𝐀𝐃𝐕𝐄𝐑𝐓𝐄𝐍𝐂𝐈𝐀. 𝐈𝐌𝐏𝐎𝐑𝐓𝐀𝐍𝐓𝐄 𝐋𝐄𝐄𝐑:
Estɑ histoɾiɑ contiene comentɑɾios sugeɾentes,
humoɾ negɾo ocɑsionɑl, spoileɾs γ modismos mexicɑnos.
Es impoɾtɑnte que ɑ pɑɾtiɾ de ɑhoɾɑ, deben de
teneɾ conocimiento de lo que pɑsɑ en el mɑngɑ de
"Vigilɑnte: Boku no Heɾo Acɑdemiɑ Illegɑls",
pɑɾɑ teneɾ un mɑγoɾ entendimiento de lo que
sucedeɾɑ́ ɑ pɑɾtiɾ de ɑhoɾɑ.
Leeɾ bɑjo su pɾopiɑ ɾesponsɑbilidɑd.

—¡Con esto finalizamos la tercera ronda! ¡Ahora los resultados!

—¡Después de un breve descanso continuaremos!

•┈••✦ ❤ ✦••┈•

—¡Okey, everybody! ¡Comencemos con este combate final! ¡Fuerza bruta en realidad! ¡Del curso de héroes, Katsuki Bakugo!

—Tsk. Esto será fácil -dijo, estirando los brazos.

—Contra... ¡La que venció a la mayoría en menos de diez minutos! ¡Del curso de héroes, Cotzomi Yeyetzi!

—No me subestimes, Katsuki... -susurré.

—No te subestimo, Yeyetzi... -dijo de vuelta con un tono serio en su voz.

—¡Comiencen!

Yeyetzi Cotzomi. Quirk: Aurumkinesis. Este quirk le permite sacar de su cuerpo energía de color dorado, que puede servirle para crear todo tipo de objetos, ya sea para protección, pelea, armas, entre muchas otras; también le permite llevar la energía por todo el cuerpo, lo que le permite obtener más fuerza, velocidad, entre muchas otras.

Katsuki corrió en dirección a mí, sacando explosiones de sus manos.

Narrador omnisciente:

Utilizando su Quirk explosivo, Katsuki Bakugo se lanzó hacia Yeyetzi Cotzomi con determinación, liberando explosiones controladas de sus palmas. Sin embargo, Yeyetzi estaba preparada para el ataque. Con su Quirk Aurumkinesis, ella pudo utilizar su energía dorada para crear una barrera protectora a su alrededor.

Las explosiones de Katsuki chocaron contra la barrera de energía de Yeyetzi, pero no lograron penetrarla. Yeyetzi aprovechó la oportunidad para contraatacar. Con un movimiento rápido, generó una lanza dorada hecha de energía y la lanzó hacia Katsuki.

Katsuki reaccionó con velocidad y desvió la lanza con una explosión bien colocada. Sin embargo, Yeyetzi no se detuvo allí. Utilizando su Quirk, canalizó la energía dorada a través de su cuerpo, aumentando su fuerza y velocidad. Se movió rápidamente hacia Katsuki, esquivando sus explosiones y lanzando ataques con puñetazos y patadas potentes.

La batalla entre los dos héroes continuó intensamente. Katsuki demostró su habilidad táctica y su poder explosivo, mientras que Yeyetzi utilizó su Quirk de Aurumkinesis de manera creativa, creando armas y escudos para enfrentar a su oponente. Ambos lucharon con determinación y ferocidad.

El combate final entre Katsuki Bakugo y Yeyetzi Cotzomi prometía ser una batalla épica, donde la fuerza bruta se enfrentaba a la habilidad y la creatividad. Ambos candidatos a héroes estaban decididos a dar lo mejor de sí mismos y salir victoriosos. El resultado de esta batalla solo sería revelado con el tiempo.

