Chapter 6:-

-Tu boda se adelantará.-anunció tras beber de su café.

Rosé lo observó con espantó, para después colocar la mirada en sus hermanos, los cuales se hicieron los desentendidos evitando él mirar.

-Padre, aún estoy en...

-Lo sé, soy consciente de ello.-asintió dejando la taza sobre la mesa.-Pero no te preocupes, el tiempo pasa rápidamente. No te darás cuenta cuandos hallas terminado él curso.

-Y la familia de...

-Tranquila, ya está todo listo.-le aseguró con una sonrisa algo sádica.-Ahora, ve y apresuraté, tu chofer ya está aquí.

-¿Chofer? .-río tras sus palabras.-Mas parece un guardaespaldas.

-Es un muerto de hambre.-pronunció él mayor dándole un bocado a su tostada.-No me sorprendería si algún día desapareciera dinero. Padre, cómo pudiste contratar a alguien sin conocer su pasado.

-Cierra la boca, Chanyeol. Jimin-ssi hace bien su trabajo.-le defendió golpeando la mesa.-¡El es un buen hombre!

-Roseanne, ¿por qué lo defiendes? A decir verdad, tu hermano tiene razón.-concordó el cabecilla.-No conozco mucho de ése muchacho, no me gustaría que algo malo te sucediera.

-No va a suceder nada, él me respeta.

-No ha sido así.-habló Jinyoung después de unos momentos.-He visto como te mira, yo que tú, le hago un interrogatorio.

-N-no, ¡no es verdad! .-colocó su mirada en su padre y éste torció la boca de mala manera.
-Papá, las cosas no son como las piensas. Entre él y yo, no...

-Rosé, vamos.-le sujetó la muñeca haciendo presión en la misma zona y la arrastró hasta perderse de vista.

Los gritos de la chica se podían escuchar claramente, pidiendo que se detuviera y dejando en claro que nada había sucedido.

Sus hermanos sólo siguieron desayunando haciendo caso omiso a la menor que pedía ayuda.

-¿Creés que resista? Nuestra madre no lo hizo.

-No hables de esa zorra, tan sólo acordarme de ella la odió más. Fue una maldita promiscua, por eso su hija salió igual.

-Baja la voz, Rosé no sabe nada de ello.

-Y tampoco se puede enterar.

🌹

Jimin estaba apoyado sobre él auto mientras terminaba su cigarrillo. Cuando escuchó las voces masculinas acercarse, lo tiró y pisoteó colocándose en una posición firme y profesional.

-Tengo una reunión, así que llegaré un poco tarde.-anunció arreglándose la corbata.
-No quiero que nadie entre ni salga de aquí, entendido.

-Sí, señor Park.-acató la recepcionista. Éste se percató de su presencia y lo miró de píes a cabeza, para después meterse al auto y marcharse.

Tras irse, esperó y esperó, pero Rosé no salía.
Se acercó a la señora y le preguntó por ella. A lo que la adulta no supo que responder.

-Será mejor que te retires, la señorita no irá a clases. Amaneció de mal estado.

-¿Podría pasar a verla?

-Imposible, no puedo dejarlo pasar.

-Entiendo, entonces me retiró.

Salió de la residencia y cuando estuvo a una distancia necesaria su lobo interior se hizo presente.
Traspasó los barrotes y subió las paredes del hogar para luego ingresar por una ventana, la cual daba a un pasillo lleno de puertas.
Olfateó él lugar y siguió uno muy íntimo para él.
Empujó la puerta color blanco, y fue ahí cuando la vio.
Su espalda estaba ensangrentada, con marcas profundas y hematomas en su pálida piel.

Jimin la abrazó y lamió las heridas sorprendiéndola. Rosé jadeo ante la sorpresa, ladeó su cabeza y lloró correspondiéndole.

-E-estoy bien.-aceptó con voz dolida. Luego sonrió y le acarició la oscura melena con delicadeza.
-Tienes que irte, alguien puede verte.

Él volvió a su forma humana y le besó los dorados cabellos. Aún manteniéndola entre sus brazos.

-No me iré de aquí.-sentenció apoyando su mentón sobre la cabeza de ella.

-¿Por qué haces esto? .-cuestionó mirándole directamente a los ojos.-Y-yo, esa noche en él auto... Estoy confundida con tu actitud.

-Es complicado, no lo entenderías.-dijo alejándose. Rosé le miró ocultando su desnudes y a duras penas se colocó frente a él.

-Si me lo dijeras, lo haría.-le acarició la mejilla izquierda con dulzura y él le correspondió dejándose llevar.
-Jimin, por favor...

-Es difícil para mí.-tomo las manos femeninas entre las suyas y las besó castamente.-Me tengo que ir, alguien viene.

