Chapter 23:-

Llevaban más de cinco minutos mirándose a las caras y ninguno soltaba palabra alguna. Baekhyun tosió falsamente y apretó suavemente la mano femenina bajo la suya.

-Con Rosé regresáremos a Australia.

El rostro se Jimin se desfiguró y sus hijos -quienes estaban a su lado- bajaron la cabeza con intensiones de llorar.

-Dime que es una maldita broma, Roseanne.-la nombrada negó y alzó la mirada colocándola en él.

-Viajáremos en dos días. Lo siento chicos.-informó, a lo que los menores se retiraron y subieron a su habitación furiosos.

-No te llevarás a Jaemin, no permitiré que lo alejes de mi. ¡Soy su padre, demonios!

-¡Y yo su madre, tengo más derecho que tú!

-Esto es él colmo.-explotó incorporándose del sofá.-Cómo puedes hacerle esto a tus propios hijos, Rosé.

-Jimin, por favor, no...

-¡No me voy a callar con esto! .-exclamó con el ceño levemente fruncido.-Haz lo que quieras con tu matrimonio, tu casa y hasta tu bebé.-señaló el vientre abultado.-Pero a mis niños no me los vas a quitar, no o través.

La contraria cerro la boca y colocó su mirar en Byun. Éste se la devolvió y asintió dejándolos a solas.

-Ahora que estamos sólos, podrías calmarte por favor.-Jimin volvio a tomar asiento tras soltar un suspiro.- Sé que para ninguno de nosotros es fácil esto, soy consiente de ello.

-Rosé, por lo que más amas en él mundo, no me quites el derecho de verlos.-pidió tomándole las manos.

-No hagas las cosas más difíciles, Jimin. Me llevaré a Jaemin quieras o no, es mi última palabra.

-Y así dices que me amas.-musitó entre dientes.

-Jimin, no seas injusto.-fue ella quien se incorporó esta vez.-Tampoco en redes las cosas, que aún sienta algo por ti no significa que puedas manipularme.

-No lo hago, intento que no cometas una locura. Por favor.-suplicó mirándola a los ojos.-Te pido que no lo hagas, piensa en nuestros hijos.

-... Lo siento, ya no hay vuelta atrás.

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Dos días después...

Baekhyun y Rosé ya se encontraban en él aeropuerto a la espera de su vuelo.
La menor se paseaba de un lado a otro mientras esperaba a que Jimin llegara con los niños.

Miró por enésima vez el reloj de su muñeca y golpeó su zapato con frustración. Llevaban más de quince minutos de retraso y su avión despegaría pronto.

-Baek, me estoy preocupando. Ya ha pasado mucho tiempo y aún no aparecen.-decía afligida.

-Tranquila, llegarán en cualquier minuto.-le dijo tomándola por ambos hombros.-Mira.-señaló con la mirada.-Ahí vienen.

La menor se volvió sonriente, pero al ver a los niños ésta se borró. Ambos le sonreían mostrando sus brillantes y blancos dientes, mientras vestían las mismas ropa y estilo.

-¿Ja-jaemin, qué haces con esas ropas? Cariño, no son aptas para un viaje, ve a cambiarte.

-No, primero debes adivinar quién en quién. Ambos nos tomaron él pelo, papá prometió que pasaríamos navidad en Busan.

-Y queremos ir, juntos.-concluyó él menor de los dos.

-Jaemin, esto es una locura, porfabor ve y cambiate.-los dos niños negaron moviendo su cabeza.

-¿Estás segura qué soy Jaemin? .-cuestionó quien había hablado antes.

-¡Claro que sí, eres mi hijo!

-Pero, es difícil estar completamente segura, ¿verdad? .-dijo él contrario sonriente.

-Jimin, ayudame quieres.-pidió a lo que él hombre se cruzó de brazos.-Decirles que es una broma de muy mal gusto.

-Lo siento, pero yo tampoco lo sé.-negó alzándose de hombros.

-Chicos, por culpa de esta idea ridícula perderemos él vuelo. Vamos, no sean problemáticos.-comentó Baekhyun.

-Queremos terminar él año juntos, hace poco comenzamos las clases. No es normal hacer esta locura.-dijo uno de los menores.

-Pasáremos navidad y año nuevo aquí.-dijo él segundo Park.

-¡Park Jaemin! .-exclamó molesta.

-¿Sí? .-dijeron los dos al unísono.

Jimin río mientras observaba la escena. Luego se colocó frente a sus hijos y miró a cada uno profundamente.

-Él es Jaehyun, no me equivocaria.-señaló a quien tenía enfrente.

