Taehyung no puede precisar el momento exacto en que su amistad con Jungkook comenzó, pero esta relación se remonta a sus recuerdos más tempranos. Han sido compañeros inseparables en cada etapa de sus vidas, desde los días de juegos infantiles hasta enfrentar juntos los desafíos actuales. Siempre han sido un equipo, yendo a todas partes juntos y apoyándose mutuamente sin importar las circunstancias. El tiempo solo ha fortalecido el vínculo entre ambos, y Taehyung tiene la certeza absoluta de que nada, bajo ninguna circunstancia, podrá romper esa amistad.

Vaya que estaba bastante equivocado.

Nunca habría anticipado los drásticos cambios que experimentaría en su vida. Si alguien le hubiera advertido que su mejor amigo lo traicionaría de la peor manera, Taehyung nunca habría creído semejante posibilidad. Sin embargo, la vida a menudo, se empeña en desafiar nuestras expectativas, y Taehyung tuvo que aprender esa lección de la manera más difícil.

El hecho de cumplir trece años y dar inicio a la etapa de secundaria no representaba un obstáculo para él. Lo veía como una transición natural, sobre todo porque contaba con Jungkook a su lado, lo cual le confería una sensación de seguridad y confianza que hacía que todo lo demás pareciera insignificante. Sin embargo, nunca anticipó que sus caminos tomarían rumbos tan divergentes; y todo esto se dio cuando, al iniciar el nuevo ciclo escolar, Jungkook rápidamente se volvió uno de los chicos populares.

Podría pensarse que Taehyung, siendo su mejor amigo, seguiría el mismo rumbo que Jeon. No obstante, las circunstancias no se desarrollaron de esa forma, ya que Kim se convirtió únicamente en el blanco de burlas.

Taehyung poseía indudablemente una personalidad encantadora, pero físicamente hablando, carecía de rasgos que lo hicieran destacar. Especialmente al compararse con su atractivo mejor amigo, que capturaba la atención de todos en la escuela. En cambio, Taehyung tenía su cabello siempre despeinado y carente de brillo, junto con los granitos en su rostro y los brackets en sus dientes, los cuales eran motivo de bromas constantes. Además, su baja estatura y complexión delgada contribuían a resaltar aspectos negativos en su apariencia.

Indudablemente, el aspecto físico no lo abarca todo en la vida, pero en esa etapa de la adolescencia, donde los jóvenes buscan desesperadamente encontrar su lugar en el cual encajar, puede causar un impacto emocional significativo. Esto fue especialmente evidente en el caso de Taehyung, cuya autoestima se vio profundamente afectada.

Habría podido resistir todos los comentarios negativos y tratos injustos que recibía si hubiera contado con el respaldo de alguien a su lado. Sin embargo, nunca imaginó que su mejor amigo sería quien contribuiría a quebrantarle por completo.

Jungkook era joven, y especialmente tonto. La presión social resultó ser un desafío abrumador para él, llevándolo a tomar decisiones cuestionables. Al percatarse de que la única forma de mantener su popularidad era estando del lado de aquellos que molestaban a su mejor amigo, sucumbió a esa presión sin comprender completamente las consecuencias. Sin embargo, con el tiempo, llegaría a lamentar cada una de esas elecciones.

Durante mucho tiempo, Taehyung toleró los tratos injustos hacia su persona sin comprender qué estaba mal en él. Sus hermanos mayores tenían una apariencia impresionante y sus padres eran igualmente encantadores. Parecían una familia sacada de un cuento de hadas, y él se sentía como el patito feo en medio de toda esa belleza.

¿Por qué? ¿Por qué no podía ser tan apuesto como ellos?

"Eres el niño más precioso que mis ojos han visto", es lo que su hermano Hoseok siempre solía decirle. Era una afirmación que Taehyung anhelaba aceptar, pero por más que lo intentara, resultaba imposible cuando a diario escuchaba palabras que contravenían esa idea, hiriendo así su autoestima.