El público en las gradas del estadio estaba completamente cautivado por la intensa batalla que se desarrollaba ante sus ojos. Gritos de emoción y jadeos de sorpresa resonaban en el aire mientras presenciaban la habilidad y destreza de Katsuki Bakugo y Yeyetzi Cotzomi.

Cada movimiento audaz y cada estrategia ingeniosa desencadenaban reacciones fervorosas de la multitud. Los espectadores estaban absortos en la acción, sin apartar la mirada de la pelea épica que se desarrollaba en el centro del escenario. La energía en el estadio era eléctrica, llena de anticipación y asombro.

El público reconocía rápidamente la experiencia y el talento de ambos alumnos. Aplaudían con entusiasmo cada vez que Katsuki desataba una explosión impresionante, y vitoreaban a Yeyetzi cada vez que utilizaba su Quirk de Aurumkinesis para crear objetos impresionantes.

La tensión en el aire era palpable a medida que la batalla se intensificaba. Los espectadores se encontraban al borde de sus asientos, sin saber qué esperar a continuación. Cada movimiento, cada ataque y cada defensa eran recibidos con una mezcla de admiración y asombro.

El público era testigo de un enfrentamiento entre dos jóvenes héroes talentosos, cada uno mostrando su propio estilo y habilidades únicas. La emoción en el estadio era contagiosa, y el fervor de la multitud alimentaba la pasión y la determinación de los combatientes.

Mientras Katsuki y Yeyetzi continuaban su feroz batalla, el público se preparaba para presenciar un desenlace espectacular. Sabían que estaban siendo testigos de un momento histórico, una pelea que sería recordada durante mucho tiempo. En las gradas del estadio, los gritos de emoción y los jadeos de sorpresa seguían llenando el ambiente, mientras el destino de la batalla aún permanecía incierto.

—¿Sabes algo, Katsuki? -susurró, todavía esquivando cada una de las explosiones que él le lanzaba- Yo conozco todo sobre ti, sé acerca de toda tu vida personal, además de que sé los usos y ventajas que le das a tu quirk... Pero también se acerca de tus desventajas -susurró.

—¿A qué te refieres con eso, extra? -preguntó, con el ceño fruncido.

—A nada, Katsuki... A nada -sonrió con burla.

Ellos siguieron peleando como si no hubiera un mañana.

La provocación de Yeyetzi no pasó desapercibida para Katsuki Bakugo, quien continuaba lanzando explosiones en un intento de derrotar a su oponente. Aunque se sorprendió por las afirmaciones de Yeyetzi sobre conocer detalles de su vida personal y las desventajas de su Quirk, Katsuki no se dejó distraer. Claro, habían entrenado un par de veces, más que nada pelea cuerpo a cuerpo por petición de Yeyetzi, por lo que sería muy raro y shockeante que ella supiera todo eso de su quirk.

Con determinación, Katsuki aumentó la intensidad de sus ataques, buscando encontrar una abertura en la defensa de Yeyetzi. Sin embargo, ella demostró ser ágil y evitó hábilmente cada una de las explosiones que él lanzaba.

La sonrisa burlona en el rostro de Yeyetzi revelaba que tenía algún tipo de ventaja sobre Katsuki, pero ella se negaba a proporcionar más detalles. La incertidumbre y el misterio solo aumentaban la tensión en la batalla.

Ambos combatientes continuaron luchando sin dar tregua, desplegando todas sus habilidades y estrategias en busca de la victoria. Cada movimiento, cada golpe y cada defensa eran ejecutados con precisión y determinación. El público en las gradas estaba hipnotizado por la intensidad y la imprevisibilidad del combate.

A pesar de los enigmas y las palabras desafiantes, Katsuki se mantuvo enfocado en el objetivo. Sabía que no podía subestimar a su oponente, especialmente cuando ella parecía tener información privilegiada sobre él. Mantuvo su guardia alta y redobló sus esfuerzos para encontrar una manera de superar las defensas de Yeyetzi.

