-¡Paren todo! -deje de hacer rapidamente la caída que estaba haciendo para ver Changbin que venía caminando desde las butacas con su seño fruncido -¡¿Que diablos te pasa niño?! ¡Vas fuera de tiempo! Necesito que te concentres Yang

Asentí repetidas veces mientras me volvía a enredar en aquellas telas y venía como los mellizos Hwang colocaban de nuevo la música y colocaban las luces necesarias. Trate de hacer las mismas vueltas y caídas que normalmente hacía en los shows pero tras lo sucedido noches atrás lo único en lo que pensaba era en la sangre que ahora manchaba mis manos y cuando menos me di cuenta ya estaba callendo directo al suelo, de no ser por Chan que por suerte me había atrapado haciendo que solamente cayera sobre el y no me lastimara a mayores.

-¿Estás bien? -dijo mientras me ayudaba colocarme de pie y los demás venían a asegurarse de que estuviéramos bien -Lo llevaré a nuestra casa rodante

Me tomo por los hombros tratando de guiarme hasta donde era nuestro lugar, Changbin en ningún momento se negó y nos dejó marchar tranquilos mientras se volteaba hacía los demás y comenzaba de nuevo a gritar órdenes.

-Sabes que puedes contar conmigo, ¿No? -dijo uno vez estuvimos dentro sin que nadie más nos viera, había tomado mis manos entre las suyas tratando de que lo mirara a los ojos -Yo lo sé, el señor Lee me mandó a cubrir todo -aquello lo había dicho casi en un susurro que apenas y había entendido del todo al aún estar un poco en shock por mi caída -Estarás bien ¿Si? Se de todo lo que hace el señor Lee, se encargó de decirme todo con tal de que no escapara fácilmente... Saldremos de esto

-N-no -dije está vez yo -Todos aquí son iguales, ¿Qué crees que es lo que pasa cuando ya no le sirves al señor Lee?

Lo ví ponerse de pie con el ceño fruncido ante mi declaración -¿Qué? -fue lo único que salió de sus labios

-Todos son iguales, hasta yo he tenido que ayudar -dije mientras me terminaba de recostar en la cama viendo el techo -Aún estás a tiempo de lárgarte de aquí, yo ya no tengo escapatoria pero te puedo ayudar si es que así lo quieres -mire al chico una vez más viendo cómo este trataba de pensarlo

-Pero tú vendrás conmigo

Negué una vez más mientras lo veía conteniendo las lágrimas -Tengo tan solo 17 años, ¿Qué haré allá afuera? Soy huérfano y quién tiene mi custodia es el señor Lee

-Aun así lo haré, te llevaré conmi... -pero no pudo seguir hablando por los toques insistentes que había en la puerta, así que temiendo lo peor me prepare mentalmente antes de abrir para encontrarme con el señor Lee y su ceño fruncido

-¡¿Qué haces aquí holgazaneando?! -me había tomado por el cuello para llevarme casi arrastrando de nuevo hacía la carpa con Chan detrás de nosotros tratando de detener al hombre -¡Suéltame maldito mocoso! -dijo cuando estábamos a mitad de camino tirando me al suelo y volteandose hacía Chan enojado -¿Acaso quieres acabo como Hannie? ¡¿Lo quieres?! -Chan nego rápidamente ante los que decía aquel hombre -¡Recoge a Yang del suelo y vayan a hacer algo productivo!

Chan me tomo por el codo ayudándome a ponerme de pie mientras íbamos a dentro de la carpa donde nos recibieron todos con miradas curiosas por los gritos del jefe.

-¡Todos a sus tareas! -Había dicho Changbin en cuanto noto que todos estaban haciendo nada por ver qué es lo que había pasado -Hoy tenemos nuestro primer show aquí, así que hagan lo mejor que puedan

Y así estuvimos todos, practicando por horas y horas hasta que fue la hora del show, dónde por suerte todo había salido a la perfección y hasta el señor Lee estaba contento de ver qué s habían agotado todos los boletos.

-¡Hoy vamos a celebrar! -Había dicho luego de que todos hubiéramos guardado todo

Desde ese momento tuve que suponer que nada bueno sucedería, pero el ver al señor Lee feliz después de no hacerlo en años lo deje pasar. Había ido al pueblo junto a Seungmin y Felix quiénes eran casi como sus manos derechas para poder traer alcohol y más comida para una fogata.

Habían vuelto una hora después con varias cajas de lo que supone serían cerveza y cualquier licor barato. Chan había ido a ayudar a bajar todo y yo había ido con Yeji y Ryujin a ayudar con la comida. Todos habían bebido demasiado menos yo que en cuanto ví que se oscurecida mucho más me levanté para ir directo a la casa rodante viendo cómo Chan seguía platicando con Hyunjin y Seungmin mientras bebían y reían sin prestarme atención.

No lo quise molestar para que me acompañará así que solo dejé mi plato en aquella pileta dónde estaban todos y me despedí de las chicas para comenzar a caminar hasta mi "hogar". No había luz, lo único que alumbraba todo era la poca liz lunar que había, así que me iba a agarrando de todo lo que encontrará para no caer en mi recorrido. Una vez estuve frente a mi remolque tome la manesilla abriendo y subiendo los escalones lentamente pero cuando quise cerrar una mano fue lo que me lo impedía.

