|Es malo juzgar a las personas sin siquiera ver mínimamente cómo son|

Llámenme cobarde, pero me he estado escondiendo de la hija de Satán en este último tiempo, y no es por miedo..., bueno, sí es por miedo, ¡pero ese no es el punto! Ejem, creo que es obvio, pero igual se los explico: la puedo derrotar si me llega a retar en una pelea y esto conllevaría a echarme encima a su padre y a sus fans. Ya tengo suficientes conflictos siendo la Chica Encapuchada como para también buscármelos en mi forma civil.
Y sí, sé lo que le dije a Videl en la escena final del capítulo anterior, ¡pero, hey! No sabía qué hacer, además, fue la única manera que se me ocurrió en esos instantes para huir del dúo de idiotas. Sé que por poco y doy señales de que yo podría ser la heroína incógnita, pero la salvé de chiripa.

Eres grande, Yuzuki.

El timbre que anuncia el almuerzo no se deja esperar, por lo que termino de agarrar mi comida y salir al patio donde me topé por primera vez a Gohan, porque sí, me mandó un mensaje diciendo que si podíamos almorzar juntos. No me molesta realmente, pero..., uhg, me es un poco incómodo el hecho de que quiera ser mi amigo; no estoy acostumbrada a ser muy apegada a la gente, siempre he preferido ser solitaria, y que al fin alguien busque mi amistad...

En serio, es raro.

—Viniste —comenta con alegría el nerd, digo, Gohan. ¿Ya mencioné que casi no le tengo respeto a mis mayores? ¿Sí? Ah, bueno.

—No tengo nada mejor que hacer —digo con sinceridad, dejándome caer a su lado con resignación. Y vaya que no miento: no soy muy cercana a mis compañeros de clase, solo a una chica que está media loca. Pero de ahí en fuera, no, nadie.

—¿No tienes amigos de tu edad aquí? —Pregunta con curiosidad él, mirándome con atención y esperando una respuesta de mi parte.

—Nop.

—¿Compañeros de secundaria? —Vuelve a preguntar.

—Sí, pero me caen mal y yo les caigo mal también, así que no —y vaya que no miento: mi relación con los compañeros de mi antigua escuela es lo que le sigue de pésima.

—¿Nadie además de mí, entonces? —Cuestiona con sorpresa, pareciendo incrédulo. ¿Tan raro es preferir la soledad antes que a tus inútiles e inmaduros compañeros?

—Tampoco te creas la gran cosa. Solo eres mi superior —gruño por lo bajo. Ugh, debí mentir al menos diciendo que tenía amigos fuera de la escuela o algún típico amigo de la infancia. Soy una idiota, ya es demasiado tarde para excusarme.

—Umh, no te preocupes. Yo tampoco tengo amigos aquí —dice riendo con un toque de nerviosismo, rascándose la nuca. No lo conozco mucho, pero puedo notar que es un clásico chico amable y estudioso, y no es que ellos sean sumamente populares, pero ciertamente es raro que no tenga amistades siendo ya de segundo año.

Genial, un nerd y una asocial, simplemente genial combinación.

—Okay... —susurro incómoda, queriendo que ya deje de hacer preguntas. No me gusta que indaguen de mi vida más de la cuenta, y sí, soy una amargada del carajo, lo acepto. Es una de las grandes razones por las cuales no tengo amigos.

—Bueno, yo...

—Así que aquí estabas —interrumpe una rubia de cabello corto abruptamente, deteniéndose frente a nosotros. De momento pienso que se dirige a Gohan, pero no, me está mirando a mí; aunque realmente no le tomo demasiada relevancia a su presencia. Esperen...

Ella es rubia, ¿acaso la escuela permite venir con el cabello rubio? ¡¿Me quité el tinte por nada?!

—Inoue-san, te hablan —escucho el susurro de Gohan, logrando sacarme de mis divagaciones a futuro.

—¿Perdón? —Inquiero de forma neutra, dirigiéndome a la chica blonda. No se me hace conocida, entonces, ¿por qué me está buscando?

—Te preguntaba si quieres almorzar con nosotros —de acuerdo, eso sí me dejó fuera de sí. ¿Me está invitando a que almuerce con ella? ¿He oído bien? Pero... dijo "nosotros", ¿a quién demonios se refiere con "nosotros"?—. Oh, perdón, no me he presentado: soy Iresa, alumna de segundo año y mejor amiga de Videl, la chica con la que discutiste hace un par de semanas.

