{🫧XLV} Nos vemos dentro de dos años







Los ojos de Hela comienzan a abrirse viendo el cielo azul despejado con una pequeña brisa en su alrededor, consiguió relajarse toda la noche y eventualmente dormir aproximadamente tres horas una vez que el cansancio la venció. Se habían cumplido dos semanas desde que despertó y hoy sería un día interesante, levanta su cabeza que estaba recargada en el brazo extendido del Cirujano de la Muerte y se incorpora para fijarse que el pirata se encontraba leyendo un libro. Trafalgar se fija que la estratega se había levantado por lo que deja de leer para hablar con ella.

—Cómo te sientes? —Desea saber.

—Acaso no dormiste toda la noche otra vez? —Responde con otra pregunta.

—Dormí lo suficiente, pero una vez que amaneció aproveché la luz para continuar leyendo. —Contesta sin mostrarse cansado.

—No me extraña por qué siempre tienes cara de demacrado. —Replica restregándose los ojos—. Conseguí un par de horas de sueño. —Admite pensando en todo lo que han pasado el capitán y ella, Trafalgar había sido sorpresivamente amable con Hela pues no esperaba que un rival pirata la tratara de esa manera. Quizá sea el hecho de que el moreno tenía asuntos pendientes con Luffy al mostrarse interesado en él en la casa de subastas en Sabaody, por lo que tal vez Trafalgar buscaba ganarse la confianza de una de sus nakamas. También admite querer agradecerle por ayudarla y cuidar de ella estos pasados días pero su orgullo al recordar su primer encuentro la hace abstenerse de mostrar su gratitud. Aún desconocía las verdaderas intensiones del ojigris por lo que por eso era una razón la cual no dormía del todo por si este llegara a abusar de ella.

Trafalgar aceptó el comentario burlón—. Hice tu último escaneo por tu cuerpo y te encuentras recuperada por completo. Te doy de alta para que regreses a la acción. —Da su diagnóstico haciendo sonreír a Hela.

—Perfecto! Sólo quedará esperar a mi capitán. —Menciona mientras se levanta.

—También añado (por si te interesa saber), que no estás embarazada. —Agrega recordando el rumor que se dijo en Marineford.

Esto provoca que la expresión de la asesina cambie repentinamente frustrante—. Eso ya lo sabía, no me puedo embarazar. —Le molestaba e incomodaba hablar sobre aquel tema.

El Cirujano de la Muerte evita hablar más del tema, al mismo tiempo que repasaba su mirada por el cuerpo de Hela recordando aquella visión que compartieron. Al igual que la estratega, el doctor no se veía capaz de acostarse con ella en ninguna circunstancia al nunca pensar que se le hacía atractiva. Dada la situación en la que están metidos, no tenía que ni le interesaba idearse ese tipo de pensamientos pues también su mente se encontraba enfocado en otros asuntos. Añadiendo que la actitud caótica, rebelde, egocéntrica y cruel de Hela no encajaba con el tipo de Trafalgar.

Eso si, de alguna extraña manera disfrutó cuidar de ella. Algo que por supuesto nunca admitirá ni a sus mismos nakamas.

Hela toma la decisión de regresar a donde estaba anclado el barco de Trafalgar y así hablar con Jinbe al sentirse preparada para confrontarlo. Cuando se iba aproximando al ex-shichibukai, comenzaba a sentirse nerviosa e impaciente pues los recuerdos y emociones regresaban a ella de golpe. Se detuvo de inmediato tragando saliva reviviendo la muerte de Ace al mismo tiempo que Jinbe se gira viéndola por primera vez desde dos semanas que han pasado. Una vez que sus ojos se conecta, la estratega pierde el control y suelta lágrimas temblando de la tristeza y angustia.

Jinbe se acerca a la Mugiwara para ir a consolarla—. Hela-chan, me alegra verte en buena forma. —Incia delicadamente.

