♡Ochenta y dos
Los días pasaban para Minnie y su lindo embarazo, tenía ya cumplidos los 7 meses estaba por iniciar el último trimestre de embarazo y todo estaba bien por el momento. Comía saludable, comía de todo en realidad pero sus Alfas se encargaban de velar porque comiera lo más saludable posible así que la nevera Nana la mantenía llena de cosas saludables para el omega, como frutas, muchas verduras, pastas y cereales.
Aunque también los Alfas lo complacían con su postre favorito que era el helado. Las nauceas ya no estaban, los antojos tampoco estaban pero ahora Minnie siempre estaba hambriento y cansado.
Sus pies se hinchaban mucho así que solía estar recostado donde sea, en el sofá, en la cama, en los sillones, en el jardín siempre con sus piernas estiradas mientras hacia lo que mejor podía hacer en ese estado: Comer.
Sus Alfas sonreían enamorados al verlo, se veía totalmente tierno así con su enorme barriga y comiendo abultando sus labios, y en más de una ocación alguno de ellos sorprendía al otro grabandolo o tomándole fotografías a un distraído Minnie redondito y muy lindo descansando.
—¿Por qué incluso haciendo nada es tan hermoso? —Cuestionó Agust a su hermano.
Habían decidido trabajar afuera en la mesa del jardín mientras veian a Minnie tirado sobre unos cómodos cojines que le había puesto nana, jugando con Shooky y comiendo bocadillos de queso y fruta. Además el día era hermoso pero no más que Minnie.
—Minnie es un ser de otro mundo Gus... nadie hay que sea como él, tan tierno y dulce, único e irreemplazable.
Agust sonrió, su hermano tenía razón.
—Creo que se quiere levantar. —Agust señaló al dulce omega quien si se iba a levantar pero definitivamente necesitaba ayuda.
—Iré yo. —Se ofreció Yoongi.
A pasos rápidos se dirigió hacia Minnie quien le sonrió al verlo acercarse.
— A ver cariño te ayudo yo.
Con una agilidad impresionante Yoongi lo cargó como a un bebé, soportando el peso triple de Minnie.
—Minnie pesa mucho. —Abultó sus mejillas haciendo un puchero bastante bonito.
—Por ti, aguanto lo que sea bebé.
Minnie sonrió enredando sus manos en el cuello de Yoongi.
—¿A donde quieres ir bebé? —Le preguntó para llevarlo hacia donde él omega dijera.
—Minnie quiere ir a la habitación, tiene mucho sueño.
Yoongi asintió y lo llevó hasta adentro para luego subirlo hasta la habitación.
Era obvio que pasara con sueño la mayor parte del tiempo ya que El embarazo doble le dejaba sin energías.
—OK bomboncito. —Yoongi lo depositó en la cama y le abrigó. —Descansa todo lo que puedas amorcito, estaremos trabajando un rato más y después veremos una película juntos ¿Te parece?
Minnie asintió sonriendo.
—Bien... te veré después.
—Chocolatito ¿Puedes llenar a Suga de tu aroma? Minnie quiere sentir el aroma de Alfita.
Yoongi sonrió tomando el lobito de peluche y lo impregnó en su aroma de chocolate que Minnie tanto amaba. Cuando se lo entregó Minnie lo olfateó cerrando sus ojos para aspirar mejor el aroma.
—Listo bebé ahora me voy a terminar mi trabajo.
—Te amo Alfita. —Dijo Minnie sacando una gran sonrisa de Yoongi quien le revolvió el cabello.
—También te amo mi cielo tanto que no tienes ni la mínima idea.
Ambos sonrieron y Minnie pudo dormir un poco, jamás creyó que un embarazo podía ser tan agotador pero por fortuna tenía dos esposos cariñosos que no dudaban en ayudarlo en todo.
En la tarde después de que los Alfas habían terminado de trabajar Minnie se encontraba enmedio de los dos mirando El Rey León por enésima vez y por enésima vez Minnie era un mar de lagrimas.
—Mufasa... —Chilló, como si mirara esa escena por primera vez.
Yoongi tenía los ojos cerrados mientras su mano acariciaba la pancita de Minnie y Agust comía palomitas acariciando del otro lado.
Al acabar la película los Alfas se llevaron al omega a la habitación.
—Minnie te daré un masaje en tus pies bebé están muy hinchados.
Minnie asintió mientras veía como Agust iba por las cosas.
En un cubo de agua caliente Yoongi le había metido los pies y ahora dejaba caer sales relajantes. Minnie jadeo ante el gusto de sentir sus pies en el agua.
Agust volvió con una crema exfoliante para pies y cuando Minnie terminó de remojarlos Yoongi los secó con delicadeza y Agust comenzó a hacer masajes con la crema.
Minnie estaba en el paraíso mientras recibía esos masajes en sus cansados pies. Por otro lado Yoongi también aplicaba una crema en su pancita para hidratarle la piel de la zona.
—¿Estás relajado bebé? —Preguntó Agust mirando cómo Minnie cerraba sus ojos deleitándose con aquellos masajes.
—Si, Minnie esta relajado y feliz por la atención de mis Alfitas.
Solo esperaba que esas atenciones no se fueran cuando los bebes nacieran porque en verdad las amaba.
...
—¿Mami? ¡Hola! Minnie te extrañaba. —Habló el omega sentado en el sofá mientras jugaba con Shooky y hablaba por teléfono con su madre.
—Ah cariño han sido unas vacaciones adorables, jamás me imaginé que podría hacer esto.
La madre de Minnie luego de su luna de miel se había ido de vacaciones con Mingseon y no habían regresando. La omega se estaba dando la vida que jamás tuvo, aprovechando la segunda oportunidad que le había dado la vida de ser feliz.
