031 || something is wrong

═════════════════════════
Chapter Thirty One
algo está mal

═════════════════════════

JUNO SOLÍA SER LA CLASE DE PERSONA A QUIEN NO LE GUSTABA INVOLUCRAR a mas personas en sus problemas personales. No quería que los demás frenaran sus vidas para apoyarla a ella, por lo que en la mayoría de los casos resolvía sus conflictos por su cuenta.

Y era por ese detalle que Juno tuvo que mentir diciéndole a Luna e Izzy que saldría de la pastelería para ir a comprar algunos ingredientes que se habían agotado.

No quería que ninguno de los dos descubriera que estaba por tener un encuentro con alguien que llevaba viéndola desde el otro lado de la avenida desde que llegó a trabajar en la mañana.

— ¿Ahora también eres un acosador?— le preguntó Juno cruzándose de brazos— Cada día confirmando que no eres el hombre que creía conocer

— Solo esperaba a que tu vinieras a mi— respondió él de manera arrogante— Te conozco lo suficiente para saber que así sería. Quería evitar una escena como la de nuestro reencuentro o que tu empleado me volviera a golpear

— ¿Qué demonios haces aquí? Creí ser bastante directa la última vez que nos encontramos. No te quiero ver, no te quiero cerca de mi— decía Juno manteniéndose seria— Y sabes perfectamente que te merecías ese golpe 

— Quería hablar contigo. Como te lo dije, tenemos temas que tratar y ya dejé que pasaran algunos días, pero no podemos seguir posponiendo esto

— Austin, tú y yo no tenemos nada que hablar. Rompimos hace varios años y yo no estoy interesada en mantener si quiera una conversación contigo— le respondió con seriedad— Si vine aquí contigo fue para exigirte que me dejes en paz. Llevaba años sin saber de ti y mi vida estaba bien con eso

— Por favor Juno, ambos sabemos que eso es mentira. Me extrañas, no existe manera en la que puedas vivir sin mi

Juno se estaba controlando todo lo que podía. No soportaba la actitud tan egocéntrica del hombre frente a ella, lo despreciaba.

Lo veía y le costaba imaginar como era posible que hubiera pasado tanto tiempo enamorada de él y peor aún, sufriendo por él.

Austin no parecía ser ni una sombra del hombre que había amado con tanta intensidad. Y es que ante sus ojos se encontraba alguien que solo podía generarle desagrado, un terrible nudo en garganta y estómago... ya no veía al hombre con quien deseaba pasar cada momento de su vida, con quien soñaba tener una gran historia de amor. Ya no podía ver nada bueno en él... 

— No significas nada para mi— dijo ella rodando los ojos— Así que deja de creer que tienes un lugar en mi vida que claramente no existe

— Si no significara nada para ti, no hubieras reaccionado como lo hiciste el día que nos reencontramos...

— Me tomaste por sorpresa. ¿Qué esperabas? ¿Qué me lanzara a tus brazos y te cantara una canción? ¿O que actuara como si nada hubiera pasado?— preguntó Juno irónicamente— Si reaccioné así es por todos los sentimientos negativos que tenía dentro. Pero ahora que los días pasaron y tuve tiempo para pensar las cosas, me doy cuenta que no vale la pena desgastarme por alguien como tú. No vales ni las energías que podría gastar solo por pensar en ti

— Pues tendrás que seguir soportándome porque tenemos una hija en común y eso no podrás cambiarlo

La sangre de Juno comenzó a arder ante la mención de Charlotte.

¿Cómo podía ser tan cínico después de que había despreciado a ese bebé desde que había llegado al mundo?

¿Cómo es que tenía la cara para presentarse después de cinco años para admitir que "tiene una hija"?

— No sé de que me estás hablando. Yo no tengo una hija contigo— negó Juno con firmeza— Yo fui una madre soltera que sacó a su hija adelante por su propia cuenta. Y si mi hija pudiera llegar a tener un padre, estoy completamente segura de que ese no serías tú

— No puedes apartarme de la niña, soy su padre— decía Austin haciendo rabiar aún mas a la castaña— ¡Tengo derechos sobre ella!

— ¿Qué demonios sucede contigo? Tú no tienes ninguna clase de derecho sobre mi hija— decía Juno con molestia— Y déjame decirte que se necesita mas que el aporte del espermatozoide para llamarte padre de un hijo. Tú desapareciste todos estos años, jamás volviste a buscarme si quiera para asegurarte que estuviéramos a salvo... no vengas a querer hacerte pasar por un padre que quiere estar junto a su hija porque no es mas que una mentira

Austin suspiró antes de responder.