Rápidamente su lobo volvió y salió saltando por la ventana asustando a la menor. En ese momento una de las empleadas entró al cuarto y se sorprendió al verla en píe.

-Señorita, debe de descansar. Por favor, vuelva a la cama.-le decía tomándola por los brazos.
Rosé siguió a la mujer, sin dejar de mirar la calle fuera del hogar.

Jimin-ah

🌹

Días después...

-Vamos Jimin, no seáis agua fiestas.-le empujó Jungkook molestándolo.

-Dejadme soló, no quiero ir. Debo trabajar.

-Sí, claro, trabajar.-le decía sarcástico.-Nunca llevarás a cabo ésta maldita venganza, confiesa de una vez que te enamoraste de ella.

-No lo hice. Ahora vete, quiero estar soló.

-Sí, soló. Eres un amargado.-se estiró y aperfumó con agilidad.-No voy a llegar, por si tienes dudas.

-No me interesa.-habló sin despegar la mirada de su laptop.
-¿Dormiras con Lisa?

-Ni que fuera la primera vez.-carcajeó cerrando la puerta.-Bien, me voy. Adiós.

-Sólo vete de una vez.-lanzó un cojín a la puerta y al otro lado se escuchó una carcajada, luego todo fue silencio.

Al cabo de media hora, guardo sus gafas y bajó la pantalla de la laptop. Miró la hora, esta marcaba las una y quince de la noche.
Fue hasta la cocina para beber una taza de café, aún que nunca llegó a hacerlo.
Él timbre sonó y arrugo levemente el ceño confundido. Fue hasta él lugar ya que éste sonó nuevamente y abrió la puerta sorprendiéndose al verla frente a el.

-Rosé, qué haces aquí.-preguntó confundido.

La menor no respondió, simplemente le abrazó el cuello y lo besó con pasión.
Se separaron por falta de aire, y éste negó alejándola.

-No deberías estar haciendo esto. Pronto te casarás, y no...

-Hazme el amor.

Seguidamente, des abotonó el abrigo dejando ver su desnudo cuerpo, únicamente cubierto por un conjuto se lencería completamente color negro. Le vio tragar duro, y sorprendiéndola, fue él quién la besó desenfrenado apoyándola en la pared contigua.

La obligó a rodearle la cadera mientras sus lenguas bailaban, o más bien, él violaba su boca con su lengua.
Rosé soltó un gemido en cuanto Jimin presionó su intimidad con su miembro.

-¿Estás segura de esto? .-cuestionó con la respiración agitada.

-Completamente.-afirmó acunandole él rostro entre sus manos.-Quiero estar contigo, Jimin.-él chico cerró sus ojos y se dejó llevar por las caricias de ella.

🌹

Tras dejar un camino de prensas hasta su cuarto la empujó a la cama y se colocó sobre ella besándola sin control alguno. Rosé se dedicaba a desordenarle los oscuros cabellos, mientras él acariciaba y hacia presión con sus manos en los muslos de la menor.

Subió su mano izquierda hasta la bragas de ésta, y de un sólo manotazo se las arrebató tirándola a cualquier lugar de la habitación.
La menor no se quedó atrás, le quitó las ropas restantes dejándolo como Dios lo había mandado al mundo. Jimin sonrió y fue haciendo un camino de besos hasta llegar a la zona íntima de ella, donde se dedicó a besar, lamer y succionar aquel dulce manjar para él.
Los gemidos de Rosé eran música para sus oídos. Cuando ella tuvo su primer orgasmo, fue su oportunidad y sin previó aviso entro en su cálido interior.

La menor soltó un fuerte gritillo de dolor y se abrazó a él ocultando su rostro en el cuello del castaño.

-Lo siento, no quería lastimarte.-le dijo mientras le deba picos suaves.-Me fue difícil controlar...

-... T-tranquilo, ya pasó él dolor.

Jimin sonrió y la besó profundamente comenzando con el famoso vaivén.
Rosé le rodeó la cintura haciendo que entrará más en ella, provocando que ambos soltaran un gemido de satisfacción. Durante la noche, practicaron diversas posturas como también nuevas experiencias para ella, las cueles los dejaba a los dos satisfechos.

-Más rápido... .-pidió haciendo puño y apretando la sabana del colchón.
-J-jimin... ¡Dios, Jimin! .-tras él último grito, él nombrado cayó rendido sobre ella y volvió a juntar sus bocas besándola con dulzura.

-Fue increíble.-sonrió apoyando su frente con la contraria. Se recostó a su lado y la a trajo abrazándola por la cintura.
-Eres mía, Chaeyoung.

-Sólo tuya.-confirmó ocultando su sonrojado rostro en él pecho fornido del mayor.

Me perteneces.
Ahora sí comienza mi venganza.

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Momo 🍑💞