—— WHO IS PLAYING WITH EVERYONE? ——

—Klaus tenemos que hablar.— Dijo Astrid entrando en la casa del híbrido, viendo a este junto a la chimenea con una apariencia que reflejaba que no estaba nada bien. —¿Qué te ha pasado?— Preguntó preocupada.

—Silas, me apuñaló con la estaca de roble blanco y me dejó un trozo clavado.— Explicó Klaus con dificultad, señal que la estaca haciendo bien su propósito.

—Ahora ya no soy una paranoica por pensar que es peligroso, ¿no?— Se burló mientras se acercaba un poco. —Pero podría haberte matado.— Afirmó preocupada por lo que le había pasado.

—Me siento como si me estuviera muriendo.— Garantizó Klaus creyendo que con quien hablaba era realmente Astrid.

—A pasar de que disfrutaría un poco viéndote morir, aún no me has conseguido la cura.— Dijo Silas mostrando que podía tomar la apariencia de cualquier ser sobre la tierra, lo que confirmaba lo poderoso que podía ser.

—Silas.— Murmuró Klaus al ver que no era Astrid con la que estaba hablando.

—Exacto.— Respondió el brujo con una sonrisa. —Anoche adopte la forma de Shane, hoy la de Astrid y mañana, ¿quien sabe?— Comentó sabiendo perfectamente como incentivar al híbrido, a fin de cuentas era muy evidente y más fácil de engañar y de manipular que la híbrida.

—Muéstrame tu verdadero rostro.— Exigió Klaus mientras miraba a Silas con despreció, cosa que le costaba porque a quien veía no era a Silas sino a Astrid.

—¿Por que iba a hacerlo, pudiendo adoptar la forma de quien quiero que veas?— Preguntó Silas con burla. —Resistete cuanto quieras Klaus, pero hasta que me consigas la cura, solo te causare sufrimiento.— Añadió el brujo justamente antes de irse, dejando en el salón al híbrido retorciendose de dolor.

✶⊶⊷⊶⊷❍❍⊶⊷⊶⊷✶

—He recibido tus tropecientos mensajes, más vale que sea urgente.— Dijo la verdadera Astrid mientras se quedaba en la sala contigua a la que estaba el híbrido.

—Lárgate.— Se oyó de fondo la voz de Klaus, el cual creía que era, otra vez, Silas jugando con lo que parecía ser un punto vulnerable.

—¿Klaus? ¿Dónde estás?— Preguntó Astrid confundida mientras entraba en el salón en el que el híbrido estaba y veía el mal aspecto que este tenía. —¿Qué te ha pasado?— Preguntó preocupada.

—Necesito más tiempo, deja de agobiarme.— Gritó Klaus creyendo que seguía siendo Silas, que jugaba con su cabeza.

—¿Agobiarte yo?— Preguntó Astrid sorprendida por su comentario y por la actitud que estaba teniendo, aunque tratándose de Klaus no debía de sorprenderla en absoluto. —Tendría que estar fuera del país cuando has empezado a acribillarme el móvil.— Alegó la híbrida haciendo que Klaus se diera cuenta de que no era Silas.

—¿Astrid?— Preguntó mientras la miraba algo confundido y desorientado. —¿Eres tu?— Preguntó de nuevo desconcertando a la híbrida con su pregunta.

—No soy San Pedro.— Respondió con obviedad, haciendo que Klaus la mirase con una expresión de pocos amigos. —Pues claro que sí, ¿quien voy a ser sino?— Alegó confundida sin entender que estaba pasando.

—Demuéstralo.— La exigió sin saber del todo si era realmente ella.

—Si esto es alguna patraña tuya para conseguir que mate a alguien, búscate a otro compinche de matanzas. Tengo cosas que hacer.— Alegó Astrid sin comprender a qué venía aquel comportamiento por su parte.

—Espera, por favor.— La pidió con un tono de súplica, haciendo que la Original se diera la vuelta viendo que tal vez sí era grave, Klaus pocas veces decía «por favor». —Silas me apuñaló con la estaca de roble blanco y aún tengo un trozo clavado dentro.— Añadió esperando que Astrid pudiera ayudarle a evitar que terminara muerto.