— Escucha, se que hice las cosas mal en el pasado y lo único que quiero es tratar de remediar todo lo ocurrido— dijo Austin de manera calmada— Quiero recuperar esa familia que tanto soñamos tener...

— Ya es tarde para eso Austin. Seis años tarde— dijo Juno seria— Lo que teníamos terminó el día que me pusiste a elegir entre mi bebé y tú. Terminó el día que me corriste del departamento sin importarte en donde pudiera terminar o que estaba embarazada. Ya no existe un nosotros, ni jamás volverá a existir

— Juno... dame otra oportunidad. Te lo suplico— pidió Austin tratando de sujetar la mano de la castaña, quien de inmediato la quitó— Nos amamos demasiado como para permitir que la historia entre los dos termine...

— No te confundas. Yo te amé, en tiempo pasado y tú mismo fuiste el encargado de terminar con todo ese sentimiento— dijo Juno retrocediendo, le enfermaba tener a Austin tan cerca— Ya no te amo. Seguí con mi vida y ahora estoy con alguien que realmente sabe el significado de lo que es amar

— Tú no puedes...

— ¡Si, si puedo!— lo interrumpió ella con un grito— Tú no sabes amar, tú solo amas ser amado. Amas saber que tienes a alguien bajo tu control... pero yo ya no soy esa persona. No más

Juno no lograba comprender como es que Austin sabia que su bebé había sido una niña, pero en ese momento esa era la menor de sus dudas. En su cabeza rondaban demasiadas teorías del porque su ex pareja estaba tan interesado en volver a recuperar aquella relación que había muerto bastante tiempo atrás.

Todas mas ilógicas que la otra.

— Estás actuando como si creyeras que no pudiera reemplazarte. Pero déjame decirte algo, yo soy demasiado para ti y tú... — rio Juno mientras lo miraba de manera burlona— Tú no eres suficiente. Ni para mi, ni para mi hija

— Juno, dame otra oportunidad... se que cometí errores y lo lamento... solo quiero que las cosas vuelvan a ser lo de antes. Si reaccioné como lo hice años atrás era porque... éramos muy jóvenes, me asusté...

— ¿¡Y crees que yo no estaba asustada!? Una vida se comenzaba a formar en mi interior y yo no tenía a nadie para apoyarme... ¡Ni siquiera tenía un techo para pasar la noche!— decía Juno incrementando cada vez mas su coraje— Tú no sabes la cantidad de cosas por las que tuve que pasar después de que me abandonaras. ¡No sabes todo lo que tuve que hacer para que mi hija tuviera una vida digna! Así que no Austin, yo no quiero que las cosas vuelvan a ser lo de antes y mucho menos te quiero cerca de mi.

La castaña dio la media vuelta antes de que Austin pudiera decir alguna palabra más. Ya no soportaba estar cerca de él, sentía náuseas ante la idea de seguir respirando el mismo aire que él y ciertamente le desagradaba volver a verlo.

No sabía que era lo que el pelinegro buscaba con su regreso, pero en definitiva no permitiría que alguien como él, estuviera cerca de Charlotte.

Ella se había hecho la promesa de siempre cuidar a su hija y así lo cumpliría, aún cuando tuviera de protegerla del hombre que biológicamente era su padre.

•••

Cada que Juno recogía a Charlotte de la escuela, era costumbre que la niña corriera emocionada hasta los brazos de su madre, quien siempre la recibía con un beso en la frente y palabras amorosas.

— ¿Qué tal estuvo tu día, corazón?— le preguntó Juno a la niña mientras cargaba su mochila— ¿Te comiste todo lo que te mandé?

— Estuvo divertido— sonrió la niña tomando la mano de su madre— Y si, todo estuvo rico. Aunque le regalé una de mis galletas de arándanos a mi amiga Lily. Es que sus padres olvidaron ponerle el postre y se puso triste

— ¿Y a Lily le gustó la galleta?

— Si, dijo que de ahora en adelante serían sus favoritas— asintió Charlotte mientras caminaba

Juno le sonrió a su hija con dulzura. Sabía que su pequeña tenía un corazón de oro y adoraba compartir, sobre todo los postres que su madre siempre preparaba para ella. Esto porque según la pequeña, quería que todos supieran que su mamá era la mejor repostera que existía en el mundo.

