✶ CHAPTER TWENTY-TWO ✶
𝐂𝐄𝐋𝐎𝐒

YA HABÍAN PASADO ALGUNAS SEMANAS DESDE LA PEQUEÑA pelea que habían tenido Julieta y Gavi.

Y si me lo preguntan, las cosas seguían igual, Gavi no dejaba que Julieta le explicara lo de Mónaco, mucho menos le dirigía la palabra.

Ahora que se encontraba entrenado, porque ya habían regresado de sus vacaciones, menos le hablaba, y le decía la excusa "no tengo tiempo de hablar, estoy ocupado entrenando"

Claramente Julieta no sabía que hacer, por más que ella intentaba hablarle y explicarle, Gavi simplemente no la dejaba. Y eso se estaba volviendo muy cansado para ella.

Ahora mismo Julieta se encontraba viendo entrenar a los chicos, ya que había acompañado a Taylor, aunque también quería ir para ver a Gavi y poder hablar con él.

Aunque no contaba claro, que Isabella también iba a estar ahí y peor aún de encimosa con Gavi, algo que Julieta no soportaba ver. Y mucho menos ver como Gavi no le ponía límites.

— Vaya que esa chica si quiere quitarte a tu novio — Julieta volteo a su derecha para encontrarse con João —. Yo que tú iba y la agarraba de los cabellos.

Julieta soltó una carcajada al escuchar su comentario, algo que no pasó de percibida en Gavi, que este solo rodó los ojos al verlos juntos. Desde que João había llegado a Barcelona, no se despegaba ni un poco de Julieta, era algo que le molestaba a Gavi.

João Félix era uno de los nuevos jugadores del Barcelona, y aunque era jugador cedido, muchos tenían fe en que sera un gran jugador. Claramente desde que este llego, la única persona con quien hablaba mucho era con Julieta.

Es su mejor amiga, obviamente iba a estar con ella todo el tiempo, y como Gavi no le quería ni dirigir la palabra, Julieta se la pasaba con João sin problema alguno. Como en estos momentos.

— Lo haría — João sonrió divertido —. Pero luego su papi me demandaría.

— Claro, mejor mantén tus manos lejos de ella — Julieta solo asintió sonriendo —. Lo malo que soy hombre, sino te ayudaría a golpearla. Mira cómo se te queda viendo, te ve como presumiendo que tiene la atención de tu novio.

— ¿Podemos dejar de hablar de ella? Lo único que causa es que quiera ir corriendo a golpearla, aparte que ni me puedo acercar porque Pablo ni me habla.

Ambos voltearon a ver a Gavi, que este se alejaba de Isabella antes que ella lo abrazara, eso hizo que Julieta sonreirá.

— ¿Aún no ha dejado que le expliques? — volvió al tema —. Que estrés con ese chico, he.

— Es complicado, espero hoy pueda hablar con él y que dejemos este problema a un lado, llevamos casi tres semanas sin hablarnos.

João hizo una mueca al ver a Julieta triste respecto a este tema, él se acercó a ella para darle un pequeño abrazo.

Pero fue interrumpido por alguien que estaba llamando a Julieta, está solo sonrió, señalando que es Arthur, para después alejarse de todos, probablemente le iba a decir algo de su mamá.

Por el otro lado del campo, Gavi veía de lejos a João con demasiado desprecio, no lo odiaba, pero si podía decir que le caía mal.

— Si las miradas mataran, João ya estuviera a tres metros bajo tierra — Pedri se acercó a él, con una sonrisa —. Pobre chico, Gavi ya deja de mirarlo.

— Claro que intento no hacerlo — dijo, aun mirándolo —. Pero joder, me molesta que solo esté con mi Julieta.

— Es su mejor amigo Gavi, obviamente iba a estar con él — Gavi miro a Pedri, con un poco de molestia —. ¿Qué? Ella no es la que te está evitando.

Gavi solo negó, mientras volvía a entrenar, no le gustaba que le dijeran que él la evitaba, aunque claramente si hacía eso, pero no intencionalmente. Gavi aunque intentaba hablar con ella, cada vez que lo hacía su mente viajaba a cuando Julieta se fue a Mónaco y lo único que hace es evitarla.

