Capitulo 4.- 𝙿𝚊𝚛𝚔 𝚂𝚞𝚗𝚐𝚑𝚘𝚘𝚗
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Sunghoon era un chico prevenido y más cuando se trataba a otros alfas, seres los cuales encontraba odiosos, preparados para ser perfectos desde la infancia bendecidos con todas las cosas buenas, sin tener que esforzarse por un buen futuro, en cambio, los omegas eran mucho más lindos y tenían más razones para esforzarse ya que el mundo no los veía más que solo máquinas para hacer cachorros pero no a los ojos de Park Sunghoon el los veía como hermosas deidades que podían crear vidas.
Y está rara adoración no venía por su familia, para nada, la familia Park conocida ya que ellos eran otra familia de Puros Alpha parecida a la Shim, aunque su padre cambio el estereotipo tras casarse con una beta tras la muerte de su difunta madre, Sunghoon desde su nacimiento se supo que era un Alpha de pura sangre, ya que cuando un Alpha da a luz otro Alpha, hay un 50% chance de supervivencia una vez nace el cachorro, tristemente su madre no corrió con suerte.
Su adoración salió por los muchos problemas que túvo socializando en secundaria, ya que en su secundaria su apellido era conocido muchos padres le pedían a sus hijos acercarse a propósito a Sunghoon para tener la oportunidad de conocer a los Park, cosa que irritaba bastante a el antisocial chico.
La única amiga que hizo cuando era menor fue una chica linda que obviamente terminaría siendo una Omega ese fue su primer cambio de opinión, era muy apegada a ella hasta que sus padres la cambiaron de escuela asustados por los géneros secundarios de los dos.
Su segunda experiencia fue con una maestra que tuvo en su primer año en preparatoria para ese entonces ya toda la escuela lo tenía con el apodo de Príncipe de Hielo por no querer hacer amigos, y aunque todos lo trataban de ignorar por su actitud su maestra era muy amigable y siempre lo mimaba como a un niñito dándole dulces después de su clase y ayudándolo con cualquier duda, y también el fue el primero en saber que la maestra estaba embarazada y que tomaría un descanso para tener un parto más tranquilo.
Sunghoon encontraba a los omegas mas amigables, era cómodo estar alrededor de omegas, aun que su familia le presentará un millón de Alphas lindas el no planeaba relacionarse con una, su plan de vida era tener una linda Omega la cuál lo protegería a él y su futuro cachorro, aún que siempre que pensaba en su género secundario se entristecía ya que su celo era mucho más complicado, su puro aroma podría hacer desmayar a cualquier Omega desprevenida.
Así que en vez de fantasear con una a su lado empezó a verlos como un ser superior al cuál cuidar, por eso se encontraba en una extraña relación con su compañero de clase el cual sorpresivamente aunque venía de padres alpha y una línea familiar de Alphas torno a ser un Omega, un Omega que soportaba su celo sin ningún problemas, o al menos eso quería aparentar.
— Entonces hoy vendrás a mi casa o tendremos que retrasarlo un día más? — Pregunto algo irritado Sunghoon, trataba de parecer indiferente para no asustar a Jake, pero sinceramente encontraba a Jake verdaderamente tierno, su linda sonrisa y su estatura que era perfecta, al no ser muy pequeño ni lo suficiente alto como para alcanzarlo, igual que su tierno y dulce aroma que le daba un sentido de comodidad completa, Jake era absolutamente todo lo que Sunghoon buscaba lo único que no podía aceptar era que Jake era un chico, nunca se imagino con un hombre a su lado entonces siempre que fantaseaba con su compañero simplemente tenía que repetirse una y un millón de veces que el tambien era un chico aún si este podía tener cachorros.
Los dos habían planeado ir a su casa para editar el resultado de Jake en el papel del examen para poder mostrarlo sin problemas y que los amigos de Jake le creyeran, ya que habían pasado algunos días y los amigos de Jake se habían dado cuenta del perfume de su hermana que había estado usando ya que su padre aunque había prometido comprar el supresor de aroma simplemente no lo compraba.