Se encoge de hombros desviando la mirada—. He fallado, Jinbe. —Admite culpable—. Tenías razón, debí prepararme para este escenario pero estaba cegada por completo. —Alza la mirada con sus ojos cristalizados—. Me he vuelto débil, Jinbe. Gracias a mi fracaso maté a un hermano de mi capitán. Todo fue mi culpa...

—Hela-chan! No voy a permitir que te culpes por las acciones que Ace tomó! —Jinbe habla con voz autoritaria.

—Lo siento porque todo fue en vano... —Confiesa lanzándose a los brazos del Caballero del Mar—. Nunca debí bajar la guardia. Ace está muerto por mi culpa.

Al principio Jinbe permite que Hela llore en su hombro, pero después la aleja para hacerla entrar en razón—. Ace-san tomó la decisión de dar su vida para que ambos continuaran por su camino. Su esfuerzo jamás fue en vano, ustedes le han declarado la guerra al Gobierno una vez más y demostrado que ya no son unos simples novatos navegando por las corrientes. Se han ganado el respeto, apoyo y admiración de toda la tripulación de Barbablanca y consiguieron darle una digna pelea a toda la flota de la Marina. —Detalla con orgullo y asombro intentando alzar a Hela—. Tanto tú como Luffy-kun se han atrevido a tanto que te aseguro que ningún otro pirata de su generación hubiera hecho.

La pelimorado consigue relajarse una vez escuchando atentamente el discurso del gyojin—. Gracias, Jinbe. Necesitaba oír eso.

Recarga su aleta en el hombro de Hela—. Una vez que despierte Luffy-kun, te necesita verte fuerte y capaz de lidiar con él. Evita quebrarte con él porque sino también caerá de nuevo. —Pide como advertencia.

—Lo sé. Luffy me necesitará una vez que despierte. —Toma un profundo respiro para reunir todas sus fuerzas y estar lista para su capitán.

Justo en ese momento, Luffy sale disparado del Polar Tang gritando de la angusta, arrepentimiento, dolor, entre otras emociones por lo que Jinbe se ofrece como voluntario para hacer entrar en razón al chico de goma dejando a Hela con la tripulación de los Heart Pirates. Mientras que Hela se recuperaba del llanto, uno de los tripulantes de Trafalgar se quedaba mirándola encantado de estar a pocos metros de distancia de ella.

—Esa es la Asesina Aniquiladora Hela!! La estratega de los Mugiwara. Parte de la Peor Generación! —Exclama emocionado.

—Ay, Shachi! Deberías controlar tus hormonas, que no ves que esa chica está apartada para el capitán! —Admite otro nakama de Trafalgar.

Hela escucha parte de su conversación—. Claro que no, Penguin! Que no ves que cada que hablamos de ella, el capitán rueda sus ojos y bufa de lo frustrado que lo tenemos. —Niega el pelirrojo Shachi.

Se acerca a los nakamas de Trafalgar ante la idea de que se les hace un poco adorables—. Así que, veo que les intereso. —Pero sobre todo quería saber a lo que se refiere con la frase "peor generación"

Penguin y Shachi se espantan al estar junto a Hela—. Oh no... nos escuchó! —Dice Penguin.

—Me pueden decir a qué se referían con que pertenezco a la peor generación?

—Son los súper piratas novatos que surgieron antes de Marineford que tienen recompensas que superan los 100, 000, 000 berries. —Explica Penguin.

—De hecho, —Shachi saca un cartel de recompensa que parece ser de Hela—. Tanto a ti como a tu capitán les subieron su recompensa. previamente tenías 115, 000, 000 berries cuando llegaste a Sabaody, ahora subió a los 350, 000, 000 berries por lo sucedido en Marineford. —Indica el pelirrojo.