Él volteo hacia donde se supone que estaría Julieta, confundido al no verla, se acordó que se había ido a contestar una llamada hace unos minutos.

— Dile al mister que fui al baño.

Pedri solo asintió, viendo cómo este se iba al lugar donde Julieta se había ido al contestar la llamada.

Julieta suspiraba tranquila al escuchar a Arthur, dándole señales de vida de su mamá.

— En serio muchas gracias por llamarme y contarme como ha estado mi mamá, es un alivio escuchar que está bien — dice Julieta con su tono de vos calmada —. Dante ni siquiera me contesta las llamadas.

— Dante ha estado cuidándola demasiado, además ya sabes cómo es él, no te lo dice porque no quiere preocuparte — se escucha la voz de Arthur por la línea —. Y no es nada, quiero que estés informada de lo de tu mamá.

— No importa, muchas gracias en serio, sino fuera por ti no estuviera informada de absolutamente nada — Julieta se quedó callada unos segundos —. Me mantienes informada de todo, ¿sí? Arthur.

Julieta ya quería colgar, la verdad era que tenía demasiadas ganas de decirle que, por su culpa, Gavi había malentendido todo, pero no quería hacerle sentir mal.

— Por supuesto — Arthur igualmente se quedó callado —. Lo siento por hacer que Gavi malentendiera las cosas, con el mensaje que te mande.

Julieta miro en seguida el punto fijo confundida, ¿cómo fue posible que él se había enterado de eso?

— ¿Como...qué?

— Si, que lo siento — Julieta aún estaba demasiado confundida —. Taylor me llamó super enojada por haberte mandado ese mensaje, fue mi culpa que pasara todo eso y ahora estés peleada con Gavi.

Oh fue Taylor.

— No, am....Taylor a veces exagera un poco las cosas, no fue tanto tu culpa, todo está bien.

Claramente fue toda su culpa.

— Bueno como quiera, lo siento — Julieta solo asintió sin saber más que decir respecto a eso —. Me tengo que ir, hablamos luego.

— Por supuesto, adios Arthur.

Julieta suspiro, sabía perfectamente que iba a tener que hablar con Taylor de esto. Se dio la media vuelta, en seguida dio un pequeño brinco asustada.

— Joder Pablo, no hagas eso — toco su pecho, sintiendo su corazón palpitar rápidamente —. Me asustaste.

— Así que ahora ese Arturo, te llama.

Julieta rodó los ojos, sabiendo exactamente que se refería a Arthur, había escuchado cuando hablaba con él.

— Arthur, se llama Arthur — Gavi solo levantó su mano restando eso —. ¿Has escuchado todo?

— Si — Julieta sonrió, ya que tal vez escucho lo de su mamá —, pero como no se inglés, no entendí nada.

— Claro.

Julieta dejo de sonreír para hacer una simplemente mueca, se quedó callada simplemente mirándolo.

— ¿Y de que hablaban? — antes que ella pudiera decirle, él la corto —. No, ni me digas, no es algo que debería importarme. Por cierto, en la noche harán una cena y mi mamá quiere que vayas.

Julieta lo miro confundida, como es posible que de tres semanas que ellos no hablaban, va y le dice que quiere que vaya a una cena, bueno su mamá.

— No sé si pueda ir.

— Bien, paso por ti... — Pablo se calló rápidamente, ya que él pensó que Julieta había dicho que si —. ¿Cómo no?

— Como escuchas, no sé si pueda ir — Julieta solo lo miro inocentemente —. Tú mamá entenderá sino voy.

— ¿Mi mamá?

— Si, es ella la que quiere que vaya, ¿no? — Gavi se quedó callado unos segundos rascándose la nuca, sin saber que más decir. —. Y, además, ¿para qué es esa cena?

— Ah, sí claro, mi mamá quiere hacer una cena para festejarme, pero ahora con todos mis amigos de aquí.

Julieta solo asintió, pensando que la conversación ya había terminado, ya que ella ya había dicho que probablemente no iría a esa cena.

Gavi se acercó un poco a ella, Julieta pudo darse cuenta de eso y aunque fuera su novia, se ponía nerviosa de su acercamiento hacia ella.