De inmediato miro detrás de ella, notando que cierta chica de coletas nos está observando de manera seria  y a su lado hay un chico de cabellos rubios que parece bastante fornido. Oh-oh, estoy en problemas.
Observo de reojo a Gohan y también parece en las mismas que yo.

—¿Y para qué quieren que los acompañe? —Cuestiono de forma seca y un tanto a la defensiva. ¡Demonios, Yuzuki, no seas tan brusca, es tu superior y acaba de decir que es mejor amiga de Videl, joder! ¡Te vas a meter en problemas otra vez!

—Solo charlar y si quieres puede venir tu novio —sugiere Iresa y mira a Gohan de soslayo, quien parece en impresionado por lo que acaba de decir. Yo me quiero reír por lo que dijo (¿el nerd y yo de novios? ¿En serio? Eso es una total locura), pero sería demasiado descortés; lo que quiero es causar una mejor impresión de la que di la primera vez—. Eres... Son-kun, ¿no? Vamos en la misma clase, ¿no es así?

—Eh, sí. Pe-pero no somos novios; solo es una amiga —aclara con timidez Gohan.

La frase final me recordó a la serie de la gata pasiva y la catarina, digo, Miraculous Ladybug. Sí, eso.

—Oh, entiendo, perdón por confundirlos. ¿Pero quieren acompañarnos entonces?

—De acuerdo... —susurro con un poco de desconfianza. Estoy casi segura de que quizás me van a querer echar la bronca de mi vida o Videl me va a retar públicamente para pelear.

Estoy jodida.

❰ ･ ❐ ･ ❱

—Videl quiere pedirte disculpas —anuncia Iresa y siento que me atraganto con mi propia saliva.

¡¿Cómo dices que dijiste?!

—¿Eh? —Susurro confundida, sintiéndome aún incrédula por sus palabras. Videl es muy orgullosa, es imposible que ella quiera...

—Lo que dijo: me disculpo por lo que dije el otro día —bufa por lo bajo la de coletas, con los brazos cruzados y con expresión enfurruñada—, ¿feliz? —susurra hacia la rubia, quien le sonríe.

De acuerdo, esto no me lo esperaba.

Me siento presionada a decir algo, pero la verdad es que no sé el qué. Me estaba preparando mentalmente para que me echaran problemas o amenazaran, pero no para que Videl se disculpara. ¿Debo decir que yo también lo siento o qué demonios? Aunque... la verdad no me arrepiento del todo, pero igual, puedo mentir y fingir culpa.

—Emh, y-yo también... lo siento... —espero y valore cada maldita palabra, me costó media vida y medio orgullo decirlas. ¡Yo casi nunca pido perdón ni me retracto de mis decisiones y palabras! ¡Por eso me cuesta tanto decir esa estúpida oración!

Videl me mira de reojo y asiente con la cabeza, centrándose en el sándwich que trae en manos, supongo que dando por cerrado el asunto. Uff, menos mal, ya la salvé.
No me hubiera molestado pelear contra ella, todo lo contrario, pero en serio le tengo temor a su padre, el poder e influencias que posee.

—Bien, sin haber ya resentimientos de por medio, espero que nos llevemos bien este año, Inoue-san —comenta con alegría la rubia—. Ella es orgullosa y reservada —exclama, haciendo hincapié en Videl—, pero tiene curiosidad por ti.

—¡Cállate! —Se queja la ojiazul, ligeramente ruborizada. ¿Eso significa que es verdad? ¿Tiene curiosidad por mí? Pero si soy una chica más del montón; claro, si nos referimos a mi forma civil.

—Por cierto —interviene el chico de cabellos largos y rubios, quien se había mantenido en silencio todo este rato—, tienes mi respeto, chica, no cualquiera le hace frente a Videl.

De acuerdo, eso tampoco me lo esperaba.

—¿Verdad que sí? Por eso es interesante, no es algo que pase todos los días —dice ahora Iresa. Miro de reojo a Gohan, quien me dedica una pequeña sonrisa al percatarse, como dándome a entender que él también piensa lo mismo que el trio.

¿En serio les parezco una persona interesante? Nadie me había dicho algo así o siquiera se interesaban por mi persona.

-Lindassj1