—Tae, caminaaa, por favoor. —hacía berrinche el pelinegro menor.

El híbrido seguía con sus brazos cruzados y con un puchero, mirando hacia otro lado para así evitar la mirada de Jungkook.

—Si tanto quieres subir a la montaña rusa, ve tu. Vete con ese tal Jimin. —se quejó Tae.

—¿Estás celoso de Jimin? ¿Enserio? —alzaba una ceja.

—Los polos opuestos se atraen, del odio al amor hay un paso, al menos eso dicen.

—Si. Y por eso te quiero mucho, gatito. Te odié en el momento que te escuché maullar porque no me dejabas dormir. Pero ahora, míranos, en un parque de diversiones–

—Okey, cállate ya. Vamos a esa montaña rusa. Pero quiero advertirte que me dan miedo las alturas. —comenzó a caminar hacia el juego. Jungkook siguiéndolo por atrás.

—¿Qué? Eres un híbrido de gato, ¿que tú no caes de patas?

—Si, bobo. Soy un híbrido, no un gato completamente. —aclaró lo bastante obvio. —Si fuera un gato completo en el momento que te vi te hubiese arañado la cara.

Jungkook rodó los ojos.

—Entonces... ¿ya podemos ir a–

—¡YOONGI, DEJA A ESE GATO EN PAZ!

Ambos pelinegros voltearon y miraron la parte gatuna de Yoongi gruñéndole muy fuerte y queriendo pelear con un gato blanco, el cual se estaba restregando en los pantalones del rubio. Ambos gatos se encontraban esponjados.

—¿Qué está pasando? —preguntó Taehyung acercándose a Jimin, el mayor ya se estaba molestando.

—Pues estábamos caminando y de repente ¡PUM!, este lindo gatito blanco se acercó a querer cariños y Yoongi se enojó.

Yoongi, al oír que Jimin llamaba 'lindo' a ese gato con pulgas se volvió a convertir en el chico pálido pero hermoso. Ocasionando que el gato blanco saliera corriendo por tal transformación.

—¿Cómo que "lindo gato"? —fue lo primero que dijo antes de poner un rostro de suma molesta.

—Yoongii, ese gatito sólo quería mimos. —berrincheó Jimin.

—Al único gato, híbrido o lo que sea, que le tienes que hacer mimos es a mi.

Taehyung al escucharlo hizo una sonrisa pícara. Se transformó en el bello gato negro con lunares blancos en forma de corazón y se paró en dos patas, estirándose en las piernas de Jimin para que le prestara atención.

—Awww, Taeee —sonrió —, que hermoso e–

—Ah, no eso si que no; este gato, este híbrido es mío. —dijo rápido Jungkook.

Jungkook se agachó para poder tomar al mínimo rápido, lo escuchó soltar un ligero 'Miau' y comenzó a tallarle la cabeza. Lo acomodo en su pecho cargando el pequeño cuerpo como un bebé.

Pasando los dos minutos seguía caminando para llegar a la entrada del juego, notando que  Namjoon y Jin ya estaban haciendo fila, joder. Había demasiada gente.

De un momento a otro volteó a mirar a Tae, el cual estaba mirándolo con los ojos entrecerrados, aún siendo un gato se le notaba lo molesto.

—Si quieres mimos, Kim Taehyung, me lo tienes que decir a mi. ¿Me oíste? A MI. Nadie como yo te puede dar esos mimos que tanto te gustan.

"Rrrr" gruñó.

Jungkook comenzaba a sentir el cuerpo pesado, Tae se estaba convirtiendo.
Al voltear, Tae lo estaba mirando con amargura, sus manos rodeaban perfectamente su largo cuello y él tomaba fuertemente las largas piernas de su mayor mientras que con el brazo contrario lo abrazaba posesivamente.

—Sólo quería saber que diría Yoongi. —hizo un puchero el mayor, recargando su cabeza en el hombro del contrario.

Jungkook suspiró y puso por unos segundos su perfil en la cabeza del híbrido, cuidando de no aplastar las orejas de su gatito.

—Pues de seguro se molestó un poco más.

El cuerpo de Jungkook giró para mirar hacia atrás y de modo que Tae también pudiera ver a la pareja mayor.

Jimin sujetaba a Yoongi (transformado en gato) por el cuello, el rubio molesto haciendo berrinches y diciendo cosas que no alcanzaban a oír, y Yoongi se dejaba hacer. No era algo raro que Jimin le hiciera berrinche.

—Creo que Jimin hyung se ve más molesto.

Jungkook solo asintió.

—¿Gatito puede comer ahora? —preguntó mimado el híbrido.

—Nop, primero iremos a la montaña rusa y después iremos a comer lo que gatito quiera. Sino, vomitarás.

—Okey, pero...

—Si, si, si. Miedo a las alturas.

—¡CHICOOOS CORRAAAAN, YA SEGUIMOS! —escucharon los chicos gritar a Namjoon.

Jungkook aún con Tae en brazos comenzó a correr para ir hacia los mayores.
Jimin solo abrazó a su gato e igual corrió.

