𝐓𝐖𝐎
"ENTRENAMIENTOS"
AHOGÓ TODOS LOS CHILLIDOS QUE QUERÍA SOLTAR, en ese momento se encontraba siendo preparada para el desfile de iniciación que tendría acabo en unas horas.
Le habían depilado todo su vello corporal, la ducharon y limpiaron las uñas, Narcissa ya había perdido el noción del tiempo ahí.Sus estilistas, Juno y Román, se sintieron complacidos con ella, que a diferencia otros tributos, no replicó ante nada.
Una vez estuvo lista, fue llevada a una habitación donde una mujer esbozó una gran sonrisa al verla. Tenía el cabello de un café claro y era alta.
—¡Eres tan linda en persona! Un gusto, soy Venix y seré tu estilista durante todos los juegos.
—Hola —murmuró ella con una pequeña sonrisa tímida.
—¡Aw, eres tan tierna! —escuchó que Juno dijo con una gran sonrisa en su rostro.
—¡Y tan linda! —añadió Román.
Empezaron a peinarla, maquillarla y vestirla. Ella usaría un vestido dorado que representaba a su distrito. A la pelirroja no le gustaba mucho pues enseñaba demasiada piel, más no tenía otra opción.
—¡Te ves radiante! —chilló Venix al verla, Juno y Román asintieron ante eso y la halagaron.
Bajaron al piso inferior del Centro de Renovación, ahí se encontraron con Cross, su estilista y sus mentores.
Mags le dedicó una gran sonrisa a la chica mientras que Finnick miraba sorprendido a la menor.
Lucía impresionante.
—Muy bien chicos, Cross, recuerda, seriedad absoluta, Narcissa, tu sonríe y saluda a todos.
Seré como Bella, pensó Narcissa recordando el gran carisma que su hermana demostró durante su corta estancia en el Capitolio.
Les subieron al carro, Cross y ella ni siquiera se dirigieron palabra alguna, Narcissa simplemente admiró los bonitos caballos que jalarían el carro.
Por eso mismo, cuando su carro empezó a andar, soltó un suspiro nervioso. A pesar de la repulsión ante todas esas personas, Narcissa sonrió levemente y saludó con timidez a las personas que parecían adorarla.
Al estar frente a la mansión del presidente Snow, la música se detiene y la pelirroja no pudo evitar borrar su sonrisa cuando observó al anciano, sabía que ese hombre era malvado, y no le agradaba ni un poco.
El presidente, un hombre bajo y delgado con el cabello blanco como el papel, da la bienvenida oficial desde el balcón. Suena el himno nacional y finalmente todos salen de ahí, la siguiente parada sería el Centro de Entrenamiento.
Dicho centro es un edificio diseñado exclusivamente para los tributos y sus equipos. Cada distrito tiene una planta entera. Eris, Mags y Finnick llegaron con ellos al piso, fue la mujer de peluca rosa quien habló primero.
—¡Las personas los amaron! ¡En especial a ti Narcissa! —chilló con una sonrisa, la pelirroja se sonrojó ante eso.
Los dos tributos fueron a su respectiva habitación en ese lugar, cuando llegó a la suya no dudó en observar todo con extrema curiosidad.
Se ducho y vistió acorde a su gusto, un vestido rosa pálido que se ajusta a su torso y era flojo de su falda. Siempre ha tenido una debilidad por los vestidos, le gustaba usarlos.
Eris le llamó para cenar, la chica de inmediato la siguió sin pensarlo, al llegar al comedor saludó con una leve sonrisa a sus estilistas y mentores.
Empezó a comer mientras observaba la repetición de la inauguración, no pudo evitar sonreír levemente al observarse, no lucía nada mal.
Al terminar eso Finnick fue quien habló primero.
—Mañana por la mañana es la primera sesión de entrenamiento. Reúnanse con nosotros para el desayuno y les contaremos ciertas cosas planeadas. Ahora vayan a dormir un poco.
Narcissa no se opuso ante eso, sin pensarlo se levantó de la mesa, volvió a murmurar una despedida y salió de ahí.
En la habitación se cambió por un camisón de seda, se recostó en la cama y sin pensarlo dos veces se durmió.
Tenía la suerte de poder dormirse fácilmente, eso sí, se levantaba bastante temprano, por eso mismo a las cinco de la mañana estaba con su uniforme ya puesto, sabía que nadie estaría despierto aún, por eso mismo no salió de la habitación.
Cuando Eris tocó su puerta horas después, salió. En el comedor solo se encontraba Finnick, quien estaba desayunando muy tranquilamente. Al observar a la pelirroja entrar, le dio una sonrisa junto a un saludo, ella le correspondió dicho saludo con un pequeño murmullo.
