LIAM DUNBAR
ALGUIEN MÁS...
original: @noncanonimagines
☯︎︎
ADVERTENCIAS: No
LIAM DUNBAR TE HACÍA sentir la chica más afortunada del mundo. Era un novio increíble y las cosas iban genial entre ustedes.
Eso fue hasta que Hayden entró en escena. Confiabas en Liam y sabías que nunca te engañaría, pero no podías negar que él y Hayden habían conectado casi al instante, y los dos empezaron a pasar cada vez más tiempo juntos.
Te parecía bien. Al menos, eso era lo que te decías a ti misma y a los demás.
Liam había sido completamente ajeno a tus celos. Una parte de ti no podía culparlos ya que tú también lo negabas. Así que la primera persona que se dio cuenta fue tu hermano, Scott.
—¿Están bien las cosas entre tú y Liam?—, te preguntó en tono suave, con las cejas fruncidas por la inquietud.
Tu asentiste con fuerza.
—¡Por supuesto, las cosas van genial! ¿Por qué no habrían de estarlo?—, descartaste.
—Parecías realmente molesta cuando dijo que estaba saliendo con Hayden—, señaló.
Respiraste hondo y mantuviste la compostura.
—¿Yo? ¿Molesta? ¿Por qué iba a estar molesta?—, preguntaste, fingiendo demencia.
La expresión de preocupación de Scott no desapareció. De hecho, solo se intensificó.
—Scott, estoy bien, de verdad. Mira, tengo demasiado trabajo que hacer y realmente no quiero hablar de esto ahora—, dijiste.
Estaba más claro que el agua que tu hermano no estaba convencido. Aún así, se limitó a asentir y a retroceder.
Por mucho que intentaras convencerte de que todo iba bien, cada te resultaba más difícil porque Hayden era cada vez más intrusiva. Parecía que estaba constantemente llamando o enviando mensajes a Liam, incluso a altas horas de la noche.
Como resultado, los dos ya no pasaban tanto tiempo juntos, a pesar de que hace mucho tiempo que eran inseparables.
Finalmente, los dos por fin tuvieron algo de tiempo a solas y te alegraste de tener a Liam contigo solo una vez más. Sentiste que sus brazos te rodearon por la cintura y te acercaban mientras apretaba sus labios contra los tuyos. Fue entonces cuando el sonido de su teléfono los interrumpió. Era Hayden. Claro.
—¿Está bien si contestó?—, preguntó.
Antes sus palabras, pusiste la mayor sonrisa falsa que pudiste hacer.
—Por supuesto—,dijiste.
—Gracias, eres el mejor—, respondió él.
Asentiste, tragando saliva con fuerza.
—Uh huh. En realidad estoy un poco cansada y creo que me iré a casa de todos modos—, dijiste antes de salir rápidamente. Una parte de ti quería que te persiguiera. Pero no lo hizo.
No fue hasta la siguiente reunión de la manada cuando oficialmente te hartaste. Pensaste que estabas bien, que serías capaz de mantener la compostura. Fue entonces cuando sonó el estúpido teléfono de Liam.
—Probablemente sea tu novia—, refunfuñaste. Era un tono bajo, pero lo bastante alto como para que los hombres lobo presentes te oyeran alto y claro.
Liam te miró, confuso.
—¿Qué? Estás aquí mismo—, dijo, desconcertado.
Tú suspiraste.
—No, yo no. Tu otra novia. O al menos la chica que desearías que fuera tu novia—, espetaste.
Él negó con la cabeza.
—____... ¿De qué estás hablando?—, preguntó, preocupado.
—Admítelo, Liam: ¡prefieres estar con Hayden que conmigo!—, exclamaste mientras todos los demás te observaban incómodos.
—No, eso no es cierto—, argumentó él.
Te pusiste en pie, harta.
—Da igual. No hagas que espere—, soltaste antes de salir furiosa.
Cuando te quedaste sola, respiraste hondo, tratando de calmarte. No era propio de ti montar una escena así, pero estabas muy enojada.
De repente, diste un respingo y sentiste que una mano te tocaba el hombro. Te diste la vuelta para ver a Liam.
—¿Qué? ¿Hayden no quería hablar después de todo?—, preguntaste con sarcasmo.
Liam suspiró y puso los ojos en blanco.
—Okey, he captado la indirecta. Soy un novio terrible—, dijo.—¿Ahora podemos hablar de esto, por favor?—.
Se encogió de hombros.
—No hay nada de qué hablar—, mentiste.
—Sí lo hay. ¿Por qué no me dijiste que te molestaba que pasara tiempo con Hayden?—, preguntó sinceramente.
Suspiraste.
—Porque soy tu novia. Por supuesto que pasar literalmente todo tu tiempo con otra chica me molestaría. No tendría que haber dicho nada—, afirmaste.
Liam asintió, con una expresión cargada de culpa.
—Tienes razón. Y lo siento. Nunca quise hacerte daño. Te prometo que Hayden es sólo una amiga. Te quiero, ____—, dijo.
—Yo también te quiero—, respondiste tímidamente.
Suavemente, tomó tu mano entre las suyas, acariciándola con el pulgar.
—¿Puedo compensarte?—, te preguntó.
Sonreíste juguetonamente antes de besarle.
—Oh, más te vale—.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top