𝟕

Jimin jugueteaba un poco con la comida en su plato, siendo acompañado por Yoongi quien se encontraba sentado comiendo frente a él. 

—Extrañas a tu mamá ¿Cierto? 

—No creo que ella me siga queriendo. —El castaño lo vio con los ojos llorosos. 

—Claro que te quiere. 

—¿Entonces por qué me dejo solo en navidad? 

—Yo estoy aquí y siempre seremos amigos. —Yoon le sonrió con seguridad. 

Jimin asintió sonriendo. 

Acompañame. —Le dijo el pelinegro, llevándolo al balcón. —¿Vez esa de ahí? —Señalo una estrella. —No importa donde estes, solo tienes que salir y ver la estrella polar, así nunca estarás solo porque donde yo este sabrás que también la estaré viendo. 

Jimin volteo a verlo. —¿Lo prometes? 

—Lo juro. 

—¿No importa que? 

Yoongi extendió su mano y Jimin la tomo completamente feliz. 
—Y no importa donde. —Le aseguro el pelinegro. 

Ambos niños miraron de nuevo aquella estrella.

Ahora Jimin caminaba a las afueras del palacio, viendo esa estrella nuevamente. Recordando como fue que Min alejo su tristeza con aquella promesa, sintiéndose feliz cada vez que veía al cielo.

Y del otro lado del palacio, Yoongi se encontraba viendola de igual manera y justo en ese momento una estrella fugaz se hizo visible en el cielo.

—Espera, espera...¿Puedes...llevar algo? —Gyu le reprochaba al señor Lee quien no le ayudaba mucho a cargar las cosas. 

—Eso es lo que hago. 

Ambos bajaron el objeto donde encima Wheein coloco una pelota de basquetbol. 

—Listo. —Dijeron los tres al mismo tiempo y Min asintió. 

—Está es una aproximación de los sensores de movimiento en la galería. —Yoongi encendió los aparatos que rodearon el lugar que marcaron. 

Los tres se sorprendieron al ver aquello. 

—Comencemos. —Min atravesó los sensores con movimientos elegantes pero se detuvo un poco lejos del objetivo, el cual era el sistema para desactivar el sistema. 
—Aquí es donde se complica un poco. —Los sensores se hacían mas estrechos en aquel lugar por lo que ya no podía avanzar.

—Oh entiendo, necesitas un compañero que pase por encima del sensor. —Beomgyu ahora comprendió el porque debían ser tres personas. 

Jimin llego en ese momento, observando. 

—Exacto, es la única forma de llegar al panel de control del otro lado. 

—Bueno, flexible es mi segundo nombre. —Le dijo Gyu quien se encontraba estirándose, al ingresar unicamente avanzo unos cuantos pasos y al agacharse para esquivar un láser de inmediato cayo haciendo que las alarmas sonaran. —Lo intentare otra vez.

Wheein rodó los ojos con fastidio al ver el fracaso de su amigo. 

—Comencemos de nuevo. —Yoongi apago las alarmas. 

Jimin se acerco, peinando un poco su cabello. —Mira y aprende. 

Comenzó con movimientos elegantes y completamente flexibles, pasando con cautela cada uno de los lazer. Yoongi lo miraba completamente atento.

Al llegar a donde estaba Min, le estiro su mano para que lo ayudara a levantarse y al hacerlo, ambos quedaron con el rostro muy cerca del otro.

Wheein y Beomgyu se miraron al ver aquello. 

Yoongi y Jimin no perdieron el contacto visual, giraron para que el rubio quedara del lado donde el pelinegro se encontraba. Min se agacho un poco, juntando sus manos como un escalón, Park sonrió y subió uno de sus pies mientras era impulsado, dando una increíble pirueta y terminando elegantemente del otro lado del sensor. 

Tomando el papel que decía "panel de control" y arrojándolo mientras le sonreía al mayor. —Listo 

Los tres espectadores se quedaron bastante sorprendidos y el señor Lee aplaudió inmediatamente. 

