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"LUCES DIFERENTE"

Derek Hale debería haber cavado su tumba desde un principio, si algo que le molestaba a la cazadora es que cuando les advierte u ordena no obedezcan sus palabras. El hombre lobo parece que se hizo de oídos sordos al escucharla amenazarlo, y se lo dejo bien en claro.

En este momento se encontraba manejando rumbo a Beacon Hills después de enterarse que el nuevo alfa había mordido a Jackson. Y no, no estaba preocupada por su amigo, estaba furiosa con Derek por desobedecerla cuando le dio tantas advertencias que se metió por su trasero peludo. Odiaba que no le hicieran caso a sus ordenes, a su "amigo", bueno, él le importaba un carajo como todos los demás.

Todo le daba igual, pero conocía a su amigo como para saber lo terco que es respecto a hacer las cosas que le dicen que no hagan pero para él es un letrero en letras mayúsculas que dice; "HAS ESTUPIDECES DEREK, CONVIERTE HASTA EL VECINO EN HOMBRE LOBO"... Y se lo toma tan literal que le daba jaqueca su falta de pensamientos.

—Bueno, tal vez pueda desquitarme un poco —susurró la rubia de manera malévola mientras manejaba.

Katherine inhalo una vez más su cigarrillo que sostenía entre sus dedos de su mano libré, en la cual tenía apoyado su codo izquierdo en el umbral de la puerta del auto de Damon, que obviamente le quitó. Contuvo el humo y después lo expulsó entre sus labios con delicadeza y sin prisa alguna. El viento golpeaba su rostro, sus ojos azules fijos en el camino, su cabello rubio moviéndose ligeramente por el aire con su mano derecha en el volante.

Ella no era estúpida, sabía que Dayn estaría en camino para seguirla, el hecho de que fuera la primera vez que apagaba su humanidad y no saber que esperar de la poderosa híbrida, lo tenía con los bellos de punta, seguramente incluso Magnus ya se ha enterado de esto, Adelina era cruel así sin más, sin ella no sabían que esperar y eso era inquietante para quien la conociera.

Dayn lo tendría que hacer solo, sin Ruel de apoyo, solo con sus cazadores, vigilar cada maldito paso que la chica hiciera, hasta el más mínimo, lo que menos querían eran ser descubiertos mientras están ocultos ahí, todos ellos no sólo los dos, porque eran un equipo que no abandona a ninguno de los suyos.

El tiempo transcurrió hasta que se encontró estacionando el auto fuera del lugar donde le saco la información a Dayn, eran unas viejas vías del tren subterráneo. Para hacerlo usó su habilidad que ya recordó tener, hipnotizar un vampiro y si, él había dejado de tomar verbena cuando la chica ya no recordaba, mal de su parte.

Subió el techo y las ventanas del convertible, después lo apago, abrió la puerta y le quitó las llaves guardándolas en su chaqueta.

Salió del auto para después cerrar la puerta detrás de ella, observó aquella estación de trenes abandonada unos segundos, sin más comenzó a caminar escaleras abajo haciendo notar su presencia a los hombres lobos.

—Derek Hale —caturreo el nombre del hombre mientras bajaba cada escalón, sus tacones haciendo ruido ligero con cada pisada que daba con elegancia y calma, su andar era como sí te estuviera seduciendo todo el tiempo sin hacer un esfuerzo por intentarlo.

El mencionado empujó a Erica Reyes, la beta que se había lanzado a besarlo justo en el momento que ella llegó. La ojiazul observó aquello sin expresión alguna, sus ojos escanearon a cada persona de ahí hasta bajar por completo y caminar unos pasos a donde el nuevo alfa estaba de pie.

—Sabes perfectamente que odio cuando no me obedecen —comenzó hablar la rubia mirando esta vez al azabache.

Éste se cruzó de brazos sin inmutarse a su mirada, observando el cambio en los ojos azules de la chica. No necesitaba ser un genio para saber lo que ella hizo, sin embargo se limitó a guardar su opinión.

—Realmente no me interesa que lo mordieras — se sinceró la chica pasando detrás del hombre, rozando sus uñas sobre la piel de los brazos del alfa bajo la atenta mirada de sus betas.

—¿Entonces porque quieres joder? —pregunto Derek con ese típico tono que lo caracterizaba.

—No te estoy jodiendo, aún —murmuró con descarado en el oído de este hasta posarse al lado derecho de Derek, mirando esta vez a los betas.

Derek suspira sin decir nada pues el doble sentido fue bastante obvio, la miró de reojo pero cuando menos pensó, recibió un puñetazo en la mandíbula que hizo que girará el rostro por el golpe y parte del torso hacia un lado, soltó un gruñido.

—Te lo mereces por estúpido —dijo la rubia pues sabía que su golpe se sintió como si fueran muchos de esos a la vez, ahora con su fuerza al cien por ciento, ese golpe debió dolerle hasta el alma.

