Song: "Romantic Homicide" by "D4VD"

💮 Morgan 💮

Tenía que enfrentarlos, enfrentar a esos dos hijos de sus benditas madres. Así que hoy me prepararía como la gran diosa griega que soy. Solo que mas provocativa.

Agarré una camiseta blanca y lo corté con las tijeras, seguidamente me lo puse. La verdad es que me gustaba como me quedaba, dejaba al descubierto mi estomago y un poco mis pechos. Las hacia resaltar. Luego cogí un vestido rosa y le corte la parte de arriba, para retocarlo y ponerme la falda pegada. Estaba muy pero que muy sexy, si fuera otra persona me habría enamorado de mi misma. Por ultimo me puse unos tacones altos del mismo color.

Cuando ya estaba vestida bajé al salón. Encontrándome con mi madre y hermanos. Estos me miraron boquiabiertos.

—¿Que te ha pasado, Mor?.— preguntó mamá.

—A mi nada, ya no soy la misma de antes.— agarré las mochilas de los niños y salí a mi coche.— Vamos niños, es hora de irse.

Ellos salieron del trance y vinieron corriendo, cuando mamá se despidió arranqué el vehículo y nos fuimos.

[•••]

Ya había llevado a mis hermanos a la escuela y ahora me encontraba con mi amiga Dionne. Esta también se había sorprendido por mi nueva apariencia. Pero parecía gustarle.

Por el caminos nos encontramos con Carol, Tommy, Harrington y Wheeler. Nosotras los ignoramos al ver que Harrington intentaba hablarnos.

—Morgan...—

—Lo siento, ¿quien eres? No hablo con extraños.— dije pasando de el.

—Es serio, tenemos que hablar.—

—Pues yo no quiero, adios.— lo evité y nos fuimos de allí.

Todo el maldito día, Steve nos estuvo persiguiendo para poder explicarme lo que en verdad sucedió ese día. Pero yo eso no me lo creería.

La mañana pasó como siempre, nada alucinante.

Excepto por una cosa, la policía vino e interrogó a Wheeler menor. Una gozada, me gusta verla sufrir.

Cuando salió del interrogó, Dee y yo estábamos apoyadas en las taquillas. Y ciando nos vio nos reímos de ella, automáticamente poniéndose nerviosa. Luego la vimos irse con Harrington.

—Sigo sin entender por que se acostó con tremenda zorra teniéndote a tí.— dijo con su mirada por donde se había ido.

—Me pregunto lo mismo...— se cruzó de brazos.

♡Omnisciente♡

Ya habían acabado las clases, estaban dando una vuelta por el pueblo. Una distraída y otra hablando.

—¿Te encuentras bien, Mor?.— preguntó la de piel oscura. Pero esta seguía sin responder.— Eoo, tierra llamando a Morgan, ¿Estás ahí?.

—Ah, si si. Estoy bien.— dijo cabizbaja.

—Pues no lo parece, ¿que te pasa?.— insistió.

—Es que, me he vestido así para darle celos a Steve, pero parece que no le importa. Realmente se ha olvidado de mí.—

—Vamos chica, pasa de el. Como dice el dicho, "hay mas peces en el mar". Eres muy guapa y tienes muchos pretendientes, mujer. No te angustien. Ya encontrarás al indicado.— intentó animarla.

Por suerte lo consiguió un poco.

—Si, tienes razón. Puedo conseguir a cualquier chico que me dé la gana. Por algo soy la gran Morgan Fairchild.— lo que había dicho Dionne le había subido el ego. Bastante.

—Bueno.— miro el reloj de su muñeca.— Creo que es hora de irnos ya, es demasiado tarde y mi madre quiere que esté en casa antes de las siete y media para ayudarla con algunos asuntos.

—Si, sera lo mejor. Tengo que ir con mis hermanos.—

Las dos se despidieron y se fueron a sus casas.

Al separarse, Morgan decidió ir a pasear al bosque, para poder despejarse un poco. Aun que todavía fueran las siete menos diez, el cielo estaba oscuro. Pero eso no le importaba.

