ACLARACIÓN: Creo recordar que en Derry no hay discoteca, pero bueno, esto es wattpad y todo puede pasar, así que...en Derry hay discoteca.

Ahora sí, disfruten del capítulo :))

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Después de salir de aquella... confusión, sinceramente, no entendía por que habíamos dramatizado tanto la situación. Es decir, sí, todo lo de Bev había estado mal, más aún sabiendo todo por lo que Greta la había hecho pasar, pero...¿lo demás? Lo demás había sido un tontería. Haber, parte era mi culpa, sí, y también de Richie, pero eso ya era normal, ¿no? Lo de pelearnos, digo. Además, ni yo misma me había dado cuenta de en que momento la conversación había dado un cambio tan drástico.

El día siguiente de la ''pelea'', decidí que sería mejor quedarme en mi casa. No es por que estuviera enfadada con ellos, ni nada por el estilo— a excepción de Richie— Si no, que, sinceramente, no sabría como reaccionar ante sus caras cuando me vieran, pues me había ido así de repente, y había hecho caso omiso de sus llamadas. No sé por que pero suponía que sería muy incómodo.

Por que lo sería

No había hablado con ninguno de ellos desde ese día. Les había visto por la calle, sobre todo a Eddie, por que era mi vecino, pero tampoco le había hecho caso. No había contactado con ninguno de ellos y ya casi había pasado una semana. Empezaba a aburrirme, mucho. Hasta que el sábado a medio día me llegó aquella llamada de Bev.

—¿A la...discoteca? ¿En Derry hay discoteca?— Pregunté mientras enrollaba en el dedo el cable del teléfono. 

—Si... si no quieres venir...no hace falta. Pero me haría mucho ilusión— Tras eso último, no sabía que responder. No quería cruzarme con Richie, y sabía que estaría allí, claro, pero tampoco quería aburrirme lo que quedaba de semana. Me quedé un rato pensándolo, y eso, Beverly, lo debió notar.

—Bueno...¿y entonces...?— Parece ser que no esperaba un no por respuesta.

—Mmm— Vacilé mientras caminaba por el salón estirando el cable al máximo— ¿Va a...haber padres?

—¿Estás bien, T/n? No creo recordar que fueras una cagada.

—No...no es eso. Es que a lo mejor mi madre no me deja— Dije con un hilo de voz— Y además, ¿No se supone que las discotecas son para mayores de diez y ocho?

—T/n...¿Estás poniendo escusas por que no quieres ver a Richie? Tranquila, lo hemos hablado, y vuelve a estar todo normal— Contestó tranquila.

—Como de normal.

—Pues como antes, ósea le sigues cayendo mal y supongo que él a ti también, pero...no creo que vaya a pelear más.

—¿Cómo que no crees?— Cuestioné mientras me acercaba más el teléfono al oído para escuchar bien lo que iba a decir.

—Pues que no creo...Richie está...Bueno, da igual, si te si te sientes incómoda o algo, lo entiendo, tampoco te voy a forzar— Esta vez sonaba un poco más desanimada. A lo mejor lo de la discoteca no sonaba tan mal.

—Bueno...supongo que...

—¡BIEEN! ¡Lo sabía!— Soltó ella feliz, interrumpiéndome. 

Después de un rato hablando con Bev, y de que me diera unos cuantos consejos de vestimenta, decidí arreglarme. No es que me importaran mucho esas cosas, y además, estábamos en un pueblo, tampoco me iba a ver mucha gente, pero igual, no quería ir como siempre.

Me probé varia ropa, pero ninguna me gustaba demasiado. Al decidí que mejor era ponerme los vaqueros que ya me había probado unas cuantas veces, y un top. Nunca me ponía tops, o casi nunca. Pero supongo que esto era un...ocasión ¿Especial?

Avisé a mi madre, pero decidí mentirle diciendo que iba a dormir a casa de Bev. Ella, extrañamente se lo creyó, y no hizo ningún comentario en cuanto a mi ropa.