La batalla llegaba a su punto álgido, con ambos héroes empujándose al límite de sus habilidades. El estadio resonaba con los aplausos y los gritos de los espectadores, que estaban asombrados por la habilidad y la tenacidad de los combatientes. A medida que la lucha se intensificaba, el destino del combate final aún estaba por determinarse.

—¿Cómo sabes la manera en que uso mi quirk y mis desventajas, si cuando entrenamos jamás te había mostrado nada de eso? -gruño Katsuki a lo bajo.

—Digamos que... He tenido un poco de ayuda para conseguir ese tipo de información -susurró con burla.

La respuesta de Yeyetzi solo aumentó la frustración de Katsuki. La idea de que alguien más le hubiera proporcionado información sobre sus técnicas y debilidades era desconcertante y lo irritaba profundamente. Sin embargo, en medio de la batalla, no tenía tiempo para profundizar en ese tema.

Katsuki decidió dejar de lado las distracciones y centrarse en el combate. Con renovada determinación, intensificó su ofensiva, lanzando explosiones más poderosas y rápidas en un intento de superar las habilidades defensivas de Yeyetzi. La determinación ardía en sus ojos mientras buscaba ganar ventaja en la pelea.

Por su parte, Yeyetzi seguía esquivando los ataques de Katsuki con agilidad, demostrando una habilidad excepcional para anticipar sus movimientos. La sonrisa burlona en su rostro revelaba que estaba disfrutando de la situación y de la reacción de Katsuki.

Aunque las palabras de Yeyetzi seguían resonando en su mente, Katsuki se negó a dejar que eso lo distraiga. Sabía que tenía que confiar en sus propias habilidades y en su instinto para superar los obstáculos que se le presentaban.

La batalla continuó con una intensidad creciente. Ambos héroes estaban decididos a dar lo mejor de sí mismos y llevar la victoria a su favor. El público en las gradas estaba al borde de la emoción, sin poder apartar la mirada de la confrontación entre estos dos poderosos combatientes.

A medida que la pelea avanzaba, Katsuki se propuso descubrir la verdad detrás de las afirmaciones de Yeyetzi una vez que la batalla llegara a su fin. Por ahora, su enfoque estaba en aprovechar al máximo sus habilidades y encontrar una manera de superar a su astuta oponente.

El combate final continuaba sin dar tregua, y solo el tiempo revelaría cuál de los dos héroes prevalecería en esta encarnizada batalla.

Por otro lado, toda la clase 1-A que también se encontraba en las gradas, se encontraba discutiendo quién terminaría ganando la batalla.

Mientras la batalla entre Katsuki Bakugo y Yeyetzi Cotzomi se desarrollaba en el centro del escenario, el resto de la clase 1-A se encontraba en las gradas, debatiendo acaloradamente sobre quién saldría victorioso.

Algunos estudiantes apoyaban a Katsuki, admirando su poder explosivo y su tenacidad. Argumentaban que su experiencia en combate y su habilidad para pensar rápidamente le darían la ventaja necesaria para superar a Yeyetzi. Destacaban sus logros pasados y su determinación inquebrantable como razones para creer en su victoria.

Por otro lado, había quienes respaldaban a Yeyetzi, impresionados por su Quirk único y su capacidad para utilizarlo de manera creativa. Señalaban su agilidad y su dominio de la Aurumkinesis como factores que podrían inclinar la balanza a su favor. Consideraban que su conocimiento previo sobre Katsuki y su aparente ventaja estratégica podrían llevarla a la victoria.

La discusión en las gradas era animada y llena de entusiasmo. Los estudiantes intercambiaban opiniones, argumentos y teorías sobre cómo se desarrollaría la batalla y quién finalmente prevalecería. Las apuestas y las emociones estaban a flor de piel, ya que cada estudiante tenía su propia perspectiva y preferencia.

A medida que la batalla se volvía más intensa y emocionante, la discusión en las gradas también se intensificaba. Cada movimiento, cada intercambio de golpes y cada muestra de habilidad era analizada y debatida con entusiasmo. La camaradería y el espíritu competitivo de la clase 1-A se manifestaban en las discusiones acaloradas y en la emoción palpable en el aire.

