si se emborracho, tu hermano está hablando solo estupideces.

-No lo sé, perdóname, pero yo no vi que Jimin estuviera tan borracho como para hablar estupideces.

-A ver, piensa un segundo. No caigas en su juego, ¿acaso no te das cuenta? .-ella negó silenciosa.-quiere tenerte preocupada, quiere tenerte débil, quiere tener control sobre ti; y que tú vayas corriendo hacia él.

-Yo no voy a hacer eso.

-Sabes qué.-suspiro cansado.-ve donde tu hermano, habla con él, ve y habla con este imbécil si también quieres. Hace lo que quieras, no te voy a detener.

Gruño, para después desaparecer de la sala y dejarla completamente sola y con muchas dudas y preocupaciones sobre los hombros.

🌹

A la mañana siguiente ...

-Channie, hola, ¿estás en tu departamento? .-pregunto Rosé mientras conducía camino a la residencia del mayor.

-No, estoy en una teteria que acabo de descubrir. Necesitaba aire y cafeína en mi sistema por esta maldita resaca del demonio, ¿por qué?

-Porque necesito conversar contigo de una cosa.

-¿Sucedio algo malo? .-inquirió frunciendo levemente el ceño.

-Prefiero hablarlo personalmente.

-Bueno, si quieres nos encontramos para almorzar.

-¿Puede ser ahora? .-insistió concentrada en la carretera.

-Claro, claro que sí.-acepto con una suave sonrisa.-te enviaré la dirección y ubicación de donde estoy, y hablamos, ¿bien?

-Sí, gracias oppa.-agradeció antes de finalizar la llamada.

Chanyeol la imito y rápidamente envió su ubicación al anterior contacto, para después dejar su celular sobre la mesa y escasos segundos después, otra presencia se presentó frente a él.

-¿Hey hyung, cómo éstas? .-pregunto Jimin saludándolo al llegar.

-Hola Chim, al fin llegas.-reprochó ante la tardanza masculina.-ni te cuento como amanecí esta mañana.-río al recordar como había llegado tambaleándose hasta su propio apartamento.

-Es bueno saber que aceptaste conversar conmigo, ya que tienes una agenda muy apretada.-Chanyeol hizo un ademán pobre restándole importancia.-por un lado está bien, así no te escaparás tan fácil. Hyung, quiero que me digas de qué se trata esa enfermedad que comentaste anoche.

-Sabía que me ibas a joder con eso.-mascullo tras soltar un bufido cansador.

-No pretenderás que me quede de brazos cruzados con una cosa así.

-No, claro que no.-negó intentando esquivar el tema.-además, le fuiste con el cuento a Rosé.

-¿Roseanne te llamó? .-inquirió entusiasmado.-¿qué te dijo?

-... ¿Por qué no mejor se lo preguntas tú mismo?, ahí viene .-pronuncio al ver a la joven llegar al local citado.

Ambos menores desviaron la mirada incómodos, y tras un largo minuto, Jimin se incorporo rascándose la nuca totalmente nervioso dándole la bienvenida.

-Hola.-soltó él primero, recibiendo una mirada desinteresada.

-No me dijiste que estabas acompañado.-dijo ella dirigiéndose al mayor de los abogados.

-Tú no me lo preguntaste.

Rosé hizo una mueca molesta y Jimin solo pudo bajar la cabeza sintiéndose aislado, además de ambos sumamente incómodos.

-Yah, pero no se queden ahí como tontos sin hacer nada. Tomen asiento y hablemos, después de todos, los dos querían hablar conmigo de lo mismo, ¿o no?

-¿Eso es verdad? .-pregunto al castaño, quien asintió levemente.-¿estaban hablando sobre ... ?

-Sí.-acepto sin dejarla terminar.-quería hablar con él, por eso citamos una reunión aquí. Anoche no estábamos muy claros que digamos.

-Anoche, estábamos completamente borrachos amigo mío.-soltó con gracia.-ay Rosie, este hombre, estaba sufriendo un mal de amores y yo fui en su auxilio. Lo hubieras visto, daba lástima.

