✶ CHAPTER ONE ✶
𝐐𝐀𝐓𝐀𝐑

SI A AURORA LE HUBIERAN PREGUNTADO HACE ALGUNOS DIAS QUE TENIA PARA HACER EL FIN DE SEMANA, ella diría que estaría en grabaciones, ya que siempre se la pasaba ahí, día, tarde y noche.

Pero esta vez no se encontraba en ese lugar, esta vez estaba en un lugar que ni siquiera sabía que algún día pisaría. Aurora se encontraba en Qatar y la unica duda era, ¿qué hacía ahí?

Para ser exactos un día atrás, Aurora se encontraba terminando con su novio, ya que le había sido infiel, su mente estaba en bloqueo, así que lo único que pensó fue irse unos días de España.

Su unica solución fue irse a Qatar con su hermano, a ver el mundial, algo que ella ni siquiera sabía, ya que pensó que Mateo solo viajaba a un trabajo.

La mentira era que Mateo había viajado por solo ir a un partido, el partido de Portugal, ya que su sueño era conocer a Cristiano Ronaldo.

— Ya te dije que no te voy a acompañar al partido — dijo Aurora haciendo su hospedaje en el hotel —. Yo solo viene a visitar los lugares de aquí. No entiendo por qué quieres que te acompañe.

— Porque eres mi hermana — Mateo hizo su cara de que era obvio —. Aparte no quiero ir solo, ya compré los dos boletos literalmente enfrente de los jugadores.

— ¿Por qué no le dices a Natalia? A ella si le gusta el fútbol.

Natalia que se estaba hospedando en la misma habitación de Aurora, solo negó rápidamente con una sonrisa de pena.

— No puedo, hoy saldré con Pedri, y claro su chicle Gavi — los tres soltaron una risa divertida —. Aurora deberías acompañar a tu hermano, no pierdes nada con hacerlo.

— ¿Ves? Escucha a tu mejor amiga.

Aurora suspiro pesadamente, para que posteriormente viera a Natalia y a Mateo en varias ocasiones sin saber que decir.

— No, mi respuesta sigue siendo no.

— Oh vamos, así despejas un poco tu mente, yo sé que sigues pensando en tu estúpido exnovio.

Aurora hizo una pequeña mueca, porque era verdad, Mateo no mentía respecto a qué ella solo pensaba en su exnovio.

Desde hace días atrás, ella pensaba en que fue lo que hizo mal, para que él le fuera infiel. Tal vez no fue lo suficientemente amorosa o tal vez no esta tan linda.

Tantas cosas que pensaba en por qué él hizo eso, y aunque intentaba no pensar en eso, cuando menos lo imaginaba, su mente viajaba a la noche que encontró a su exnovio, con una de sus amigas en la cama. 

— ¿Podemos no hablar de él? Mi respuesta sigue siendo no.

Mateo suspiro desesperado sin saber que más hacer para convencerla, él miró a Natalia para que lo ayudara, pero esta solo le contesto con un levantamiento de hombros.

Por mientras Aurora terminaba de acomodar todas tus cosas, ya que él viaje a Qatar no es solo un día, ya tenían planeado quedarse varios días ahí.

— Te compro un boleto para ir a ver a Taylor Swift — Aurora volteo en seguida a verlo —. En el lugar Vip y te acompaño, así te tomo fotos.

Aurora tenía el dinero suficiente para comprarse ella misma un boleto, pero para ser sincera no quería gastar su dinero. Así que si Mateo compraba los boletos con su propio dinero claro que aceptaría.

Pero ella se quedó aún sin decir que si, ya que no la convencía del todo.

— Y haré como tu chófer por una semana.

— Un mes.

— Así no, un mes es mucho.

— Entonces no te acompaño.

— Bien, bien, por un mes soy tu chófer.

— Acepto.

Aurora estrecho la mano con su hermano con una sonrisa, si bien ella sabía manejar, pero le daba tanta flojera hacerlo, siempre prefería ir de copiloto.

Natalia sonrió divertida al ver que los dos hermanos sonreían mientras se estrechaban las manos.

— ¿En serio estrechan la mano, para ser un trato?

— Es cosa de hermanos Natalia.

Mateo solo le guiño el ojo y volvía a sonreírle a su hermana ya que tenía compañía para ir a ver el partido de Portugal.