El hombre masajeo la zona moviendo la mandíbula mientras volvía a mirarla, evitó a toda costa quejarse por el golpe, pero él estaba convirtiendo adolescentes en betas, cuando podían rechazar la mordida u en otra ocasión morir y eso le parecía sin sentido a la original.

—Los betas de Derek —murmuro en voz baja sin humor mientras sus ojos azules pasaban entre la beta rubia, el moreno y el castaño.

Los cuáles parecían estatuas, más Isaac que nada, Erica la repasaba de arriba a bajo sin descaro alguno y Boyd estaba normal de la vida pero casi como Lahey.

—Soy Boyd —el moreno se presento haciendo que Katherine volviera a mirarlo, en menos de un segundo estaba frente a él y este mismo, no se inmutó.

—Me agradas —murmura en voz baja con seriedad y un asentamiento de cabeza al no sentir miedo por su presencia, eso le gusto.

El mencionado le sonrió levemente, la rubia quedó esta vez frente a la rubia beta, observándola sin prisa, sus ojos la repasaron de pies a cabeza, si algo podía notar es apesar de ser una adolescente rebelde, es que la mujer lobo, tenía un toque sensual.

—Erica Reyes —habla la chica con ese toque coqueto pero al mismo tiempo, ligeramente amable, no era idiota, la presencia de Katherine es intimidante.

Derek no hizo nada, observó a la híbrida conocer a sus betas, analizarlos, sin nada que temer, porque no importaba si ella no tenía humanidad, no iba a lastimar a los adolescentes, creía.

Erica estiró su mano hacia la vampiro, esta observó la mano y la tomó con delicadeza, la fue subiendo hasta que sus labios tocaron la palma de la mano de la chica beta.

—Un placer, Erica —respondió Katherine con un toque frívolo pero con un indicio de coqueteo sutil.

La mencionada trago saliva, sintió un escalofrío recorrer su columna ante la manera en la que esa chica mencionó su nombre, el como después de dejarle ese beso en la mano, había levantado la mirada para verla con esos ojos azules que la hizo apartar la mirada de la mujer.

La híbrida la soltó y esta vez quedó frente a Isaac, este con pesar le sostenía la mirada pero lo hacía, apesar de que obviamente la chica le daba miedo, no quiso demostrarlo incluso si lo sentía, prefería no retar a su suerte.

—Isa... Isaac Lahey —carraspeo su garganta cuando se equivoco al hablar, se maldijo en su mente por ese error nervioso.

Katherine no respondió rápido con él, solo con observarlo le era suficiente para sacar conclusiones del porque Isaac se sentía tan impotente frente la presencia de alguien que tiene un fuerte liderazgo, el como le costaba mirarla.

Y no, no es porque sea un ser sobrenatural, al menos no en parte, era porque lo hicieron sentir que valía poco, claro que le era notable el cambio que la mordida le dió pero eso no quitaba los traumas que sabía que tenía el chico y no tenía necesidad de saber razones.

Pero también sabían que Derek los eligió por alguna razón y viéndolos, aquellos chicos se sentían importantes por primera vez al ser lo que son ahora, lobos.

Por un segundo, solo por un segundo, se vió reflejada en él, la chica retiró la mirada de Isaac para retroceder dándole espacio al chico para que respire de nuevo.

Porqué si, Isaac había contenido la respiración.

—Un gusto, Isaac... Soy Katherine —dijo en un tono como si le diera igual no decir más que su propio nombre.

La mujer se gira para ver a Derek.

—Bien, ¿cual es la nueva amenaza de Beacon Hills? —pregunto en un tono de aburrimiento y desganada.

Sinceramente lo que menos quería era estar en una escuela fingiendo ser un adolescente, sin embargo para ella le fue entretenido todo tipo de cosas que pasan ahí. Stiles, Scott, Allison, todos ellos con los que eran conocidos, van a notar la diferencia en aquella rubia.

Su presencia de por sí ya es impotente, ahora lo era más, Katherine desprendía una energía bastante atrayente para cualquiera y esos ojos azules que portaba se sentían más pesados que nadie podía aguantarle la mirada por más de 1 segundo.

Llegaba a incomodarlos o que se sintieran juzgados y los betas de Derek podían confirmarlo porque se lo hicieron saber a su alfa cuando ella después de su encuentro se desapareció.

Detuvo su paso mientras miraba a un Stiles que jadeaba por aire llegando con Allison, ni siquiera quiso escuchar, simplemente observó desde la distancia.

Lo que menos quería era tener a esos niños preguntando donde estuvo o que había pasado, no quería a él preguntando.

Sin embargo, Stiles podía sentir una mirada sobre él, haciendo que se sienta raro y un poco incómodo, alzó la cabeza y miro detrás de él, nada. Miró al frente y pudo reconocer a la distancia a alguien.

