━━━━━━ CHAPTER ELEVEN ━━━━━━
❝MUERTOS Y MÁS MUERTOS❞

La luz golpeó el rostro de Kira cuando está despertó, sus ojos apenas se estaban acostumbrando a ella cuando los pudo abrir de manera correcta. Le dolía el cuerpo pero ya no igual a como le dolió cuando habían realizado el hechizo.

Cuando miro a su alrededor tratando de saber donde estaba se dio cuenta que estaba en lo que parecía reconocer como una tumba. La chica se puso de pie justo cuando el dolor de su cuerpo desapareció por completo.

Kira se sintió renovada de alguna forma, también sentía como un poder la albergaba. La chica miro la tumba que estaba iluminada por velas por todo el lugar, cuando se giro un poco para darse cuenta de que su cuerpo estaba acostado en una pequeña cama. La chica de acercó con temor al pensar que estaba soñando de alguna forma.

Kira estaba viendo su propio cuerpo, parecía dormido. También se veía la sangre seca por su cara. No sabía que estaba pasando por lo que intentó tocar su cuerpo para ser detenida por una voz.

—¿Es muy loco cierto?—la pregunta que le hicieron llamó su atención.

Kira miro a la chica que tenía enfrente, era una castaña sonriente.

—Lo es.—fue lo único que pudo contestar ella volviendo a ver su propio cuerpo.

—No tienes que preocuparte por eso ahora,—le dijo.—Hay alguien que desea verte mucho.

La mujer salió del lugar siendo seguida por Kira. Había muchas personas en el cementerio algo que sorprendió mucho a Kira, normalmente no había tanta gente por las mañanas.

—¡Mami!—esa voz.

Se trataba de Emma quien chillo feliz al ver a su madre. Kira corrió a la niña para poder cargarla cuando la tuvo cerca. La abrazó con fuerza como si temiera que ella desapareciera de nuevo.

—Mi niña—murmuro la rubia llorando levemente.

—Te estañe—dijo la niña sonriéndole a su madre.—Hayi me cuido.—señalo a la mujer de antes quién sonreía feliz.

—Soy Hayley—se presentó.— Probablemente no hayas escuchado hablar de mi.— comentó ella.—Pero soy la madre de Hope.

—No lo sabía.—Kira negó.—Muchas gracias por cuidar de Emma.—le agradeció con sinceridad.

—Es una niña encantadora, además tu cuidas de Hope.—le resto importancia.

—Tu sabes dónde estamos.—miro a su alrededor confundida.

—Dahlia puso un hechizo de sueño en ti y Emma, la niña por alguna razón pudo abrir un extrañó portal que hizo que podamos verla y ahora que estás aquí tu también puedes hacerlo.—explico Hayley.—Tu cuerpo o en este caso espíritu es como si tú estuvieras muerta.

—¿Quieres decirme que puedo ver muertos?—pregunto Kira sorprendida.

—Temporalmente—otra voz llamó su atención. Esta vez era una chica rubia de ojos de color quién sonreía de manera amable.—Soy Camille por cierto.—se presentó.

—¿Camille cómo Camille...?

—La novia de Klaus, si.—acepto ella.

—Klaus menciono algo sobre tu muerte, lo siento mucho, por la dos.—se lamento mirando a las mujeres.

—No tienes porqué, estoy feliz de haber muerto por mi hija.—respondio Hayley.

—Y yo no me arrepiento de haberme sacrificado por Klaus.—dijo Camille.

—Gracias.—les agradeció.

—Escucha Kira, cuando Freya quitó el hechizo que retenía tu magia por completo te convirtió en una de las brujas más poderosas del mundo.—comenzo a hablar la híbrida.

—¿Eso que quiere decir?

—Que si alguien puede vencer a Dahlia y Esther eres tú.—contesto la rubia ahora.

—Esther no es la persona que Dahlia ama más.—Kira las miro con atención.—Eres tu Kira.

—Tu eres la persona que puede terminar con ella.—entonces Kira suspiro con pesadez.

La cosas todavía no terminaban.