— Mami, ¿Podemos ir a los columpios un rato? A los que me llevaste junto con papá Spencer hace unos días— preguntó la niña— Y te prometo que al llegar a la pastelería me voy a portar muy bien

— Hoy la carga de trabajo es demasiada, pero lo que podemos hacer y se que te va a animar es llamar a Spencer. Si es que no está muy ocupado trabajando— sugirió la castaña, recibiendo un brinco de alegría por parte de su hija— Bueno, le mandaremos un mensaje para ver que tan ocupado esté en cuanto lleguemos a la pastelería

— Si mami— sonrió la niña

Madre e hija caminaron mientras la niña de cabellos largos y castaños contaba de manera alegre todo lo que había hecho en el colegio.

Juno escuchaba con atención a la pequeña, sintiendo como su corazón latía de alegría por ver a su hija ser tan feliz.

Adoraba que Charlotte fuera una niña tan alegre.

Y es que pese a la ausencia de un padre, la niña lograba siempre sonreír y ser feliz con la pequeña familia que formaron con todos en la pastelería.

Ninguna de las dos parecía que pudiera necesitar mas en la vida.

Y aún así Spencer llegó a ellas, logrando así obtener un rayo de alegría. Siendo así un elemento en sus vidas que tal vez no era del todo necesario, pero que ahora se había vuelto indispensable.

Charlotte veía a Spencer como el papá perfecto. Alguien digno de admirar que se dedicaba a proteger a las personas y que además era un mago que hacía trucos increíbles.

Las dos eran bastante felices con lo que tenían y Juno haría hasta lo imposible porque nada se viniera abajo.

•••

La UAC se encontraba fuera de Virginia, sin embargo Spencer al encontrarse herido permaneció en las oficinas (todo gracias a que Hotch descubrió que aún no estaba autorizado para volar fuera del estado).

Ahora el castaño se encontraba en la oficina de Penélope García conversando sobre una futura convención a la que querían asistir.

— Aún no sé si quiero un disfraz completo y maquillaje. No encuentro a alguien que haga buen trabajo con eso último— mencionó la rubia mientras jugaba con su silla

— Juno es maquillista. Podrías preguntarle si te puede ayudar— sugirió Spencer

— Tu novia es como una barbie. Repostera, madre de tiempo completo, enfermera y ahora hasta maquillista. ¿Acaso vuela?— decía García con sorpresa y riendo

— Juno es mas hermosa que cualquier barbie

— Awww. Vaya que estás enamorado, solo hace falta ver el brillo en tu mirada cada que la mencionas— sonrió la de lentes— Me hace feliz saber que encontraste a alguien indicada para ti. Mereces vivir toda clase de cosas bonitas

Spencer sonrió agachando la mirada y sintiendo su corazón acelerarse ante la aparición de Juno en sus pensamientos.

Y es que la castaña era todo lo que había podido desear ena vida e incluso mas. Rompiendo todas sus escalas y expectativas, Juno era la mujer de sus sueños, de eso jamás existiría duda.

— Juno es maravillosa. Jamás esperé que pudiera llegar a sentir todo esto por alguien y mucho menos que pudiera ser correspondido— suspiró Spencer

— Date mas crédito. Eres alguien inteligente, cariñoso y atractivo, que no sepas verlo o aceptarlo no significa que otras personas no puedan notarlo— sonrió García nuevamente— Cualquiera sería afortunada de tenerte

— El afortunado soy yo por tener a Juno y Charlotte en mi vida

— Los tres son afortunados por tenerse unos a otros— dijo Penélope

Spencer sonrió dándole la razón a su amiga.

Momentos después, su teléfono sonó indicando que tenía un mensaje de texto nuevo.

Juno: "Hola cariño, buen día. ¿Estás ocupado?"

Me: "Hola, no realmente. ¿Qué pasa?"

Juno: "Charlotte te extraña (y por supuesto que también yo). Quería saber si tenías algunos minutos para hablar por teléfono"

Me: "Por supuesto, yo también las extraño"

Solo bastaron unos cuantos segundos para que el teléfono de Spencer comenzara a sonar nuevamente, solo que ahora indicando que una llamada estaba entrando. El castaño sonrió al ver el nombre de su novia en la pantalla y contestó de inmediato.

— ¡Hola papá Spencer!— saludó la niña en cuanto la llamada fue respondida

— Hola Charlotte— saludó de vuelta el castaño— ¿Cómo te fue en la escuela?

