Chapter 8:-
Dos semanas después...
-¿Y, has hablado con los chicos? .-cuestionó Jennie, mientras la veía jugar con la cuchara dentro de la taza de café.
-Anoche pude hablar con Jungkook, pero solamente por cinco minutos, quizás menos.-dijo cabizbaja.
-¿Te dijo el motivo? .-pronuncio Jisoo haciendo mueca.
-Lo único que alcancé a escuchar, fue que tenía una cena importante con unos empresarios de no sé qué.-bufo mirando la pantalla de su móvil celular.-ya debo irme, tengo una cita.
-¿Cita? .-dijeron al unísono.
-Chanyeol regresa de Londres, y siendo su hermana menor debo estar a su lado.
-¡Chanyeol-ssi! Wow, hace cinco años que teníamos noticias de él.-exclamó con sorpresa.-darle mis saludos de mi parte.
-Claro que lo haré.-asintió sonriente.-por favor unnie, finge sorpresa en cuanto lo veas.
-¡Claro! Hasta haremos una fiesta de bienvenida, ¿te parece?
-Si hay comida, ahí estaré.-le confirmó al momento de incorporarse y tomar su bolso de la silla.-adiós.
-Suerte Rosie.-se despidió viéndola salir del lugar y caminar a toda prisa por las calles cercanas.-creo que ha Jungkook no le va a gustar esta sorpresa.-negó mientras apretaba los labios y movía su cabeza lado a lado.
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Aeropuerto de Bucheon
-¡Channie! .-exclamó moviendo su brazo derecho mientras que con su mano izquierda sostenía un cartel llamativamente decorado con el nombre masculino.
Él hombre alto y de cabellos oscuros evito a los demás pasarejos, y en cuanto estuvo lo suficientemente cerca de la rubia, soltó sus maletas y la alzó en el aire abrazándola fuertemente.
-Bienvenido a casa, oppa.-soltó en cuanto él la dejo pisar el suelo o través.
Ambos se regalaron una sincera sonrisa cuando sus ojos se conectaron. Chanyeol negó y la acercó rodeándole el fino cuello con su brazo.
-Te extrañé, mocosa.
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-Lindo departamento.-comentó visualizando el lugar.
Observo detenidamente cada cosa de la sala y arrugo el ceño cuando vio una foto en particular. Rosé se dio cuenta de ello y sonrió incómoda.
-Todavía estás con la rata.-comento metiéndose las manos en el bolsillo del vaquero con pesadez.-creí que ya habían terminado por lo que te hizo.
-Eso quedo en él pasado, no hay necesidad de recordarlo.-dijo desviando la mirada.
-Disculpame, pero yo no nunca lo olvidaré. Eres mi hermana menor y debo de protegerte, sobretodo ahora que...
-Sí, estamos solos.-le miró con afirmativa.-Jungkook cambió, ya no es ese tipo de persona. Cuando nuestros padres murieron siempre estuvo a mi lado, nunca me dejó sola, hasta él día de hoy.
-Tu siempre lo defiendes, como si fuera un ángel.-negó sacando una cajetilla de cigarros de bolsillo trasero.-Bah, a mi nadie me engaña, Rosé.-señaló metiéndose un cigarrillo en su boca.
-Chan, por favor, detente.-le pidió cansada.-dejemos esta conversación para otro día, ¿sí?
-... ¿vives aquí con él?
-Hace un año.
-Ya veo.-asintió deslizando la puerta que daba al balcón.-espero que ambos paguen él alquiler.
-Lo hacemos, de hecho tenemos un inquilino que también nos ayuda en ello.-comentó colocándose a su lado.
-¿Y?
-¿Y? .-cuestionó confusa.-no te entiendo.
-Solo voy a decir que, tres son multitud.
-Chan, no pienses cosas que no lo son.
-Yo solo estoy diciendo, no seas paranoica.-le dijo tras soltar una carcajada.-ni que te hubieras acostado con él.-río expulsado el tabaco.
Hubo un largo silencio en el cual solo se dedicaban a mirar la ciudad desde la altura. Rosé iba a decir más, pero el sonido de la contraseña y la puerta principal fuera abierta llamó la atención de ambos hermanos.
Desde el recibidor se escucharon unos pasos y unos murmullos de quejas. En cuanto la persona cruzó la sala se detuvo abruptamente, en donde su mirar cayó en la fémina rubia y en el mayor de ellos.
-Jimin-ssi.-pronunció la menor con sorpresa.-creí que estaría en la oficina.