-Bueno, pero no queremos hablar de eso en realidad, sino, por lo que me dijiste anoche hyung.-murmuró sintiéndose avergonzado.

-¡Pero todo tiene que ver!

-No.-declaró la rubia casi perdiendo la poca paciencia.-, una cosa no tiene nada que ver con la otra. Queremos hablar de lo qué te pasa a ti.-señalo con acusaciones.

-Ro, todo tiene que ver.-dijo nuevamente confundiéndolos.-porque si yo no me hubiera inventado que tengo una enfermedad, ninguno de los dos se hubiera reencontrado y no hubieran arreglado sus problemas.

-¿Perdon? .-pronuncio frunciendo el ceño.

-No se hagan los desentendidos. Sí hay algo o hubo algo entre ustedes, no lo dejen en el pasado.

-Acabas de decir, que inventaste una enfermedad, ¿eso dijiste?

-Ro, la vida les está dando una segunda oportunidad, y este par de tontos lo están dejando pasar.-decía tratando que entendiera su punto de vista.

-No puedo creer que hallas hecho una cosa así, de verdad.-negaba sentida.-me decepcionas oppa.

-Lo sé, fue una idea loca, pero no te molestes, Rosie.

-¿Una idea loca? .-bufo negando.-una estupidez diría yo. Eso se llama jugar con los sentimientos de la gente, y yo no estoy para eso. Adiós, me voy.-terminó de decir completamente molesta.

Tomó sus cosas y sin llegar a despedirse, se retiro del lugar.

-Ro, espera. Roseanne.-la llamaba el castaño siguiéndola de cerca.-Ro, escuchame.-pronuncio en cuanto llego a su lado tomándola del brazo.-te juro que yo no tengo nada que ver con esto.

-Es que no entiendo. No puedo entender a mi propio hermano, ¿acaso se volvió loco?

-Yo no creo que esté loco. Anoche se escuchaba muy sincero.-le contaba a lo que ella ni siquiera tomaba atención.

-¿Anoche?, anoche ustedes estaban completamente alcohólicados, y yo la muy estúpida que le creé a un par de borrachos, la verdad es que ... .-se quedo muda al sentirse decaída, obligándose a apoyar en el auto frente a ella.

-Ro, ¿estás bien?

-Sí.-aseguró afirmando con su cabeza.

-¿Segura? .-insistió preocupado.

-Sí, es que, espera ... vi unos puntos blancos, pero ya se me pasó.

-No, lo mejor es que entremos y bebas algo.

-No, sí ya estoy bien.-se negó nuevamente.

-Pero, no puedes conducir así.

-¡Sí, puedo conducir Jimin! .-exclamó impaciente.-estoy bien, permiso.

Lo obligó a hacerse un lado, dejándola abrir la puerta del automóvil.

-¿Por qué cambiaste el número de celular?, no era necesario.

-No me hagas las cosas más difíciles.

-¿Y tú crees que para mí son fáciles? .-insistió dolido.

-Perdoname, pero es lo único que puedo hacer.-termino de decir, antes de subirse al auto y marcharse dejándolo con la palabra en la boca y en el estacionamiento.

🌹

Más tarde, en un café del centro ...

-¿Una enfermedad grave? .-dijeron las tres al unísono.

-Sí.-asintió la rubia mientras llevaba la taza de té hasta sus labios.

-¿Eso le dijo Chanyeol a Jimin?, sinceramente no me lo puedo creer.-comento Jennie mientras negaba.

-Pueden imaginar que el muy tonto le creyó y ahí fue donde me lo contó, y también figuramos los dos bien preocupados por él.-decía totalmente cansada.-y mi queridisimo hermano jugando.

-Es que Ro, hay que decirlo, Chanyeol es un genio.-soltó Jisoo con gracia.-es un gurú, es claro que lo hizo para que Jimin y tú estuvieran juntos.

-Por favor unnie, no le celebres nada.-reprocho haciendo mueca.

-Aceptalo, fue inteligente.-insistió señalándola sonriente.