Al llegar, al momento de que pararon de correr, Yoongi se transformó y cayó al piso.

—Todavía no subo y ya estoy mareado. Vayan sin mi. —dijo secamente, y aún con su humor amargado.

—No, subirás. Vamos Yoongi. —le susurró Jimin.

—Rebotas mucho al momento correr.

—Puedo rebotar en otro momento si quieres, pero vamos, Yoongi-ssi.

Yoongi abrió los ojos sorprendido de las palabras de su novio. Pero sonrió.

—Lo haré sólo porque sé que si no subo no me compraras mi hamburguesa.

———————————————
——— 🐈‍⬛ ———
———————————————

—¡JEON JUNGKOOOOK! ME VOY A MORIR Y DESDE AQUÍ MENOS PODRÉ CAER DE PATAS.

Todos gritaban chillosamente por la adrenalina y la poca diversión que aún no empezaba, sin embargo, Taehyung estaba sufriendo a más no poder.

Jungkook reía y reía y alzaba los brazos. Taehyung cerraba los ojos para evitar marearse y vomitar.

Se pudo tranquilizar un poco al sentir las manos de Kook en las suyas.

—¡No me sueltes! —le dijo en voz alta Jeon para que el híbrido lo escuchara.

—¡Ni loco!

Jungkook sonrió, se sentía mal por haber subido a su gatito torpe a un juego que sabía que le ocasionaría un miedo terrible, pero... para todo hay una primera vez.

—Uff, ¿ya se acabó? Al fin. —soltó en suspiros el mayor.

—¡Em... Tae, se puso lento porque todavía no empieza lo mejor! —le gritó Jin desde atrás.

Recorcholis.
Espera, ¿qué es eso?

—Kook... ¿moriré aquí? —preguntó cuando ya estaban cerca de la punta para bajar a toda velocidad a su muerte. Según Taehyung.

—Este... nop, no creo.

—Ahora quiero orinar. —exclama Yoongi mirando hacia abajo.

—Kook... me voy a morir aquí. —dijo un poco más espantado.

Ambos híbridos tenían sus colas esponjadas y sus orejas estaban hasta arriba y tomaban a sus 'dueños' de las manos.

—¡Que no te vas a morir, gato tonto!

—Jimin, solo quiero que sepas que te quiero mucho. —dijo de repente Yoongi mirándolo.

—Ow, Meow Meow, yo igual te quie–

—Y quiero decirte que cuando tapé el baño, lo destapé con tu cepillo de dientes.

El grupito de amigos, exceptuando a Jimin y Yoongi, pusieron una cara de desagrado, después rieron.

—Yoongi...

El camioncito comenzó a bajar a toda velocidad.

—¿QUÉ HICISTE QUÉ MIN YOONGI?

—WUUUUUUU

Todos comenzaron a gritar, la diversión apenas comenzaba.

No para Taehyung que estaba todo paniqueado, pero Jungkook sostenía su mano fuertemente para tranquilizarlo, al menos un poco.

———————————————
——— 🐈‍⬛ ———
———————————————

—Baño, baño, baño, baño, gatito quiere orinar y vomitar. —dice un mareado Taehyung.

Jungkook con rapidez cargó al híbrido y comenzó a correr para que no se vomitara en medio de toda la gente.

Ya en el baño, Taehyung se encontraba vomitando.

—¿Ya estás mejor, gatito? —preguntó Jungkook desde afuera del cubículo.

—Ño... —secó sus lágrimas que salían por la fuerza de vomitar. —siento que ya no tengo riñones.

—Perdona, Tae. —abre la puerta del cubículo, sabiendo que solo estaba vomitando. Tomó papel y comenzó a limpiarle los restos pequeños de vomito que había en sus labios. —Vamos por una hamburguesa y después un helado de oreo, ¿te gustaría?

—Shi.

Ambos sonríen. Tae se levanta y le baja al retrete para que lo que había sacado de su estómago se fuera. Salieron y se encontraron a los chicos unos minutos después en el ares de comida.

—¿Todo bien? —preguntó Yoongi.

—Algo así. —respondió Jungkook.

Se sentaron y pidieron su comida, estuvieron hablando animadamente, Taehyung se sentía mejor y su cola gatuna comenzó a jugar en el rostro de su amo, haciéndole cosquillas. Verlo sonreír por la sensación era hermoso. No podía explicarlo, pero le gustaba ser la razón por la que Jungkook sonreía, al fin alguien lo quería después de mucho tiempo.

Al terminar de comer, todos se levantaron y se separaron para ir a diferentes juegos.

—Meow Meow, ¿vamos a las fuentes de pareja? —le pregunta Jimin a su híbrido, lo abrazaba por la espalda, cuidando no aplastarle la cola, aunque sabía que no le dolía, él no quería aplastar esa hermosa negra cola larga.

—No, te pones cachondo.

Jimin sólo rió y tomó de la mano a Yoongi para salir corriendo a donde había querido ir Jimin.

—Nosotros iremos a no sé dónde. —dijo Jin.

—Nos vemos al rato. —ahora habló Namjoon.

