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El loco, el enamorado y el poeta están llenos de imaginación.

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aviso: este capitulo seran dos puntos de vista, intercalando entre Jacob y Ada.

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ADA SWAN

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— ¡Vamos, Bella, ¡qué infierno! — Me quejo en la cocina, irritada por la demora de Bella en bajar. Tenía que llevarla a la escuela y luego ir a la reserva, continuar mi entrenamiento con Leah y luego ir a hacer mi ronda, pero la princesa estaba tardando una vida en salir de la habitación y prepararse.

Tomo tres panqueques y los pongo en el plato, y les pongo mermelada de fresa en todos y luego los apilo, haciendo un sándwich de panqueques. Doy un bocado grande, sintiendo mi estómago hambriento apreciar la comida. Para ayudar a masticar y poder terminar más rápido, lleno un vaso con jugo de naranja y tomo un sorbo largo.

Cuando me estoy preparando para dar el último bocado, Bella baja las escaleras con su mochila en las manos. Termino de comer, me meto todo en la boca y me levanto de la silla, diciendo un "vamos" con la boca llena.

— ¿No vas a la escuela?Bella pregunta cuando me ve en pantalones cortos y camisa, ni un poco preparada para fingir ser una humana normal en una escuela.

— No. Tengo unos días más de reposo— Tomo las llaves de mi coche y de mi casa, y me voy, siendo seguida por Bella. —Te dejaré en la escuela con tu tesoro y luego me iré a la reserva.

— Pero Edward no podrá estar conmigo durante la tarde—Giro los ojos, cerrando la puerta de la casa y echando un último sorbo en el aire, para asegurarme de que no había ningún vampiro desconocido cerca.

— Lo sé, así que Jacob te recogerá en la escuela.

Le doy la espalda a Bella y voy hasta mi coche, abriéndolo con la llave y entrando en el lado del conductor. Tiro del pasador de la puerta para Bella y ella pronto se sienta a mi lado, poniéndose el cinturón.

Enciendo el coche y jalo el freno de mano, saliendo poco a poco del garaje y luego yendo para la calle. Enciendo la radio, cambiando las estaciones sin mirar mientras me concentro en la calle. Cuando encuentro una canción que me guste, coloco el cambio, cambiando la marcha antes de girar la calle.

— Bonito coche— Comenta Bella, sonriendo un poco para mí.

— Regalo de mi madre. Era su coche—Me mojo los labios, preparándome para empezar la conversación pesada.

Traté de disculparme ayer todo el día, pero solo ignoré a Bella y me quedé viendo dibujos en la TV mientras ella hacía sus deberes de la escuela. Como Bella no era de empezar conversación, y yo no quería conversar, nos quedamos las dos en el silencio de la sala.

—Ada...

—Bella...

Las dos hablamos al mismo tiempo. Me río por la situación, bajando el volumen de la radio.

— Puedes hablar primero.

Bella asiente, mientras hace sus gestos, pareciendo en duda con algo o extremadamente incómoda.

—Quería saber cómo estás con todo lo que está pasando.

Me río de su tono, golpeando mi dedo con el volante mientras me encojo de hombros.

— No sé. ¿Bien? ¿Voy bien? ¿A veces quiero morder a alguien? Instinto animal, supongo. No sé— Se queda quieta un momento. Probablemente recordando que hace unos días, la persona a la que quería morder era a ella. —Ya sabes, el otro día... Quería decir que estuvo mal. No estaba completamente controlada y resultó que solo te tiré la mierda encima.

— Está bien— Su voz es baja. — Tienes todo el derecho a estar enojada. Creo que yo también lo estaría si descubriera que mi hermana sale con un vampiro y casi muere muchas veces.

— Pues sí— El clima se pone pesado por un momento, y yo suspiro. Abro una sonrisa de lado, queriendo romper aquella tensión entre nosotros. — Sabes, Bella, tengo curiosidad sobre algo.

—¿Sobre qué?

— El tipo es frío como el hielo. ¿No te molesta allá abajo? a la hora de ya sabes...

—Ada!

— ¿Qué? ¡Es una pregunta seria! ¿Es como un consolador de hielo? — Rió al ver su cara roja. — ¿Qué, aún no han hecho nada?

Se muerde los labios, avergonzada, y se asienta de nuevo.

—Edward cree que va a... lastimarme.

Pienso un poco y al final veo que el vampiro tiene razón.

— Sí. Tiene razón. En un sexo normal, una cosa más dura es buena. Menos con un vampiro— Arqueo las cejas, viendo que ya estábamos llegando a la escuela. —Él te rompería en el medio y no de un modo bueno.

— Dios mío, Ada! solo tienes 16 años, ¿cómo puedes hablar de eso tan abiertamente?

— ¿Y ahora el sexo es igual al alcohol y yo tengo que esperar hasta los veintiuno para dar? Por amor, Bella. Yo estudiaba en una escuela de arte. Lo que yo tenía era a un bad boy que tocaba la guitarra...

Estaciono el coche cerca del Volvo de Edward y él pronto viene hacia nosotros, su cara seria me molesta. Decidí no salir, ya que estaba "lleno" y no sería una buena idea si me vieran en la escuela.

— Hasta más tarde, entonces—Bella dice, antes de salir del coche. La puerta ya estaba abierta y Edward la sostenía.

—Hasta luego.

Cuando Bella sale del coche y cierra la puerta, salgo del estacionamiento y tomo la carretera a La Push.

