♡Sesenta y nueve
Minnie no había querido separarse de sus Alfas desde que había llegado al hotel y no paraba de dejarles mimos y cariñitos ni de decirles lo feliz que estaba por haberlo llevado con su mami.
Estaba tan eufórico que los Alfas
tuvieron que verlo correr, saltar y cantar durante toda la noche después de volver de cenar pero era la cosa más bonita y agradable de todas, ver a ese hermoso omega sonreír feliz era lo mejor del mundo.
Ahora lo habían logrado convencer de irse a duchar antes de dormir.
Simplemente tenían a un Omega feliz y ellos también lo estaban.
La puerta fue tocada con suavidad y Jungkook entró por ella una vez más, habían estado a la espera de unos resultados médicos que se le habían practicado a la omega en donde indicaba que si estaba pasando por un trauma craneal debido a un golpe duro en la cabeza lo cual le dejó una amnesia temporal pero que con el tiempo podía recuperar sus recuerdos, al menos a su hijo si lo recordaba con claridad y eso era bueno.
El omega salió corriendo del cuarto de baño envuelto en su bata rosita de baño nada más y se tiró a los brazos de Jungkook con fuerza.
—¡Kookie!
Yoongi corrió tras Minnie y se detuvo justo cuando el omega se abrazó al otro Alfa, sin querer gruñó achicando los ojos atento a cualquier movimiento de su amigo.
—Más te vale no mover un músculo Jungkook. —Advirtió. —No queremos volver sin uno a Corea.
El Alfa azabache negó sin mover su quiera sus ojos y casi sin respirar. Agradecía la advertencia pues esos alfas eran capaces de desaparecerte sin advertirte si quiera. Si lo sabía él.
—Kookie, gracias por encontrar a Mami de Minnie, estoy muy feliz.
—No fue nada Minnie... Emm es parte de mi trabajo y además debía hacerlo porque somos amigos. —Respondió Kookie nervioso pues ahora había dos Alfas de brazos cruzados frente a él.
Agust fue el primero en acercarse y arrebatar a Minnie de los brazos de Jungkook y con eso el Alfa azabache pudo respirar más tranquilo.
—¿Qué pasa Jungkook?
—Sólo venía a dejarles estas copias de las evaluaciones hechas a la señora Park.
Jungkook dejó los papeles sobre una de las mesitas.
—Mañana iremos a las 10 de la mañana a recoger los resultados de DNA y luego nos prepararemos para volver a Corea.
Los Alfas asintieron, Agust aún tenía a Minnie en sus brazos.
—¿Estando allá deberá ser internada en algún sitio o podemos llevarla a casa?
—Creo que eso deberá determinarlo un médico allá, para estar seguros nada más.
—Bien entonces nos vemos mañana a las 10. —Yoongi sacó a Jungkook de la habitación casi casi a empujones.
Luego se volvió hacia Minnie con su expresión seria.
—Minnie no puedes salir en bata si hay más Alfas afuera. —Regañó.
El omega se bajó de los brazos de Agust e hizo un puchero muy tierno mirando a Yoongi.
—No, sin pucheros omega travieso, no puedo permitir que otros Alfas te vean desnudo.
—¡Pero Minnie no estaba desnudo! —Replicó indignado el omega. —Minnie trae bata de baño.
Agust se acercó para intervenir en la pelea que los otros dos estaban teniendo.
—Pero es casi lo mismo si no traes nada bajo esa bata pequeño... ¿Traes ropa interior?
El omega no respondió, sabía que sus Alfas estaban enojados con él por abrazar al conejito pero es que de verdad quería agradecerle. Aunque quizá si debió cambiarse primero.
—No, solo bata. —Acto seguido se desprendió de la bata la cual cayó al piso quedando por completo desnudo frente a ellos.
Al ver el mutismo de sus Alfas sonrió ladino. Era la mejor forma de contentarlos, mientras que los dos Alfas tragaban saliva admirando la belleza que tenían frente a ellos.
—Minnie ahora si esta desnudo. —Canturreó caminado hacia adentro. —Y Minnie quiere mimos.
Los alfas se habían quedado de piedra, los estaba provocando como sólo él sabía hacerlo y lo estaba logrando.
—¡Ahora! —Volvió a hablar el omega desde adentro.
Agust y Yoongi se apresuraron a ir tras él, peleando en el camino por ir más rápido que el otro, dándose leves empujones entre sí.
Al poco rato la habitación de hotel ya estaba totalmente llena de feromonas y la característica mezcla de aromas de los tres mientras los Alfas poseían a su Omega, deleitándose con sus bellos jadeos de excitación.
Dejandole en claro Minnie que solo ellos eran dueños de ese cuerpo tan adictivo y de esos gemidos enloquecedores.