Ambos se quedaron en un sumergido silencio, en donde no escuchaban nada y solo estaban ellos dos, allí mirándose fijamente.

— Quiero besarte.

Gavi había roto ese silencio, al igual que él, Julieta se había sorprendido por lo que dijo, pero a los segundos ella se acercó a él.

— ¿Y qué te detiene?

Gavi sonrió involuntariamente, algo que también ocasionó que Julieta sonreirá, y cuando ya estaban a sólo unos milímetros...

— ¡Gavi, ven acá! — se escuchó el grito de Xavi.

Ambos se separaron rápidamente por el repentino grito del mister, los dos pudieron ver lo rojo que estaban.

— Tengo que... tengo que irme. — dijo Gavi un poco apenado.

— Claro.

Julieta solo le dio una media sonrisa, viendo como este corría rápidamente al campo y la veía de reojo.

Ella solo suspiro lentamente, odiando un poco, mucho, a Xavi por haber interrumpido ese momento. Julieta simplemente volvió a donde estaba desde el inicio.

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Julieta se preparaba una rica comida para cenar, mientras veía a Taylor como se preparaba para ir a la cena de Gavi.

— ¿En serio no has visto mis tenis? — Julieta solo negó —. ¿En dónde los habré dejado?

— No lo sé, pero ya pasaste aquí más de 5 veces, no creo que por acto de magia vayan a aparecer a la sexta vez.

Julieta soltó una pequeña carcajada mientras seguía en su comida, Taylor solo la miro con su rostro serio, mientras volvía a buscar en donde ya lo había hecho.

— Creo que los deje en la casa de Pedri.

— Uy, y ¿cómo le vas a hacer para recuperarlos? — pregunto, curiosa —. Recuerdo que ustedes también están peleados. 

— Eso no lo sé, pero lo que sí, es que yo no sere la primera en hablarle. 

— Ustedes tienen más una pelea de egocentrismo. 

Taylor solo soltó una risa, para acercarse a ella a darle un pequeño beso e irse a poner otros tenis. Taylor y Pedri también estaban peleados, por una cosa muy diferente, pero según Julieta, era más fuerte su pelea. 

— ¿Estás segura de que no iras? — pregunto Taylor, ya lista para irse. 

— Aqui la pregunta es, ¿tú estás segura de ir? — dijo Julieta mirándola —. Recuerda que Pedri estará ahí.

— Lo sé, solo voy por Gavi. 

— Bueno, si es lo que dices. Yo no ire, no quiero que Gavi este ignorándome. 

— Okey, yo ya me ire, te veo en la noche. 

Julieta solo asintió levantando su mano como despedida, ella siguió con lo suyo, terminando su cena.

Claramente quería ir a esa cena, con tal de solo estar con Gavi, pero sabía que este la iba a ignorar y ella estaba muy cansada de estar rogándole, así que definitivamente, esta noche ella se quedara en su casa. 

Por el otro lado se encontraba Gavi sentado en su sala, viendo la puerta a cada segundo que pasaba.

Tan solo deseaba que Julieta cruzara esa puerta con esa sonrisa que tanto amaba Gavi. En todo el transcurso de la cena, él simplemente estaba al pendiente de la puerta.

Los chicos hablaban del entrenamiento que tuvieron hoy y los errores que deberían de corregir.

— Oh vamos, pero hay que confesar que el más distraído en el entrenamiento fue Gavi — hablo Ferran, eso hizo que Gavi volviera a la plática con ellos —. Sino era Julieta a quien miraba demasiado, era João que lo estaba matando con la mirada. 

Todos empezaron a soltar pequeñas carcajadas, mientras Gavi rodo sus ojos con fastidio, la verdad, lo último que quería, era hablar de João. 

— Cierto, fuiste muy obvio Gavi. — dijo Pedri con una sonrisa. 

— Yo creo que hasta el mismo João se dio cuenta de eso. — ahora hablo Balde. 

Todos voltearon al mismo tiempo al ver llegar a Fermín con Taylor, ambos venían riendo, Gavi enseguida volteo a ver a Pedri, que este los miraba molesto, con su mandibula apretada. 

Gavi en estos momentos deseaba tanto que Julieta estuviera a su lado, para poder hablar sobre ese triángulo amoroso que se había hecho en estas semanas. 