El señor Lee, había empujado la puerta tratando de entrar haciendo que trastabillara hacía atrás por el impulso que hizo con la puerta. Su mirada era oscura y en una de sus manos traía una botella de ron y en la otra su navaja favorita. Quise llorar en cuanto note lo que iba a pasar.

Me tomo del brazo pars luego tirarme sobre mi cama mientras el se subía sobre mi tomándome por mis muñecas para inmovilizarme, por más que trataba no podía hacer contra la fuerza de el.

-M-minho, no -dije entre sollozos cuándo había empezado a dejar besos sobre mi cuello mientras que si mano libre se posaba en el elástico de si short comenzando a bajarlo -Minho, para... Por favor

Pero el no hacía casi y entre más lloraba podía sentir su agarre en mis muñecas hacerse más fuerte, para cuando volví a soltar un sollozo sentí un ardor en mi mejilla izquierda -¡Cállate Yang! ¡Todo esto es tu culpa! -Había dicho meitnras me volteaba y se quitaba su cinturón para poder amarrarme a la cabecera de la cama -Esto no estaría pasando si tú hubieras llegado antes de que yo lastimará a mi dulce Hannie, es tu culpa Yang Jeongin -Me había bajado los shorts junto a mi ropa interior por completo cuando escuchamos la puerta ser abierta y luego el señor Lee había sido quitado de mi espalda. Pude ver cómo Chan lo había tirado al suelo mientras lo golpeaba pero para cuando quise advertirle, Minho ya había clavado su navaja en el abdomen de Chan -¡¿A esto querías que llegara?! ¡Maldición Jeonginnie! ¡Todo esto es tu culpa! -Me desató para luego hacerme ayudarlo justo como habíamos hecho con Jisung, llevandolo entre aquellos bosques.

En este lugar nadie puede hacer nada, así que cuando nos vieron salir con el cuerpo todo ensangrentado de Chan y yo con demasiadas lágrimas fue suficiente para que todos fueran a sus casas rodantes.

El señor Lee había tomado una palabra en el camino y nos llevó lo más lejos que podía de aquel circo. Me había hecho ayudarlo a enterrar el cuerpo de Chan y luego me había dejado ahí llorando. Había amanecido para cuando ya me había calmado y comencé a caminar de regreso al circo. Todos iban de un lado a otro arreglando lo que sería la escenografía de hoy. Había practicado unas horas y luego había vuelto al remolque para poder cambiarme a uno de mis tipicos trajes.

El espectáculo había sido un éxito, pero había algo dentro de mi. Algo...

Escuché una risa detrás mi cuando iba hacia mi remolque de nuevo. Voltee esperando encontrarme con alguna de las chicas correteando como era su costumbre entre las carpas pero no ví a nadie más por ahí.

-Vamos Jeonginnie, ¿Dejaras todo así? -Voltee en cuanto escuché esa voz -No... Tu tienes que hacer algo Innie, ¿Me dejaras así? - Volteaba en todas las direcciones tratando de entender de dónde es que provenía esa voz -¡¿Me dejaras morir así?! -Mire al frente de donde yo estaba, en dirección al bosque viendo a Chan parado en medio de mi campo de visión, ensangrentado y lleno de cortes en la cara. Lo ví acercándose más y más hasta que pude sentir su toque en mi mejilla -Hazlo por mi Jeongin, así estarás junto a mi -Mire mi mano cuando sentí algo frio posarse en ella.

Mire una vez más al chico frente a mi y luego de asentir con una sonrisa tome aquel objeto entre mis manos para meterme en el remolque. Me quite aquel traje negro que traía para colocarme uno blanco con perlas de adorno, ese era mi favorito... Solo lo usaba en ocasiones especiales.

Salí y me lo volví a encontrar, me extendió su mano y aún con estás entrelazadas caminamos hasta la casa rodante del señor Lee. Toque dos veces y espere a aque saliera, en cuanto me había visto con aquel traje me dejó pasar sin decir nada, cerró la puerta tras de mi y comenzó a dejar de nuevo esos veces en mi cuello. Vi a Chan en una de las esquinas mientras me sonreía orgulloso por lo que estaba por hacer.

Me voltee sobre mi eje poniéndome enfrente de Minho y deje que este pasará sus manos por mis piernas y mi trasero, saque lentamente aquel objeto afilado de mi pecho y luego había pasado mis manos por su cuello. No grito, aquella hoja afilada atravesando su cuello desde la parte de atrás le impidió decir algo. Había tosido haciendo que me manchara un poco que manchara mi traje con pequeñas gotas de sangre, pero una vez estuve seguro de que ya no se movía trate de tomarlo por dejado de sus axilas para llevarlo hacía la carpa, dejándolo en medio del lugar donde el siempre solía posarse para iniciar los expectaulos.

Luego de eso salí por todos los demás, haciendo exactamente lo mismo. Colocándolos en dónde siempre eran sus lugares.

Mire mis muñecas y luego mire a Chan buscando su aprobación así que luego de que el asintiera lo hice, pase aquel objeto por estás mientras yo iba hacia mis telas y comenzaba a subir despacio por aquel mareo que estaba comenzando a sentir. Había colocado la música antes de subirme, está sería mi mejor rutina.

Dos, tres, cuatro vueltas y por fin me deje caer...

Chan me atrapó en sus brazos.