Estuvo caminando por uno hora, se le pasó muy rápido. Quería dejar de pensar en sus desgracias por un momento.

Pero un ruido la sacó de sus pensamientos. Morgan se sobresaltó y se puso nerviosa y con miedo.

Que hacía alguien a esas horas en el bosque. Bueno a ver, ella había ido a despejarse un poco, pero ¿Alguien le había seguido?.

—¿Hay alguien ahí?.— preguntó temerosa.

Solo que nadie respondió.

Por el miedo que recorría sus venas empezó a correr. Intentando huir de ese peligro que creía que le acechaba.

Corrió y corrió a mas no poder. Pero como si la vida la odiase, se tropezó con una raíz saliente haciéndola caer. Ella maldijo a todo ser que pasaba por su cabeza en ese momento.

Con terror volvió a mirar hacia atrás con más cautela.

Pero vio algo delante de ella que la hizo temblar y empezar a llorar.

—¡Nooo~!.— solo pudo mascullar eso.

Delante de ella se encontraba algo o alguien de más o menos dos metros, con el cuerpo demasiado flaco y las extremidades mas largas de lo que son junto a unas gigantes garras.

Rápidamente dirigió sus ojos a donde se supone que debería estar su cabeza, pero en vez de encontrar lo que esperaba encontró algo mas perturbante.

No sabría como explicarlo, era como una flor extraña que se abría y tenía millones de colmillos listos para morder y acabar con tu vida.

A Morgan le recorría el miedo por las venas. ¿Así hiba a morir? Ella no creía que moriría de esa forma, o sea era inimaginable. Pero ahora estaba sucediendo.

Se hiba a ir de este mundo sin despedirse de sus hermanos, de su madre, Dionne, sus amigos. Pero sobretodo de Steve, si, le había roto el corazón, pero aun así lo quería. Si el a ella no.

De un momento sintió algo sujetarla del pie y llevarla a quien sabe dónde.

Y lo único que salio de su boca fue un ultimo grito.

[•••]

Al día siguiente, al no aparecer Morgan por ningún lado nadie se preocupó, solo la de tez morena. Pues la gente ya se había enterado por los rumores de lo que había pasado entre ella y Steve, así que pensaban que se habría quedado en su casa.

Dionne preguntó a todos si sabían algo de su rubia amiga, y todos dijeron que no, así que como su ultimo recurso era ir con Steve, tuvo que descartar totalmente la idea.

Pero era su amiga. Quería saber donde diantres se encontraba. Para ella era raro no verla en los pasillos del insti.

—¡Steve!.— gritó al verlo.— ¿Has visto por casualidad a Mor?.

—Eh, no. ¿Por que? ¿Le ha pasado algo?.— preguntó rápido.

—Como si te importara.— se cruzó de brazos.— Bueno, ¿La has visto o no?.

—No, no lo he hecho.— dijo preocupado.— ¿Por que?

—No te importa. Si la ves, avísame.— y con eso se fue. Sin dejar decir algo a Harrington.

Ahora debía llamar a los Fairchild, por si se había quedado en casa. Igual estaba enferma.

Fue a la cabina de teléfono y marcó el numero de la casa. Fue Moníc la que respondió.

—¿Diga?.— dijo la mujer.

—Hola señora Fairchild, ¿Está Morgan en casa?.— pregunta la morena preocupada.

—Eh no, suponía que se había quedado en la tuya. ¿Pasa algo?.— respondió de la misma forma.

—Bueno, es que...— estaba pensando con cuidado lo que hiba a decir.— Nada, nada tranquila. La acabo de ver saludándome cerca de la entrada. Me había dicho que iría a su casa para recoger algunas cosas, pero veo que ha cambiado de idea. Que tenga un bonito día. Adios.— sin más colgó.

¿Si no había ido a su casa entonces a donde? Donde está Morgan. Rápidamente, sin importar lo tanto que lo odiaba, fue con Steve y sus amigos.

—¡Steve! ¡Steve!.— gritó desesperada.

—Hey Dionne, tranquilízate. Respira hondo.— la intentó calmar el chico.

—Es Morgan... No ha vuelto a casa.—

_xbitch