Al observar su nuevo cartel, este había cambiado no sólo la recompensa sino el hecho de que la Marina había modificado su nombre ya que pasó de ser "Hela" a "Jann Ashla"—. Qué!? —Queda atónita por el hecho de que habían usado su verdadero nombre en el cartel, y sorprendía por lo mucho que su botín había subido. Esto sólo significa que como Zoro no participó en los hecho, Hela por fin le había ganado a su nakama en cuanto a precio—. Genial! Cuando vea a Zoro se lo voy a restregar en su cara! —Expresa con malicia.

—Cielos, si que es más atractiva de cerca... —Comenta Shachi susurrando pero lo suficientemente fuerte para que su capitán escuchara.

—Shachi, Penguin, dejen de atosigar a asesina-ya. —Ordena a lo que sus nakamas se alejan de inmediato.

Al instante, los nakamas de Law perciben que alguien llegaba a la isla, se trataba de nada más y nada menos que El Rey Oscuro, Rayleigh. Este se acerca a la isla mencionando que se había quedado sin barco por lo que tuvo que nadar para llegar hasta aquí. Intercambia un par de palabras con Hela resaltando la condición de su capitán a lo que está responde que se encuentra con vida haciendo que la estratega vaya a checar a su capitán, no sin antes dirigirse al moreno.

—Sólo te lo diré una vez. —Aclara con seriedad para después relajar su tono—. Gracias por salvar a Luffy y Jinbe. —Se negaba a aceptar que con ayuda de Trafalgar ella consiguió recuperarse también—. Pese a que lo hiciste por tus propios caprichos e intensiones que tienes con mi capitán, pudiste dejarlos morir pero no lo hiciste. Gracias, Trafalgar.

—No lo agradezcas. —Responde sin querer recibir el agradecimiento—. Será mejor que le entregues esto a Mugiwara-ya —Le entrega el sombrero de paja mientras se alejaba de la estratega para zarpar de la isla.

—Más te vale que no menciones ni una sola palabra de lo que sucedió estas dos semanas, no me gustaría ser reconocida como una chica básica que cae por ti porque estoy segura que sólo las fáciles son las únicas que quieren contigo. —Aprovecha para burlarse sin importarle lo que Trafalgar piense o actúe.

Con ello, se dirige en dirección a su capitán el cual se encontraba colapsando en el suelo llorando a mares. Jinbe se gira para darle paso a Hela para reencontrarse con su capitán, el cual cuando siente una presencia más frente de él, alza la mirada con sus ojos brillando del alivio al ver a uno de sus nakamas presente—. He-Hela...? —Cuestiona dudoso por si estaba alucinando.

Le dolía ver a su capitán de este modo pero recordó las palabras de Trafalgar y Jinbe sobre que tenía que mantenerse fuerte y capaz de apoyar a su capitán por lo que no mencionaría nada relacionado con respecto a Portgas D. Ace—. Luffy... —Su voz queda colgando en el aire. Esboza una enorme sonrisa al reencontrarse con su capitán resguardando sus lagrimas.

Luffy hace una mueca con su boca apretando sus labios con sus dientes temblando y al mismo tiempo soltando más llanto—. HELAAA!!! —Grita desahogado y enormemente feliz de ver a uno de sus nakamas frente a él, acto después se abalanza a los brazos de la estratega para regalarle un apretado e intenso abrazo a tal punto de ambos caer al suelo por la fuerza de este—. ME ALEGRO DE VERTE, HELA!!! ME DA GUSTO SABER QUE ESTAS CONMIGO A MI LADO!!! TE HE ECHADO DE MENOS!!! —Confiesa chillando hundiendo su rostro en el cuello de la pelimorado.

Hela regresa el abrazo con la misma fuerza relajándose de que su capitán se encontrase en buen estado, conmovida por las palabras del chico de goma deseaba soltar una lágrima pero seguía absteniéndose cuando recordaba lo que Jinbe le dijo antes de llegar a Marineford, "Luffy-kun no puede perder a su hermano y al mismo tiempo uno de sus nakamas. Si quieren continuar su aventura por los mares, tendrás que hacer el esfuerzo de salir con vida y salvar a tu capitán sin importar la situación en la que estén" —. Siempre estaré a tu lado Luffy, en las buenas y en las malas. Sin importar a lo que nos enfrentemos, pelearé infinitamente por ti.