-Espero que tengas razón papá, porque no querrías enviar al niño equivocado otra vez hasta Australia.

-¿O sí? .-ante la pregunta él castaño observó detenidamente a los chicos y suspiró pesadamente.

-Les proponemos algo.-comentó dando un paso adelante.-Regresamos a casa y  pasamos él día como familia los cuatro.

-¿Nosotros cuatro? .-dijo tras soltar una leve risa.

-Y cuando regresemos, les diremos quien es Jaehyun y quien es Jaemin.-terminó de decir él otro gemelo.

-Se hará lo que he dicho y llevaré a uno de ustedes conmigo a Australia, así les guste o no, entendido.

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-¿Decías? .-cuestionó Jaehyun entre risas.

-Estoy muy molesta con ustedes niños.-dijo mirándoles por él retrovisor.-Jimin, dime que vamos a hacer.

-Dejarlos, son unos niños Rosé. Deja que pasen unos días más juntos, no es para nada malo lo que hacen.-comentó mientras conducía.

-Te comportas igual o peor que tus hijos, un niñato de guardería.-dijo encogiéndose en su asiento.-Baekhyun explorará por esto.

-¿No confía en ti? .-volvió a decir Jimin.-Si no lo hace, es porque no te respeta como tal.

-No te metas en mis cosas, Park Jimin.-gruñó observando la carretera a través de la ventanilla.

Estaban en pleno mes de noviembre, y a los menores se les había ocurrido ir al mar. Cada vez que se acercaban al punto del viaje sentia como sus huesos dolían más y más.
Jadeo haciendo que se empañara él vidrio y dibujó en el, su hijo quien estaba tras ella sonrió y le acarició la larga cabellera dulcemente.

-No estés enojada mami, nosotros te queremos mucho.

-Solamente queríamos pasar tiempo en familia, es todo.-terminó de decir Jaemin con una morisqueta feliz.

-Lo sé niños, lo sé. Yo también los amo mucho mis tesoros.

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-Hemos llegado.-anunció Jimin estacionándose.

-Al fin, ya sentía mi trasero entumecido.-se quejó quitándose él cinturón se seguridad.

-Rosé, ahora tú eres la niña chiquita. Guarda esas quejas para después, ¿quieres?

-Nosotros vamos primero.-dijo Jaemin bajándose junto a su menor.

-¡No se vayan tan lejos!

-¡Sí! .-exclamaron mientras se alejaban.

-No debí de haber aceptado esto.-murmuró sorprendiendo a Jimin.

-Que molesta eres algunas veces, Roseanne. ¿Ni siquiera pasar tiempo con nosotros soportas?, ya veo que sólo te interesa tu matrimonio y ese bebé, has dejado de lado a nuestros hijos.

-¡No es así! ¡no coloques palabras que no he dicho en mi boca, idiota!

-¡No me insultes, tonta! .-contraatacó furioso.

Rosé no dijo nada, lo único que hizo fue abrir la puerta y bajarse del auto. Jimin la imitó, rodeó él automóvil y la tomó del brazo atrayéndola a su cuerpo.
La rubia lo miró sorprendida colocando ambas manos sobre el torso del mayor. Jimin le acarició la dorada cabellera y colocó uno de sus mechones tras la oreja femenina, ella cerró sus ojos ante la caricia dejándose llevar.

Pronto sintió como Jimin la rodeaba con sus fuertes brazos y ocultaba su rostro entre su cuello y hombro.

-No quiero discutir, mucho menos contigo gordita.-musitó haciéndola sonreír.

-Hace mucho tiempo que no me decías así.

-Yo soy él único que puede llamarte de esa manera, lo sabés, ¿verdad?.-acunó él rostro femenino entre sus manos y lo acercó al suyo.
-¿Te he dicho que me vuelves loco?

-No, Jimin basta.-le detuvo desviando la mirada.-Hoy no.

-¿Entonces, cuándo podremos estar completamente solos?, quizás no tengamos ninguna otra oportunidad de hacerlo.

-Por ahora quiero disfrutar de nuestros hijos, nada más.

-Eso quiere decir que...

-En estos momentos todo es muy complicado para mi.-Jimin dio un paso atrás e hizo una mueca disgustado.-Necesitó tiempo para...

-Pues yo no lo tengo, te quiero a mi lado Rosie. Estoy cansado de esperar.

-Jim-...

-Te amo, y aunque estés embarazada de otro, mis sentimientos no cambiarán por ti, te lo aseguro.

Yo también te necesito, Jimin-ah

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Momo 🍑💞