Los hermanos Mikaelson estaban seguros de algo, nunca habían visto a su hermano Klaus actuar como si tuviera la humanidad apagada. Era la mañana del día siguiente y se habían encontrado más de 250 cuerpos muertos y drenados en Nueva Orleans, sin mencionar los cuerpos de los vampiros que los Mikaelson habían tenido qué quemar.

Loco, era una exprés que le quedaba corta a Klaus en estos momentos. Mataba a cualquier persona que se le atravesará por el frente. Había asistido a todos los lugares donde encontraría buenas y ninguna había encontrar a su madre. Sobra decir que todas ellas murieron.

James por otro lado no había salido de us habitación desde lo de Kira, se había encerrado y no había nadie que pudiera hacerlo salir. No quería saber nada del mundo exterior. Remus había intentado entrar al lugar pero fracaso en el intentó.

Freya intentaba encontrar alguna pista que pudiera ayudarle pero los resultado eran negativos, tal vez si ella se hubiera fijado bien en el hechizo su tía estaría con ella. Oh amenos eso es lo que ella pensaba.

—¿Necesitas algo más Sirius?—Marlene le preguntó a su novio quien seguía un poco dañado por Dahlia.

—Estare bien, Kol me ha dado de su sangre.—respondio sonriéndole al mencionado.

—Siempre salvando el día.—fijo el castaño.—¿Tu que hiciste teñida?—le preguntó a Marlene quien lo vio ofendido.

—Mi hermana acababa de ser secuestrada.—se defendió.

—Excusas.—dijo Kol negando con la cabeza antes de mirar a Sirius.

—Basta Kol.—Rebekah lo callo.—Necesitamos que llames a Davina.

Ante la mención de la chica Kol se puso serio de repente.

—No.—negó.

—Necesitamos a otra bruja Kol, y ella es la mejor opción.—insitio su hermana.

—No Rebekah.—volvio a negarse.

—¿Quién es Davina?—pregunto Sirius frunciendo el ceño.

—La ex novia de Kol.

Sirius miro a Kol quién rodo los ojos.

—¿Quieres una bruja? Bien te traeré una.—dijo antes de salir del lugar.

Rebekah le dio una mirada extrañada y negó con la cabeza.

—¿Que haremos con Nik?—le preguntó la rubia a Elijah.

—Por el momento no se puede hacer nada. El no nos escuchará.—suspiro con pesadez.—Tendremos que esperar que Kol traiga una buena bruja para que ayude a Freya y podamos encontrar a nuestra tía y prima.

Remus quien iba llegando a la sala de dejó caer en un sillón junto a Sirius.

—¿Que ha pasado?

—El no abre la puerta y cuando lo hice se encerró en el baño.—explico levemente.

—¿Deberíamos insistir más?—pregunto Sirius mirando a su amigo.

—Creo que deberíamos darle su espacio por ahora, no es fácil por todo lo que ha pasado.—le respondió.—Por cierto. Peter me ha llamado está mañana.

—¿Peter?—pregunto Rebekah mirando a Remus quién asintió.

—Peter Pettigrew nuestro amigo. Fue con nosotros a Hogwarts pero no lo hemos visto mucho últimamente, su madre está enferma.—explico Sirius brevemente.

—Dijo que fue a visitar a James y Kira pero que nadie le abrió. Le dije que habíamos tenido un viaje de último momento y que intentamos contactar con el pero no contesto.—dijo Remus sin mentir. Había intentado contactar con Peter pero el no había aparecido.

—Ya le contaremos después.—le resto importancia Sirius.

En ese momento Kol entro al lugar con una sonrisa en el rostro.

—¿Por qué sonríes inútil?—pregunto Rebekah.

—Que groserita eres eh—le contesto a su hermana.—Ignorando tu falta de respeto hacia mi persona, te informo que nuestra bruja llegará está misma noche a Nueva Orleans.—dijo para sorpresa.

—¿De quien estás hablando?

—Ya lo verás Rebekita.—murmuro Kol sonriendo.

Rebekah negó con su cabeza pensando en que dejar la bruja a cargo de su hermano no parecía haber sido buena idea.

El día continuo con la mayor normalidad que los Mikaelson podían tener, eso hasta que Kol desapareció diciendo que se iba a buscar a su bruja.