Después de eso los tres cayeron rendidos sobre la cama, debían dormir pronto volverían a Corea.
•┈┈·┈•••┈┈┈••✦ ✿
Al día siguiente iban ya de camino hacia el albergue otra vez, ahora ya con la seguridad de que iban a poder llevarse a la madre de su omega.
—Oh ohh Minnie quiere uno de esos ¿Ahora si puede? —Preguntó emocionado señalando hacia afuera del auto, al señor que caminaba cerca con unos objetos muy curiosos que Minnie quería.
Namjoon bajó la ventanilla del auto a la orden de Agust quién se asomó para pedir lo que Minnie deseaba.
Haciendo uso de su poco Español que sabía logró comprar varios objetos con los que Minnie iba feliz.
—¿No había otra cosa con que hacer más ruido? —Refunfuñó Namjoon refiriéndose a la cosita de madera que llevaba Minnie en sus manos y que cuando la giraba hacia un sonido estrepitoso.
—No, pero si te sigues quejando le comprare otras dos. —Amenazó el Alfa rubio alzando la voz para hacerse oír sobre el ruido que Minnie hacia.
Todos rieron mientras Minnie jugaba con su juguetito nuevo, la "matraca" había dicho el hombre que se llamaba. También compró un balero, un trompo y una peonza que Minnie daba vueltas divertido que cuando caía mostraba un número.
—¿Cón que juegas Minnie? —Preguntó Jungkook dándose la vuelta para ver a Minnie.
—Con mi Pirinola. —Respondió simple.
Namjoon y Jungkook comenzaron a reír bastante alto ante la atenta mirada de los alfas.
Yoongi rodó los ojos y dio un golpe en la cabeza a Jungkook para que dejara de reír.
—¡Deja de alburear a mi Omega, idiota! —Le Regañó Yoongi enfadado.
Los demás Alfas no dejaron de reír hasta que por fin llegaron al albergue. De nuevo se bajaron y de inmediato Minnie se tomó de la mano de sus Alfas y cuando pasaron a la recepción se encargó de que la omega que los había atendido el día anterior viera sus dos marcas renovadas en su cuello, que por cierto se colocó una camisa que dejaba ver Bastante su bello cuello marcado.
Para los alfas no había pasado desapercibido eso, pero ellos estaban orgullosos y felices de que Minnie mostrara sus marcas con orgullo también.
Al pasar a la oficina del director este ya los estaba esperando con los resultados del DNA.
—Buen día Señores Min, están están las hojas y en un momento viene la señora Park solo que... tuvimos un inconveniente.
—¿Qué tipo de inconveniente? —Preguntó Yoongi de manera brusca, ya no quería más problemas solo quería volver con su suegra y su omega a Corea.
—Ah no es nada grave solo es eso. —El Alfa señaló a la mujer que venia caminando y en sus brazos traía a un gato.
—¿Un gato? —Dijeron los dos Alfas al unísono.
—¡Un gato!
El omega se acercó rápido a su madre y la abrazo para después quitarle el gato de sus manos.
—Dice que es para su hijo, no lo quiere soltar desde ayer.
—¡Gatito bonito! Mío, mío...
Cuando salieron del albergue llevan a Minnie feliz con su madre y un gato, al cual por cierto tuvieron que hacerle papelería legal para poder llevárselo a Corea.
Esa tarde ya habían hecho de nuevo maletas para volver a su país finalmente luego de haber arreglado todos los papeles de la señora Park y del gato... ya podían abordar tranquilos ese avión que los llevaría a su casa otra vez.
En el avión, Minnie no quería dejar al gato sólo pero tuvieron que meterlo en una caja para gato y ponerlo con los demás animales que viajaban.
—¿Recuerdenme por qué llevamos un gato pulgoso? —Refutó Yoongi.
—Porque es de Minnie. —Agust simplemente respondió acomodando el cinturón de su omega.
—Ah si es cierto. —Yoongi no volvió a quejarse del gato.
Si su omega quería un gato, ellos iban a llevarse un gato y fin.
—¿Mami estas bien? ¿Tienes miedo?
La omega sonrió y negó abrazando a su hijo, según el médico mientras más tiempo pasara con Minnie más rápido podía volver a recordar las demás cosas como por ejemplo como se llamaba y que le había pasado para así por fin hacer un juicio contra ese hombre que la golpeó.
—Te amo mami, ahora Minnie es más feliz. Minnie tiene dos Alfitas, a su mami y a gatito. Ah y también a familia pez.
Agust y Yoongi voltearon a verse.
—Oh-ho. —Murmuró Agust.
Gato y peces eso si que seria un problema.
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