Aunque era un poco sorprendente, ya que Gavi recordaba que Fermin tenía novia, Alí, pero suponía que ellos ya habían terminado. Definitivamente él necesitaba a Julieta. 

— ¿De que venían hablando? — pregunto un curioso Ferran —. Nosotros también nos queremos reír.

— De nada importante — dijo Fermín aún con una sonrisa en su rostro —. ¿Ustedes de que hablaban?

— Nos estamos burlando de Gavi. 

— No deberían hacer eso. 

Gavi sonrió abrazando a Fermín como si fuera su gran mejor amigo. 

— Fermín si es MI amigo. 

— Es que sí, no deberían hacer eso.......sin mí. 

Los chicos empezaron a burlarse mientras de nuevo volvían al tema de Gavi y el enojo que tenía hacia Joao. Él simplemente rodo los ojos, ignorando todo lo que decían. Taylor se sentó a su lado sonriendo y entregándole un pequeño regalo. 

— Más tarde que nunca. — dijo refiriéndose al regalo. 

— Gracias — este le sonrió —. Y ¿Julieta?

Taylor simplemente negó, con tan solo eso Gavi sabía que se refería a que ella no vendrá. Suspiro, sabía que iba a ser una noche demasiado pesada. 

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Gavi se reía de las cosas que decían sus amigos. Todos, absolutamente todos estaban pasados de copas.

No sabía en qué momento fue que la cena tranquila pasó a una fiesta entre ellos. Ahora mismo el que hablaba era Ferran sobre como terminó con Sira.

Claramente Ferran estaba llorando, mientras sus amigos se burlaban de él. Gavi definitivamente estaba grabando eso, al día siguiente tenían que enterarse de cada babosada que decían.

Gavi estaba completamente sobrio, ya que él desde un inicio dejaba sus tragos en la mesa y cuando volteaba para tomar, alguien más lo había agarrado.

— Y digo tal vez yo fui el problema — decía mientras volteaba a ver a Pedri —. ¿Me veo como que soy el problema?

— No, bueno un poco, pero claramente no fuiste tú el del problema.

Ferran empezó a llorar de nuevo, mientras todos lo consolaban, de un momento a otro todos ya miraban a Taylor, esperando a que ella dijera algo.

— ¿Qué? ¿Por qué me miran así? Dan miedo.

— Pues te toca — Taylor miro confundida a Balde —. Te toca decir algo triste.

Taylor solo soltó una pequeña oh, la verdad era que estaba demasiada borracha para saber que era lo que decía, así que lo único que se le vino a la mente era lo de Julieta.

— Ya, tengo una historia — todos se callaron para escucharla —. Pero no es de mí, solo no le vayan a decir a Gavi — todos hicieron la señal de silencio, mientras Gavi la miraba confundido, definitivamente estaba muy borracha o eso hacia creer —. Lo que pasa, es que la mamá de Julieta tuvo un paro cardíaco, pero lo bueno es que ella sigue viva.

Los chicos escuchaban atentamente a Taylor, pero para decir verdad al día siguiente ellos se iban a olvidar de esa historia. Pero a Gavi no, a él no se le iba a olvidar, Gavi estaba sobrio.

Él dejo su celular al lado para sentarse al lado de Taylor, con su rostro de preocupación claramente.

— ¿Qué fue lo que dijiste?

— Lo que escuchaste, por eso Julieta se fue a Mónaco, por su mamá, y ahora probablemente se vaya para siempre a Mónaco — todos empezaron a decir que no se vaya —. Si, triste, yo también le dije que no se vaya, pero pues ella se va por su mamá.

— ¿Entonces Julieta no fue a Mónaco por Arturo?

— Arthur, no, Gavi fue un estúpido.

— Si, fui un estúpido. — susurro para el mismo. 

Los chicos volvieron a hablar sobre Julieta y el por qué no debería irse de aquí, haciendo planes para que ella se quedara, mientras Gavi se lamentaba una y otra vez. Él no dijo nada más, se alejó de la sala para irse rápidamente al cuarto de Aurora.

— ¿Puedes estar al pendiente de los chicos? Probablemente no regrese.

