¿Como sería Lissandra como madre?

Advertencias: Fluff. Tristeza leve(¿.

• Al principio no sería una madre ejemplar, eso esta mas que claro, pero sería suficiente.

• La avaricia y el deseo de mantener todo bajo el hielo eran grandes, así como tampoco quería que todos se enteraran de tu existencia. Ser la monarca de la ciudadela implica tener enemigos por doquier, sus enemigos son demasiados, y pensar que todos se enteren de la existencia de su hija hace que su frío corazón tiemble ante la idea de tu muerte o de un peligro fuerte.

• Cuando no esta en casa, definitivamente dejara a varios guardias de hielo para velar por tu seguridad, después de todo, ella misma los creo y confía en sus creaciones.

• La primera vez que te tuvo en brazos, su corazón dio un vuelco, viendo los pocos cabellos albinos junto a unas marcas en tu rostro y pequeño cuerpo, de color azul y poco blanco, demostrando ser una descendiente del hielo.

• Desde entonces, se volvió sobre protectora, demasiado. Velaba día y noche, buscando posibilidades para las batallas que lidiaban seguido. Queriendo que en todo momento, estés a salvo y lejos de todo el caos.

• La primera vez que estuviste en peligro, fue cuando cumpliste tres años, cerca estaba un ursino, quien trato de arañarte al reconocer la esencia de la ultima hermana en pie en ti. Lissandra presencio todo, atacando con sus picos de hielo al ursino hasta que murió lentamente, frente a ti.

• Lissandra sabia que no siempre iba a estar, ella o sus guardias, por lo que simplemente decidió que tuvieras un excelente entrenamiento. Así en un futuro la ayudarías y estarías bien con ese entrenamiento.

• Al tus poderes despertar, notó que eran iguales a los de ella, incluso aunque no le gustara, tenia ciertas habilidades de sus hermanas, Serylda y Avarosa. Y grata fue su sorpresa cuando un arma llego a la ciudadela, cortesía de Ornn.

• Cuando todos se enteraron de tu existencia, fue un caos. Todos querían matarte, ¿tener a una descendiente a la ciudadela?, ¿una que lideraría a la guardia en algún momento?, no podían permitirlo cuando querían destruir a Lissandra y su dinastía.

• Conviviste por años con tus tías, quienes te enseñaron sus artes y formas de batalla, te adoraban. Y adoraban como tenías esa actitud tan parecía a las de ellas tres juntas.

• Oh, los vigilantes de hielo, ellos estaban en desacuerdo con tu existencia, era un peligro, no sabría decir porque. Muchas veces pensaron en como eliminarte, pero sabían que Lissandra te adoraba, demasiado, por lo que no tuvieron mas opción que aceptarte y verte como la heredera legitima y enseñarte tanto como atacarte para ver tus reflejos.

• Cuando la batalla de las hermanas empezó, no fuiste del todo parte. Viste todo, como se destruían entre ellos, tus tías y madre pelear entre ellas. Una escena que odiaste. Pero al final te uniste a tu madre, peleando contra ellas. Hasta que ustedes dos fueron las únicas vivas en el abismo, donde sacrificaron a todos para sellar a los vigilantes.

• Como no, ayudaste a tu madre con el hielo puro, enviando olas al mismo que sellaba a todos los grandes seres. Incluso entrando en sus sueños para controlar un poco su sed de venganza.

• Lissandra tuvo un sueño, no, una pesadilla. Donde morías a mano de los vigilantes, de modo de venganza, pensaría que fue un temor cualquiera, pero al verte tan madura, tan cambiada, el temor se volvió demasiado y supo que era una posibilidad del futuro. Desde entonces, cada paso, decisión o acto que tomabas o ella tomaba, lo pensaba, analizaba y hacia algo para resolverlo, no quería perderte.

• A menudo, cuando no lograbas dormir o simplemente no tenías ánimos de nada. Lissandra llegaba a tu habitación con varios libros, para que le leyeras y ella leerte igualmente, cuando aun no era ciega.

• Y cuando quedo ciega, Volibear ya se había ido, pero tu la viste en el suelo, rodeada de su propia sangre, quejándose del dolor y tocando sus ojos, la furia se almaceno en tu pecho, finalmente dejando salir todo, rompiendo el hielo alrededor, creando hielo oscuro junto a guardias humanoides, para que las protegieran mientras tu revisabas sus heridas. Ese día sentiste lo que ella igual hizo cuando casi eras atacada por un ursino.

• Hubo un lapso en el que no viste a tu madre, se negaba a que la vieras así, ciega, débil, no quería que la vieras débil, odiaría que lo hicieras, pero no te culpaba. Y cuando se digno a que la vieras, no te separaste de ella en ningún momento.

• Lissandra te nombró comandante de la guardia, presenciabas cada batalla, hacías estrategias con ella y lideraban juntas la ciudadela. Pero no solo eras comandante, también líder de una tribu, una que construiste tu misma, siendo los trolls y tu tribu los únicos aliados a tu madre.

• Por milenios, después de pasar por el mismo proceso que Lissandra, permaneciste en tus mismos lugares. Te gustaba, aun mas cuando habían percances en las batallas, con percances me refiero a los ursinos, era divertido acabar con todos.

• Como si tu sangre tuviera una maldición, tu madre ciega, Avarosa sorda y Serylda muda. A ti te quitaron la capacidad saber cual era tu realidad. Me explico, te quitaron la consciencia que te decía seguido estar en tu mundo, en el Freljord. Haciéndote paranoica y pensar seguido que estabas en el interior de Runaterra, el maldito vacío. Ceguera, sordez, mudez y casi demencia absoluta faltantes en la sangre de las primeras hijas del hielo.

• Llevo meses que te recuperaras totalmente, Lissandra cuido de ti día y noche, hasta que finalmente al encontrar una forma de mantenerte en calma, hacerte ver que estabas en el frío freljord y no en el destructivo vacío, usándolo varias veces.

• Ambas perduraron, perduran y lo seguirán haciendo hasta que el hielo deje de estar junto a ellas, seguirán endureciendo el abismo.

• Lissandra te ama incondicionalmente, capaz de cualquier cosa por ti, y sabe que si algún día el vacío la alcanza por su traición, la guardia estará en excelentes manos.