En las gradas, los estudiantes de la clase 1-A se encontraban divididos en sus opiniones y predicciones sobre el resultado de la batalla. Cada uno defendía a su favorito con pasión y esperanza, esperando ansiosamente ver cómo se desarrollaría el enfrentamiento final entre Katsuki y Yeyetzi.

—Estás cansado... -susurró Yeyetzi.

—Tch, claro que no lo estoy

—Tus brazos se están cansando de tanta explosión que estás lanzando, y sé que esa es una de tus desventajas

Las palabras de Yeyetzi resonaron en los oídos de Katsuki, pero él se negó a mostrar señales de debilidad. Aunque en su interior podía reconocer que la batalla había sido agotadora y que sus brazos comenzaban a resentir el esfuerzo de tantas explosiones, no quería darle el gusto a su oponente de admitirlo.

—¡No tengo tiempo para tus trucos mentales baratos! —respondió Katsuki con determinación, tratando de ocultar cualquier señal de fatiga.

A pesar de su respuesta, Katsuki sabía que Yeyetzi tenía razón en parte. El uso extenso de su Quirk de explosiones podía agotarlo físicamente, y había entrenado lo suficiente como para ser consciente de sus propias limitaciones. Sin embargo, estaba decidido a superar cualquier obstáculo que se le presentara y llevar la victoria a su favor.

La batalla continuó con una intensidad cada vez mayor. Katsuki se esforzó por mantener su ritmo y encontrar la manera de superar las defensas de Yeyetzi. A pesar de la fatiga que comenzaba a acumularse, se aferró a su determinación y a su instinto de lucha.

El público en las gradas estaba completamente absorto en la confrontación, sin saber si las palabras de Yeyetzi eran una estrategia para desestabilizar a Katsuki o si realmente había descubierto una debilidad en su oponente. La incertidumbre y la emoción llenaban el aire, mientras todos esperaban ansiosos el desenlace de la batalla.

En medio de la fatiga y la presión, Katsuki se dio cuenta de que debía confiar en sus habilidades y en su resistencia. Sabía que tenía que encontrar la manera de superar sus propias limitaciones y demostrar su valía como héroe. Con cada explosión lanzada, se esforzaba por demostrar que no sería derrotado tan fácilmente.

La batalla llegaba a su punto crítico, y solo el tiempo revelaría si Katsuki sería capaz de superar la fatiga y utilizar su Quirk al máximo para inclinar la balanza a su favor.

—Yo gané -susurró Yeyetzi, antes de que Katsuki lanzara una fuerte explosión en su dirección.

La situación era impactante. El campo de batalla estaba envuelto en llamas y el humo dificultaba la visión de los espectadores. Lentamente, el humo se dispersó y reveló a Yeyetzi de pie en el área de combate, con su uniforme superior roto pero aun en pie; los hombres chiflaron al ver esta escena.

Mientras tanto, Katsuki Bakugo yacía desmayado fuera de los límites del área de combate, aparentemente derrotado. El impacto de la explosión y su propia fatiga habían sido demasiado para él.

El público en las gradas quedó en silencio ante el resultado inesperado. La victoria de Yeyetzi había sorprendido a todos, desafiando las expectativas y dejando claro su talento y habilidad en el combate.

Los compañeros en la clase 1-A quedaron atónitos al ver a su compañero derrotado. Algunos expresaron su preocupación por su estado y se apresuraron a prestarle ayuda, mientras otros miraban a Yeyetzi con asombro y respeto.

Yeyetzi, por su parte, se mantuvo en silencio, observando el caos que había dejado a su paso. Una sonrisa satisfecha se dibujó en su rostro mientras se reafirmaba en su victoria. Había demostrado su valía como luchadora y había superado las expectativas, dejando una impresión duradera en todos los presentes.