Ante la creciente dificultad de la situación, Taehyung decidió hablar con sus padres para solicitarles la posibilidad de mudarse a vivir con una de sus tías que residía en el extranjero. Los señores Kim, desconcertados por la repentina y desesperada decisión de su hijo, no lograban comprender la razón detrás de su deseo repentino de alejarse de ellos.

A pesar de haber recibido múltiples negativas, Taehyung no desistió en su insistencia en ningún momento. Llegó al punto en que incluso su hermano Seokjin se ofreció a acompañarlo con la esperanza de persuadir a sus padres para que accedieran, lo cual dio resultado. El menor de los Kim era la adoración de sus hermanos mayores, tanto así que incluso Hoseok no dudó en apuntarse para marcharse con ambos. No obstante, Seokjin le pidió que permaneciera con sus padres, reconociendo que perder a todos sus hijos de golpe sería una carga demasiado difícil de sobrellevar para ellos.

Hoseok no estaba completamente satisfecho con la decisión, pero siempre había escuchado a su hermano mayor, por lo que al final accedió. Aunque en realidad no quería distanciarse de Taehyung, ya que la sola idea de separarse de él le partía el corazón en mil pedazos.

Aunque al menor le causaba un dolor profundo alejarse de su familia de esa manera, estaba convencido de que revelar la verdad solo los destrozaría aún más, y él no deseaba eso. Además, no quería que su familia lo percibiera de manera diferente, pues a sus ojos siempre había sido alguien que resplandecía, y no deseaba que esa imagen fuera reemplazada por lástima.

Irse lejos es algo que le agobiaba demasiado para ser honesto, al menos ahora que su hermano Seokjin estaría a su lado, podría sentirse más tranquilo al respecto. Fue así como ambos finalmente se dirigieron a Nueva York, donde su tía Dahyun y su primo Namjoon los recibieron con gran alegría en su hogar.

Taehyung pensaba que la solución a sus problemas era escapar lejos de ellos. Más tarde, se daría cuenta que en realidad solo necesitaba de tiempo para terminar de crecer y desarrollarse por completo.

Quizás fue la vida, el karma o posiblemente los genes, pero Taehyung terminó convirtiéndose en un chico sumamente precioso. Aun así, haberse marchado resultó ser beneficioso en gran medida. Tener el constante apoyo de su hermano y su primo le permitió reconstruir su autoestima desde cero, ayudándole a convertirse en una persona fuerte y seguro de sí mismo.

A pesar de las transformaciones físicas que experimentó, Taehyung se comprometió consigo mismo a no permitir que esas alteraciones afectaran su esencia. Se propuso mantenerse humilde en todo momento y a no dejar que los estereotipos sociales definieran su identidad.

Con esa convicción en mente, al finalizar la secundaria, decidió que era tiempo de volver. Durante esos casi tres años en los que vivió en el extranjero, no tuvo la posibilidad de ver a sus padres y a su hermano Hoseok más que a través de videollamadas. La añoranza por su familia era abrumadora; su único deseo era reunirse con ellos nuevamente.

Seokjin se encontraba estudiando la universidad en ese momento, destacándose como el mejor de su año y perfilándose hacia un futuro prometedor. Quedarse en Estados Unidos le aseguraba un camino exitoso. Sin embargo, cuando Taehyung le comunicó su decisión de regresar a Corea, Seokjin no dudó ni un segundo en seguirle. Para él, su hermano menor y su familia eran lo más importante. Había llegado a ese país en primer instancia por Taehyung, él era la razón principal que le unía a ese lugar que ni siquiera era su hogar.

A pesar de las múltiples personas que cuestionaron su elección e incluso de aquellos que intentaron persuadirlo para cambiar de opinión, Seokjin se mantuvo firme sin dar importancia alguna a las opiniones ajenas. No dudando en ningún momento cuando hizo su cambio hacia una universidad en Seúl.

