Chapter Thirteen

—Ya está— hablo la joven alejándose para dejar que el castaño se mirara en el espejo —Agregue algo de maquillaje a sus ojos, se ve muy natural ademas de que usted ya es muy bonito—

—Gracias— respondió el menor para levantarse —Bajaré a desayunar— la doncella asintió hacia su reina pero la puerta fue tocada así que se apresuró en abrir viendo al rey ahí.

—Se hace algo tarde para que desayunes vamos— hablo ofrenciendome su mano, en estas semanas nuestra conversación había mejorado, aunque solía ausentarse por un horas era por qué tenía trabajo que hacer, y para que no estuviera muy apresado en este palacio me dejaba pequeñas tareas ya sea supervisar algunas obras que estaban en proceso de construcción.

También no podía negar que me gustaba que me tomara de la mano y aunque no volvió a abrazarme como aquel día en ese salón, no me quejaba tenía en cuenta de que se esforzaba en hacer aquellas acciones que parecían creer posible y viniendo de su persona, era un hecho soy muy afortunado.

—¿Vas a ir al pueblo nuevamente?— pregunto mientras terminamos de desayunar

—Si, la construcción del nuevo colegio y las restauraciones del anterior está casi por finalizar, los niños están muy felices— contesto con una leve sonrisa

—Si gustas te puedo acompañar—

—Sería un gran placer—

Minutos después ambos se dirigieron rumbo al pueblo para supervisar las obras, uno que otro pueblerino se acercaban a saludar a los reyes pero quien más llamaba la atención era Taehyung ya que recibía flores y alguna que otra fruta o pan, claro que el castaño recibía gustoso con aquella leve sonrisa dejando a Jungkook con ganas de verlo sonreír ampliamente.

Hasta que llegaron a la construcción, aún le faltaba ventanas y pintar las paredes, los obreros se inclinaron en son de respeto para verlo ingresar dentro de las instalaciones.

—Siento que a los niños les encantara todo esto, ordene a qué arreglaran las viejas sillas y mesas que estaban guardadas en un almacén, todo será rehusado pero tendrá un mantenimiento una vez al mes— menciono mientras que el pelinegro lo escuchaba atento, hasta que ingresaron a una de las aulas

—Recuerda no esforzarte mucho, a veces uno puede sentirse presionado o ansioso por algo, es mejor pensar y realizar todo con calma.—

—Lo se—

—Taehyung yo...— intendo decir el mayor pero fueron interrumpidos por los gritos de unos traviesos niños quienes se asomaban por la ventana buscando al castaño

—Tata!! Tata!!— gritaban muy animados pero luego dirigieron su mirada a Jungkook

—Majestad— susurraron temerosos

—Ahora salgo— Respondió Taehyung tomando el brazo de Jungkook para llevarlo hacia afuera

—¿Tata?— pregunto volteando a verlo

—Oh..eso...es que no me acostumbro a qué me digan reina y les dije que me llamarán así además solo son niños— respondió sin preocupación alguna

En cuanto salieron afuera los niños corrieron a abrazar a Taehyung quien con una gran sonrisa los recibió, dándole por fin aquella imagen que quedaría guardada en su mente.

Su sonrisa rectangular relucía preciosamente mientras hablaba con los pequeños.

—Tata mi mamá me dijo que cuánto te viera te entregará estás flores— hablo el pequeño dándole lirios blancos

—Muchas gracias, son hermosas— respondió oliendo las flores —no olvides también de darle flores a tu madre—

—Tata pronto tendré un hermanito y mi mamá le pondrá tu nombre—

—¿Enserio?— pregunto el castaño asombrado

—Si! Dijo que era muy bonito— Jungkook miraba con una leve sonrisa, era algo gracioso ver esa escena

Se la pasaron casi toda la mañana en ese lugar, hasta que decidieron regresar al palacio.

—No sabía que te gustaran los niños—

—A decir verdad yo los adoro demasiado así que cuando veo uno me dan ganas de apapacharlo—

—Mañana partire al reino este, tengo que hablar con él rey respecto a nuestro acuerdo de las cosechas—

—¿De que trata ese acuerdo?—

—hace años atrás antes de que mi padre falleciera hizo un acuerdo con el antiguo rey del este en dónde las cosechas que mi reino le daría al suyo se vendría a un bajo precio sin ganar casi nada, por un tiempo mi pueblo se quejo y cuando ascendí al trono no podia romper aquel acuerdo ya que en si abastece a todo un reino y tuve que dejarlo pasar por alto hasta el dia de tu coronación—

—Hmm...—

Jungkook vio a detalle al menor y alzó su mirada

—Deseo que me acompañes—

Taehyung miró a Jungkook con algo de temor no quería ir pero tampoco quería que el fuera, tenía miedo de que Chanyeol le llegara a decir que era infértil.