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JACOB BLACK

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— ¡Jake! — Oigo la voz de Bella acercándose y me doy vuelta, viéndola acercarse con su sanguijuela de mascota. Ella me abraza rápidamente, y yo le devuelvo el abrazo. — Es bueno verte.

Me alegro de verla, pero extrañamente confundido. Desde que Ada se quedó en casa, me sentía cada día más confundido entre ella y Bella. Bella parecía solo una imagen distante. Un enamoramiento de la infancia. Una amiga muy querida.

Antes era Ada quien ocupaba ese puesto, pero estar todos los días a su lado me hizo ver lo maravillosa que era. Incluso con la cara hinchada de sueño, o de mal humor y o diciéndome que "lavara los malditos platos" que ensuciaba. Y no me había dado cuenta de cuánto estaba presente en mi vida, hasta que me desperté hoy en mi cama y no la tuve para decirme buenos días.

Más allá de la impresión, estaba disfrutando conocer a esta nueva Ada. Parecía otra persona desde que volvió

— Tengo que irme— El vampiro dice, mirándome con curiosidad. — Nos vemos más tarde, querida.

Bella se despide del novio y yo me subo a la moto, extendiendo el casco en su dirección. Ella lo toma y se lo coloca. Enciendo la moto y salgo del estacionamiento.

Cuando llegamos a la reserva, estaciono la moto frente a la casa de Sam y luego todos los chicos bajan las escaleras corriendo, viniendo a saludar a Bella.

— Ahí, mira quien volvió! — Quien habla primero es Jared, la sonrisita burlona en la boca. Volteo los ojos, bajando de la moto y ayudando a Bella a bajar.

—Que pasa, Bella!

— ¿Quill? ¿Tú también? — Bella lo mira sorprendida.

—Sí, me uní a la manada— Se encoge de hombros, y todos nos reímos.

Leah llega a tiempo, acabando con la risa. Ella se para delante de Bella, que la mira curiosa. Cruzo los brazos, mirando serio para ella.

— ¿Qué pasa, Leah?

Se encoge de hombros, cruzando sus propios brazos.

— ¿Trajiste a la novia de la sanguijuela para herir más a Ada?

Recibo esto como una patada en el estómago. Descruzo los brazos, dejándolos caer al lado de mi cuerpo.

—No es así, Leah.

— Lo que sea— Ella da la espalda y se va.

Bella me mira con la ceja curvada.

— Es la hija de Harry, Leah Clearwater. Simpática, ¿no?

Emily con Sam llegan, saludando a Bella. Sam me mira serio y yo puedo ver en el aire lo que él no decía verbalmente. " Tienes que hacer una elección entre las dos hermanas". Infierno. La elección parecía tan clara, pero una parte de mí todavía quería aferrarse al pasado.

Me despido de los chicos y jalo a Bella, tomando mi moto y arrastrándola hasta el garaje de Sam, que era más grande que la mío y, por eso, él me dejaba guardar la moto allí. Bella viene a mi lado, las manos en los bolsillos, pareciendo pensativa.

— ¿Cuándo se unió Leah a la manada? — Bella finalmente pregunta.

— Más o menos cuando su padre murió. Su hermano, Seth, también se transformó. Solo tiene quince años. Es uno de los más jóvenes— Miro rápidamente a Bella, viendo su rostro sorprendido. Vuelvo mi mirada hacia adelante, volviendo a empujar la moto. —Sam lo mantiene en casa, estudiando, pero él es perezoso— Suspiro, mis hombros cayendo. — Quería que Leah se quedara en casa.

Bella me mira seria.

— Deja de ser machista, Jake.

Me río a carcajadas.

— No es porque sea mujer. No me ves quejándome de que Ada haya entrado en la manada, por ejemplo— Le sonrío. — Es más por el triángulo. Todos tenemos que vivir con el drama de Leah, Emily y Sam. telepatía de lobo, ¿recuerdas?

— ¿Sam dejó a Leah por Emily?

Sacudo la cabeza, tratando de encontrar palabras.

— No, no fue así. Sam se odia por herir a Leah, pero Emily era la elegida.

Bella se encoge de hombros con las cejas curvadas.

— Sí, a veces es el amor lo que te elige.

Me mojo los labios, entrando en aquel asunto que parecía tan delicado en los últimos días. Veo el garaje acercándose, la cabañita modesta, y suspiro.

—Es más que una atracción, Bella. Sam se imprimió de Emily.

— ¿Me podrías explicar qué es eso?

Le pido a Bella que abra las puertas del garaje y entro con la moto, luego sentándola en su lugar y bajando el pedal. Apoyo mis manos en el asiento de la moto, mirando el cuero mientras buscaba palabras para describir ese sentimiento. Levanto la cara y veo a Bella mirándome, esperando una respuesta.

— Tener una imprimación con una persona es como... cuando ves a la persona, y todo cambia. De repente, no es la gravedad lo que te mantiene en el planeta. Es ella. Nada más importa— Bajo la mirada, la cara de Ada riendo apareciendo en mi mente. Vuelvo a mirar a Bella, no sintiendo ese mismo sentimiento de antes. — Harías cualquier cosa. Sería cualquier cosa por ella.

Bella aparta la mirada, levantando los hombros.

— Tú pareces conocer el sentimiento— Trago en seco, ahora yo desviando la mirada de ella. — ¿Alguna vez tuviste... una imprimación con alguien?

— Sí— Saco mis manos de la moto, dejando mi espalda recta.

—¿De quién?

—De Ada.

Perdonen tanto la demora, espero les haya gustado el capitulo, +200 votos el siguiente, nos vemos, gracias por leer :)