Se levantó una Merlina mareada y dormida al lado de su novia con la pregunta en su cabeza "¿Qué pasó ayer?"

Solo recordaba que ayer Enid y ella estaban besándose mientras Ajax las grababa, luego de eso se fueron a su habitación y oh...

Un recuerdo de ellas dos besándose apasionadamente invadió su cabeza mientras la miraba a ella en su cama durmiendo profundamente como si de un koala se tratase. Enid era una persona que podía llegar a ser muy dormilona, muy activa o muy cariñosa, de un poco de todo, lo que Merlina amaba y agradecía.

¿Por qué no lograba acordarse?

Le daba igual, lo único que quería era pasar tiempo con la chica que siempre soño que sería su amada.

Decidió dejarla dormir, ella estaba tan enamorada de ella, le podría decir un montón de cosas que le encantaban de ella, pero sonaría muy cursi y pues sabemos que nuestra chica Addams no es así de empalagosa, pero por Enid haría cualquier cosa, no importaba la hora, el lugar o el segundo.

Fue al cuarto de baño donde se lavó el rostro, el cuál tenía unas ojeras que eran bastante notorias, la azabache no le prestó atención a eso y procedió a lavarse los dientes para luego cambiarse de ropa.

Se empezó a cambiar en la cama pero logró hacer un ruido muy fuerte al ver que se cayó un zapato suyo ocasionando que Enid se levantase y ella maldiciera por lo bajo.

―Buenos días Mer. ―habló ella mientras se restregaba los ojos risueña.

―Hola pequeña, no te quería levantar, perdóname. ―le dió un beso cariñoso en la frente.

―No pasa nada, oye. ―se levantó de la cama y fue hacía el armario. ―Sobre lo que pasó anoche...

Merlina abrió sus ojos como platos ¿Anoche? ¿Que hizo ella anoche? Pues se imaginaba un montón de cosas, la rubia tenía una camisa de ella puesta que le llegaba hasta las rodillas, aunque por si ella no era alta le gustaba la ropa grande y pues Enid tenía esa puesta.

―¿A-anoche? ¿Q-qué pasó anoche?

―Pues anoche. ―se acercó hacía ella con una sonrisa coqueta en su rostro mientras la agarraba de la nuca.

―Anoche t-tú y y-yo. ―la señalaba a Enid y al mismo tiempo a ella. ―¿Hicimos eso?

Enid rió por lo bajo.

―No tontita, casi. ―al decir eso la de ojos negros soltó un suspiro aliviada. ―Igual yo sí quería pero bueno.

Merlina solo se limitó a sonreír y la miro con ternura, se tiró con ella a la cama y la empezó a besar apasionadamente, como si no hubiera un mañana, como si ella mañana no estuviese con ella, pero sus besos fueron interrumpidos por la puerta que se abrió mostrando a Yoko dejando a unas sonrojadas Enid y Merlina.

―Puaj, ¿qué hacían? ―habló con cara de asco al verlas en la cama.

―Ay Yoko, cómo si tú y no hicieramos eso. ―apareció Divina detrás suyo.

―¡Divina no cuentes tantos detalles! ―chilló.

Las dos enamoradas se miraron y se rieron.

Las chicas tomadas de la mano fueron a sus respectivas clases y en una les tocó ir a esgrima, una de las clases que más amaba la Addams pero por Sinclair no tanto.

Tocaba un enfrentamiento, amistoso, la azabache lo veía de una forma completamente diferente.

¿Amistoso?

¿Amistoso?

Já.

¿Qué nuestra Addams tomaría como amistoso?

Nada.

Nada de nada.

Enfrentarse contra uno de sus compañeros el cuál si había acatado las órdenes y había comprendido que no se harían daño.

―En garde. ―dijo el profesor para poder iniciar el enfrentamiento mientras ambos se colocaban las máscaras y en posición. ―Prets, ¡allez!

Y así fue como llevaron a cabo la pelea de espadas, Enid miraba como su novia peleaba con ese chico y para decir verdad su cuerpo se movía bien, empataron 3-3. Hubo un momento donde a Enid ya no le favorecía la cosa, Merlina estaba jugando rudamente, parecía que quería matar a ese pobre chico, cómo ella quería ganar decidió empujar al otro chico y él cayó al suelo sacando un gemido de dolor agarrándose su pierna herida.

―¡Merlina Addams a dirección! ―gritó el profesor a lo cuál la oji-negro se quejó.

En la oficina de la directora Weems quiso ir Enid pero Merlina sólo quería entrar ella, que la dejara en paz.

―Me han informado de sus asuntos señorita Addams.

―Pff... Cómo siempre. ―bufó.