Habíamos quedado los Barrens, pero había decidido ir a casa de Beverly primero. En cuanto llegué, ella solo abrió los ojos mucho, y en seguida me sonrió. Llevaba puesto un vestido con flores que le sentaba genial.

—PERO QUE GUAPA DIOS MÍO—Dijo ella lo suficientemente rápido para que la pudiera entender. Como no sabía que hacer, solo solté una risita nerviosa.

—G-gracias...Tu también vas muy guapa, seguro que todos se fijan en ti— Dije mientras la volvía a mirar. Estaba preciosa.

—¿A quien le importa eso? ¡Solo quiero divertirme!—Me dijo entre risas mientras me agarraba del brazo y empezábamos a andar. Al llegar a los Barrens ninguno comentó nada ante mi presencia. Supongo que lo habían hablado, y no querían más problemas. 

Ya eran las siete, y nos encontrábamos justo en frente de la discoteca. Era un poco más grande de lo que me esperaba, pero seguía siendo más pequeña que las de Canadá. Nos quedamos mirándola casi por cinco minutos. Ya pensé que nos íbamos a quedar ahí toda la vida, hasta que por fin, alguien habló. No me sorprendió que fuera él el que hablara, pues había estado todo el camino diciendo que iba a ser el rey de la fiesta, y que se lo iban a pasar genial.

—¿Podemos entrar de una vez?— Dijo Richie, harto de esperar. Al ver que nos empezábamos a mover, decidió añadir algo—. Venga chavales, es nuestra oportunidad para ligar.

Yo solamente rodé los ojos, y me adentré con Beverly a la discoteca. Al segundo de entrar, supe que había sido buena idea, por que estaba llena de gente, y eso nos vendría bien para descansar un poco de los problemas. Cada uno nos fuimos por nuestro camino. Bill Stan y Eddie se fueron hacía la barra para pedir algo. No puedo decir que no me sorprendió ver a Eds aquí, porque su madre es muy estricta, y pensaba que no le iba a dejar. Beverly se fue directa a la pista de baile, al igual que Richie, pero se fueron por caminos distintos. Ben solo se sentó en una mesa, no sé muy bien para que, y al final, me quedé yo sola con Mike.

—Es un poco surrealista lo de Richie, ¿no?— Me dijo observando a la gente que bailaba alegremente en la pista—.Los chicos me lo han contado...haber...pesado es pero nunca había tratado así a nadie.

—Ya...¿Por que todos me decís que es pesado, pero que a mi me trata peor que a todos? Es decir...es que simplemente no lo entiendo.

—Bueno...cuando un chico trata así a una chica es por lo que es, pero...

—¡T/n! ¡Ven a bailar!— Espetó Beverly interrumpiendo a Mike, y sujetándome del brazo hacia la pista de baile. Yo no tuve más remedio que dejar que me arrastrara, y me despedí de Mike con una sonrisita nerviosa. Las palabras de Mike todavía resonaban en mi cabeza, pero la música y toda la gente al rededor bailando, me hizo olvidarme de eso muy rápido.

Tras un rato bailando, Bev y yo, nos dirigimos a las mesas en las que se habían sentado los demás, y cansadas, nos dejamos caer en un sofá en el que también estaban Richie y Eddie.

—Que cansada estoy dios mío— Comentó Bev bebiendo un poco de lo que había en la mesa, sin saber verdaderamente lo que era.

—Si...

—¿Ya ahora que hacemos?— Preguntó la pelirroja echándose hacía atrás. Stan y Bill enseguida intercambiaron una mirada que no pude reconocer, pero sabía que no se trataba de nada bueno, ¿Qué se traen estos dos entre manos?

—Que cojo...— Empecé a decir pero sin éxito, ya que Stan me interrumpió.

—Tenemos una idea.

Continuara...

Jsjsj, si me costó escribir este capítulo.

Ahora sí, prepárense para el chisme potente 😈😈😈

Espero que os haya gustado! <33