—¿Kathy? –dijo en un susurró jadeante mirando a la rubia, la cual desapareció en un segundo después de eso.

Allison volteó a donde el chico miraba pero no había nada y Stiles juraba no estar loco para haber sido una ilusión lo que presenciaron sus ojos.

—¿Viste a Katherine? —la morocha se encontró preguntándole a un Stiles sorprendido.

—Sí —respondió en voz baja antes de irse rápidamente corriendo con Scott.

Stiles corrió como nunca hasta llegar a donde su mejor amigo lo esperaba, frena de golpe y el chico tuvo que agarrarlo para que no fuera de cara contra el piso, el de lunares jadeo por aire una vez más mientras golpeaba el hombro de Scott de manera frenética.

Y señalando la salida de la escuela pero obviamente el adolescente hombre lobo no sabía que intentaba decir y su cara de confusión era obvia.

El chico Stilinski rodó los ojos un poco frustrado de que su mejor amigo no lo entendiera como si fuera la culpa de McCall no haberle entendido nada mientras respiraba como si nunca tuviera oxígeno en su sistema.

—Acabo... D-de ver... a-ah, Katherine —formuló las palabras entrecortadas antes de tomar un profundo respiró exagerado.

—¿A Katherine? —pregunto Scott de sorpresa, repitiendo todo.

—No... a la vecina —respondió sarcástico mientras respiraba mucho mejor.

El otro rodó los ojos ante el sarcasmo de su amigo y espero a que el chico pudiera respirar más correctamente para poder escuchar lo que quiere contarle. Después de unos minutos bastantes largos, Stiles respira profundo nuevamente y comienza a relatar lo que había visto.

La noche había caído una vez más en el pueblo, la chica se encontraba caminando tranquilamente por las calles en camino a la secundaria donde Derek estaba. Con el pulgar de su mano se limpió la comisura de sus labios y después lamió la sangre que acumuló al haber bebido de una persona al azar.

Fría era la noche en esos momentos, no es como que aquello le afectará pero tampoco era ciega para notarlo, al llegar al estacionamiento evitó pasar por el carro donde divisó a Lydia Martin llorando.

Abrió la puerta y entró donde estaba la piscina de natación, sus tacones hicieron que Derek mirará detrás de Stiles y Erica hizo lo mismo. El adolescente no se giró a los segundos, de alguna manera pudo distinguir el sonido de la caminata de la híbrida.

Ella paso al lado de él sin verlo, sus ojos fijos en Hale, pues este le había pedido que viniera y ella no tenía nada que hacer, excepto ignorar las llamadas telefónicas de Dayn.

—Los ojos son... amarillos y rasgados. Mhm... Tiene muchos dientes —comienza a señalar pero mirando entre Derek y Katherine, la cual se encontraba mirándolo de una manera que no era amigable—. Y tiene cola también...

La rubia lo miró unos segundos antes de retirar la mirada, la criatura que describía el chico parecía irreal si no fuera que en este mundo, cada cosa podría existir.

—¿Ya es suficiente?

El sonido de unas uñas contra el metal la hizo mirar arriba, ladea la cabeza un poco, observando y Derek hizo lo mismo, Erica parecía más asustada a diferencia de ellos dos.

—¿Qué ya lo han visto? Se ven como si supieran de que estoy hablando —les dije Stiles antes de dar un paso adelante y girarse para mirar arriba.

Dónde se divisó a la criatura que les ruge primero antes de bajar de un salto, lanza a la mujer lobo contra la pared dejándola inconsciente de manera rápida.

—Corre —Derek le dijo a Stiles empujándolo pero justo ese insignificante segundo basto para que la criatura le hiciera una cortada en la nuca.

—Derek tu cuello —señala el adolescente al notarlo.

Ella revisó a Erica, vió que Derek perdía la movilidad de su cuerpo y el humano lo sostuvo a tiempo, ¿por qué tuvo que venir?

Stiles lo ayudo mientras avanzaban rápido y si, ella no lo ayudo a cargarlo pero avanzaba detrás de ellos.

—Llama a Scott —Derek le dijo al chico mientras ella negaba con la cabeza, ¿de que ayuda podría servir un adolescente que apenas sabe como usar su lobo?

Ella volteó a mirar donde estaba aquella extraña criatura, ese segundo para ella fue diferente pues Stiles intento marcarle a su mejor amigo, sin embargo se le cayó el teléfono al suelo, al intentar agacharse a recogerlo hizo que Derek se cayerá a la piscina.

Apesar de que su instinto estuvo por querer saltar, no lo hizo, en cambio Stilinski lo hizo sin pensarlo, segundos después salieron a la superficie.