La batalla había llegado a su fin, y el resultado había dejado una profunda impresión en los corazones y las mentes de aquellos que la presenciaron. Yeyetzi se había consagrado como una fuerza a tener en cuenta, mientras que Katsuki debía enfrentar la derrota y aprender de ella.

La batalla entre Katsuki Bakugo y Yeyetzi Cotzomi había dejado una huella imborrable en la historia de ambos jóvenes héroes, y sus caminos seguirían entrelazados en el futuro.

—¡Bakugo está fuera del límite! ¡Cotzomi es la ganadora del festival deportivo! -la voz de la heroína Midnight resonó por todo el estadio.

La declaración de Midnight, la reconocida heroína y presentadora del festival deportivo, resonó en todo el estadio, confirmando oficialmente la victoria de Yeyetzi Cotzomi en la batalla contra Katsuki Bakugo. El anuncio hizo eco entre los espectadores y la clase 1-A, quienes asimilaron la noticia con una mezcla de sorpresa y admiración.

El silencio inicial fue rápidamente reemplazado por aplausos y vítores para Yeyetzi, reconociendo su habilidad y logro en el enfrentamiento. Era evidente que su destacada actuación y su estrategia efectiva le habían asegurado la victoria.

•┈••✦ ❤ ✦••┈•

—Todos los eventos de primer año del Festival Deportiva de este año han sido completados. ¡Y ahora, empezaremos la ceremonia de premiación!

Del suelo, comenzaron a salir varias plataformas, donde en el podio de primer lugar, se encontraba nuestra querida protagonista, Yeyetzi Cotzomi, la cual tenía una cara seria, la misma cara de siempre; Katsuki se encontraba en el podio del segundo lugar mientras se mordía el labio inferior, y en el podio de tercer lugar, se encontraba Todoroki con el ceño fruncido, y Tokoyami con los brazos cruzados.

—¡ahora, entregaremos las medallas! La presentación de las medallas, por supuesto, será hecha por este hombre...

Una gran risa resonó por todo el lugar, lo que hizo que todo el estadio estallara en gritos de emoción y felicidad.

—¡Es All Might!

—Ay no -Yeyetzi pensó, colocando una mirada de "¿Por qué él?".

All Might saltó desde lo alto del estadio, para caer a un lado de la maestra y heroína, Midnight.

—¡Nuestro héroe, All Might!

—¡He traído las medallas! -gritó al mismo tiempo que Midnight.

Todo el estadio quedó en silencio.

—Perdón, hablé al mismo tiempo -se disculpó con All Might, dándole una sonrisa apenada.

—Los de primero de este año tienen mucha suerte -alguien dijo desde lo alto.

—¡Tienen al héroe número uno viéndolos!

—Ahora, All Might, por favor entrega las medallas, empezando desde el tercer lugar -Midnight le extendió las medallas a All Might.

All Might tomó una de las medallas de tercer lugar y se dirigió hacia Tokoyami.

—Joven Tokoyami, felicitaciones -le colocó la medalla- Realmente eres fuerte

—También amable -respondió el de cabeza de pájaro.

—Sin embargo -All Might rodeó a Tokoyami en un abrazo- Para luchar bien contra diferentes tipos, no solo debes de confiar en tu quirk. Si entrenas más tu propia fuerza, tendrás más opciones cuando luches -se separó del abrazo.

—Entendido -dijo Tokoyami, tomando la medalla entre sus manos.

—Joven Todoroki -le colocó la medalla- Felicitaciones. Asumo que hay una razón por la que no usaste tu lado izquierdo en el final con tu batalla contra Cotzomi -mencionó.

—Tuve la oportunidad durante mi enfrentamiento con Midoriya, pero luego me volví inseguro de mí mismo. Creo que entiendo un poco por qué estás interesado en él. Quiero ser un héroe como tú. Pero no creo que sea correcto para mí ser el único que lo haga -lo miró- Aún hay algo que debo de resolver

—Tu cara se ve totalmente diferente -dijo con su típica sonrisa de siempre y abrazó al chico- No preguntaré detalles. Pero estoy seguro de que podrás hacer lo que quieras hacer

—Sí -dijo el chico.