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Los hermanos ya habían llegado al estadio, era un poco temprano, pero Matero de lo emocionado que estaba, quería ser el primero en llegar, aparte de que siempre le había gustado llegar temprano a los lugares que iba.

Aurora iba un poco enojada, ya que claramente estaba por obligación, en cambio de Mateo que iba demasiado feliz.

Ya que sus asientos estaban muy cerca de los jugadores y por primera vez Mateo iba a ver a su jugador favorito más allá que de una pantalla.

— Quita esa cara y sonríe Aurora, tal vez el amor de tu vida te está viendo en estos momentos. — dice bromeando.

Aurora lo miro con incredulidad, intentando no gritarle, ya que había mucha gente. 

— ¿Ya viste la noticia que esta popular hoy? — este solo negó —. Ya todos se enteraron de que Misael me fue infiel. 

Mateo en seguida dejo de sonreír, para preocuparse por su hermana, nadie había sabido sobre eso, ninguno de los dos sabía cómo es que se enteraron de que a Aurora le habían sido infiel. 

— No tengo ni la menor idea como le hicieron para enterarse. Ahorita llamo a mi mánager para que elimine todo. 

— No Mateo, así déjalo, está bien, al que están afectando es a él, no a mí. Ya le toca sufrir un poco. 

Aurora sonrió, tendría que valer la pena todo el sufrimiento que paso estos días, pero en serio ella quería saber quién dio a conocer eso, ya que se suponía que las únicas personas en saber eso, era Mateo, la chica con quien se acostó, su exnovio, Natalia y ella.  

No sentía que ninguno de los que sabían habían dicho algo. Mateo la abrazo por los hombros y la llevo hasta sus asientos.

Aurora pudo ver lo grande que era el campo y tan cerca que esta de el, aunque no le gustaba el fútbol y no sabía nada, ya le estaba agradando estar ahí.

Aurora pudo ver como los jugadores salieron al campo a calentar, ella dio un brinco y tocó su pecho, cuando Mateo grito "te amo Cristiano", ya que le había gritado en el oído.

— No vuelvas a hacer eso.

— ¿El que?

— Gritar de esa manera — le dice para voltearlo a ver —. Casi me quedo sin mis timpanos.

— ¿Como quieres que no grite de esta manera?, si enfrente mío está el amor de mi vida.

Aurora soltó una carcajada y volteo a ver a los jugadores, para darse cuenta de que estaban demasiado cerca de ellos y pudo ver a Cristiano a unos metros de ellos, ya entendía la emoción de su hermano.

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João que se encontraba en el campo entrenado antes de que empezara el partido, veía en repetidas ocasiones a las gradas para ver si su exnovia estaba ahí. 

Si sabía que era un poco estúpido esperando a que Magui estuviera ahí, ya que se supone que habían terminado porque ella le había sido infiel y, aun así, João anhelaba que fuera apoyarlo. 

— Deja de esperarla, ella no llegara — Cancelo le dio un pequeño apretón en los hombros —. Ya deberías de estar pendiente a más chicas, muchas se mueren por ti. 

 — Aun así, solo la quiero a ella. 

— Una vez me dijiste que con la unica chica con la que cambiarias era una actriz, no recuerdo su nombre. 

Félix lo miro confundido sin saber a quién se refería. 

— Ah, Aurora, ella jamás me hara caso. 

— Pues eso no lo sé, pero mira quien esta allá. 

João volteo a donde le estaba apuntando con la cabeza, y se sorprendió demasiado al ver a Aurora ahi, comiendo unas papas mientras sonreía.  

Él en seguida sonrió al verla, claro está que no era la primera vez que João la había visto, este tenía un pequeño crush en ella desde que era muy chico, pero lastimosamente nunca había tenido la oportunidad de hablar con ella. 

— ¿Que hara ella aquí? 

— Ni idea, pero lo que sé, es que ya está soltera — Félix lo miro confundido sin saber cómo es que él sabía eso —. Me entere porque es la última noticia más popular. Su novio le fue infiel. 

— ¿En serio? ¿Como le pudo ser infiel a ella?

Los dos João's la miraban, Félix estaba feliz por dentro, ya no le importaba si su exnovia llegara al partido, ahora solo veía a Aurora.  

