En ese One-shot Jim será troll y Krel akiridiano.
También quiero aclarar que la historia se concentrará en el final de Trollhunters.
Ahora si, ¡¡Disfruten el último One-shot!!

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Normalmente en las series o películas se ve a una pareja perfecta, que tiene un "Y vivieron felices para siempre" aunque, en la realidad, no es nada parecido.

TODAS las parejas tienen peleas, unas más graves que otras, que pueden llegar a separar a esa pareja, o reflexionar en lo que están haciendo mal y salir adelante.

Una de esas parejas es Jim y Krel, es decir, una relación entre un alien y un troll no iba a ser fácil. Pero, empecemos por el principio de su relación.

Al regresar de Nueva Jersey y haber encontrado una nueva piedra corazón, Jim se tuvo que quedar con los trolls, ya que su casa estaba llena de bebés que habían rescatado y el hecho de que era más seguro para él estar en la oscuridad.

Por fin pudo reencontrarse con Toby y AAARRGGHH que lo recibieron felices, pero en una de sus visitas a Mercado-troll Toby había llevado a Krel, aunque ya se conocieran de algunas aventuras que habían compartido, Jim y Krel empezaron de cero, se conocieron más a fondo, se contaban anécdotas, y cuando tuvieron más confianza, sus miedos, preocupaciones, y todo lo malo que les había pasado.

Era cierto, que, aunque aún fuesen jóvenes, sus vidas no eran las más felices, pero habían podido seguir adelante, y eso los unía mas que nunca, hasta el punto en que... se enamoraron.
Jim se lo había dicho, cuando invitó a Krel al bosque en la noche, los dos estaban arriba de un árbol, viendo el atardecer, el akiridiano se le había quedado viendo por unos segundos en shock, hasta que se acercó al mitad-troll para darle un dulce beso.

Y así, en solo unos meses, se habían vuelto novios, todo era genial, Krel iba a visitar a Jim, este iba por las noches a la casa del akiridiano, para escuharlo tocar la guitarra, para que Jim le cocinará, o para ver películas.

Pasaron así un año, en donde todo era perfecto, hasta que a Krel se le vino una idea a la mente.
- ¿Jim?- le llamó, estaban en su casa viendo una película
El mitad-troll lo vio con una sonrisa y duda de que le quería decir.
- ¿Qué pasa mi rey?- le dijo con ese lindo apodo que casi siempre usaba
- Estaba pensando... llevamos más de un año juntos, y aunque me encante ir a Mercado-troll, pienso que sería bueno... ya sabes...

El akiridiano vio a Jim, pero este aún tenía duda en su mirada.
- Vivir juntos...- susurró, pero Jim lo había escuchado perfectamente
Sonrió y sus colmillos se vieron más, mientras cargaba a Krel dando vueltas por el aire, el akiridiano gritaba y reía feliz, mientras que Jim le decía que "Sí" cada que daba una vuelta.

Al bajar a Krel, este estaba un poco mareado, pero vio a Jim con una sonrisa y beso los labios del mitad-troll.

Durante otros dos meses, Jim iba dejando sus cosas para poder oficialmente vivir con su novio, no eran muchas cosas, su ropa que había conseguido para su nueva complexión, uno que otro libro, y cosas personales.
Krel lo ayudaba en lo que podía, pero había ocasiones en que Jim movía sus cosas, y es que, el akiridiano era muy organizado, y odiaba que movieran sus cosas.
- ¿Amor?- lo llamó Krel
- ¿Qué pasa?- dijo etrando a su habitación
- Puedes poner tus cosas en otra parte, es que aquí tengo mis cosas y ya están organizadas y...
- Hey, esta bien- dijo Jim dándole un beso en la mejilla- yo soy el que está desacomodando todo, no te preocupes
Krel le agradeció y le dio un beso, mientras acomodaba sus cosas.

Quien diría que esta sería una de las primeras peleas que tendrían...

Los meses pasaban, ya casi sería su aniversario de dos años, pero... las cosas no iban tan bien.
Jim era bastante desorganizado y dejaba sus cosas o su ropa en el piso y por todos lados, y Krel tenía que recogerla, pero trataba de no enojarse con él y decirle amablemente que levantara sus cosas.

Mientras que Jim estaba un poco harto de que Krel siempre tuviese que tener todo perfectamente organizado.
Así que tenían pequeñas peleas sobre eso, o por que pelicula ver, que comer, entre otras cosas, pero, eran cosas pequeñas, se arreglaban en solo unas horas.
Hasta que... una gran pelea hizo que todo se fuese al carajo...

Krel estaba en su laboratorio tratando de reparar uno de sus más recientes inventos, pero no funcionaba por más que trataba.
- Hola lindo- lo llamó Jim entrando al laboratorio de su pareja
- Hola- dijo sin prestar mucha atención, estaba muy concentrado en que todo saliera bien
- ¿Qué haces?- pregunto viendo a Krel tratando de reparar una pieza robótica
- Trato de hacer que funcione de nuevo, pero, ¡No puedo!- dijo tirando el aparato al piso, suspiró cansado

Jim sonrió y abrazó a su novio por la espalda dándole besos en la mejilla y el cuello.
- No te preocupes, estoy seguro de que lo arreglaras, eres la persona más lista que he conocido
- Gracias- dijo dándole un beso en los labios- iré a ver a Stuart, quiero ver si tiene alguna pieza que me pueda ayudar, no me tardó
Jim solo asintió y vio a su novio salir.