—¿Por qué iba a atacarte Silas?— Preguntó Astrid sin entender por qué le habría atacado a él cuando Klaus no suponía ningún peligro ni le podía ofrecer nada de gran valor.

—No estaba en situación de hacer preguntas.— Respondió con obviedad.  —Creo que es obvio que estoy herido, ahora entenderás por por qué te he llamado.— Añadió mientras señalaba las tijeras de podar que había en el suelo, las cuales estaban llenas de sangre.

—¿Y ahora necesitas ayuda?— Preguntó Astrid cruzándose de brazos. —Por que creo que dije por activa y por pasiva que no buscarais la cura, sino lo hubierais hecho no estarías en esta situación.— Le recordó mientras soltaba un suspiró de frustración. —¿Que quieres que haga?— Añadió sabiendo que debía de ayudarlo, su moralidad y sus sentimientos, como siempre, jugaban en su contra.

—En realidad es muy sencillo.— Afirmó Klaus algo aliviado de que ella pudiera ayudarlo. —Necesito que me saques la estaca.— Añadió con obviedad.

✶⊶⊷⊶⊷❍❍⊶⊷⊶⊷✶

—Oh, dios mío. Si tienes corazón.— Dijo con burla Astrid mientras buscaba, con las tijeras, algún rastro de una estaca. —Oh, falsa alarma, es una costilla sangrienta.— Añadió mientras Klaus ponía una mueca de dolor.

—Me alegra que verme sufrir te resulte divertido.— Comentó entre dientes molesto por el comportamiento que estaba teniendo, pero no estaba en situación de hacer enfadar a Astrid, no por su bien.

—Considéralo como una venganza por encerrar a mis hermanos quinientos años.— Le informó mientras centraba su atención en la herida. —Te juro que aquí no hay nada.— Afirmó con seguridad, sabiendo que si hubiera algún rastro de la astilla que aún tuviera dentro ya habría dado con ella, no era muy complicado.

—Mientes.— Garantizó Klaus sin creerse que aquella posibilidad fuera posible, porque de serlo no sentiría aquel fragmento dentro de él.

—¿Qué necesidad tengo de hacerlo?— Preguntó mientras tocaba en un punto que hizo que el híbrido empezara a dar golpes en la mesa en señal de que le estaba haciendo daño. —Lo siento, lo siento.— Se disculpó mientras sacaba un poco las tijeras. —Perdona.— Añadió una vez ir él se relajo, para luego sacar las tijeras de una forma violenta. —Sabes que, que no lo siento. Te mereces sufrir por todo el mal que has hecho, así que hoy haremos las cosas a mi manera.— Sentenció mientras Klaus se daba la vuelta y miraba fijamente a Astrid la cual le miró con una expresión en la que sí quería sobrevivir iba a tener que cooperar, porque sino ella no haría nada que le pudiera ayudar.

✶⊶⊷⊶⊷❍❍⊶⊷⊶⊷✶

—Siento como las astillas se acercan a mi corazón.— Dijo Klaus mientras observaba como Astrid estaba con su teléfono ignorandole. —Ayudame.— Exigió.

—Ya... creo que todavía no has aprendido lo que la mayoría han sentido.— Respondió sin apartar la mirada de la pantalla de su teléfono.

—Te salve la vida.— Afirmó Klaus esperando que Astrid tuviera el mínimo sentimiento de compasión.

—Nadie pidió que lo hicieras, y si intente algo estúpido es por que vosotros habéis desencadenado un infierno en la tierra.— Le recordó Astrid mientras le miraba de reojo viendo que todavía no había sufrió lo suficiente.

—Estas intentando matarme.— Afirmó Klaus mostrando que estaba comenzando a enfadarse y eso, en verdad, no le convenía nada.

—No, estoy intentando que aprendas una valiosa lección con respecto las dagas, los ataúdes y esas cosas.— Respondió la chica mientras guardaba su teléfono.

—No pienso dar mi brazo a torcer ni por ti no por nadie.— Sentenció con firmeza.

—¿Qué pasa contigo?— Preguntó Astrid mientras se ponía de pies. —Te he tendido la mano a pesar de todo lo que has hecho y sigues queriendo salirte con la tuya.— Alegó sorprendida por el comportamiento que estaba teniendo, era evidente que nunca iba a cambiar. —Lo tuyo no tiene remedio.— Afirmó mientras se daba la vuelta con la intención de marcharse.