— Bien. Le regalé una galleta a mi amiga Lily y pude saltar la cuerda cinco veces seguidas y hace rato que llegué a la pastelería, le puse agua a las flores que me regalaste. ¡Son muy bonitas!— contestaba la niña con emoción— ¿Ya vas a venir? Ya va a ser la hora de la comida

— Me da mucho gusto por ti, eres una niña muy hábil y la alegra que cuides las flores y te gusten. Fueron elegidas solo para ti. Sobre ir a comer, desgraciadamente aún me encuentro trabajando por lo que no podré acompañarlas en la hora de la comida, pero intentaré volver para la cena— explicaba Spencer, quien era visto por García, quien no podía evitar sonreír al escuchar a su amigo— Cuando llegue, quiero ver como saltas la cuerda. ¿Está bien?

— Si papá Spencer. Te extraño

— Y yo a ti Charlotte. Obedeces a tu mamá y haces tus tareas

— Está bien, te vemos mas tarde— decía Charlotte— Te paso a mi mamá para que hables con ella

— Gracias, nos vemos mas tarde— se despedía Spencer

Hubo un corto silencio mientras Charlotte le entregaba el celular a su madre, uno suficiente para que Spencer sonriera por la pequeña conversación que había tenido con la niña.

Le gustaban los niños y aunque no era un pensamiento que pasara por su mente de manera constante, no descartaba la idea de en algún momento convertirse en padre. Sin embargo por el empleo que tenía no parecía encontrar el momento indicado para que eso sucediera, además claro de que no había conocido a alguien que le gustara lo suficiente para pensar en un futuro a su lado.

Pero todo cambió cuando Juno apareció en su vida y no solo lo hizo pensar en una enorme cantidad de escenarios, si no que también le dio la alegría de tener a Charlotte en su vida. Quien si bien no era su hija biológicamente hablando, pero la quería y la adoraba como si así lo fuera.

Porque para Spencer la familia no se trataba siempre de un lazo sanguíneo.

— Gracias por tomar la llamada, se que siempre estás ocupado, pero Charlotte quería oír tu voz y por supuesto que yo también— habló Juno— ¿Cómo va todo? Por lo que escuché asumiré que sigues en Virginia

— Me hace muy feliz poder hablar con ustedes— dijo Spencer con una sonrisa— Y en efecto, estoy en Virginia. De hecho justo ahora estoy con García en su oficina

— ¡Hola Juno!— saludó la rubia con alegría— Saludos a Charlotte

— Yo le mando tus saludos. Hola Penélope— saludó Juno riendo— ¿Su caso fue local?

— En realidad el equipo salió del estado y me pidieron quedarme porque Hotch descubrió que aún no tenía autorización de un doctor para viajar...

— Pero me habías dicho que si...

— La autorización la di yo y en teoría soy doctor, así que vamos a llamarla una segunda opinión

— Ya hablaremos de eso cuando vaya por ti en la noche— dijo Juno con un poco de seriedad en su voz— No estoy molesta... bueno, no del todo, pero no vuelvas a hacer eso. Recibiste un disparo en la rodilla y eso

— Lo siento... es solo que no quería seguir sintiéndome tan inútil y quería volver al trabajo— se disculpó Spencer

— Cariño, tú jamás serías alguien inútil— le respondió Juno un poco mas serena

El teléfono de García volvió a sonar, lo que significaba que el equipo necesitaba de ellos.

— Creo tienes otras cosas que atender, así que te dejo trabajar. Me avisas cuando estés por salir para ir por ti— dijo Juno nuevamente

— No... espera, cuéntame un poco sobre tu día. ¿Cómo te sientes? Noto algo raro en tu voz y no creo que sea solo por lo que está pasando

Juno suspiró y tratando de que no se notara nada en su voz, respondió.

— Estoy bien. La mañana estuvo tranquila, mucho trabajo, lo de siempre

— ¿Segura? Sabes que me puedes decir lo que sea

— Lo sé... todo está en orden, así que no te preocupes y continua con tu trabajo— mintió la castaña— Te quiero

— Y yo a ti...

Juno colgó la llamada antes de que Spencer pudiera decir algo mas, cosa que por supuesto había generado que el castaño creyera su teoría de que algo mas había pasado y su novia lo estaba ocultando.

— ¿Todo en orden?— preguntó García

— No creo... pero te explico luego

pregunta: ¿cuáles creen que sean las intenciones de austin ahora que está de regreso?

¿creen que eso les traiga problemas a spencer y juno?

otra cosa, les agradecería muchísimo si comentan un poco mas para hacer que la historia siga llegando a más personas por medio de los #.

no sean lectores fantasma porque a mi me encanta hablar con todxs ustedes.

sin mas por el momento, me despido y les agradezco muchísimo por todo el apoyo en la historia, valen mil.

K.🦋

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top