Recogió la pequeña pieza, que era como una pequeña pelota metálica con varios detalles azules, trato de abrirla pero no pudo, la golpeó un par de veces, entonces vio varias herramientas, su conocimiento de tecnología akiridiana no era mucha, pero por lo que había visto hacer a Krel, trataría de ayudarlo, tal vez pudiese repararlo.

Tomo un destornillador, y lo puso en uno de los tornillos, abriendo la pequeña pelota por la mitad, tenía muchos cables adentro, asi que tomó unas pinzas, mala decisión, ya que por accidente rompió uno y la pelota empezó a temblar, Jim se apartó al ver que la otra mitad llegaba a su par y los detalles azules se prendían y entonces la pelota empezó a flotar y el caos empezó.

Por alguna razón, la pelota se puso como loca y empezó a destruir todo, tiraba las herramientas de Krel y algunos de sus experimentos, Jim trataba de atraparla, pero era imposible, parecía que tenía vida propia, y entonces salió del laboratorio, que estaba todo destrozado y fue a la casa.
- ¡¡No!!- grito Jim llendo tras la pelota

Esta empezó a destrozar la cocina, la mesa, los platos y después fue a la sala y empezó a tirar el teclado y la guitarra de Krel, rompió la pantalla del televisor, todo era un desastre, hasta que se oyó como la puerta se abría, y Krel veía como su casa estaba destrozada y la pelota volaba descontroladamente y a su novio tratando de alcanzarla.
- ¡¡Krel!! ¡¡Ayúdame!!- dijo Jim tratando de atrapar a la pelota

Krel estaba en shock, veía todas sus cosas destruidas, hasta que oyó a Jim llamarlo de nuevo, por fin reaccionó y tomó un control especial que Stuart le había dado, apuntó a la pelota y apretó uno de los botones que hizo que la pelota parara en seco en el aire y luego cayera rompiéndose por la mitad.
- Gracias a dios- dijo Jim suspirando cansado

Krel fue hacia la pelota y la recogió, viendo que uno de los cables estaba cortado, frunció el entrecejo y se dirigió a Jim.
- ¿Tú hiciste esto?- pregunto visiblemente enojado
- ... Quería ayudarte a repararlo, pero por acciden-
- ¡¡No!! ¿Por qué lo hiciste? ¡Tú no sabes cómo funciona la tecnología akiridiana, pero ahora todo nuestra casa está destrozada- dijo enojado
- Perdón... Krel yo
- ¡¡No!! Esto ya es demasiado, todos mis experimentos, mi laboratorio y mis cosas estan destrozadas, ¡Y todo es tu culpa!- dijo cada vez más enojado

En ese momento, Jim también se empezó a enojar.
- ¡Oye, yo solo trataba de ayudar!, además todas esas cosas pueden recomponerse, ¡Solo te pones así, porque eres demasiado organizado!
- ¿Yo?, ¿Y qué hay de ti?, TODOS los días tengo que recoger tus cosas porque tu jamás lo haces

Los dos se quedaron en un silencio lleno de tensión.
- ... Creo que será mejor que te vayas- susurró Krel
Jim lo vio con el entrecejo fruncido, pero al final suspiró cansado.
- Como quieras- dijo dando un portazo, por lo menos ya era de noche y no tendría problema en ir con alguien con quien hablar

Krel quitó algunas lágrimas que amenazaban con salir de sus ojos, y empezó a recoger todo, nunca se habían peleado así, jamás se habían gritado tan feo.

Mientras Jim iba caminando a Mercado-troll, sentía que se había ido por tanto tiempo, cuando apenas se había ido hace 5 minutos, jamás se habían peleado de esa manera, odiaba enojarse con Krel... cuanto lo extrañaba, entendía el punto de vista del akiridiano, pero él también podía llegar a ser un poco desesperante.

Pero... no se imaginaba estar en otro lugar, ahora cuando pensaba en su futuro pensaba en Krel, estar juntos y felices, pero ahora no era buen momento, debía hablar con un viejo amigo.
- No se porque vino conmigo
- ¡Por favor Blinky!, necesitaba hablar con alguien
- Maese Jim, yo soy al último troll que debería preguntarle sobre amor
- Lo sé, perdón es que... fuiste el primero que se me vino a la mente

El troll vio a su aprendiz y se sentó junto a él, estaba en su cueva tranquilamente leyendo, cuando Jim apareció corriendo y empezando a hablar rápidamente, pero por lo menos entiendo lo que trataba de decirle.
- Entiendo que se peleen, es normal en las parejas, no todo es perfecto como lo pintan algunas personas
- Ya lo sé Blinky, pero en serio odio estar así, no hablarnos... y es la primera vez que me pide que me vaya, no quiero que vuelva a pasar...
- Entonces repare el daño, debe hablar con Krel, solo asi se solucionara todo

Jim asintió ante el consejo de Blinky, era cierto, debía hablar con Krel, sabía que abría más peleas, pero era importante también tratar de evitarlas.