—A mi no me des la espalda.— Afirmó Klaus mientras se ponía delante de ella y la miraba enfadado.

—Tenia que haberlo hecho hace mucho tiempo.— Garantizó la híbrida mientras mantenía una expresión en la que no iba a ayudarlo, de hecho la daba igual si acababa muerto.

—Ha desaparecido.— Murmuró confundido. —Nunca, nunca fue real, estaba en mi cabeza.— Explicó Klaus mientras miraba a Astrid sorprendido. —Silas entró en mi cabeza.— Añadió al comprender todo lo que había pasado, y el por qué Astrid no encontraba ningún resto de la estaca.

—Genial, un problema solucionado, ya puedo irme de este lugar.— Sentenció la Original justamente antes de irse a velocidad vampirica dejando allí a Klaus.

—Astrid no...— Empezó a decir justamente cuando se fue. —Mierda.— Murmuró con frustración.

✶⊶⊷⊶⊷❍❍⊶⊷⊶⊷✶

—¿Seguro que estarás bien con ella?— Le preguntó Astrid a Hayley mientras la primera preparaba sus cosas.

—Sí, no te preocupes por mi.— La tranquilizo Hayley agradecida de que alguien se preocupara por ella.

—Bueno, loba, es algo inevitable. Me preocupo por mi familia, por muy destruida, disfuncinal y nueva que sea.— Sonrió la Original mientras dejaba su maleta en la puerta de su habitación.

—Gracias por todo, de verdad Astrid.— Insistió Hayley mientras Astrid salía fuera de su habitación y veía a alguien  en la entrada de su casa.

—¿Quien eres?— Preguntó Astrid hacia el hombre de pelo rojizo que estaba allí.

—Es el momento de que tengamos una reunión familiar, Astrid.— Sonrió el misterioso hombre mientras se daba la vuelta para mirar a la chica.

—Silas.— Murmuró Astrid justamente cuando Silas usaba la magia y la atacaba.

—¿Astrid? ¿Estas ahí? ¿Qué ha pasado?— Preguntó Hayley justamente cuando escuchaba varios golpes y un quejido de dolor, señal de que había ocurrido algo.

✶⊶⊷⊶⊷❍❍⊶⊷⊶⊷✶

—Puedes hablar con más calma, he pasado una mañana de locos.— Le pidió Klaus a Leonidas ya que no estaba entendiendo nada de lo que el vampiro estaba diciendo.

—Tendrás una vida de locos si no te aseguras de que mi hermana esta bien.— Le advirtió el moreno preocupado por lo que le podría haber pasado a su hermana mayor.

—Su coche esta aquí aparcado.— Le tranquilizó Klaus al reconocer el vehículo de color negro.

—Mira en su casa.— Insistió el Original. —Hayley me dijo que la estuvo escuchando hablar con alguien y luego hubo como una pelea.— Explicó Leonidas haciendo que Klaus frunciera el ceño.

—¿Alguien intentó robar a Astrid?— Preguntó con burla al ver que la puerta estaba forzada. —Se lo comería....— Añadió justamente cuando entraba en la casa y veía varias cosas rotas y tiradas en el suelo, junto a una advertencia que estaba escrita en la pared con sangre.

—¿Qué pasa?— Preguntó Leonidas preocupado. —¡Klaus! ¡Dime que esta pasando!— Exigió al ver que el híbrido se había quedado en silencio preocupado por lo que podía haber ocurrió o por lo que iba a ocurrir.

—Silas.— Consiguo decir. —Se la ha llevado Silas.— Sentenció con seguridad en sus palabras, ¿que otra persona atacaria a Astrid y se la llevaría?

—¿Cómo lo sabes?— Preguntó Leonidas preocupado por lo que le podía haber ocurrido a su hermana, si es que seguía siendo su hermana.

—Irónicamente ha dejado un mensaje con sangre, y pone, cito textualmente: "No la busquéis porque ya no estará".— Leyó Klaus mostrando que los problemas con Silas habían crecido desmesuradamente.