—Yo...no le he contado algo majestad no se si mi padre le a llegado a decir—

—¿Sobre que?—

—La razón del por qué el rey del reino este se  divorcio de mi, es que yo...— las palabras que quería decir no salieron de su boca tenía mucho miedo de que todo el avance que había tenido se fuera al agua. Jungkook ya sabía lo que diría pero no pensó que las manos de aquel castaño comenzaran a temblar y en su rostro reflejará terror

—Considero que lo que te hizo el y tú hermano no es nada más que un completo acto de cobardía— Hablo intentando tranquilizar al menor tomando sus manos. —Tu padre no me oculta nada y así tal cual yo decidí aceptarte— Jungkook se levantó para sacar de uno de los cajones el retrato que miraba todas las noches antes de dormir —El me entrego este retrato tuyo— hablo entregándole a Taehyung su propia imagen

—¿Mi padre le dijo que...yo...tengo el vientre seco?— a Jungkook le molestó que Taehyung hablara de esa forma, pudo haber mencionado infértil o que no podía quedar en estado ¿pero esas palabras? Estaba seguro que aquello que dijo lo está repitiendo de alguien más.

—Es increíble ver lo mal que hablas de ti mismo— respondió demostrando su total incomodidad

—Es la verdad, si usted desea anular nuestro matrimonio yo lo aceptare— Jungkook apretó fuertemente su mandíbula, luego se dió cuenta en como los ojos del castaño brillaban y lágrimas amenazaban con salir así que se acercó a él y tomando de su mentón se unió a él en un cálido y lento beso.

Taehyung no correspondió de inmediato puesto que sus lágrimas rodaron por su mejilla, soltando un leve suspiro entre los labios del pelinegro comenzó a mover sus labios temeroso de que lo alejará pero eso no ocurrió y el mayor dirigió su mano al cuello del castaño para que no se fuera, las temblorosas manos de Taehyung se posicionaron en el saco de Jungkook quien poco a poco se alejo de él para mirarlo fijamente.

—Te jure no soltarte y eso haré, mi hermosa reina— susurro secando las lágrimas del menor para depositar nuevamente un beso en sus dulces labios.

Al día siguiente todo estaba preparado para que partieron al reino este, no estaba muy lejos pero Jungkook quería llegar e irse lo más rápido posible no quería que su esposo se sienta sofocado ya que demasiado hacia con acompañarlo.

—¿Estás listo?— pregunto el pelinegro al menor quien asintió pero antes que subiera al carruaje lo tomo de la mejilla para acercarse y depositar un pequeño pico en sus labios, viendo cómo el castaño sonreía tímido para ingresar al carruaje, camino hacia su caballo para subir y asi dar comienzo al viaje.

En todo el camino Taehyung no dejaba de pensar en como reaccionaria su hermano o Chanyeol al verlo nuevamente, había pasado aproximadamente dos meses desde que se fue de aquel palacio y en dónde pudo escuchar la infidelidad de quién creía el amor de su vida.

El camino poco a poco se fue acortando que un pestañeo fue suficiente para ver qué ya se encontraban frente a las puertas de aquel palacio, respiro profundamente para ver cómo abrían la puerta de su carruaje, sosteniendo la mano de su esposo para así ingresar.

—¿Este palacio es más pequeño que el nuestro no es así?— pregunto viendo a Taehyung asentir

—Majestades— hablo el jefe de la guardia real mirando de reojo a Taehyung sonriéndole sin que el rey se diera cuenta, aunque no se habían tomado el tiempo de conocerse bien, Sehun le tenía cierto respeto y admiración al castaño —En unos minutos bajara el rey y su...concubina—

—Nuestro pueblo busca un precio justo por las cosechas, ¿el tratado que hizo mi padre ya es demasiado antiguo y no crees que es momento de hacer la diferencia?—

—¿Romper el tratado?—

—¿Está será tu primera decisión importante?—

—¿Yo? Pero es el rey quien toma las decisiones—

—Y tú eres mi reina, ¿que diferencia hay?—

—¿Piensa en el pueblo y sus beneficios, te dejare elegir si romper o seguir con este tratado?—

—¿Que pasa si digo que el trato queda roto?—

—Este reino pasará hambre, depende de nosotros pero también han abusado de nuestra generosidad, ¿te parece justo eso?—

—No—

—Se que tomarás una buena decisión—

—Rey Jeon— aquella voz hizo el cuerpo del menor erizarse, mientras que Jungkook volteó para luego el castaño imitar su acción sujetando por instinto el brazo del pelinegro.

—Se que tomarás una buena decisión—

Chanyeol y Beakhyun miraron fijamente a Taehyung, sentimientos encontrados y dolorosos golpearon su corazón

—Rey Park le presento a mi esposo, la reina Jeon Taehyung— hablo Jungkook

—Un placer— Murmuro entre dientes no comprendiendo como es que Taehyung había contraído matrimonio con aquel arrogante y frívolo rey.

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