-Olvide unos archivos de un caso.-dijo rápido y sin dejar de mirar al hombre alto al lado de la fémina.-¿quién... ? .-comenzó a decir con curiosidad.
-Oh, él es mi hermano mayor, Park Chanyeol.-presentó al pelinegro.-Chan, él es Park Jimin, es nuestro inquilino y el mejor amigo de Jungkook.
Chanyeol se acercó al recién llegado y estiró su mano en forma de saludo, este la tomó y le dio un leve apretón mirándole aún no muy bien convencido por su actitud.
-Un gusto conocerte, nunca creí que esa basura de Jeon tuviera amistades. Tal vez hizo un pacto con él diablo, ¿no lo creés hermanita? .-cuestionó colocando su mirar en la menor de ambos.
-Chan, ¿no creés qué ya es hora de que te vayas? .-musitó abriendo sus marrones ojos.-temprano m dijiste que tenías algo importante que hacer, ¿no lo recuerdas?
-No.-negó rápidamente con burla.-de hecho, los invitaré a cenar.
-¿Perdón? .-dijoe esta vez Jimin confundido.-si no mal recuerdan, yo vengo de pasada. Estoy en horario de trabajo.
-Y en qué trabajas.-interrogó con una ceja alzada.-espero que algo mejor que ése imbécil de Jungkook.
-En un buf-...
-¡Basta! .-gritó Rosé haciéndolo callar.-Chanyeol, vete y no regreses.-señaló la puerta con notoria molestia.-¡quiero que te vayas! .-lo empujó al ver que no se movía.
-Oye, Ros, es solo una broma.-trató de excusarse entre risas.-no seas exagerada.
-Estoy cansada de que ataques a Jungkook. Él es mi novio y lo amo.-le dijo en cuanto estuvieron en el corredor.-y tú ni nadie se debe de interponer, no lo voy a permitir.-indicó con el ceño fruncido.
-Haz lo que quieras, me da igual si te levanta la mano como esa vez.-le dio la espalda con intenciones de irse, pero se detuvo y volvió para decir más.-ah, y no intentes llamarme, ya me di cuenta de que lado estas. El amor te tiene ciega, y cuando te des cuenta, ya será demasiado tarde.
Finalmente se perdió en cuanto tomó el ascensor e ingreso en la caja metálica, dejándola sola y con notorias lágrimas en sus abultadas mejillas.
Jimin salió un segundo después, y la abrazo dándole consuelo. Había sido testigo de todo lo dicho por el pelinegro.
-No estás sola, ¿bien? .-le dijo besándole los dorados cabellos.-le di mi palabra a Jungkook que te cuidaría, no romperé mi promesa.
La menor lo abrazó con fuerza en forma de aceptación, y dejo que se quedara así con ella por un largo rato.
Gracias
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Tres semanas después...
Jimin y ella ya estaban en el aeropuerto a la espera de sus amigos.
A su alrededor había un gran publico que también esperaban algún familiar, pareja, amigos o como en su caso, mejor amiga y su novio.
Cuando se acercó la hora de que él avión aterrizará, la gente empezó a hacer un alboroto empujándose entre sí para estar de los primeros en fila, provocando que algunos se molestaran y otros discutieran por empujar.
En su caso, Rosé fue quien más se senria incómoda y afligida al estar apoyada en un pilar del lugar. Jimin al darse cuenta de ello, le dio la mano y la alejó del escándalo quedando ellos en primer lugar de espera.
Para cuando se dieron cuenta de como sus dedos estaban entrelazados y abrazados por los empujes, los viajeros ya habían salido siendo seguidos por Lisa y Jungkook, los cuales les miraban con suma confusión y su concentración estaba en sus manos juntas.
Rosé se soltó rápida y abruptamente del contacto y se acercó a su novio, recibiéndolo con un fuerte abrazo.
-Bienvenido, cariño.-saludo para después regalarle un dulce beso en los labios.
-He vuelto a casa, bonita.
Jeon sonrió en forma de respuesta, para después alzarla y volver a besarla como demandaba tras un largo y agotador viaje.
Él pelinegro intercambio miradas con la tailandesa, quien movió su cabeza en afirmación y después le dio la espalda acercándose hasta Jimin. Éste último le sonrió a la joven de cabello corto y alzó una ceja ante lo anteriormente sucedido, había sido testigo de sus miradas pero no quiso decir nada.
No era su asunto.
No seré yo quién encienda la bomba, mi amigo
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Momo 🍑💕
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