Chicago, Illinois
10:00 am
09 de Diciembre de 1978

Ha transcurrido una semana de nuestra llegada tan poco convencional a Chicago.

Aunque debo decir que los primeros dos días fueron algo incómodos para mi, por el asunto que todos presenciaron

Pero luego de esos días, me he dedicado a ayudarle a Gilda a cuidar de los niños y de conocer mucho mejor a la familia de John.

Debo admitir que me siento feliz de la humildad que tuvieron al dejar que nos quedaramos por varios días en su hogar.

La madre de John, la señora Agnes tiene un carácter fuerte, pero en el fondo es una persona sumamente agradable.

El padre de John, el señor Adam tiene un carácter noble y muy sencillo, trabajador y muy dedicado a estar siempre con su familia.

La abuela de John, La señora Nana, es la que tiene el carácter mucho más noble, que es mejor comparandolo con el del señor Adam, y debo admitir que ella es el lazo por el cuál toda esta familia no deja de verse, ella es el eslabón principal de la cadena de la familia Belushi y la cuál he observado que hace que John sea mucho más feliz desde su llegada.

Su hermana Marian, realmente es alguién divertida pero muy apegada a la realidad, aunque debo decir que con la convivencia que hemos tenido la he ayudado a tener mucho más confianza en si misma y apoyarla a que salga a divertirse de vez en cuando de su hogar.

Su hermano Jim (James), es alguién muy atrevido, amante a la diversión y a la buena vida, algo parecido al carácter de su hermano mayor, apoya mucho a sus padres y cuida mucho de su abuela, al igual que trata de proteger mucho a sus hermanos, un muchacho muy sencillo y maravilloso desde mi punto de vista.

Y por último, el pequeño Billy, el cuál aún es un chico apegado en la pubertad, pero tiene un carácter díficil, al igual que John y su Madre, pero que nunca olvida el valor de la familia y también dedica tiempo a ser alguién agradecido y solidario con ellos, lo cuál para su corta edad es maravilloso.

La convivencia de la familia Belushi es realmente agradable, no hay conflictos, no hay diferencias, sólo es una familia que goza de la felicidad de todos.

—Winona, ¿Me ayudarias a buscar a los niños?— Gilda me preguntó interrumpiendo mis pensamientos— Es que el almuerzo ya está servido

—Okey, déjame ayudarte, creo saber donde están

Indiqué a Gilda donde vi a los niños por última vez y efectivamente estaban ahí, en el granero junto al señor Adam

—Y así niños es como se ordeña a una vaca

Observé con curiosidad y miré la sorpresa en las caras de los niños

—Buenos días y perdón la interrupción señor Belushi, pero debo decirle que el almuerzo ya está servido para que todos juntos vayamos a comer— Comenté y los niños exclamaron felicidad para irse caminando junto a Gilda.

—Sabes Winona, te he estado observando durante estos días— Yo miré con asombro al padre de John mientras caminabamos hacía la casa— Debo decirte que eres una chica soñadora, gentil y una gran persona con mi hijo, creo que desde que llegaste a la vida de John la transformaste en una mejor

—Bueno, es lo que muchas personas me han dicho durante estos meses Señor Belushi, y en cierta forma me alegra ayudar y ser solidaria con las personas que me rodean, es lo que yo misma hubiera deseado cuando era niña y mis padres no me apoyaban ni mucho menos me mostraban una pizca de cariño, por lo cuál no fui feliz con ellos, creo que después de su muerte fue cuando me volví como soy realmente.

—Lamento lo de tus padres Winona, pero para nosotros no hay problema si algún día quieres formar parte de la familia Belushi— El señor Adam sonrió con gentileza

"Espero que eso se pueda señor Adam"

—Considerelo pensado por mi— Sonreí y puse mi mano para estrechar la suya, lo cuál ocurrió segundos después

Todos comiamos con paz y armonía en la mesa de la familia, pero hay algo que me inquieta mucho.

Últimamente John se ha distanciado de mi, pero no de los demás, lo cuál para mi solo significa una cosa.

"Le doy vergüenza"

Suena absurdo, pero si notarán la manera en la que me ignora y ni siquiera me voltea a ver, me hace recordar mi infancia, su desagradable ausencia y falta de amor que me tenían mis padres.

—Bueno, provecho familia— Me levanté de la mesa y salí con cuidado de la casa de los Belushi, empezando a caminar por las calles sin mirar hacía donde.

Y fue tal mi imprudencia que no sentí un automovil pasar, sentí un gran golpe en la espalda para luego no saber de mi.

Toda esta semana me la he dedicado a realizar todas aquellas cosas que me apasionaban en mi juventud cuando vivía en Chicago, al igual que convivir con mi familia, con Gilda y los niños.

No se porque últimamente he tenido tanto pena al hablarle a Winona, pude notar antes de que viniera a la mesa junto a mi padre, que hablaban y sonreían de una manera peculiar, mi padre no es de esas personas que le tiene confianza a cualquiera y eso solo me hace pensar que Winona se está ganando el cariño de toda mi familia y yo me he alejado de ese sentir por parte de Winona por ser un cobarde.

En todo el almuerzo me dedicar a ver hacía el suelo o hacía otra dirección para no ver a Winona a los ojos, cada vez que hago eso me siento como un tonto chico enamorado de preparatoria.

Escuché las palabras de Winona al salir de comedor y escuché sus pasos al salir de mi hogar y fue cuando muchos gritos me hicieron levantar la mirada confundido

—¿¡En serio John!? ¿Crees que la mejor idea para no decirle que la amas es agachar tu mirada e ignorarla?— Las palabras de Nana me dejaron sorprendido

Jamás me había expresado su descontento en mi actitud con una mujer, ni siquiera con Judith.

—Déjame decirte John, que Winona está tan decepcionada de tu actitud con ella— Gilda se sinceró y me lo comentó

Esto me hace sentir más idiota de lo normal

—De verdad hermano, una mujer cuando quiere un hombre trata de buscar una manera de hacer que tengan un agradable acercamiento y tú lo único que estás haciendo es rechazarlo— Marian me dijo— estás muy mal al tratarla así y ten cuidado hermanito, Winona es una gran mujer y si algún hombre llegara a conocerla y a tratarla mucho mejor que tú, se casaría con ella

El solo pensar a Winona en brazos de otro hombre me hace sentir tan mal, no me hace sentir como un loco, celoso y posesivo, sino como un hombre derrotado y sin fuerzas para verla de esa manera con alguién más que no soy yo

—Así que hijo ponte las pilas si no quieres que Winona deje de amarte— Comentó mi madre

—¿Amarme?— Preguntó con confusión y asombro

—¡Eso está más que claro John!, ¡Te ama y la amas!, ¡Déjate de rodeos y comienza a conquitarla sopenco!— Jamás había visto a Gilda exigirme algo con tanto coraje, pero a la vez me sirvió mucho

Estoy siendo un jodido cobarde, con miedo de expresar mi amor por una mujer que siente el mismo sentimiento que yo.

Las miradas algo desaprobatorias de mi familia puestas sobre mi, solo me hicieron reflexionar y permitirme pensar y actuar mucho mejor a la situación.

Tengo que hacer algo y tiene que ser pronto

Nuevo capítulo

Espero les haya gustado

Ahora si los capítulos serán muchos más frecuentes y mucho más interesantes

Los quiere

zyalle