{🔥XXII} Brillo estallando en Enies Lobby
Lograba sentir la angustia, esfuerzo y dolor de sus compañeros confirme se acercaba a Enies Lobby. Esto preocupaba más y más a la estratega arrepintiéndose de dejar a sus nakamas sin su ayuda. Sino fuera por la estúpida ambición de Exequiel, Hela siguiera cautiva bajo su influencia. Por una parte agradeció al asesino ante tal maltrato que hizo florecer sus verdaderos poderes.
Sentía que su tiempo se le estaba acabando, no podía volar más rápido si no quería desgastarse para pelear contra la Marina y demás. No obstante, por debajo del océano escuchó una especie de musica mágica extraña. Baja su vista sin dejar de volar para fijarse que una enorme sombra estaba emergiendo del mar. Intenta enfocar su atención sin creer lo que sus ojos estaban viendo.
—MERRY!! —Desvela con un par de lágrimas en sus ojos al ver a su barco en pésimas condiciones pero dispuesta a ayudar a escapar a su tripulación. Esto hizo reflexionar a Hela sobre que iba en la dirección correcta—. Vamos, Merry!! Nuestra tripulación nos necesita! —Impulsa Hela motivada a volar con más rapidez.
La emoción de Hela se intensifica cuando logra ver a infinitos barcos marinos rodeando frente a ella indicando que había llegado a Enies Lobby. Ya estaba más cerca de sus amigos. Del otro lado, los Mugiwara se estaban quedando sin opciones al ver que barco de escape había sido destruido. Entraron en desesperación cuando Nami escucha una voz.
—TODOS AL AGUA!!! —Gritaba Hela desde lo más lejos.
Los ojos de Nami se cristalizan—. Qué sucede, Nami-san? —Cuestiona Sanji.
—Es-es... —No lo podía creer. Alzó la vista de hacia donde provenía la voz para confirmar su teoría—. ES HELA!!! —Chilla llena de alegría.
Los demás piratas alzan la vista celebrando para ver que efectivamente era Hela quien volaba en dirección a ellos, destruyendo los barcos de la marina a su paso como si fueran simples pedazos de madera. Los cañones apuntaban a la estratega en un intento de frenarla, pero eran inútiles pues no le hacían ningún daño cualquiera.
—Hela!!! Salva a Luffy!!! —Pide Usopp a todo pulmón señalando a Luffy tirado en el suelo sin poder moverse.
Hela va de inmediato a salvar a su capitán—. Luffy!! —Se preocupa al ver el estado que se encuentra el chico de goma.
Este se gira para ver a su nakama—. Hela... eres en realidad tu? —Pregunta con las pocas fuerzas que tiene.
—Soy yo... —La imagen y la situación quiebra a la asesina—. Salgamos de aquí. —Toma a Luffy cargándolo y así salta al agua junto con sus demás nakamas.
Cuando se meten al agua, el Going Merry hace su aparición para navegar una vez más, esta vez para salvar a su querida tripulación. Hela se encarga de dejar a sus nakamas, junto con otros cuatro aliados más dentro del barco, para que acto seguido se deje ver frente a ellos, no sin antes permitirles que se recuperen del cansancio.
Aterriza dentro del Merry dándole la espalda a los demás tripulantes y compañía. Seguía brillando por lo que se les hacía difícil identificar a Hela al principio. No es hasta que neutraliza sus poderes y se gira para enfrentarse a sus nakamas—. HELA!!! —Dusan y Chopper son los primeros en abalanzarse sobre la estratega para abrazarla expresando lo mucho que la extrañaban.
—Ahora quien es la que hace entradas ridículas? —Aprovecha Zoro para burlarse.
Sin embargo, lo único que quería hacer Hela era llorar y abrazar a cada uno de sus amigos. Pero estaba consiente de que estaban llegando más barcos de la Marina a impedir el escape, por lo que se ahorró sus lágrimas y reencuentros—. Luffy, —se dirige a su capitán—, yo misma me encargaré de los barcos, ustedes naveguen sin mirar atrás.
—Hela-luv! Vendrás con nosotros! —Afirma Sanji queriendo acercar a ella.
—No. Cuando llegué a Enies Lobby, conté aproximadamente una cantidad infinita de barcos enemigos. No conseguirán escapar sino me deshago de los barcos. —Niega con autoridad y preocupación—. Luffy, mis labores aquí no terminan. Hasta que no me asegure que podamos ser libres para navegar, no podré regresar con ustedes. —Chopper exclama de los nervios—. Si es que consigo derrotar al enemigo, me perdonas por escapar y me volverías a aceptar dentro de tu tripulación?! —Cuestiona llorando incontrolablemente.
