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—¡No quiero!—Vaera le gritó a su hermana.

—Ha pasado suficiente tiempo, se preocuparán—Rhaenyra le devolvió el grito.

—¡Nyra!—Vaera gimió—. ¿Qué pueden hacer? ¡No tienen dragones, no pueden venir a buscarnos!—Vaera volvió a gritar.

—Tú no te meterás en problemas, porque tú nunca te metes en problemas, pero yo si lo haré—Rhaenyra le recordó.

—Puedo decirle a mi padre que es mi culpa—Vaera ofreció.

—Él dirá que soy el mayor y que debería saberlo mejor—respondió Rhaenyra.

—Puedo asumir la culpa, él no se enojará si digo que es mi culpa—Vaera le recordó.

—No, Vee—Rhaenyra le dijo—. Él no se enfadará contigo porque te sales con la tuya.

—Yo no he matado a nadie—Dijo Vaera a la defensiva—. Calypso tampoco. Bueno, al menos no a propósito—Agregó suavemente.

—Vamos—Rhaenyra exigió y Vaera gimió pero siguió a su hermana mayor.

Rhaenyra y Vaera se abalanzaron sobre sus dragones, Syrax y Calypso. Para consternación de todos, las princesas eran tan salvajes y vibrantes como un dragón.

—Bienvenidas de nuevo, princesas. Confío en que su paseo haya sido agradable—Ser Harrold Westerling comentó mientras Rhaenyra se deslizaba desde la espalda del dragón. Vaera era tan pequeña que se sentía como un paseo deslizándose de la espalda de Calypso. Ser Harwin la atrapó y ella le sonrió felizmente.

—Trate de no parecer demasiado aliviado, ser—Rhaenyra dijo con una sonrisa mientras pasaba junto a él y su dragón fue llevado de regreso a la cueva.

—Me asustas estando ahí arriba—comentó Harwin.

—Soy un dragón—Vaera le recordó—. Estoy bien.

—Eres tan pequeña—le dijo Harwin mientras guiaba a Calypso detrás de su hermana—. Me preocupa que vayas a salir volando. Entonces pierdo mi trabajo—bromeó Harwin.

—Ja. Ja—dijo secamente Vaera—. Me extrañarías si me hubiera ido—le dijo Vaera con confianza.

—Sí, lo haría—Harwin estuvo de acuerdo.

—Estoy aliviado. Cada vez que esa bestia dorada te trae intacta, me salva la cabeza de un pincho—Westerling habló, pero ella lo ignoró como siempre lo hacía cuando se trataba de sus preocupaciones o las de cualquier otra persona con respecto a sus dragones. Al igual que Vaera.

—Syrax está creciendo rápidamente. Pronto será tan grande como Caraxes—Alicent comentó cuando Rhaenyra volvió a salir.

—Eso es casi lo bastante grande para ensillar a dos—Rhaenyra le dijo a su amiga más cercana. Pero Rhaenyra era la salvaje y Alicent la mansa. A Vaera no le gustaba Alicent. Ella quería ser la mejor amiga de Nyra y Alicent tenía ese título actualmente. Vaera pensó que era porque era más joven y más pequeña que Nyra por lo que quería amigos mayores, pero a Alicent no le gustaban los dragones, por lo que Rhaenyra y Vaera pasaban un tiempo juntas sin interrupciones.

—Creo que estoy bastante contenta como espectadora, gracias—Alicent le aseguró cuando el guardián del dragón, Elder, comenzó a hablar en alto valyrio con el dragón tratando de calmarlo.

—Dohaeras—Syrax se quejó y emitió un pequeño rugido de disgusto por estar atrapado y no volar con su maestro—. ¡Naejot!—demandó y Syrax rugió de nuevo cuando fue trasladado a su propiedad.

—Calypso está mucho mejor entrenado que Syrax—Vaera se jactó de pasar junto a Rhaenyra.

—¡Callarte!—Rhaenyra siseó antes de darse cuenta de lo tarde que era.

—¡Carrera hasta llegar con madre!—Vaera declaró y las chicas se fueron. Se dirigieron rápidamente al lado de su madre, el bebé nacería en cualquier momento. El sonido de los caballos relinchando, los pájaros graznando mientras entraba llamó su atención. Cuanto más se acercaba, más lento caminaba, un paso adecuado para una princesa. Pero Vaera se adelantó.

—¡Hola mi bebé!—Aemma declaró mientras Vaera la abrazaba—. ¿Estabas montando hoy?

—Calypso realmente quería a mamá—Vaera le dijo.

—Oh... ¿en serio?—Aemma cuestionó con una risa.

—Sí, me lo dijo—Vaera estuvo de acuerdo cuando Rhaenyra entró.

—Ah... Rhaenyra. Sabes que no me gusta que ustedes dos salgan a volar mientras estoy en esta condición—La reina Aemma le dijo a su hija.

—No te gusta que vayamos a volar mientras estés en cualquier condición—Rhaenyra corrigió—. ¿Tú también regañaste a Vee?—Vaera se rió entre dientes. Nunca fue disciplinada. Vaera era la bebé de la familia y se salió con la suya. Rhaenyra estaba resentida con ella por eso.

—Majestad—dijo Alicent haciendo una reverencia ante la reina.

—Buenos días, Alicent—Aemma dijo amablemente.

—¿Has dormido?—Rhaenyra cuestionó a su madre.

—Dormí.

—¿Cuánto tiempo?'—ella presionó y Aemma se rió entre dientes.

—No necesito que seas mi madre, Rhaenyra—Le recordó mientras sostenía a Vaera contra ella.

—Bueno, aquí estás, rodeada de asistentes, todos concentrados en el bebé. Alguien tiene que atenderte—Rhaenyra le dijo con confianza.

—Puedo quedarme—le dijo Vaera—. Puedo hacerte té y galletas, quieres una galleta, ¿verdad? Yo también quiero una galleta—Ella susurró.

—Siempre quiero galletas—Aemma estuvo de acuerdo.

—¡Yo las conseguiré!—Vaera declaró saltando.

—Te acostarás en esta cama muy pronto, Rhaenyra. Esta incomodidad es la forma en que servimos al reino—Aemma le dijo solemnemente.

—Prefiero servir como caballero y cabalgar hacia la batalla y la gloria—Rhaenyra le dijo y hubo un murmullo de risas en la habitación a lo que Rhaenyra les devolvió la mirada. Ella estaba destinada a cosas más grandes que el matrimonio y los bebés.

—Tenemos matrices reales, tú, yo y Vaera. La cama infantil es nuestro campo de batalla. Debemos aprender a enfrentarlo con labio rígido. Ahora toma un baño. Apestas a dragón—Aemma dijo besando la mejilla de su hija.

Hey!

Espero y disfruten mucho de este libro como yo lo hice. Desde que lo empecé a leer, me enganché.

Cabe aclarar, que Vaera en los primeros capítulos es una niña, y a lo largo de la historia la vemos crecer.

Trataré de publicar lo más seguido posible porque también tengo otros fanfics que actualizar.

Si gustan, los invito a leer uno de HOTD mismo, pero es poliamor (Daemon x Oc Female x Rhaenyra)

Les cuento, hace unos días Matt Smith estaba a 15 minutos de mi casa y yo estaba dormida :)

Nos leemos en el siguiente capítulo.

Besos.