~" Rozando el paraíso "
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Un suave golpe llegó a la espalda de Taehyung al ser estampado con medida fuerza contra la puerta. Ya estaban en la habitación del menor, la tensión sexual era palpable en el aire, pero también los nervios. La incertidumbre de adentrarse de lleno a un terreno del todo nuevo los mantenía con el pulso acelerado.

Solo contaban con la pequeña luz proveniente de la lámpara de noche sin embargo, eso no impidió que sostuviesen miradas mientras se deshacían de la molesta ropa que limitaba sus caricias a la ardiente piel.

El contacto visual jamás fue interrumpido, aún cuando batallaron por llegar hasta las sábanas, aún cuando sus labios se maltrataran entre sí entre desesperados besos, aún cuando se entregaban decididamente, mantuvieron su juego de miradas, casi parecían cerciorarse de que aquello era real, de que él estaba ahí.
Taehyung percibió encantado a aquellos orbes oscuros estar al pendiente de cada expresión de placer que él lanzaba, engulléndole con deseo.

Jungkook mordió y succionó fuertemente con el anhelo de ver las marcas violetas o rojas al día siguiente,  su deseo aumentó al hacerse una imagen mental e hizo que succionase con más fuerza dejándole escuchar los gemidos de Taehyung.

El propósito de las caricias le sugerían a Taehyung que el menor no estaba contemplando ser el de abajo y corroboró aquello cuando lo vio apoyarse contra el espaldar de la cama y bombear su miembro con lentitud mientras clavada sus ojos prendidos de lujuria en los suyos, invitándole silenciosamente a usar su boquita para algo más que mantenerla abierta de la impresión.

Suspiró incosientemente justo encima del miembro del pelinegro una vez estuvo más cerca, mandando un ligero temblor por todo su cuerpo. Acercó un poco más su rostro y dirigió sus labios hasta la punta dando varias lamidas mientras lo masturbaba lenta y tortuosamente.

Jungkook soltó un par de jadeos al sentir como chupaba desde la base hasta la punta succionando con fuerza una vez llegaba a esta.
Soltó un ronco gemido y tomó aire para ordenar

— Metelo todo, bebé, se que puedes.

No estaba obligado a hacerle caso a Jeon por ser su primera vez en todo aquello, pero tampoco es como si no quisiera satisfacerlo, por ello con algo más de confianza por lo que provocaba en el azabache, se aventuró a ir más profundo. Sintiendo arcadas repentinas, lo sacó algo asustado, vaya, las chicas lo hacían ver tan fácil.

Una caricia llegó a su cabello con el propósito de calmar sus nervios, por ello, le dio una sonrisa algo tímida al menor y se propuso intentar nuevamente. Varios minutos de prueba y error, su entusiasmo dio resultados, tanto así que tenía al pelinegro jadeando con desespero.

Jungkook dirigió a Taehyung hasta su regazo y robó su aliento por segunda vez con un demandante y caliente beso, no quería correrse tan pronto con solo una felación.
Llevo dos de sus dedos hacia la boca del castaño, sonríe complacido al ver la atrevida lengua de Taehyung ensalivarlos, deleitándose con la ardiente expresión hasta retirarlos de la acogedora cavidad. A pesar de la saliva envolviendo sus dedos, alcanza el lubricante situado en su mesita de noche una vez le ordena a Taehyung darle la espalda.

Introduce un dedo en la apretada entrada de Taehyung moviéndolo al segundo de ingresarlo dentro. Le ponía tanto verlo en cuatro, tan nervioso y excitado solo para él que adentró un segundo dedo de forma impaciente sin dejarle adaptarse causando en Tae dolor, ardor y varios gemidos bastante agudos.

— Agh, espera —una de las manos del mayor se mueve hacia el cuerpo de Jungkook con el fin de detenerlo —Du-Duele

— O-Oh, perdón. —sus labios viajaron hasta el lóbulo del chico de piel canela, intentando relajarlo ante el dolor.— Me emocioné un poco, bebé, lo siento.

— Tranquilo, so-solo, hazlo lento por a-ahora, por favor

Taehyung pensaba que ahora no podía ponerse de exigente, teniendo en cuenta que Jungkook había propuesto tener toda una noche de placer, no quería hacerlo arrepentirse por si cabía la posibilidad de haber sesiones futuras.
No deseaba echar a perder la oportunidad que por años había deseado, jamás pensó que su amistad pudiera llegar hasta aquí, por supuesto, por cuestión de inseguridades tampoco quiso hacerle saber de sus sentimientos alguna vez, eso solo iba a desencadenar la pérdida definitiva de su mejor amigo. Además, aún no era capaz de hacerle frente a su sexualidad, puesto que un atemorizante pensamiento lo  atormentaba, ¿Qué pensarían todos de él? ¿Qué pensaría él?

Grande ha sido su sorpresa al verse en los brazos de Jungkook entre pieles sudadas y gemidos entrecortados, quizá por él, y solamente por él, podría permitirse ser feliz y confesarse sin importarle la reacción del mundo.

|Editado|

ㅤ࿆
˖⬪ ݁❟ D̸𝔯𝐞𝕒ᴍᴍi̶𝐞 ·₊˚.