Krel recogía sus cosas mientras pensaba todo lo que había pasado, se sentía terrible por haberle gritado a Jim, la verdad no sabia porque había elegido ser su novio, honestamente, podía cantarle miles de canciones, pero ninguna podía expresar la gran persona que era Jim.

¿Cómo habían terminado así? Por Seklos y Gaylen, solo quería volver en el tiempo y no enojarse con Jim, no haberle pedido que se fuera.
Jim siempre sacaba lo mejor de Krel, se había enamorado desde el día en que se besaron y desde entonces han estado juntos.

Dicen que el amor es por siempre, su para siempre es todo lo que necesitaba, quería estar con Jim, no podía prometer que todo siempre estuviese bien, pero si que estaría para él en todo momento...

Con eso en mente dejó la casa para ir a hablar con Jim, el cual estaba en el mismo lugar donde le pidió a Krel ser su novio y donde compartieron su primer beso, era un árbol bastante viejo, pero fuerte, estaba en la cima viendo las estrellas y la luna llena.

Krel pensaba en dónde estaría Jim, y una corazonada le dijo dónde podría estar, fue en su deslizador hasta el lugar, esquivando árboles, rocas, y uno que otro animal, y llegó.

Y como pensó, ahí estaba, en la cima de su lugar favorito, sin hacer mucho ruido, dejó su deslizador en el piso y subió al árbol, al estar a un metro de Jim, este lo percibió y los dos se quedaron viendo un momento.

Jim dio unos toques a la rama, haciendo entender a Krel que se sentará junto a él.
Los dos se quedaron en un silencio un tanto incómodo, tenían tanto que decir, pero no sabían por dónde empezar.
- Espero que sepas que tú eres de lo que están hechos mis sueños- empezó a hablar Jim- me quedo despierto por las noches, pensando en nuestro futuro, en mis sueños, que quiero compartir contigo, porque no veo un futuro sin ti, me enamoré, tú te enamoraste, ambos nos enamoramos..., significas todo para mí, no me puedo imaginar estar en otro lugar, si no es contigo

Krel lo vió, estando atento a cada palabra que le decía Jim, quería llorar, abrazarlo, besarlo y dejar de lado todo, solo estar acurrucados los dos, sin decir ni hacer nada, pero tenía que responder a Jim.
- Dicen que el amor es para siempre, pero tu para siempre es lo único que me importa- empezó a expresarle lo que había pensando hace solo unos minutos- por favor, quédate, no te puedo prometer que todo esté bien, todo el tiempo, pero ten por seguro que jamás te dejaré y siempre estaré para ti, por favor... quédate para siempre conmigo

Jim tomó su mano y le dio un beso pequeño viendo con lágrimas a Krel, pero habló tratando de que su voz no se quebrará tanto.
- La forma en como somos juntos, es la razón por la que sigo contigo, no me imagino con alguien más, sino contigo, hemos compartido penas y alegrías que hicieron que terminaramos juntos, mientras te quedes a mi lado, sabré que estaremos bien...

Los dos no pudieron evitarlo más y se abrazaron mientras lloraban en el hombro del contrario.
- Perdóname Jim, jamás debí haberte gritado de esa manera, eres todo para mí, y yo tampoco me imagino un futuro sin ti
- Oh Krel, también te debo una disculpa, no debí haber tratado de reparar algo que no entiendo
- No, no, tratabas de ayudar, y eso es lo importante

Ambos se vieron con ojos vidriosos, y se dieron un beso lleno de amor y cariño.
- Tratare de ser menos organizado, y enojarme por cosas así
- Y yo trataré de ser menos desorganizado y no jugar con la tecnología akiridiana
Krel sacó una pequeña risa y junto sus frentes cerrando los ojos y disfrutando de la cercanía que tenían, acaricio el cabello negro de Jim y sus cuernos, este solo disfrutó de las caricias con una sonrisa enamorada.

Porque aunque no todo fuese color de rosa en su relación, sabían que mientras ambos estuviesen juntos para todo y siempre tratarán de arreglar las cosas, estarían bien, y esa era la única promesa que importaba.

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En serio espero que les haya gustado el One-shot, me siento extraña por acabar esta serie de pequeñas historias, pero pues, todos sabían que esto llegaría a su fin en algún momento.

Quise acabar los One-shots con una de mis canciones favoritas de una de mis bandas favoritas. La canción se llama If I'm James Dean, You're Audrey Hepburn (Versión acústica) por Sleeping with Sirens.

Y además quise terminar tocando un tema que es "las peleas en las parejas" (Que es maso menos de lo que se trata la canción), algunas terminan en completo desastre por una pequeña pelea y otras, pelean porque su relación perdure, y eso me parece increíble.

Y ahora si para terminar, quiero agradecer a cada uno por todas las ideas que me dieron, cada comentario, cada leída, y voto, de verdad que leer todo lo que me ponen me alegra mi día.

PD. Quédense atentos para más historias nuevas ;)

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