—Muy bien. —Dijo Gyu comenzando a estirarse de nuevo. 

Jimin estaba en su habitación, eligiendo ropa y en ese momento recibió un mensaje de texto de parte de Yoongi. 

"¿Nos vemos afuera?"

Frunció el ceño con extrañeza pero después sonrió.

Yoongi esperaba en la entrada del palacio hasta que escucho aquella voz tan peculiar.

—Bon soir Yoongi, ¿Vamos? —Le pregunto dirigiéndose a su auto.

—En un momento. —Min vio su reloj.

El rubio frunció el ceño y ladeó la cabeza sin entender que era lo que estaban esperando.

En segundos se comenzó a escuchar un helicóptero, el menor alzo la vista y soltó un "Oh" sonriendo ante eso.

El helicóptero descendió a unos metros de ellos.

—Un cliente me lo presto.

—Eres todo un James Bond. —Minnie le sonrió.

—¿Vamos Jiminie? Como en los viejos tiempos. —Yoon le extendió su brazo y el rubio lo tomo. Ambos comenzaron a caminar hacia el que seria su transporte.

Taehyung observaba aquello con una sonrisa.

Hoseok al ver a su esposo se acerco a su lado en aquel gran ventanal.
—¿Qué pasa?

—Jimin y Yoongi, me parecen realmente adorables juntos.

—Espero que se dirijan al norte.

—¿Por qué? —Tae vio como el helicóptero despegaba.

—La tormenta avanza hacia el sur, cerraron el aeropuerto hace una hora.

Kim se volteo rápidamente asustado. —Yoojung.

—Me escribio, dijo que se desviaron por Bruselas.

Taehyung suspiro aliviado.

—Pensé en sorprenderla y buscarla yo.

—¿Cuando crees que volverás? —Comenzo a caminar un poco junto a su pareja.

—Son 8 horas de viaje, si salgo a primera hora debería llegar cuando ella aterrize, solo estaría fuera un día, día y medio como máximo.

—No pasa nada. —Tae le sonrió.

—¿Estas seguro de que estarás bien? —Seok se detuvo, quedando ambos de frente. —Porque con todo lo que esta ocurriendo...

Taehyung lo interrumpió para calmarlo. —Tendré reuniones toda la mañana y tomaré el té con el cardenal Im así que no te perderás de mucho.

—Te voy a extrañar. —Jung le sonrió.

—Yo ya te extraño.

Hoseok lo tomo de la cintura y lo acerco a su cuerpo para poder besarlo. Taehyung puso las manos sobre su pecho, correspondiendo aquel suave beso.

—¿A donde vamos, al polo norte? —Jimin pregunto, viendo por las ventanas del helicóptero.

—Algo así, ya lo veras. —Respondió Yoongi.

El lugar estaba cubierto de nieve, había puestos adornando las calles con luces por casi todo el lugar, las personas iban y venían alegremente.

Ambos chicos caminaban por el pasillo y el pelinegro volteo hacia el rubio quien frunció el ceño con una sonrisa.

—Adelante, dime tu mejor critica.

—Parece que los elfos de santa fumaron demasiado muérdago esta vez. —Jimin dijo con diversión.

Y los dos comenzaron a reir.

—Tengo una idea. —Yoongi le dijo.

—Dime que incluye algo de alcohol.

—No, eso no.

—¿Pintaremos algo obsceno en los muñecos de nieve?

Y solo la idea volvio a hacerlos reír.

—Patinaremos.

—No es enserio. —Jimin nego, viendo la pista de patinaje frente a ellos.

—Sabes que quieres.

—En tus sueños.

—Animate, será divertido. —Min coloco una mano tras la espalda del menor.

—Para ti. —Minnie lo golpeo levemente en el brazo.

—¿Que te parecen los osos polares?

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top