―Me temo que como sus acciones siempre son las mismas tendré que tomar el riesgo de una expulsión hacia usted.

―¿Qué? ¿Solo por empujarlo?

―Sí, pero no tomaré en cuenta eso ahorita, la próxima que suceda. ―cogió unos papeles de su escritorio. ―Tenga un buen día Addams.

―¿Qué pasó? ―habló Enid.

―Te dije que te fueras Enid.

―Vamos al cuarto a hablar. ―la tomó de la mano y fueron hasta la habitación.

Llegaron a la habitación, Merlina no tenía ganas de hablar sobre eso, sabía lo que iba a pasar, su novia le iba a dar un sermón y no tenía ganas de eso, lo único de lo que tenía ganas era quedarse a escribir o a dormir, me dolía tanto la cabeza y el sermón que prácticamente le podría dar Enid haría que le doliera más.

―Dime, ¿qué pasó? ―lo dijo con tanta calma en su voz que la vestida de negro tomó la decisión de contarle.

―Nada, me dijo Weems que si seguía así me iba a tener que expulsar. ―restandole importancia se sentó en la cama de la rubia.

―Merlina pero tú sabes muy bien lo que te ha dicho Weems varias veces.

Y ahí lo tienen damas y caballeros, Enid retándole a Merlina por hacer esa estupidez.

―No quiero que te expulsen.

La de pelo azabache ya estaba cansada de eso, cómo su novia la trataba como niña chiquita, como si ella no se supiera cuidar sola.

―¡Ya déjame en paz Enid! Estoy harta de que me trates como una pequeñita.

Enid soltó un bufido y la cogió de la cara y le explicó.

―Es que me preocupo por ti Merlina, eres la única persona de la que me he sentido segura, protegida, no quiero que te vayas de mi lado. ―estampando sus labios con la de cabellos negros dándole a entender que la ama lo cuál le quedó muy claro.

Su novia solo se preocupaba por ella, algo que nadie había hecho excepto por sus padres.

Se estaba preocupando por ella.

―¿Ya te dije lo mucho que te amo?

―No, pero me gustaría que lo hicieras ahora. ―rió poniendo las manos en su cuello acercando nuevamente sus labios  y lograr formar un lindo y tierno beso.

Ambas llegaron al campus donde decidieron comer, en el campus se encontraron a Divina e Yoko, sus típicas buenas amigas, todas optaron la idea de comer las cuatro juntas aunque talvez era idea de Divina dejarlas solas a ellas dos para que tuvieran una especie de "Mini cita"

Divina tomó la mano de Yoko jalándola para ir a otro lugar.

―¡Au duele! ―se quejaba la chupasangre.

―Shh ¡Cállate! Haz silencio que no me dejas oír.

―Mmm, Divina digo que tenemos que dejarlas solas. ―se rascaba la nuca con incomodidad. ―Talvez podríamos tener una cita tú y yo. ―sonrió coqueta a lo cuál Divina la miró y con una mano tomó su cara.

―Es verdad, hace tiempo no nos centrabamos en nosotras. ―Yoko asintió con una sonrisa tierna y sacó dos almuerzos, cuando volteó vió a Divina viendo a las chicas y estirandose más para escuchar.

―¡Divina por dios!

―Eh, perdón, ahora sí, saca los postres para tenerlos fuera.

―Bien. ―Yoko la miró con los ojos entrecerrados pero al voltear otra vez se encontró con la misma escena.

―¡Divina! ―gritó y ella giró asustada por haber sido descubierta. ―¿Sabes qué? Mejor no tengamos nada. ―la vampira se fue indignada.

―No, no ¡Yoko espera no seas dramática! ―fue corriendo tras ella.

En cambio la pareja reciente estaba comiendo junta, cómo una cita. La rubia estaba dándole de comer a la azabache y ella le estaba dando de comer a la rubia.

Ya habían terminado el almuerzo entonces estaban comiendo el postre que era fresas con crema, el favorito de ambas, mientras comían sonreían, está más de obvio decir que se aman.

alex's note 💌

Ok, ahora esperar que suba capitulo cada 2 semanas, mentira 😻

AMO AMO LA MINI CITA, YOKOVINA MIS TÍAS Y WENCLAIR MIS MAMISS

¿Qué les pareció el capítulo? Me gusta leer sus opiniones 🫶🏻

También ¿Les gustaría que hubiera una escena +18 en esta historia? La verdad yo prefiero que no porque me gusta hacer las historias re tiernas pero ustedes son los lectores, ustedes opinan 💋

a_failed_experiment te dedico el cap porque estuviste desde que inicie está historia<3