All Might se separó del hijo de Endeavor y caminó hacia el podio de segundo lugar, donde se encontraba Katsuki.

—Joven Bakugo -le colocó la medalla- Felicitaciones. Diste todo de ti para llegar a las finales, estoy demasiado orgulloso de ti.

—No fui lo suficientemente fuerte -dijo con seriedad- Perdí -dijo, mirando hacia otro lado.

—En el mundo de los héroes, las victorias y las derrotas son parte del camino hacia el crecimiento y la superación -dijo el rubio mayor con sabiduría, colocando una mano en la cabeza del rubio menor de ojos rojos.

Katsuki solo asintió, sin decir ninguna otra palabra, era obvio que él estaba bastante desanimado.

—Joven Cotzomi -dijo All Might con orgullo, dirigiéndose hacia la protagonista de la historia- ¡Buen trabajo haciendo lo que dijiste en la juramentación! ¡Me sorprendió demasiado lo que hiciste ahí en el campo de batalla! ¡Estoy demasiado orgulloso de ti! -sonrió en grande.

Yeyetzi solo se limitó a asentir.

—En este mundo donde las personas son constantemente comparadas públicamente, no hay muchos que puedan seguir apuntando a la cima de una escala inmutable -tomó la medalla entre sus manos y la colocó con sumo cuidado en el cuello de la joven muchacha- Muchas felicidades, sigue adelante -sonrió.

—Gracias -fueron las únicas palabras que salieron de la oji roja, lo que le sacó una gotita estilo anime al gran héroe profesional.

All Might se bajó de los podios y sonrió.

—¡Entonces, ellos son los ganadores de esta vez! -sonrió a una de las cámaras que apuntaban en su lugar- ¡Pero, escuchen! Cualquiera aquí pudo haber terminado en esos podios. Solo como ven... ¡Competir! ¡Mejorar cada vez! ¡Y subir aún más! ¡La siguiente generación de héroes definitivamente está floreciendo! ¡Así que, solo tengo algo más que decir! ¡Todos, díganlo conmigo, por favor! Listo...

—¡Gracias por su gran esfuerzo!

—¡Plus Ultra! -la multitud repitió al mismo tiempo que All Might.

—¡¿Eh?! ¡Debiste gritar "¡Plus Ultra!" allí, All Might! -le reprendieron.

—Bueno, es que todos se esforzaron... -trató de excusarse.

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—Buen trabajo -dijo Aizawa una vez que entró al aula- Mañana no habrá escuela o el día siguiente -mencionó- Estoy seguro de que los héroes profesionales que observaron el festival deportivo querrán reclutarlos, pero consolidaremos todo y lo anunciaremos cuando regresen. Así que descansen y espérenlo

—¡Sí!

•┈••✦ ❤ ✦••┈•

Después de que Aizawa les haya dado el permiso de retirarse cada uno a sus casas, Katsuki y Yeyetzi, como de costumbre, se fueron juntos hacia sus casas. Katsuki se la pasó callado la mayor parte del camino hacia su casa; por otra parte, Yeyetzi se le quedaba viendo con preocupación. Una vez llegaron a la casa de Katsuki, ambos fueron recibidos por ambos padres del rubio.

—Oh, hola, Yeyetzi-chan -corrió hacia la mencionada, abrazándola con emoción, ignorando por completo a su hijo- No sabía que ibas a venir, cariño -sonrió, y frunció el ceño hacia su hijo- ¡Maldito mocoso del demonio, ¿por qué no nos mencionaste que Yeyetzi iba a venir?! -reprendió a su hijo.

—¡No debería de mencionarte una mierda, maldita vieja bruja! -le gritó de vuelta, igual con el ceño fruncido.

—Tranquila, Mitsuki-san, fue por petición mía que Katsuki no le dijera nada -sonrió con tranquilidad.