Los demás fueron llegando, y una vez todos terminaron de comer, fue Finnick quien tomó la palabra.
—Primero debemos hablar del entrenamiento ¿Desean entrenar juntos o por separado?
—Separado —respondió Cross sin dudarlo.
Finnick observó a Narcissa quien se encogió de hombros, no le molestaba.
—Bueno, entrenarán por separado —declaró el rubio—. Ahora, Cross, dime en que eres bueno.
—Se usar cuchillos, lanzas, hacer buenos nudos, y luchar cuerpo a cuerpo —respondió él.
—¿Y tu Narcissa?
—Se hacer nudos y tengo buena resistencia —respondió ella en voz baja.
—Muy bien, durante los entrenamientos procuren no resaltar mucho ¿Saben hacer trampas?
—No mucho —admitió Cross.
—Se algunas —murmuró la pelirroja mientras jugaba con sus dedos, tal como hacía siempre que se sentía nerviosa.
—Intenten aprender sobre cosas de las que no tengan conocimientos —les aconsejó Finnick—. Lo que mejor se les dé intenten reservarlo para el entrenamiento privado ¿Entendido?
Los dos asintieron ante las órdenes del rubio quien dejó su seria mueca y volvió a adoptar su sonrisa.
—Muy bien, entonces no queda más que decir, buena suerte —les dijo el rubio.
[...]
Una vez en las salas de entrenamiento, Narcissa de inmediato fue al puesto donde los nudos se encontraban, el instructor le dio una pequeña sonrisa para comenzar a explicar, ella era la única en el puesto.
Cuando notó las excelentes habilidades de Narcissa, supo que no necesitaba más ayuda por lo que se apartó, claro que continuó observando todos sus movimientos.
La pelirroja estuvo en otros puestos, el de como hacer una fogata, como hacer un refugio y finalmente el de arquería. Una vez el entrenamiento culminó, los dos chicos del distrito 4 se dirigieron a su piso.
Ninguno mencionó nada, era claro que a Cross no le agradaba mucho la idea de que Narcissa fuera su compañera en estos juegos.
—¿Cómo les fue? —espetó Finnick al verlos entrar.
—De maravilla —se limitó a responder Cross, fue a su habitación directamente.
—¿Qué me dices tú Narcissa? —preguntó el rubio luego de soltar un suspiro.
—Bueno... aprendí a como hacer una fogata, un refugio y mejoré mi habilidad con el arco y flechas —respondió dejando sorprendido al vencedor.
No esperaba que Narcissa le respondiera, ante sus ojos ella era demasiado tímida como para mantener una conversación con él. Pero le alegraba saber que ella empezaba a tenerle confianza.
—Eso es bueno, todo lo que aprendiste fue esencial para sobrevivir —espetó él con una sonrisa—. Mañana procura ir a los puestos con armas, intenta aprender como usar una lanza o cuchillos.
—Yo.... se usar una lanza —contestó dejando al mayor sorprendido—. No quise decirlo antes porque Cross estaba ahí, pero yo aprendí cuando era pequeña, mi padre me enseñó, él era pescador.
—¿Hay algo más que no me dijiste antes? —cuestionó el en tono suave.
Notó que ella se relajó un poco más, eso fue buena señal. Finnick rápidamente comprendió que Narcissa se sentía más cómoda con personas que no alzaran la voz.
—También se esconderme y escalar, cuando era pequeña jugaba mucho a las escondidas con Bella, si quería ganarle a mi hermana mayor debía ser más astuta, así que trepaba muchos árboles y rocas.
—Eso de hecho es una muy buena habilidad.
—No se si esto también es bueno pero se sobre plantas, cuales se comen, cuales no, todo eso, disfruto realmente de la lectura.
—Narcissa, aunque no lo creas, siento que es más probable que ganes tú a que gane Cross —admitió el rubio reconociendo las habilidades de la tributo.
—¿Enserio lo crees? ¿Por qué?
—Bueno, Cross tiene el cuerpo, no negaré que es bastante fuerte, pero tu pareces más astuta y perspicaz, esas cualidades son más importantes durante los juegos.
Tales palabras animaron un poco a la pelirroja, quien sin dudarlo le dio una gran sonrisa a Finnick, una sonrisa honesta.
—Muchas gracias por el voto de confianza, Finnick.
—Sólo digo la verdad —contestó algo aturdido, no esperaba que la chica le sonriera de esa manera.
Le pareció bonita sonriendo de esa manera, muy bonita.
Cissa's dress ;D
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