Dos meses de casados y sentía que no podía ser más feliz al lado de Mingseon y Minnie también era muy feliz.
—¿Cómo va el embarazo cariño? ¿Cuéntame como estan esos bebes?
—Ah, Minnie se cansa mucho más y ya no puede dormir bien. —Hizo un puchero que su madre obviamente no podía ver.
—Es normal cariño estas en el último mes de embarazo ya casi, falta poco se fuerte mi cielo. Esos bebes van a nacer muy fuertes.
—Si mami.
—Por cierto Cariño tengo una noticia, quería dártela al volver pero no se cuando lo haremos así que lo diré... creo que vas a tener un hermanito Minnie.
¿El omega había oído bien?
—¿E-en Verdad mami? ¿No le mientes a Minnie? —Chilló de la alegría.
—No cariño, me hice una prueba de farmacia y salió positiva. Estoy tan feliz pero hay que esperar a poder ir a hacer una Al laboratorio y confirmar pero mi corazón de madre me dice que si... vas a tener un hermanito.
—Ay, Minnie feliz.
Los ojos del omega se habían llenado de lágrimas.
—Bebés de Minnie tendrán con quien jugar.
—Si cariño, siempre quisiste un hermanito pero la vida siempre sabe como y cuando es el momento. Te amo cariño te llamare después.
—Si mami cuídate mucho entonces. Come bien.
—Gracias cariño.
La llamada terminó y Minnie se echó a llorar en el sofá.
¡Estaba feliz!
Recordaba cuántas veces le había pedido un hermanito a su mami cuando estaba pequeño así no estaría sólito y tendría con quien jugar. Ahora sus bebes tendrían compañía.
—¿Bebé que pasa todo bien? ¿Por qué lloras? ¿Son los cachorros?
Agust había entrado justo a tiempo y lo vio ahí, llorando y se preocupó.
—No Alfita, bebes de Minnie están bien. Mami de Minnie va a tener también un bebé y Minnie está muy feliz.
Agust lo abrazó, Minnie estaba muy sensible y se debía a que faltaba poquito para que diera a Luz y eso lo tenía así.
—Wow eso es una buena noticia amor, ven vamos a buscar a Yoon para contarle.
Minnie asintió y se fue en busca de Yoongi con Agust a su lado.
Al parecer Yoongi había estado trabajando en el estudio, ya casi no iban a la empresa para estar todo el tiempo con Minnie y ellos solo se encargaban de gestionar cosas desde casa y al parecer su empresa Marchaba muy bien.
La puerta estaba abierta así que Minnie sólo entró y se llevó una gran sorpresa cuando vio a Suran parada frente a Yoongi.
—¡Suran!
—¡Minnie mi vida! Estas hermoso. ¿Cómo van esos bebes? —Preguntó emocionada al verlo.
—Cansan mucho a Minnie. —Chilló tirándose a los brazos de Suran.
Ella le acarició el cabello enternecida.
—¿Qué le ocurre? —Preguntó Yoongi al ver tan sensible a su Omega lindo.
—Su madre está en cinta Yoon.
Yoongi abrió los ojos sorprendido.
—¿El hada de los bebés anda suelta? —Bromeó.
De inmediato se dio cuenta de lo que había dicho pues sus ojos se dirigieron a Suran y se apenó.
—Lo siento Suran. —Se disculpó.
Ella sonrió restandole importancia mientras seguía abrazando a un lloroso Minnie.
—No te preocupes Yoongi, es más digamosle a Minnie. —Ella lo separó un poco para que Minnie pudiera oír bien. —Yo también estoy en cinta Minnie, tengo 4 meses y aparte de eso me voy a casar. Venía a dejarles la invitación a la boda. —Sonrió.
Minnie volvió a llorar haciendo que Suran borrase su sonrisa.
—¿Qué pasa cariño dije algo malo?
—¡No, Minnie más feliz porque hay más bebés. —Sonrió.
Estaba tan feliz pero sensible por las noticias.
—No llores cariño, mi bebé jugará con los tuyos. Ahora ven, mejor dame consejos. Dime todo lo que debo y no debo hacer, y que comer y que no...
Suran se llevó a Minnie fuera de la oficina para distraerlo y que dejara de llorar.
—¿No sientes raro? —Preguntó Agust mirando a su hermano.
Yoongi lo miró con una ceja alzada pero sabía realmente a lo que se refería Agust.
—Al principio si, al principio pensé que Suran solo fingía ser buena con Minnie pero demostró que era genuina y le agradezco, antes de ser pareja ella y yo fuimos buenos amigos así que realmente agradezco que haya tomado todo de esa manera tan madura y mírala ahora. Encontró a su pareja Destinada, es feliz, y se va casar y a tener un bebé. Yo jamas podría haberla hecho feliz Agust, no como hago feliz a Minnie, porque a él lo amo.
Agust asintió.
—Estoy de acuerdo, Minnie nos robó el corazón Yoon.
Era la total verdad, Minnie jamás necesitó de artimañas, ni engaños, ni de esfuerzo para robarse sus corazones. Sólo era él y su propio encanto, su dulzura su aniñada forma de ser.
Era como un Dulce Mochi irresistible, fue una pasión inevitable la que nació entre ellos y ese lazo jamás nadie iba a poder romperlo.
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Hola Mandarinas pasaba a agradecerte todo el apoyo que le han dado a esta historia, sin duda no sería un éxito sin todas ustedes.
Por otro lado también necesitaba avisarles que en estos días se estará publicando el capítulo final, el epílogo, y unos capítulos extras.
Besos
Las amo 💖
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