— Ay no, Gavi no pienso ser la niñera de....

— Iré a ver a Julieta, necesito que me perdone ella a mí.

— Ah si es así, claro, corre.

Gavi sonrió para rápidamente tomar las llaves de su coche e irse al departamento de Julieta, aún era temprano así que deseaba que estuviera despierta.

Solo pensaba en lo estúpido que fue, el no haber dejado que ella le explicara las cosas, fue un completo idiota y lo afirmaba.

No tardo ni 15 minutos cuando él ya estaba afuera del edificio. Todo su cuerpo temblaba, su corazón palpitaba fuertemente y sentía que sus nervios lo iban a matar.

Suspiro lentamente, preparándose mentalmente, ni siquiera sabía que le iba a decir, pero él quería verla y disculparse.

Entro al edificio para irse al departamento se Julieta, caminaba lentamente casi ni podia caminar, ya que sus piernas igualmente que sus manos temblaban.

— Hola, buenas noches Gavi.

— Buenas noches, Alejandro.

Gavi saludo al guardia del edificio, ahora eran amigos ya que Gavi se la pasaba más allí que en su propia casa.

— Ya se me hacía extraño que no venias, pensé que terminaste con la señorita Julieta.

— No, afortunadamente sigue siendo mi novia, ¿está en el departamento?

— Si, ella está ahí.

Gavi sonrió, despidiéndose con su mano para ir directamente al ascensor, toco el botón, sintiendo como su mano temblaba por el nerviosismo. No sabía que era lo que iba a decirle, como le iba a pedir perdón, lo único que sabia era que necesitaba verla. 

Al salir del ascensor, se quedó unos dos minutos fuera del departamento, pensaba una y otra vez como iba a convencer a Julieta que lo perdonara. Antes que él pudiera tocar la puerta, Julieta salía de esta, con su rostro preocupado y poniéndose un suéter. 

Julieta se detuvo rápidamente a ver a Gavi afuera, este la miraba con una sonrisa nerviosa, mientras que Julieta lo miraba confundida, preguntándose que hacia él aquí.  

— Pablo — fue la primera en hablar —. ¿Tú, qué...qué haces aquí?

— Oh, es que quería hablar contigo — Julieta en seguida escucho su voz demasiado nerviosa —. ¿Tú a donde ibas?

— Es que Taylor me llamo y escuche su voz, definitivamente esta borracha, así que no quiero que venga manejando. 

— No tienes que preocuparte, le dije a Aurora que por nada en el mundo los deje salir, probablemente se queden a dormir allá. 

— Oh bueno, entonces no me preocupo — sonrió —. ¿En qué momento, tu cena se convierto en fiesta?

— Eso ni yo lo sé, de un segundo para otro ellos ya estaban tomando. 

Julieta soltó una pequeña risa, ocasionando que Gavi también lo hiciera. Ambos ya no dijeron nada más, Gavi miraba a todos lados, menos a los ojos de Julieta, y Julieta simplemente veía sus manos, sin saber que más decir. 

— ¿Quieres...quieres entrar?

Gavi asintió, entrando al departamento, este en seguida se fue a sentar en la sala, Julieta hizo lo mismo, pero sentándose lo suficientemente lejos de él, algo que hizo extraño en Gavi. 

— Puedes sentarte a mi lado, por favor — Julieta solo asintió, sentándose a su lado, Gavi tomo las manos de ella —. Lo siento. 

Ella lo miraba mucho más confundida, de lo que ya estaba, simplemente se preguntaba el por qué estaba ahi, y por qué se estaba disculpando. 

— ¿Lo sientes... por qué?

— Por ser un gran estúpido, por dejarme llevar por los celos, por no dejar que me explicaras que fuiste a Mónaco por tu mamá, no por el idiota de Arturo — Julieta abrió un poco su boca, ¿en qué momento de había enterado? —. Fue Taylor, ella lo dijo. 

— Claro, ella tuvo que hacerlo — dijo sabiendo que probablemente lo dijo a propósito —. Yo intente decírtelo, pero no me dejabas. 

— Lo sé y lo lamento tanto, debí haberte escuchado, debí dejar mis celos a un lado, debí haber confiado en ti — suspiro —. Lo siento tanto, fui un gran idiota, estúpido. 