—Gracias por unirte a mi tripulación, Hela. —Agradece sincero y más calmado.

—Es todo un honor ser tu nakama, Luffy. —Acierta la asesina.

A los pocos segundos, tanto Sombrero de Paja como la Asesina Aniquiladora caen rendidos durmiéndose como se encontraban pues al parecer la presencia del otro los ayudaba a encontrar la paz interior y consiguieron descansar definitivamente el resto del día y toda la noche. Jinbe los había dejado solos aquel entonces regresando la siguiente mañana y continuar con sus asuntos, con Luffy reencontrándose con Rayleigh discutiendo sus planes, junto con Hancock y sus aliadas quienes trajeron comida para los tres piratas recién recuperados.

Mientras almorzaban, Rayleigh comenta que el mismo Kuma tenía intensiones de salvar a los Mugiwara de las manos de la Marina en Sabaody por lo que mandó a todos los piratas lejos de ahí en zonas más seguras adjuntando que Hancock odia a los hombres por lo que no tendría sentido que Luffy se encontrase escondido en su isla. Del otro lado, la cosa cambiaba con Hela pues Kuma tenía intensiones de enviar a Hela a otro lado pero no contaba conque ella quedaría última e intentara salvar a su capitán.

Rayleigh hace dudar a Luffy si sería buena idea en regresar a Sabaody luego de lo sucedido y débil que ahora se encuentra haciendo que el chico de goma se tense y quede pasmado. El viejo propone entrenar a Luffy durante un tiempo para después regresar con el resto de sus nakamas siendo ahora capaces de afrontar las amenazas del Nuevo Mundo. El capitán acepta confiado y seguro de que es lo mejor con respecto a sus aventuras. Rayleigh también ofrece entrenar a Hela pero esta rechaza la invitación al decir que debería enfocarse completamente en Luffy, añadiendo que su tarea como hermana mayor aún no termina.

—Tengo que rescatar a Dusan del Rey Matze. —Insiste una vez preparada para el viaje enterada de que Kuma había mandado a su hermano a Thorne consiente del peligro—. No está a salvo en ese reino, por lo que tengo que salvarlo.

—Atlas Dusan ha demostrado ser un chico capaz de cuidarse la espalda. Le has enseñado muy bien. —Admira Rayleigh—. Será que tú eres quien no está lista para dejarlo ir? —Cuestiona reconociendo la respuesta.

La estratega se pone a reflexionar sobre lo que dijo el viejo, quizá tenía razón al ser siempre sobre-protectora con su hermanito menor. No es su culpa, prácticamente lo ha estado criando por catorce años haciendo que su instinto maternal haya crecido provocando que madurara a muy temprana edad—. Puede ser. —Afirma sin definir su respuesta—. Pero también merezco respuestas sobre mi pasado como parte de la realeza de Thorne y la única persona viva que sabe es el Rey Matze.

—Hela, —se acerca Luffy para intervenir en la conversación—, yo sé que por mucho tiempo tu misterioso pasado ha sido algo que te ha retenido, por lo que te doy permiso de luchar contra este y después te prepares con respecto a nuestra continuación de aventuras. —Propone el chico de goma aceptando el viaje de su nakama.

—Gracias por entender, Luffy.

—Y también dile a Dusan que es bienvenido en nuestro barco si lo desea. Tenemos pendiente nuestro duelo de surf. —Añade Luffy sonriente.

—Lo haré. Te prometo regresar con mis habilidades controladas a la perfección. —Afirma pensando que tendrá aproximadamente dos años para estudiar de sus poderes.

—Nos vemos dentro de dos años! —Despide Luffy contento y con ello Hela zarpa directo a Thorne.












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