—¿Por qué lloras, Jaehyun?– preguntó Johnny, sentado en la silla frente a Jaehyun.

—Doie...no me habla, él me evita...–dijo con sus manos tapando su rostro, pero se notaba que estaba llorando por las pequeñas gotas que caían por sus mejillas hasta su pupitre.

—¿Qué? ¿Por qué te evita? Yo lo he visto normal.

—Soy un tonto, arruiné nuestra amistad, ocasioné que nos besaramos en mi cumpleaños. No voy a negarlo, me gustó mucho y realmente quería hacerlo, pero no tomé en cuenta cómo se llegaría a sentir él, creo que a él no le gustó, incluso sabe que me gusta, él ya no quiere ser mi amigo.– destapó su rostro, se notaba su nariz roja y mocosa, sus ojos cristalizados y su labio fruncido.

—Jae, deberías hablar con él, ¿Lo intentaste?– Jaehyun pareció pensarlo mirando a la ventana y luego volteó a verlo sorprendido y negó con la cabeza, ocasionando que Johnny rodara los ojos– ¿Por qué no me sorprende que no le hayas hablado?

—Me daba miedo, es que... él, pareciera que me evita, el otro día no me dijo nada, solo me miró y se fue corriendo. Desde Jeno le contó que me gusta en su casa y yo me fui, cuando volvimos a colegio, él parece tímido y yo soy aún más tímido, me da vergüenza hablarle, él sabe mi secreto y me da miedo de que me rechace...

—A ustedes dos les encanta complicarse la vida, porque ayer vi a Doyoung llorando también.

Jaehyun abrió los ojos grandemente y después volvió a llorar, Johnny suspiró y acarició su cabeza tratando de consolarlo.

—No tengas miedo, deberías hablar con él, ya es suficiente sufrimiento, ¿No lo crees? Los dos han sufrido por esto, no dejen que su amistad y el futuro romance se quede estancado, entiendo lo que sientes, pero es mejor arriesgarse antes de perderlo.

—Tienes razón– sacó un pañuelo y limpió su cara, después lo botó– voy a hablar con él hoy mismo, no quiero que llore, me odio por haberlo hecho llorar. Hablaremos y resolveremos esto de una vez por todas, me niego a perderlo.

—¡Así se habla!

Cuando fue la hora de salida, Jaehyun se apresuró a salir de su salón, ese año habían quedado en distintas aulas, así que tenía que correr y apresurarse a llegar al aula del mayor.

Al llegar, Doyoung estaba saliendo, se miraba triste pero cuando lo miró, su expresión cambió.

—Jae...– sus mejillas se volvieron rojas. Jaehyun sintió sus mejillas arder al verlo, incluso su sonrojo llegó hasta las orejas.

—Doie hyung...vámonos, tengo que decirte algo.– extendió su mano y esperó unos segundos, que le parecieron horas, hasta que el mayor tomó su mano y la entrelazó.

Ambos caminaron con sus manos juntas hasta un lugar cercano, hasta el parque, se sentaron en unas bancas.

Ninguno de los dos hablaba, estaban observando el paisaje con sus manos entrelazadas, aunque parecieran incómodos, en realidad no era así.

—¿Qué quieres decirme?– preguntó sin mirarle.

Jaehyun volteó a verlo, Doyoung se miraba tan lindo de perfil.

—Doyoung, sobre lo de antes...lo que dijo Jeno... quería decirte que es verdad.

Doyoung volteó a verlo, sorprendido, sus mejillas estaban rojas.

—¿Realmente?

—Si.

—¿Entonces te gusto?

—Estoy enamorado de ti, Doie hyung.

—¿De verdad?

—Si.– soltó una risita y Doyoung sonrió felizmente.

—No me lo creo.

—¿Quieres que te lo exprese de otra forma?– Doyoung asintió y cerró sus ojos, esperando un beso, que pronto recibió sintiendo sus labios unidos a los del menor. Cuando se separaron, se miraron y luego sonrieron– Me gustas mucho, estoy enamorado de ti.

—También estoy enamorado de ti, Hyunnie.

Ambos sonrieron, sus mejillas dolían de tanto sonreír, pero esa felicidad que sentían era increíble. Volvieron a unir sus labios en un suave beso y sintieron esas mariposas en el estómago.