— Tienes el campo abierto para ti solo, ahora mete un gol y dedícaselo. 

Cancelo se fue dejándolo solo, mientras que este solo veía a Aurora de lejos, ahora por fin, ella estaba soltera, lo que estaba deseando por mucho tiempo y lo único bueno, que él también estaba soltero.   

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Los minutos ya habían pasado rápidamente, ya iban en el segundo tiempo, y hasta ahora el marcador iba 0-0. Aurora estaba comiéndose unas papas que Mateo le había comprado.

El ambiente ahí era demasiado alegre, así sea gente del rival todos eran demasiado amables, aunque hablaban en diferentes idiomas.

Aurora se prometió a aprender más idiomas, además que el inglés, ella pensaba que el inglés era el que muchos hablaban, pero era una gran mentira.

Aurora fue rápida y quito sus papas al alcance de Mateo, ya que él había gritado y estuvo a punto de tirarles sus papas.

Mateo había gritado porque Cristiano Ronaldo había metió el primer gol, así como toda la afición empezó a gritar y dar golpes al aire.

Aurora simplemente sonrió, al ver como Mateo se ponía con el gol, Aurora estaba segura de que él se emocionó más porque Cristiano metió el gol, que el gol como tal.

— Mira, me lo dedico a mí, yo lo sé. — le dice Mateo, al volver a sentarse.

— Oh claro — ella le sonrió —. Mira hasta te apunto, deberías estar gritando de felicidad. 

Mateo sonrió, con esa mentira solo había hecho que alimentara su esquizofrenia. Mientras Mateo seguía atento al partido, Aurora veía todos los mensajes que le estaban llegando en estos momentos. 

La noticia de que Misael le fue infiel se estaba haciendo mucho más famosa y popular de lo que ya estaba. Vio todos los mensajes, tales como que si le preguntaban que si estaba bien después de enterarse de eso o cosas como que no se sintiera mal que ella es bonita. 

Aurora solo pensaba en que si ellos supieran que esta noticia fue hace unos días y ella fue la primera que se enteró y no se enteró por un celular. Se detuvo en unos mensajes, eran de su exnovio donde le decía que se vieran y solucionaran el problema. 

Ella solo sonrió, ahora si quería hablar con ella, ya cuando todos se enteraron de lo que le había hecho. 

Aurora volvió a poner atención al partido y dejando a un lado su celular, ella pudo darse cuenta de que ya iban 1-1 y ni siquiera supo cuándo le metieron un gol a Portugal.

Volteo para ver a su hermano y este estaba con los brazos cruzados, enseguida se dio cuenta que estaba enojado.

— ¿Que paso? No vi el gol. 

— ¿Como que no lo viste, Aurora? Hasta tire la mitad de tus papas. 

Aurora miro en seguida al suelo, viendo la mitad de sus papas ahi tiradas, hizo una mueca, para después darle un pequeño golpe en el hombro a Mateo. 

 — Mateo, eran mis papas. 

— Eso te pasa por no estar pendiente al juego, no es mi culpa.  

Aurora solo rodo los ojos, volviendo a comer sus papas, que ahora ya solo quedaban muy pocas, por la cupa de su hermano. 

Ella que estaba a la mitad de comerse una papa, vio como rápidamente un chico del Portugal, que había metido el segundo gol, fue hasta a la esquina donde ella estaba y después de festejar, volteo a verla y con sus manos formó una "A", para después apuntarla y luego irse de nuevo a su posición.

Las cámaras directamente la apuntaron y en seguida salió su rostro en la pantalla grande del estadio.

Aurora miraba sin saber que hacer aún con su papa a mitad de su boca, todos a su alrededor voltearon a verla con sorpresa y felicidad. Ella miro a Mateo, que este, estaba de pie para festejar el gol, pero se quedó helado viendo a su hermana. 

Mateo estaba que no se la creía ¡JOÃO FÉLIX ACABABA DE DEDICARLE UN GOL A SU HERMANA! ¿A caso estaba soñando?

— Mateo, estoy confundida, muy confundida.

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Nota de la autora:

Si chicos cambie absolutamente todo el capítulo, así que, si es recomendable que lo vuelvan a leer, en fin, solo para decirles que esta historia volverá a las actualizaciones, ya que me volvió la inspiración.