— Bueno, no voy a retractarte de lo que dijiste al último — ambos rieron —. Tres semanas, tres para que te dieras cuenta de la verdad y no por mí. Fuiste muy egoísta Pablo. 

— Lo sé, en serio. Lo siento, por favor perdóname. Yo no quiero perderte, sé que el ignorarte estuvo demasiado mal, que no debí hacerlo, fui un gran estúpido, por favor perdóname. 

Julieta separo sus manos con las de Gavi, algo que hizo alterar mucho en los adentros de él, ella se alejó un poco, sin saber cómo empezar con todo. Al par de unos simples segundos Julieta sonrió, Gavi miraba confundido. 

— Claro que te perdono cariño, aunque tú también te mereces una disculpa, por haber hecho que malinterpretaras todo y claro por mentirte — Gavi sonrió, mientras negaba —. Asi que, yo también lo siento. 

— No tienes que disculparte, entiendo porque lo hiciste, está bien — Julieta sonrió —. ¿Como esta ella?

Julieta suspiro pesadamente, sabiendo que se refería a su mamá

— Ella está bien por el momento — Gavi hizo una pequeña mueca —. Pero, tengo miedo. Miedo a que la pierde, miedo a que no pueda despedirme de ella. 

Gavi rápidamente se acercó a ella, para poder abrazarla, a los segundos escucho como ella empezaba a llorar. 

— Intento ser fuerte, pero no logro hacerlo. Mi madre casi muere, y yo estoy a miles de kilómetros de ella — las lágrimas resbalaban por sus mejillas —. No quiero perderla Pablo, aún no. 

— Y no lo harás linda, no lo harás. 

Gavi mensajeaba la espalda de Julieta, mientras ella lloraba y se liberaba de todo ese dolor que había acumulado en estos últimos días. Se desahogaba como no lo había hecho en años. 

Julieta recordaba que la última vez que ella había llorado de esa manera era cuando su padre había muerto. Después de unos largos minutos, Julieta rompió en abrazo limpiando sus lágrimas. 

— Gracias, lo necesitaba. Te necesitaba — Gavi sonrió —. Que pena que me veas llorando. 

— Ay, pero si te ves preciosa llorando — Gavi le dio un pequeño beso en la mejilla, Julieta sonrió con ese gesto —. No sé si estoy soñando, pero es la primera vez que me dijiste cariño y me has dicho que me necesitabas, estas siendo cariñosa conmigo. 

— Bueno, por ti puedo ser muy cariñosa. 

Julieta sonrió, al igual que Gavi, ambos se quedaron callados por unos pequeños segundos.

— Y.... ¿te iras a Mónaco?

Julieta guardo silencio, sin saber que responder a esa pregunta, no sabía que decirle respecto a eso. 

—Aún no lo sé, estoy pensándolo, pero si decido irme, probablemente me vaya como en marzo, del proximo año. 

— Bueno, si es así, a mí no me importaría nada, tener una relación a distancia contigo. 

Julieta soltó una pequeña carcajada, ocasionando que Gavi riera junto a ella. 

— ¿Te vas a quedar ahi solo viéndome o ya vendrás a besarme de una vez?

— Oh por dios, estaba esperando a que lo dijeras. 

Julieta sonrió divertida, para después sentir los brazos de su novio jalándola hacia él y disfrutar el profundo beso, que ambos habían esperado por estas tres dolorosas semanas. 

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𝐍𝐎𝐓𝐄:

Quiero dar una aclaración antes que suba los otros capítulos, después no entenderán.
Ya saben que esto es ficticio, así que muchas de las cosas que pasaron en la realidad, probablemente no pasen.

Por ejemplo la lesión de Gavi, si la pondré pero no cuando lo hizo, sino unos meses después, por ejemplo, Gavi se lesiono en noviembre, aqui en el fic se lesionara como en marzo, así que lo digo para que no se revuelvan.

Y bueno, más que nada decirles que ya no tengo bloqueo creativo asi que muy probablemente esté actualizado seguido estos días.

Y también esta por terminarse la primera parte de esta linda historia, sin más que decir espero actualizar en este semana sino en la otra.