— Si.. perdón por seguir atrasando, solo que mi papá no me daba permiso, pero mamá por fin le gritó que me dejara en paz — Presumió lo último bastante emocionado, Sunghoon casi se atragantó en su bebida al ver la linda sonrisa que siempre lo tomaba por sorpresa.
— Está bien, no te preocupes, entonces vayamos antes de que se haga tarde. — aunque antes de que pudiera tomar un paso mas se chocó con un chico de casi la misma altura que el — Que diablos no v- —.
— Heeseung-Hyung! — gritó el Omega detrás de él antes de lanzarse le encima para un abrazo al tal Heeseung — Que haces en este piso no deberías estar llendo a casa? —
— Bueno me he dado cuenta que tratas de evadirnos a proposito y me pregunté si habré hecho algo mal como para que te enojaras, sabes que te pediría disculpa por lo que sea. —
El chico de cabello rojo se veía algo apenado, Sunghoon aunque inquieto de ver cómo Jake lo abrazaba sin ninguna pena decidió alejarse para darle a los dos amigos su espacio para hablar, mientras que por su lado fue a comprar dos bebidas que podrían tomar de camino a casa para el y Jake.
Aunque después de lo que se sintió como horas vio al tembloroso Omega llegar corriendo a el con sus cabellos de un color rubio y la ropa hecha un completo desastre, alrededor de el tenía un claro aroma de otro Alfa mezclado con el dulce olor del suyo aumentado por su celo.
Sunghoon maldijo mientras se quitaba su chaqueta para cubrir y esconder la cara de Jake ya que aunque tarde aún habían algunos estudiantes a lo lejos que podrías reconocerlo — Hablemos de lo ocurrido en mi casa solo sígueme para que tomes tu medicamento. — Dijo mientras lo encaminaba lejos de la preparatoria para proporcionarle de sus supresores al igual que tomarse uno para calmar sus crecientes ansias.
— G-Gracias.. — Susurro Jake una vez estaba más calmado, tomaron un taxi a la casa de Sunghoon, y cuando llegaron subieron las escaleras rápidamente para evadir a su madrastra la cuál una vez reviso Sunghoon se percato que no estaba en casa así que volvió a la habitación solo para hacer que Jake se sentará entre sus piernas para que pudiera abrazarlo, creando una zona segura donde el Omega pudiera desahogarse, aparte de cubrir el olor de los dos, oler a el amigo de Jake tan obviamente le ponía los pelos de punta y más sin saber que había hecho.
Jake se sentía raro, ya no estaba en claro peligro y se sentía protegido entre los brazos de su compañero pero aún sentía las claras manos que buscaban el tocar su piel sin descuido junto con los rasposos dientes que rozaron su nuca arriesgando su futuro, estaba confundido y aún muy asustado por lo cual no sabía cómo empezar a contar lo sucedido.
Sunghoon se había percatado, aunque Jake no lo sintiera estaba temblando desde que salió de la escuela no había parado, sus ojos aunque ya no afectados por el celo seguían dilatados. — Lo que sea que haya sucedido no tienes que contarme lo ahora, solo necesito que te calmes y si decirme no ayuda, solo olvídalo, no necesito saber — Dijo Sunghoon con una voz calmada mientras frotaba lentamente su cachete con la cabeza de Jake para tratar de transmitir su confianza, lo cual había funcionado de una o otra manera ya que simplemente suspiro y dejó su cabeza reposar en el pecho acelerado de el Alfa por la acción repentina.
Gracias por leer, favor de decirme si hay cualquier error.
Siento que hay un vergo de errores dentro de esta historia, auxilio, me gusta lo que pensé para continuarla pero cada que escribo otro capítulo siento que estoy escribiendo para la vrg JAJA
Aun así espero les guste ya salga como salga xd
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