Taehyung se encontraba sumamente nervioso, aunque también se sentía renovado y listo para regresar y confrontar sus miedos, incluyendo su pasado y a aquel antiguo amigo que había dejado atrás. A pesar del daño que le había causado, nunca albergó rencor hacia él. No obstante, tampoco tenía interés en recuperar aquel vínculo que este mismo se había encargado de romper.

Durante el tiempo que estuvo lejos, no supo nada acerca de Jungkook. Nadie conocía la verdadera historia de lo ocurrido, excepto su primo Namjoon, a quien le había confiado todo. Los años que vivieron juntos les ayudó a ambos a consolidar un vínculo fuerte más allá de la sangre. El hecho de tener la misma edad les posibilitó coincidir en la misma clase, facilitando así la estadía de Taehyung en la secundaria y brindándoles la oportunidad de pasar más tiempo juntos.

Es verdad que era su primo, pero también se había convertido en su mejor amigo.

Por esa razón, cuando le dijo que volvería a Seúl porque extrañaba a su familia, Namjoon no dudó ni un segundo en decirle que se iría con él.

Fue necesario insistir bastante con Dahyun, ya que desprenderse de Namjoon, siendo su único hijo, resultaba extremadamente difícil para ella. Aunque para el moreno tampoco era sencillo alejarse de su madre, sabía que no quedaría sola. Al partir, esperaba que su madre pudiera finalmente centrarse en reconstruir su vida de la manera adecuada.

Su padre falleció a causa de una enfermedad cuando Namjoon era tan solo un niño pequeño, una pérdida devastadora que afectó a su madre en muchos aspectos. Salir adelante fue un desafío considerable, pero su hijo siempre fue su fuente de fortaleza, motivándola a seguir adelante. Fue así como Dahyun se aventuró a mudarse a Nueva York con su pequeño hijo y logró establecerse allí.

Hace cuatro años que mantenía una relación con un hombre llamado Oliver, a quien conoció en su lugar de trabajo. Siempre fue muy cautelosa con respecto a su relación, preocupada de que no afectara negativamente a su hijo. Por ello, constantemente estableció barreras para evitar que se traspasaran ciertos límites.

El deseo más profundo de Namjoon para su madre era que encontrara la felicidad, y Oliver parecía ser una persona agradable. Durante todo este tiempo, él había demostrado paciencia frente a la situación y condiciones de su madre, y Namjoon podía percibir claramente cuánto la valoraba. Por lo tanto, esperaba que, con esta distancia entre ellos, ella pudiera finalmente dedicarse a sí misma y construir su propia felicidad con él.

Así que después de rogar por varios días y de todas las maneras posibles, Dahyun finalmente aceptó dejar que Namjoon se marchara con sus primos. De esta manera, los tres Kim finalmente emprenderían su regreso a Corea.

Taehyung no podía anticipar las vueltas inesperadas que daría la vida ni lo que le aguardaba al regresar, especialmente la sorpresa que le esperaba al comenzar el instituto.

—¿Jeon Jungkook? No, lo siento. No me suena.

—¡Ah! Creo que se refiere al rarito.

Quizás su error fue pensar que las cosas permanecerían de la misma manera que cuando se marchó, pero al regresar, se dio cuenta de lo alejado que estaba de la realidad. Ya que en una ocasión, al no encontrar rastro alguno de Jungkook, su curiosidad le llevó a preguntar por él. Nunca imaginó que aquel chico que solía estar en la cima de la jerarquía social ahora deambularía por los pasillos en completa soledad.

Sí, la vida sin duda da muchas vueltas.

Holaaaa, finalmente este bebé está saliendo a la luz c': ¡Qué emoción!💖. Ya les había comentando por mi canal de WhatsApp, pero esta será una historia cortita, espero que les guste c':

¿Listxs? n.n

𝐊𝐢𝐦𝐍𝐢𝐤𝐚𝐫𝐢.