Luffy quien estaba paralizado anteriormente logra juntar sus fuerzas para levantarse y caminar hacia Hela—. SERÁ MEJOR QUE REGRESES PORQUE SINO NUNCA TE LO VOY A PERDONAR!! —Comanda como todo un capitán acompañada de su forma de ser.
Esto sirve como motivación para Hela pues despega del Merry para volar y destruir cada barco en su camino. Los de la Marina quedaban horrorizados ante el desastre que la asesina estaba creando a su alrededor. La castaña juntó todo su coraje, furia, ambición y dolor que llevaba cargando contra cada uno de los soldados y barcos que se encontraban. Esto alarmaba a la Marina intentando detener a Hela de todas las maneras posibles.
Conseguía cargar algunos barcos para lanzarlos a Enies Lobby y destruir lo que quedaba de ella—. POR MI TRIPULACIÓN!!! —Grita conforme admiraba su entorno.
—Quién es ella? —Se preguntaban los soldados asustados.
—Es la estratega de los Mugiwara, Hela! —Responde uno.
—Fue quien masacró a los soldados en Alubarna y mató al único brujo sobreviviente. —Añade alguien más.
—Yo escuché que mató a su propio hermano. —Especula otro.
Los marinos de alto rango admiraban la destrucción que hacia Hela, al mismo tiempo que discutían sobre ella—. Estaremos buscando más información de ella. —Revela el hombre.
—La "asesina aniquiladora" representa un peligro para el mundo al dar a conocer que es usuaria de la fruta Glow-Glow —Replica otra voz masculina—. Si se lo propone, puede acabar con la existencia de una entera civilización.
—Esperemos que nunca despierte su fruta en todo su resplandor.
—Eleven su recompensa, pero que sea menos que la de Sombrero de Paja. No queremos alarmar a nuestros superiores y a las demás personas. Después de todo, sigue siendo una simple mocosa.
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La estratega acabó su labor de destruir Enies Lobby y al mismo tiempo ayudó a los refuerzos de su tripulación a escapar sanos y salvos. Acabó con cada uno de los barcos enemigos para evitar que ni uno siguiera al Merry y de paso cobrar venganza sobre lo que le hicieron a su madre hace años atrás.
Después de encargarse de la Marina, se regresa en dirección a terminar con Exequiel de una vez por todas. Sin embargo, mientras estaba volando, se encuentra con dos barcos detenidos fijándose que uno de ellos era el Going Merry. Así que detiene su viaje para averiguar de qué se trata. Su vista se postra en sus nakamas parados frente a su barco con Luffy encendiendo una antorcha y colocándola en el Merry, honrándolo tributo a todo lo que ha hecho por los Mugiwara en lo que va de su viaje en el Grand Line.
Hela admira las flamas intensificando y pasando cada rincón del Merry haciendo que un par de lágrimas escapen de sus ojos—. Lo siento. —Una voz se deja escuchar mientras el barco se quema—. Me hubiese gustado llevarlos aún más lejos. —Continúa hablando la que para ser Merry—. Lo siento. Quería vivir aventuras con ustedes por siempre.
—Nunca apreciamos todos los sacrificios que tomaste por navegarnos siempre seguros. —Contesta Hela en un susurro.
—Pero he sido feliz. Por haber cuidado siempre de mí, muchas gracias. He sido realmente muy feliz gracias a ustedes!
—MERRY!!! —Grita Luffy con dolor y arrepentimiento en su voz provocando que Hela baje hasta con él para consolarlo. El chico de goma de inmediato siente su presencia por lo que abraza de su nakama con mucha fuerza sin dejarla ir en ningún momento—. Soy un terrible capitán, Hela. —Chilla Luffy en contra del pecho de la asesina—. No pude mantener a salvo al Going Merry, siempre ponía al barco y a ustedes en peligro sin siquiera analizar la situación. —Continúa lamentándose—. Debí tomar las cosas con más seriedad y quizá Merry estuviera aún navegando con nosotros.
La ropa de Hela se empezaba a mojar gracias a las lágrimas del moreno—. Tu oíste lo que Merry nos dijo, para ella fue un honor que navegaremos juntos. Su meta fue siempre cuidar de nosotros y lo hizo hasta el fin de sus días. —Consuela abrazando a su capitán—. Llora todo lo que puedas, Luffy. Pero siempre recuerda que eres nuestro capitán y tienes que alzar a la tripulación incluso en los tiempos más difíciles.
—No nos dejes, Hela... —Pide el capitán—. Te ordeno que regreses a bordo con nosotros cuando termines. —Comanda alzando la mirada fijándose justo en los ojos de la estratega.
—Regresaré, mi capitán. —Afirma Hela con certeza para alejarse de él y realizar lo que Luffy le ordenó.
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