—¿Puedes rastrearla?— Preguntó el moreno haciendo que el híbrido se quedara en silencio confundido. —Eres medio hombre lobo, se supone que deberías de poder hacerlo. Astrid lo hacía incluso sin control y con el hechizo.— Explicó sabiendo que sin una bruja lo único que podrían hacer era dar con ella mediante el olor.

—¿Y para que la quiere?— Preguntó Klaus mientras salía de la casa de Astrid y se iba en busca de Bonnie.

—Teniendo en cuenta que es la única mujer que desciende de él y que quiere traer de vuelta a su querida hermana perdida que por cierto le traicionó, supongo que usar el cuerpo de mi hermana para traer de vuelta a la suya.— Explicó el ex brujo preocupado por lo que suponía que sucediera eso, porque si llegaba a suceder perdería a su hermana, para siempre.

—¿Qué pasaría si no llegamos a tiempo y lo hace?— Preguntó Klaus queriendo tener toda la información necesaria para saber a que se estaban exponiendo.

—No podríamos traer de vuelta a Astrid. El espíritu, por así decirlo, que estaría en el cuerpo habría acabado con el anterior. Para hacerlo, el dueño debe de morir y en los minutos posteriores se debe de realizar el hechizo.— Explicó Leonidas mostrando en su voz el miedo que tenía a que eso pudiera suceder. —No es igual a cuando, tu por ejemplo, estabas dentro del cuerpo de Alaric. Por qué ambos cuerpos están vivos.— Añadió, esperando que de esa forma Klaus comprendiera la gravedad de la situación.

—Así que debe de matar al portador original para traer de vuelta al huésped.— Asumió al comprender todo lo que el moreno le había explicado.

—Exacto.— Respondió el Original viéndo que lo había comprendido. —Y empieza a buscar, si Silas lleva dos mil años encerrado, te aseguro que todo lo tiene muy bien planeado, principalmente para que nadie le impida cumplir con su objetivo.— Añadió el vampiro sabiendo que su única esperanza era que Klaus pudiera dar con Astrid o que una bruja lo hiciera antes de que fuera demasiado tarde y fuera irreversible lo que Silas planeaba hacer con el cuerpo de Astrid.

—Te mantendré informado.— Se limitó a decir Klaus justamente antes de finalizar la llamada, dándose cuenta de que aquello se había vuelto mucho más personal de lo que ya era. Porque una cosa era atacarle a él directamente y otra, muy distinta, era atacar a Astrid.

★★★

Empiezan los problemas y creerme que en el próximo capítulo será todo intenso.

Bueno, es un capítulo importante donde pasan muchas cosas.

Voy a empezar desde el final, con la conversación entre Klaus y Leo, se que lo de poseer cuerpos no es tan dramático en la serie, pero tengamos en cuenta que la magia de la familia de Astrid y la de Esther es completamente diferente, además de que teniendo en cuenta que Silas es capaz de hacer todo, lo más conveniente es matar para que si a él le impiden sus objetivos sus enemigos ganen, o por lo menos así es como yo lo interpretó.

También es cierto, que amo hacer a Leo en modo hermano protector, en especial amenazando a Klaus.

Pasando a la escena de Hayley y Astrid, en verdad no tiene mucha relevancia, pero sí es cierto que ella y Taylor se sumarán a la búsqueda de Astrid, ambas por razones diferentes aunque todo enfocado en la familia. Evidentemente.

Y la escena Klastrid, bueno, lo ocurrido en el capítulo anterior no significa nada para su relación. En especial cuando será durante y después del embarazo, cuando las tensiones entre ambos empiecen a desaparecer, esto es como un tira y aprieta, pero al final todo termina en final feliz o amargo, depende.

Dejando de lado, lo del capítulo de hoy, la semana que viene tendrán lugar los dos últimos capítulos de la historia. Dos capítulos en los que realmente van a pasar muchas cosas.

Como recordatorio, os informo que en Enchanted habrá uno de los flashbacks más esperados, la boda de Klaus y de Astrid. Así como más respuestas sobre el pasado de Taylor y el padre biológico de Astrid.

No os niego que estoy deseando empezar Enchanted ya.

¿Qué os ha parecido el capítulo?

Os leo ❤️