Los pelinegros sonrieron siguieron caminando, mirando hacia los juegos, viendo a gente ganar y perder en las actividades.

—¿Quieres un premio? —pregunta Jungkook.

—Oh... ahorita no, Kookie, tan sólo caminemos un rato. —le contestó sonriendo.

—Tomémonos de las manos.

Y sin obtener respuesta, tomó la mano de Tae, éste se sonrojó un poco y sonrió tímidamente.

—Kookie, ¿qué son las fuentes de pareja? A donde fueron Jimin y Yoongi. —preguntó interesado el híbrido.

—Oh, bueno, es un area donde van parejas, cada pareja tiene un espacio y se quedan un rato ahí, haciendo lo que quieran: hablar, darse cariños, darse besos.

—¿Qué son besos?

—Los que te doy antes de dormir. —respondió.

—¿Cuando pegas tus labios en mi frente?

—Así es. —respondió Jungkook sonriendo y volteando la mirada hacia él.

—¿Y los besos sólo se dan en la frente? —preguntó extrañado Tae.

—No, se puede en los labios, manos... en la pancita —dijo acariciando rápido el estómago de Tae, sacándole risas. —en donde sea, técnicamente.

—¿Y por qué no me has dado besos en los labios?

—No somos pareja, TaeTae.

—Y si fuéramos pareja... ¿me darías besos en todos lados y en especial en los labios? —preguntó emocionado Taehyung, tal cual como un niño pequeño.

Jungkook se sorprendió ante la pregunta. No supo que decir.

—Oh mira, la tienda de nieves. Vamos por tu nieve de Oreo. —cambió el tema. Señaló el puesto de las nieves

—¡Oh si!

"Eso estuvo cerca..."

Quien diría que el chico rebelde, el que le valía madres todo, el que solo quería distracciones con mujeres, tuviera una debilidad, y ese era su híbrido.

———————————————
——— 🐈‍⬛ ———
———————————————

Después de haber comprado sus nieves, Taehyung estaba alegre, el sabor de esa cosa helada era simplemente magnífica, algo que nunca había probado, ni siquiera habían tirado esa cosa en la basura como para haberla probado.

Siguieron caminando y vieron a un perro caminar solo, un poco atareado.

—Kook, mira, un perrito. Que lindo.

—Tiene pulgas, no vayas a–

—Yo también tenía pulgas. —lo miro indignado.

—Es diferente, Tae.

No pudo decir más, Taehyung ya estaba acercándose a ese perrito, ¿que hacía un lindo cachorro solito en un parque de diversiones? Tenía entendido que se permitían mascotas... al menos si fuera híbrido, pero éste no parece uno.

—¿Nos lo podemos quedar? —pregunto alegre Tae con el cachorro en brazos.

—¿Estas loco? ¡No! Me basta con tenerte a ti. Además, tiene dueño, vele el collar.

—¡Mickey!

Ambos chicos escucharon a alguien gritar ese nombre, y al momento, el perro ladró.

—¡Mickey!

—No llevas ni dos meses con el perro y ya se te perdió. —escucharon a una chica decir.

—Mi bebé. —se escuchó angustiado.

Taehyung miró al perro mover su cola de manera alegre y escuchó que chillaba de alegría. Comenzó a caminar a hacia los que gritaban por el cachorro.

—Disculpen, ¿es de ustedes este bonito? —preguntó tímidamente alzando al perrito, éste estaba moviendo la cola rápidamente de felicidad y el chico castaño alto sonrió al ver a su pequeño sano y salvo.

Se acercó más al chico pelinegro que al parecer era un híbrido y tomó a su cachorro para llenarlo de besos y decirle cosas como "¿Por qué saliste corriendo así?"

—¡Mickey! Mi pequeñín, oh Dios, no te vayas así de nuevo. —decía casi chillando el castaño.

Jungkook se acercaba a Tae para abrazar a su híbrido del hombro, éste se encontraba viendo la escena tierna.

—Gracias por encontrarlo, mi hermano es algo despistado. Soy Jung Ji-woo, y él es Hoseok. Llevábamos rato buscando a nuestro perrito.

—¡Si! Muchas, muchas gracias. ¿Puedo abrazarte? —pregunta el castaño.

Jungkook al escuchar tal pregunta, tomó de la cintura a Tae, lo apegó a su cuerpo y gruñó cual gato molesto.

—No fue nada. —hizo una leve reverencia el híbrido. —Y creo que no hace falta el abrazo. —sonríe —Mi amo es un poco celoso.

—Oh, ¿es tu híbrido entonces? —preguntó Hoseok.

—Por supuesto. —asintió firmemente. Abrazando y pegando su nariz en el cuello del híbrido. Olía a vainilla. Tan delicioso.

Quería morderlo y chupar ese cuello color caramelo. Era tan precioso.

Primero que nada, FELIZ CUMPLEAÑOS AL SOL DE TODO ARMY, A NUESTRO VARÓN.

AHHH, son más de 2.50k de leídas.

Muchísimas gracias, Tamalitos.