Los ojos de color miel de Stiles hicieron contacto visual con la chica que había estado observando al agua antes de parpadear y eso se le hizo raro. Retrocedió de la orilla cuidadosa y observó el animal que los acechaba, ni siquiera escucho lo que Derek y Stiles hablaban mientras el último intentaba mantener a flote al otro.

Observó con atención como el animal reaccionaba al agua al tocarla.

—¿Vieron eso? Creo que le tiene miedo al agua —Stiles dice lo suficientemente alto.

—¿Pueden dejar de hablar un segundo? —sisea la chica con seriedad mientras le hacía una señal a Stiles de no soltar a Derek.

—¿Por qué no entras? —él pregunta ignorando sus palabras.

—Es profundo —fue lo único que respondió.

Llega al teléfono de Stiles en segundos, revisa en los contactos, hasta presionar el de nombre de Scott, lleva el celular a su oreja con la mirada en la criatura.

—McCall —dice la rubia cuando esté le responde la llamada.

Scott al otro lado se quedó sorprendido sin embargo le dijo que no podía responder ahora antes de colgarle, Katherine chasquea la lengua y guarda el celular en su bolsillo.

—Ha colgado —le dice a Derek con irritación.

—No creo poder resistir más —Stiles murmura pues comenzaba a cansarse de sostener al hombre lobo.

Katherine se pasa una mano por el pelo, al ver a esa cosa acercarse en su dirección no dudo en sacar una navaja de su bota, si se iba contra ella esta no iba a dudar en matarlo y sus ojos azulados se podía notar su decisión en hacerlo.

De reojo observó a Stiles intentar nadar a la orilla, suspira con pesadez antes de esquivar las garras del animal y encagarle la navaja en el hombro sacándole un rugido. Llega al otro lado de la piscina justo antes de que se hundan los dos chicos, los saca rápidamente dejándolos caer al suelo con cero amabilidad.

Stiles respira profundo nuevamente al igual que Derek, Katherine va de regreso para quitarle la navaja que dejó sobre la piel de esta criatura. Al quitarla este mismo la lanza contra el espejo de cristal que se rompe en pedazos y en ese mismo momento Scott llega.

Ella dispuesta a encajar la navaja en el cuello del Kanima al ponerse de pie, sin embargo este no la miraba, si no que miraba su propio reflejo en un cristal roto, como si no se reconociera, rugió antes de huir de ahí rápidamente, noto que era ágil.

Limpia la navaja mirando el cristal de arriba roto por donde el animal escapó, entonces supo que era exactamente, rueda los ojos al sentir quien venía en su dirección.

—No pienses en acercarte —ella señala mientras camina fuera del lugar con Stiles siguiéndole el paso.

—¿Dónde has estado? Estaba preocupado por ti, todos lo estábamos —el rapado se pone frente a ella haciendo que Katherine frene sus pasos.

Ella lo observó con frialdad que él no entendía.

—Luces diferente —señala el chico en voz baja.

Katherine no respondió a eso tampoco, porque Stiles Stilinski no tenía ni idea de lo que es ella y sí la cuestionaba lo iba a mostrar de una manera no agradable para él.

—Deja de molestarme, Stiles —dice retomando su camino lejos de él—. Dile a Derek que sí, si es un Kanima la criatura esa.

Después desaparece en un chasquido, el adolescente hace una mueca y suspira, no la entendía en lo absoluto, ¿por qué se comportaba así? Se veía totalmente diferente.

Scott observó a su amigo mientras dejaba de mirar la computadora que puso encima de un auto, hicieron contacto visual y Stiles hizo un encogimiento de hombros mientras caminaba a donde él pero en su cara podía notarse que le afectó.

🕷: Pues bueno, ¿hola? ¿Me extrañaron?

Lamento haber tardado demasiado en traerles un capítulo nuevo, pero tenía un tremendo bloqueo escritor y lector, más aparte de dió un bajón emocional horrible que me duró más de una semana, pero hice el intento de escribirles cada que podía.

Así que les traigo capítulo nuevo, nuevos separados y gif nuevo que tanto prometí, ayer se me olvidó jeje.

Cualquier error o falta de ortografía, lo arregló después, ¿okis?

¿Les gusto el capítulo y todo? Díganme que si o me desaparezco de nuevo y le digo a Beyoncé que no le dieron las gracias.

¿Saben cual es la diferencia del encuentro entre mi Katherine y Stiles? ¿Les digo? Es que había más acercamiento por parte de ella hacía él, les digo una evidencia del anterior versión para quienes no pudieron leerla..

𝒥ℯ𝓃𝓃𝒾ℯ-𝒮𝓉𝒾𝓁𝒾𝓃𝓈𝓀𝒾 🌙

Tiktok: Agl.Kennedy —Aquí subo contenido de ellos, edits y eso de mis historias o al azar, sigan mi cuenta.

Bye, coman y tomen agüita, muaak