—Oh, ya veo -se calmó al instante- Bien, puedes ir con Katsuki en su habitación, yo les avisaré cuando la comida esté lista

—Muchas gracias, Mitsuki-san

Narra Yeyetzi:

Me despedí de los padres de Katsuki y caminé con el mencionado hacia su habitación. Una vez ahí, Katsuki aventó su mochila junto con su medalla hacia una esquina de su habitación para tirarse boca abajo en su cama; por mi parte, yo dejé mi mochila y medalla en la silla de su escritorio y caminé hacia su cama, acostándome en su espalda.

—Bájate de encima de mí -dijo con voz cansada.

—No -dije, abrazándolo un poco.

—Yeyetzi, bájate -ordenó.

—Que no -negué.

—Que sí

—No, porque sé que estás mal y necesitas un abrazo -dije, abrazándolo más fuerte.

Katsuki por fin dejó que lo abrazara y me quedara acostada en su espalda.

—¿Todo bien? -pregunté en un susurro y él solamente asintió, a lo que solté un suspiro.

Sabía que Katsuki no estaba bien, él esperaba ganar el festival deportivo con todas sus fuerzas, pero como siempre, fui y la cagué, quitándole su momento de brillar. Sabía que Katsuki, a pesar de todos los halagos que ha recibido durante toda su vida, siempre había sido alguien demasiado inseguro, y sabía que justo en estos momentos, él se sentía inútil e inservible por no haber sido capaz de haber ganado el segundo lugar.

Solté un suspiro y me dejé caer a su lado, abrazándolo con fuerza para tratar de calmarlo; en estos mismos momentos, él más que nada necesitaba mi apoyo, y yo estaba más que dispuesta a dárselo.

—Katsuki... -él hizo sonido de "mmm" para saber que me estaba prestando atención- Felicidades -sonreí, levantándome de la cama.

—¿Felicidades? -me miró con confusión, sentándose en la cama mientras me miraba.

—Sí, felicidades -sonreí, tomando mi medalla de primer lugar entre mis manos y me acerqué a él, para colocarle la medalla- Te la mereces -coloqué mis manos en mi cintura.

—Pero -miró la medalla con sorpresa para después mirarme- Es tuya, tú ganaste -frunció el ceño.

—Puede que yo haya ganado, pero para mí, tú siempre serás mi número uno -sonreí, sacando mi celular para abrazarlo.

—¡Oi! ¡Suéltame!

—¡Sonríe! -dije, tomando una foto para subirla a mi Instagram.

—¡No te atrevas a subirla, Yeyetzi! -exclamó.

—¡Muy tarde! -reí entre dientes, y él no tardó en hacerme cosquillas.

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Al mismo tiempo

📍Residencia Midoriya

Narra Midoriya:

Estaba normal en mi habitación levantando pesas, cuando escuché que me llegó un mensaje del grupo que tenía con Uraraka-san.

Oigan, ¿ya vieron lo que subió Cotzomi
a su Instagram?
5:47 p.m.

¿Qué subió?
5:47 p.m.

¡No deberíamos de estar revisando las
redes sociales de nuestra compañera!
¡No la conoces casi nada como para andar
mirando sus redes sociales!
5:47 p.m.

Sí, sí, dejando eso de lado... ¡Miren!
5:47 p.m.

Se ve que se llevan demasiado bien
5:48 p.m.

Sí, ellos hacen un buen dúo
5:48 p.m.

Lo único que hice, fue dejar mi teléfono a mi lado en la cama y pensar en todo lo que había pasado entre Kacchan y Cotzomi-san. Ellos se volvieron cercanos, demasiado cercanos, más cercanos de lo que Kacchan y yo hemos sido durante todos estos años... Y esto se siente mal...

Me siento...

Reemplazado...

Ａｔｌａｃｈｉｎｏｌｌｉ • ｔｉｃｈｉｙｏｔｌ • 𝟯/𝟯

Festival deportivo 3/3