Eran las 8 en punto de la noche en Nueva Orleans cuando Kol entro al recinto Mikaelson con unas maletas en sus brazos. Los que estaban presentes le dieron una mirada extraña.

—Eh aquí tu bruja hermanita.—exclamo haciéndose a un lado para dejar a la vista a la chica.

—¿Bromeas?—chasqueo su lengua Rebekah con incredulidad.

—Bonnie Bennett.—Elijah saludo acercándose a la joven quien asintió.

—No estoy aquí por ninguno de ustedes.—aclaro al ver las miradas de Rebeca.—Ayudare con Kira y su hija para poder encontrarlas.—dijo haciendo que Freya asienta.

—Entonces vamos.—la rubia mayor la guío a la sala y Bonnie la siguió de cerca.

Kira miraba a su hija jugar con las flores que Hayley le había dado, la pequeña niña ignoraba todo lo que pasaba a su alrededor. Kira por otro lado veía a personas muertas caminar de un lado a otro. Si bien ver a Camille y Hayley era una cosa ver a muertos era otra y sin decirlo, le causaba un miedo terrible.

Estaba sentada en una tumba mientras pensaba en como es que debía salir de aquí. No tenía idea de cómo es que derrotarian a Dahlia. Se suponía que era su hermana. Las hermanas no hacen lo que ella le hizo a Kira.

Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando alguien se sentó junto a ella.

—¿Momento difícil?—prefunto la voz del hombre.

Kira lo miro de reojo con el corazón latiendo al mil, si la veía Significaba que el era un muerto.

—Se podría decir.—se limito a responder.

—Sabes, mi esposa siempre dice que no hay momentos difíciles. Solo malas decisiones.—le contesto haciendo que Kira lo mirará.

—¿Eso que quiere decir?—pregunto ella.

—No losé, se lo pregunté una vez y ella solo se rió de mi.—dijo soltando una risa y Kira hizo lo mismo.—Supongo que debes tomar una decisión, en los momentos difíciles de hace eso.—comento mirando el lugar.

—¿Tengo que hacerlo?—susurro Kira con pesadez.

—Esa es tu elección, siempre puedes ignorar tus problemas, yo lo hice.—comento.—Pero si quieres mi consejo, no lo hagas y es mejor que te enfrentes.—se puso de pie llamando la atención de Kira.—Tengo que irme.

—Gracias por el consejo.—le agradeció con una sonrisa.—Soy Kira por cierto.

—No hay de que Kira.—le sonrió devuelta el hombre.—Mi nombre es Ansel.—con una última sonrisa el hombre desapareció de la visita de Kira.

La chica miro por dónde se fue y sintió un revoltijo en su estómago pero lo ignoró por completo.

—¿Kira?—la chica suspiro cansada.

—Muertos y más muertos.—murmuro girandose para encontrarse con una cara conocida.—¿Bonnie?

La chica sonrió feliz antes de acercarse.

—¿Dónde estás?—pregunto con urgencia.

—Estamos en el cementerio, en una especie de tumba con muchas velas. Emma está conmigo.—le dijo sintiendo como un mareo la apoderaba.

—Vamos a buscarte, no tienes que preocuparte.—sonrió antes de que la conexión se cortará y Bonnie desapareciera.

En ese momento Kira sintió un tirón y miro a Emma con miedo al ver qué ella ya no estaba, se giro y vio como Camille y Hayley desaparecían lentamente.

—¿Qué está pasando?

—Dahlia debe de estar despertandolas,—contesto Hayley.—Tienes que prepararte Kira, tienen que vencerla.—dijo mirando a la mujer quien asintió.—Y cuida mucho de mi Hope, por favor. Dile que si madre la ama con todo el amor del mundo.—pidio lo último con lágrimas en sus ojos.

—Ella lo sabrá.—Kira quiso acercarse pero fue interrumpida.

—Fue un gusto conocerte Kira...

Después de eso todo de se volvió negro de nuevo y Kira no supo que pasó después.

ADRI'S NOTE——31—07—22

Otro capítulo listo, espera ue les gustará tanto como a mí.

Díganme que les gustó más del capítulo.

Alguna teoría?

2/4