-Yo no estoy para sus juegos, entiendes.-las dos restantes solo rieron mientras se miraban.-imaginense si Chris se llega a enterar que, estuve en una amena charla con Jimin en un café. Ahs, tenia tanta rabia que casi me desmayo.

-Ay Rosie, cómo llegar a desmayarte.-se burló Lisa revolviendo la taza sin mirarla.-no exageres.

-No es de exagerada. Llegué al auto, y tuve que afirmarme de la puerta porque estaba viendo puntos blancos.

-Ros, eso no es normal.-declaro la mayor tras fruncir levemente el entrecejo.

-Unnie, es súper normal, si he estado muy estresada. Ustedes no entienden por lo que he tenido que pasar últimamente.-les contaba con dezganes.-si siendo sincera, llevo un tiempo con mareos y náuseas. Me he sentido pésimo.

-Espera, espera un segundo. ¿Mareos y náuseas? .-pronunció Jennie con deje de sorpresa tras intercambiar una que otra mirada con las chicas.

-Sí.-acepto Park dándole un sorbo a la infusión.

-Bien, ¿y desde cuándo? .-insistió en saber la futura esposa de Min.

-Hace unos días.-afirmó encogiéndose de hombros.

-Ro, te puedo hacer una pregunta.-dijo Lisa esta vez mirándola con rareza.-¿cómo vas con tu periodo?

-¿Por qué?

-Cómo qué por qué.-soltó Jisoo siendo obvia a la situación.-Ro, mareos y náuseas, son dos palabras claves. Amiga, ¿no haz pensando que podrías estar embarazada?

-¿E-embarazada? .-cuestiono sintiendo un vacío en el estomago.

-Sí.-soltaron al unísono.

-Chicas, por favor.-río con nervios.-¿se volvieron locas?

-¿Por qué?, eres joven. Es normal que puedas tener un bebé.-le decía Jennie a su lado.

-Eso sería muy difícil, ustedes saben el porque.

-¿Y sí existiera la mínima posibilidad de qué pasara? .-dejo caer Manoban provocando un silencio muerto entre ellas.

-No Lisa, no.-alargo con pánico.-chicas, no insisitan. Además, con Chris nos cuidamos.

-Bien, es entendible, pero, y con Jimin. ¿Tambien se cuidaban? .-comento Jisoo apoyando ambas manos bajo su mentón mirándola con una sonrisa ladina.

-¿Jimin?

-Sí, Jimin. Con el hombre que haz tenido los mejores orgasmos de tu vida, ese Jimin.-volvió a decir la mayor sin importarle mucho la vergüenzas ajena.

-Hemos estado juntos muy pocas veces.-confesó restándole importancia.

Lisa solo pudo soltar una risa alta molestándola.

-Amiga, solo basta una vez para que quedes embarazada. ¿Se cuidaron?

-Siempre, bueno, casi siempre.

-Bien, casi.-repitió irónica.

-Bueno, la primera vez no porque no sabíamos que iba a pasar, entiendes.-siguió ante sus sospechas.-o sea, todo esto era una locura y pasó en su departamento y bueno, para que te voy a contar detalles ..., y también, la ultima vez en su casa ... .-murmuró sintiendo sus mejillas arder.

-Rosé ... .-musitó Jennie tomándole la mano dándole ánimo.

-Dios, cómo fui tan descuidada tantas veces.-se regaño bajando la cabeza avergonzada.

-Bien, lo entendemos.-soltó Jisoo tras intercambiar mirada con Lisa.-de todas las esas veces, solo dos no se cuidaron.-la rubia asintió en silencio.-¿estás con atraso?

-Unnie, soy irregular. Si es lo que quieres saber.

-Pero dinos, estás con atraso, sí o no.

-Te estoy diciendo que soy irregular. Bien, supongamos que, no sé, una semana de atraso.

Tras su confesión, el trio de féminas solo pidieron suspirar y mirarla con pesar.

-A ver Rosie, perdona que te lo diga pero, yo que tú, voy y me compro un test de embarazo y me lo hago ahora mismo.-dictaminó Lisa dejándole un sabor amargo en la boca.

¿Embarazada?

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Momo